El golpe de estado político palestino … significaciones, causas y resultados
Tras el terremoto palestino, devenido del resultado de las elecciones que llevaron a un triunfo arrollador al Movimiento de Resistencia Islámica Hamas, surge a nivel palestino, regional e internacional, una importante interrogante: ¿cómo podrán los palestinos formar un nuevo gobierno capaz de enfrentar los grandes desafíos planteados y cómo tratar con las fórmulas regionales e internacionales, con los retos que impone la ocupación israelí y con el gran cambio ocurrido en la estructura interna palestina?.
Las elecciones legislativas palestinas finalizaron con un conjunto de discusiones y debates tanto a nivel nacional como árabe e internacional.
En Palestina, los resultados pusieron fin al tema sobre cuál es el programa que quiere el pueblo y también a la cuestión de las cuotas asignadas a los destacamentos.
A nivel árabe e internacional, los comicios dieron una respuesta a la polémica democrática árabe y demostraron la capacidad del pueblo palestino de revitalizar la democracia, ya que los mismos se llevaron a cabo de forma responsable y transparente. Igualmente quedó demostrado que el pueblo palestino es capaz de construir un modelo democrático civilizado, ejemplo de pureza a nivel del Tercer Mundo que supera la llamada democracia a nivel internacional.
¿Qué ocurrió realmente en Palestina?. ¿Cuáles son las causas y las consecuencias de las elecciones palestinas en todos los niveles?
1- La cantidad de votos obtenidos por el Movimiento Hamas a pesar de ser la primera vez que participa en elecciones.
2- La falta de capacidad política efectiva de los otros entes políticos: los independientes, los partidos tradicionales representados por las fuerzas de izquierda y los nuevos grupos electorales integrados por varias organizaciones bajo un denominador común con el objetivo de poner fin al dominio o hegemonía de una determinada fuerza política.
3- La estruendosa caída del partido del poder en las primeras elecciones de amplia participación, celebradas bajo el signo de una fuerte competencia tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania.
De los resultados de las elecciones, según lo anunciado por el Comité Electoral Central Palestino podemos observar lo siguiente:
Hamas obtuvo 80 escaños en el Consejo Legislativo de un total de 132, de ellos 76 directos y otros 4 de candidatos independientes respaldados por ese movimiento. Los candidatos de la Lista de La Reforma y El Cambio (Hamas) obtuvieron el mayor número de votos, inclusive en aquellas regiones donde algunos postulantes de la lista de Al-Fatah, lograron ganar puestos electorales. La diferencia de votos entre los candidatos de Hamas y los de Al-Fatah ha sido verdaderamente significativa.
En las 16 circunscripciones* electorales, el resultado ha sido definitivo a favor de Hamas, con un total de más del 95 por ciento. No obstante, se debe señalar que Hamas perdió en dos circunscripciones electorales, Qalquilia y Rafah a pesar de que el movimiento ganó en ambas provincias en las anteriores elecciones municipales.
El movimiento Al-Fatah obtuvo 43 escaños, 16 figurando en las circunscripciones como independiente y 27 de la lista electoral de Al-Fatah. Sin embargo, la pérdida de las elecciones, no se puede medir por números únicamente porque representa un gran detrimento para dicho movimiento, ya que sus símbolos históricos no han podido representar competitividad a nivel de las circunscripciones frente a otros candidatos. Otro factor ha sido la polémica en torno a su programa y a la constante actitud política oficial de Al-Fatah, la cual ha sido siempre la mecha que encendió la discordia, la causa de las divisiones internas durante los últimos 5 años.
El otro fracaso lo representó el hecho de que las demás organizaciones sólo obtuvieron 9 escaños. Ninguno de los candidatos que se presentaron como independientes de estas fuerzas políticas pudo ganar, salvo los 4 apoyados por Hamas: 1 en Tulkarem y 3 en la circunscripción de Gaza.
Ya es hora de que estas fuerzas, incluyendo los nuevos listados electorales, reconozcan que no han podido influir en el ciudadano palestino.
Si hacemos una pausa ante las causas de este tsunami político, podemos decir lo siguiente:
El Movimiento Hamas se ha caracterizado por tener un mensaje político directo y claro, mediante el cual sus candidatos lograron llegar de una forma sencilla a las masas palestinas, de forma tal que el movimiento parecía tener homogeneidad, una clara visión política y una gran capacidad de planificación para dirigir sus asuntos; inclusive para dirigir la campaña electoral comenzando con la selección de los candidatos y terminando con la disciplina de sus militantes y simpatizantes y su férrea adhesión a las decisiones del movimiento islámico de no presentarse como independientes.
La virginidad de los militantes y candidatos de este movimiento, los hicieron apropiados para hacer un papel claro a los ojos de los ciudadanos, ya que la mayoría de sus postulantes han sido muy conocidos en las actividades de servicios sociales, gozando de una gran credibilidad entre las masas palestinas. Además, el desempeño de Hamas en el plano político a nivel de los ayuntamientos municipales y su capacidad de formar coaliciones en aquellos casos donde no hubo listados claros de alianzas, le permitió tener un alto grado de aceptación de las masas, sobre todo gracias a la utilización de un discurso político claro en contra del monopolio del poder político y la actitud unilateral ajena a los intereses del pueblo.
Respecto al Movimiento Al-Fatah, varios factores desempeñaron un papel importante en la pérdida de su rol protagónico. Entre ellos podemos señalar los siguientes:
1- La falta de una visión política clara y consistente.
2- El lenguaje agresivo y hasta ofensivo, de sus candidatos, en contra de los candidatos del Listado de la Reforma y el Cambio.
3- El caos organizativo que envolvió al Movimiento Al-Fatah en los últimos tiempos sobre todo al formar su listado electoral o al apoyar a otros candidatos en las diferentes circunscripciones.
4- El gran número de candidatos de Al-Fatah presentados a nivel de las circunscripciones. Hubo 120 candidatos, conocidos por su militancia en Al-Fatah, que fueron presentados como independientes, muchos de los cuales no tenían aceptación, ni siquiera una fuerte integración al movimiento. Inclusive algunos habían ganado en las anteriores elecciones municipales sin contar con el apoyo de Al-Fatah. Este gran número de candidatos hizo que ese movimiento perdiera por lo menos un escaño en cada circunscripción electoral.
No obstante, la cuestión más importante es el doble desafío entre Al-Fatah y el ciudadano palestino, ya que este, según todas las encuestas y sondeos realizados, rechazaba a los candidatos oficialistas o a los ex-miembros del Consejo Legislativo. Cuando observamos las listas presentadas, vemos que los candidatos de Al-Fatah eran de esta clasificación.
Las masas palestinas castigaron a Al-Fatah mediante el voto, debido a la actitud política de la ANP en los últimos años. Ha quedado claramente demostrado que el ciudadano palestino repele esta actitud diaria y política anterior, lo cual demuestra o explica que Hamas obtuviera en muchas regiones originalmente cristianas, como la zona de Al-Massiun en Ramallah con un 50 por ciento de pobladores cristianos, el 70 por ciento de los votos de los ciudadanos.
En el caso de los destacamentos y demás fuerzas políticas, podemos clasificarlas en dos grupos:
1- El que representa la clase alta de la sociedad palestina, que ha sido incapaz de dirigirse al resto de las clases sociales, sobre todo al tener que dar respuestas a temas importantes como la Resistencia o la naturaleza de las relaciones con el exterior, el financiamiento y el apoyo externo que reciben.
2- Los destacamentos de la OLP o la izquierda palestina, que no han podido presentar nada nuevo que pudiera atraer la atención del ciudadano palestino. A cambio, se observa que la corriente islámica ha predominado en el lenguaje político de estos destacamentos, entonces el ciudadano se preguntaba, ¿qué es lo nuevo que presentan estos destacamentos a diferencia de Hamas?.
Cualquiera que hayan sido los resultados y las causas, nos vemos en una encrucijada cualitativa, donde tenemos que revisar todos los anteriores cálculos y valoraciones políticas sobre las cuales se estaban trazando los cálculos palestinos futuros, y de ahí surge la pregunta, ¿qué es lo que viene después?, especialmente en lo que se refiere al Movimiento Hamas.
Ante Hamas se presenta un conjunto de temas candentes a los cuales debe darle respuesta con la misma rapidez con que obtuvo los votos electorales. Esto representa un gran peso para el Movimiento al tener que entrar por primera vez en el amplio terreno de la acción política.
Estos temas se dividen en dos partes, la primera interna y la segunda externa.
Los temas internos:
1- La capacidad del Movimiento Hamas de atraer al Movimiento Al-Fatah y no dar espacio a algunos sectores de este movimiento que se oponen a la participación del Al-Fatah en la vida política interna junto a Hamas. Eludir la participación en el proceso político interno por parte de Al-Fatah significaría una gran pérdida para el pueblo palestino, el cual vivirá una vez más bajo la sombra de un solo programa.
La participación política de Al-Fatah junto a Hamas, le dará a este la posibilidad de tratar correcta y coordinadamente con los militantes de Al-Fatah en el Consejo y sobre todo con aquellos que han sido elegidos en sus listados electorales. Esto allana el camino para un trato dócil y de entendimiento con los militantes de las fuerzas participantes en el gobierno y en la toma de decisiones políticas.
2- Poder lograr un acercamiento al Movimiento Jihad Islámica o llegar a un acuerdo con este movimiento respecto a las cuestiones pendientes y de ese modo evitar que dicho movimiento realice actos fuera del contexto político trazado como algunas de aquellas acciones que ponían a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) contra la pared. Similar actitud quizás obligaría a Hamas a reaccionar, en cierta medida, de la misma manera que lo hacía la ANP, lo cual podría desalentar a los ciudadanos palestinos e impedir las reformas que Hamas proyecta realizar.
3- La formación de un gobierno de tecnócratas, los cuales gozan con cierta credibilidad entre las masas palestinas y representan los diferentes coloridos del arco iris político palestino.
Los temas externos:
1-La relación con la ocupación. Hamas necesita el envío de algunos mensajes que puedan calmar al ocupante y hacer ver su capacidad de realizar las reformas internas necesarias. Ante todo se debe enviar mensajes políticos con relación al tema de las negociaciones y aquí creo que Hamas debería adoptar una fórmula de negociaciones indirectas a través de algunas partes y sobre todo las europeas, ya que la parte israelí en estos momentos no está preparada para un proceso de paz, lo cual requiere un período de tiempo de tres a seis meses antes de plantear cualquier proyección política definitiva. Se deben tener en cuenta, en todo caso, las próximas elecciones israelíes y los resultados que se pueden derivar de las mismas.
2- La Relación con los países donantes y los Estados Unidos de América. El primer tema en este sentido es el de franquear la reserva con respecto al apoyo europeo y norteamericano poniendo en claro que este apoyo no se brinda a Hamas ni a Al-Fatah como fuerzas políticos sino al pueblo palestino en si, y que estos países deben respetar la decisión del pueblo palestino sin chantajearlo.
No hay dudas de que las elecciones legislativas representaron un golpe de estado político en todos los sentidos y niveles y a pesar de todos los análisis, los próximos días llevan en sí grandes cambios y acontecimientos impredecibles. No obstante, se puede decir que la fórmula que el Movimiento Hamas debe utilizar para solucionar los temas planteados ante sí consiste principalmente en compaginar entre las constantes nacionales palestinas por las cuales obtuvo la confianza del pueblo y la flexibilidad política con que debe contar para tender los puentes con el mundo entero y poder avanzar y alcanzar los objetivos del pueblo palestino a la sombra de una situación local, regional e internacional compleja.
- La ley electoral para las elecciones legislativas establece el 50 % a través del listado porcentual (a nivel nacional) y el otro 50 % a través de la circunscripción.