SAN SALVADOR, mar 21 (alc). El obispo de la Iglesia Luterana
Salvadorea, Medardo E. Gmez, declar sentirse apenado por la actitud
secesionista de dos pastores de su denominacin.
El obispo Gmez reconoci la semana pasada que haba suspendido a los
reverendos Ricardo Cornejo y Roberto Pineda, porque han cometido
desacato contra la iglesia, pero aclar a un diario local “no har
pblico los problemas internos de la iglesia”.
Posteriormente, en una carta a los fieles, declar sentirse dolido por
el problema y que dos personas que colaboraban con l “han tomado
caminos diferentes a nuestra Iglesia. Han actuado con infidelidad,
irrespeto y desacato. Por ello, han sido suspendidos como pastores de
la Iglesia Luterana Salvadorea”.
Puntualiz que ellos estn “construyendo un movimiento eclesial
paralelo y ahora lo anuncian como Iglesia Luterana Popular de El Salvador”,
pero ya no son nuestros pastores.
El obispo enfatiz que Roberto Pineda y Ricardo Cornejo, “estn
tratando de hacer dao a la Iglesia, centrando sus ataques sobre mi persona
y en una forma mentirosa e injusta dicen que la Iglesia se ha derechizado y
que yo como Obispo he dado un giro de 180 grados”.
No crean esa mentira, dice el obispo. “Nuestra presentacin no es ser
de izquierda o derecha, somos de Dios, somos de Cristo. Les llamo al
acompaamiento fraternal”.
“La historia de mi vida ha sido de muchas pruebas difciles, he
enfrentado amenazas, persecucin, tortura, crcel, mucha pobreza”,
pero todo ello ha sido posible de sobrellevar; ahora con las mismas fuerzas
s muy bien que tambin lo sabr superar, dice el obispo Gmez.
Segn la prensa salvadorea, Pineda y Cornejo forman parte del Bloque
Popular Social, una organizacin que promueve manifestaciones
callejeras en contra del gobierno del presidente Elas Antonio Saca y del
Tratado de
Libre Comercio con Estados Unidos. En diciembre del ao pasado,
Cornejo fue golpeado brutalmente por la Polica Nacional Civil.
Por otra parte, el reverendo Eduardo Chinchilla Guevara, secretario
regional para Mesoamrica del Consejo Latinoamericano de Iglesias
(CLAI) envi al obispo Gmez, un mensaje que dice: “En estos tiempos
necesitamos de una iglesia unida que d testimonio de nuestro Seor
Jesucristo a un mundo dividido. Les insto a agotar todas las
instancias de dilogo, sabiendo de la madurez que ha caracterizado a la
IglesiaLuterana Salvadorea.
“El CLAI por su parte se mantendr acompandoles de manera solidaria y
siempre presente en este momento tan difcil que usted como cabeza de
la Iglesia Luterana enfrenta”, agrega. (131/2005).