SAN SALVADOR, 2 de noviembre 2007 (SIEP) “Como Iglesia Luterana
Popular en este día decidimos traerle serenata a Schafik (Handal) y a Farabundo (Martí) como expresión de nuestro respeto por su testimonio de vida” explicó el Rev. Ricardo Cornejo.
Añadió que “Schafik fue un revolucionario que dedico su vida a luchar por las transformaciones que necesita nuestro país, su vida fue un apostolado, fue un brillante y esforzado, profeta por la justicia y el socialismo, un luchador social, un militante comunista…”
Considero que “a Schafik una vez con Roberto le preguntamos que si creía en Dios y el nos respondió que en ese Dios que nosotros predicábamos, en el Dios de Monseñor Romero él si creía y nosotros le respondimos que ese es el único Dios que existe; los demás son ídolos, ídolos del dinero, ídolos de la guerra, ídolos del poder.”
Acompañando a tumba de Schafik se encontraba su hija Erlinda, a quien
saludamos, así como conocimos a Schafiksito, hijo de una luchadora popular, de solo un año, y también comimos a la salud del Comandante Simón, las típicas hojuelas con miel.
Por su parte, el rev. Roberto Pineda, proclamó ante la tumba de Farabundo Martí que “aquí venimos a decirte con mucha alegría que los sueños por los que luchaste y fuiste fusilado, siguen vigentes en todos nosotros y siempre te recordamos, los que te fusilaron fracasaron en borrar tu memoria…”
“Y los militares asesinos de obreros y campesinos, de mujeres e indígenas no lograron su vil propósito de borrarte de nuestras mentes, la semilla de tu ejemplo de dignidad revolucionaria alimenta nuestros corazones y nos impulsa a seguir luchando.”
Opinó que “te decimos que en el 2009 vamos a sacar a los areneros del poder, dos hijos tuyos, dos seguidores tuyos, Mauricio y Lonel encabezan el combate de este pueblo por al democracia y la liberación nacional y te decimos vamos avanzando, el pueblo esta perdiendo el miedo, el futuro se acerca, la lucha crece como un río desbordado de la gente soñando con el cambio…”
Concluyó afirmando que “todavía tenemos la tarea de denunciar cada 2 de noviembre y cada hora de nuestras vidas, la situación de nuestros desaparecidos, a las miles de familias que siguen esperando saber donde están los cadáveres de sus seres queridos, sabiendo que los asesinos andan sueltos por las calles como resultado de la Ley de Amnistía. Te prometemos Farabundo, que algún día a estos mártires así como a los mártires del 32 se les hará justicia….el día esta cercano.”