En la patria de Fidel…

SAN SALVADOR; 17 de agosto de 2006 (SIEP) “En Cuba nadie se duerme sin haber cenado y todos se levantan en la mañana con la seguridad que van a desayunar y a almorzar y esto para mi como pastor es profundamente evangélico” indicó el Rev. Ricardo Cornejo, de la Iglesia Luterana Popular de El Salvador.

El Rev. Cornejo estuvo en Cuba, acompañando a un grupo de salvadoreños y salvadoreñas que viajaron a curarse de enfermedades de los ojos, en el marco del programa cubano-venezolano Misión Milagro.

Nos relata el religioso salvadoreño que “viajamos desde Guatemala hacia la Habana, en Cubana de Aviación. A salida de Guatemala se pagan tres dólares y no 27como aquí. Íbamos 46 y allá nos convertimos en un grupo de 250 personas de toda América Latina.”

“Al llegar a La Habana nos reciben jóvenes entre los 18 y 27 años de edad que realizan su servicio social. Nos conducen a Tarará, que es una ciudad hospital en las afueras de La Habana. Nos impactó de entrada el trato amigable, el calor humano del pueblo cubano, su espíritu revolucionario…”

“Estos jóvenes estudian para servir a su prójimo y no para aprovecharse de la gente, se practican relaciones de amistad entre seres humanos que a veces no practicamos ni en nuestras familias.”

“Luego de sacarles sangre a los pacientes, se les entrega a cada uno una bolsa con comida y agua para llevar a sus habitaciones, aunque ya habíamos cenado. Al siguiente día nos reúnen para explicarnos las reglas del tratamiento. La primera regla es la disciplina. El pueblo cubano es muy disciplinado. Hay que hacer cola para cada comida…pero con la seguridad que todos van a comer. Nadie se acuesta sin cenar y nadie se levanta sin saber que va a comer desayuno y almuerzo.”

“A propósito en los primeros días observe que algunos llegaban al comedor y tomaban fruta y la guardaban en sus mochilas, para llevársela a sus habitaciones. Y los que llegaban después ya no encontraban fruta. Era el espíritu capitalista de saquear, acumular, obrando en nosotros. Lo discutimos y lo resolvimos.”

“En Cuba todos trabajan y todos comen. No hay desempleo Todos los jóvenes y niños estudian. No puede haber, no se permite un niño fuera de la escuela. Y esto los cubanos lo quisieran para toda América Latina.”

“Hubo un caso que me impactó de una señora salvadoreña. Cuando la examinaron descubrieron que tenía gangrena en un pie. Y entonces se quedó allá. La operaron y le van a hacer y darle su prótesis. Y mandaron atraer a su hija con gastos pagados para que estuviera con ella cuidándola. A mi con esto, con esta experiencia, siendo pastor, me han evangelizado mucho más…”

“Y es con este pueblo generoso, con este país digno que los gobiernos areneros se niegan a tener relaciones diplomáticas. Es una vergüenza para nosotros como país no tener relaciones con Cuba…”

“El 13 de agosto realizamos un Culto de Acción de Gracias por la salud de Fidel y estuvimos orando por su pronta recuperación. Me contaron que ustedes también dedicaron aquí el Culto a la salud de Fidel. Decidimos allá realizar al regresar otro Culto esta vez en la plaza del Salvador del Mundo, de nuevo por la salud de Fidel y de agradecimiento al pueblo cubano.”

“Finalmente mis respetos por dos médicos cubanos que sobresalieron por su dedicación, cariño, compromiso con nuestro pueblo salvadoreño. Son los doctores Rolando Hernández y José Ramón Martínez. Conocerlos me impactó, me evangelizó…siempre dispuestos las 24 horas del día, para ayudar. Diariamente pensando en los demás, allí descubrí, encontré al revolucionario verdadero que no tiene doblez…”

Dejar una respuesta