Con la erupción de un volcán, lluvias que dejaron a miles sin hogar y dos temblores con fuerza de 6 y 5 puntos en la escala Richter, El Salvador celebró los 25 años de fundación del Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional. Y como si no fuera suficiente lidiar desde la pobreza con los exabruptos naturales, la forma en que El Salvador tiene que sufrir un gobierno casi tan colonialmente incapacitado para atender a su población como el de aquí, ayuda a comprender mejor la complicada agenda del frente FMLN, que de frente guerrillero se ha consolidado como un partido político de tendencias con gran apoyo popular y principal oposición a la claque administradora.
A manera de ejemplo, cuando el equipo científico que estudia los volcanes en el país notificó un día antes de la erupción que se debían subir los niveles de alerta, el gobierno los bajó y no se preparó al pueblo; el hecho de que la coordinadora de los vulcanólogos sea hija de Chafik Handal, líder principal del FMLN desde los años de la guerrilla, no puede ser elemento casual en esa conducta. Luego, cuando desde la reunión del Grupo de Trabajo del Foro de Sao Paulo (GT-FSP) reunido en El Salvador al momento se coordinó la confirmación de oferta de ayuda de Cuba, Venezuela y China para los damnificados por las lluvias, el gobierno lo que anunció fue que los niños en los refugios estaban enfermos y que recibirían la ayuda de Estados Unidos y países europeos, con mutismo respecto a la oferta de los otros tres países. Este patrón de sumisión a los capitales en prejuicio del pueblo había ocurrido ya en la reciente dolarización de la economía salvadoreña (con un cambio donde los pobres perdieron 2 de cada 8 colones) y luego frente a la iniciativa bolivariana de Petro Caribe: primero el presidente dice que El Salvador no estaba incluido en la oferta venezolana y luego se reúne con una delegación colombiana para negociar la compra de petróleo a Uribe… siguiendo el mismo libreto que aquí le tocó a Aníbal Acevedo Vilá.
En ese escenario, el FMLN mantuvo su compromiso de ser sede, del 5 al 9 del corriente mes, de una reunión del Grupo de Trabajo del Foro de Sao Paulo y el Seminario “El rol de los partidos políticos en la integración de los pueblos”. Así, mientras sus funcionarios y cuadros atendían la población más afectada (en muchos casos ellos mismos) también hospedaban y participaban de una serie de actividades que abarcaron tanto el seminario como actos de recordación de los combatientes nacionales e internacionales caídos en la guerra, los asesinados en los tiempos de “paz”, el ejemplo del Che en el aniversario de su muerte, una misa donde el sermón franciscano pareció una ponencia política a la izquierda de casi todo nuestro liderato político, junto a la renovación del compromiso con sus principios de apoyo a todo tipo de lucha de los pueblos y la superioridad del socialismo como modelo de organizar una sociedad. Conjuntamente, la autorreflexión crítica estuvo bien presente, en particular la preocupación que presentan muchos en el FMLN de cómo lograr crecer electoralmente sin erosionar sus bases ideológicas; al respecto dijo Chafick en una intervención: el FMLN no puede crecer en votos al costo de la formación política y compromiso revolucionario de su militancia; y como reiteró Blanca Flor Bonilla, diputada y representante del FMLN en el GT-FSP, al respecto de que los valores que formaron al FMLN los obligan a ser solidarios con todos los que siguen luchando, incluso con las armas, en toda Nuestra América (nota: en México, además de los zapatistas, hay otros 13 grupos armados al momento).
Grupo de Trabajo del Foro de Sao Paulo
Dentro de este marco de solidaridad, el Grupo de Trabajo del Foro de Sao Paulo algo renovado, en particular en las delegaciones del gobernante Frente Amplio de Uruguay, el PRD mexicano y la representación del fundador PT brasilero, aprobó una resolución de denuncia del asesinato del compañero Filiberto Ojeda Ríos y acordó atender en su próxima reunión la propuesta de una campaña de intensificar el apoyo de los países latinoamericanos por nuestra independencia en el año 2006. Julio Muriente, (MINH) y José Escoda (Frente Socialista) de Puerto Rico, acordaron iniciar acá el proceso para que en la próxima reunión del GT, que se celebrará en La Habana el próximo diciembre, se entregue un bosquejo de cómo implantar esta propuesta. En una coyuntura donde partidos miembros del FSP gobiernan en Brasil, Venezuela, Cuba, Uruguay, República Dominicana, Panamá y Chile; y cogobiernan importantes sectores o cuentan con representaciones legislativas importantes en países como Colombia, El Salvador, México, Costa Rica, Bolivia y Guatemala, entre otros, este apoyo puede convertirse en una nueva etapa de solidaridad continental a nuestra lucha.
En otros aspectos de las luchas latinoamericanas, tanto en el seminario como en las discusiones del GT-FSP se enfatizó en el alerta frente a la remilitarización yanqui del continente, la urgencia de seguir luchando contra el ALCA y sus diversas variantes de dominio yanqui en la región, la necesidad de una solución política y humanitaria a la guerra en Colombia, el apoyo al derecho de asilo de distintos combatientes en diversos países del continente (incluyendo el caso de los seis vascos en México) y el apoyo a la liberación de los cinco cubanos encarcelados por el gobierno norteamericano por hacer trabajo de inteligencia antiterrorista.
Como cierre cultural a la tríada de actividades, el domingo 9 se celebró una gran fiesta popular, en cuya entrada se recogían donativos para los damnificados, acto donde Puerto Rico pudo decir, de forma modesta pero clara, ¡Presente!