Hay que encender el fuego sagrado de la resistencia…
Conmemoración del 26 Aniversario de la Masacre de Las Hojas en San Antonio del Monte, Sonsonate, 22 de febrero de 1983
SAN ANTONIO DEL MONTE, Sonsonate, 22 de febrero de 2009 (SIEP) “Hace 26 años los militares asesinaron a 74 hermanos indígenas aquí en esta Cooperativa las Hojas. El espíritu de estos hermanos se revela en la brisa del viento y el murmullo de este arroyo, en la fortaleza de esta Ceiba que nos cobija, en nuestra voluntad de seguir luchando…”expresó el Rev. Roberto Pineda, de la Iglesia Luterana Popular de El Salvador.
Sobrevivientes de los asesinados asistieron a un Culto Ecuménico celebrado por pastores luteranos, bautistas y religiosos indígenas. La ceremonia religiosa fue convocada por las Comunidades de Fe y Vida y el Movimiento Indígena Salvadoreño. estuvieron presentes los pastores, Ricardo Cornejo, Roberto Pineda, José Merches, Héctor García, y Alex Orantes y los religiosos indígenas Jorge Camacho, Carlos Urías y Valentín Pérez.
La Iglesia Luterana Popular se hace presente para acompañar a su pueblo indígena
Expreso el Rev. Pineda que “estamos en un lugar sagrado. Hace 23 años aquí fue derramada la sangre de 74 indígenas. Un lugar sagrado, la memoria de la sangre de los 74 mártires indígenas es acariciada por la brisa del viento, el murmullo del arroyo…el sol que quema nuestros cuerpos…y nuestra voluntad firme de exigir justicia para que se castigue a los culpables y se reparen los daños causados…”
“En nuestra tradición religiosa cristiana, estamos finalizando el periodo de Epifanía, y la lectura para este día nos habla del encuentro entre Jesús y un paralítico. Los amigos del paralítico ubican a Jesús y van a buscarlo y llevan al paralítico y como la casa esta llena lo meten por una abertura del techo. Jesús se sorprende por este gesto de fe y de solidaridad y lo cura…”
“Cuando a principios de 1980 los indígenas de esta comunidad se unieron y compraron una propiedad y formaron una cooperativa, dejaron de estar paralizados y empezaron a caminar, se pusieron de pie y el régimen militar imperante en esa época reaccionó violentamente asesinándolos. Los poderosos le temen a la unidad y la organización popular. Y le temen ala memoria histórica…”
“Aquí estamos para dar testimonio que la sangre derramada en Las Hojas por nuestros hermanos indígenas no fue en vano, ellos fueron semilla que alimenta nuestros corazones y nos impulsa a seguir luchando, no podemos permitir que el sistema nos paralice, que el sistema nos confunda…”
El camino de la serpiente rebelde recorriendo nuestra historia
“Hoy tenemos el reto de cambiar nuestro país y construir un El Salvador respetuoso de nuestra diversidad, que incluya a nuestro componente indígena, del cual nos sentimos orgullosos, porque posee una larga tradición de lucha, el camino de la serpiente rebelde que se inicia desde que se negaron en Acaxual a obedecer a Pedro de Alvarado y lo dejaron cojo por toda su vida; desde que Anastasio Aquino se proclamo Rey de los Nonualcos…”
“Desde que Feliciano “Chano” Ama se levantó con los comunistas del PCS en Izalco en 1932 y su cuerpo fue ahorcado en una Ceiba, desde que nuestro hermano Adrián Esquino Lizco formo ANIS en los años setenta, desde la pastoral indígena feminista de nuestra hermana luterana Sihuat Tutut, fallecida el año pasado, desde la victoria del pasado 18 de marzo en que el FMLN gano la alcaldía de Izalco. Ese es el hilo rojo de nuestra historia, nuestro collar de valor y sacrificio, nuestra Ceiba de la Dignidad…hemos ido de batalla en batalla.”
Por su parte, el Rev. Ricardo Cornejo afirmó que “estamos a las puertas de una gran acontecimiento histórico este próximo 15 de marzo, y los pueblos indígenas deben incorporarse a esta gloriosa jornada, y aportar sus ideas, su visión del mundo, su ética, su dignidad, que son ladrillos con los que construiremos la casa de la nueva Patria…”
Asimismo Higinio Morales, Presidente de la Cooperativa, agradeció la asistencia a este acto y reitero el compromiso de seguir exigiendo que se haga justicia y se castigue a los culpables de este crimen que continua impune……”
Informó que: Entre los asesinados se encontraban Marcelino Sánchez Marenco (Vizcarra), Héctor Manuel Márquez, Pedro Pérez Centino, Benito Pérez Centino, José Guido García, Juan Bautista Mártir, Y Gerardo Cruz, únicamente estos siete fueron reconocidos legalmente y sus partidas de defunción están asentadas a las 17 horas del 22 de febrero de 1983. Todos aparecen como MUERTOS POR ARMA DE FUEGO según datos de la Alcaldía de San Antonio del Monte.
Esta masacre fue cometida por el Batallón Jaguar de la Brigada de Sonsonate al mando del Coronel Elmer Araujo quine ordenó al Mayor Oscar de león Linares y al Capitán Carlos Figueroa Morales efectuar el Operativo asesino. Los tenientes Carlos Sasso Landaverry y Francisco del Cid Díaz con sus soldados cumplieron esta orden…los cadáveres fueron medianamente enterrados en la molienda vieja en los márgenes del Río Guayapa en el cantón Las Hojas y estos fueron encubiertos por orden del Coronel Napoleón Morales.”
Nos acompañan el Corazón del Cielo y el Corazón de la Tierra
El Tata Jorge Camacho recuperando las tradiciones religiosas de nuestros abuelos y abuelas proclamó: Invocamos al Corazón del Cielo, al Corazón de la Tierra. La ceremonia religiosa, que es una ofrenda a los dioses, inicia saludando el oriente, a la Ceiba colorada, luego al poniente, luego al sur y luego al norte…Preparamos la ofrenda, el tabaco sagrado…los candelas con los cuatro colores de la tierra: el rojo, el negro, el amarillo y el blanco. Invocamos al Gran Ahau, al Gran Creador Y Formador…”
El Tata Carlos nos explica que aunque fui bautizado cristiano, en mi sangre llevaba el toque indígena, y esto me condujo a conocer el fuego sagrado…hoy es el día de Lajuj Iq (en quiche), en nahuat es el día de Ajacat, el Dios del Viento.
Apunta Camacho: Y no se equivocaron nuestros abuelos…hay hoy un soplo divino, un viento pasivo, los abuelos no se confundieron…A mediodía se enciende el fuego sagrado, frente al sol que calienta la tierra y nos da la vida…como indígenas, estamos olvidados y exigimos que se nos tome en cuenta, demandamos reconocimiento constitucional…”
Concluyó que “nosotros respetamos mucho a nuestros hermanos luteranos, nos une la lucha por la justicia y la dignidad, y lo exhortamos a que sigan
acompañándonos, siempre respetando nuestra propia visión de mundo, autóctona, surgida de nuestra Madre Tierra…”