Realizaran Foro Internacional en Izalco sobre genocidio de 1932

IZALCO; Sonsonate, 30 de julio de 2006 (SIEP) Desde su creación en el año 2002, la Fundación José Feliciano Ama (FAMA) se ha trazado como plan de trabajo el rescate de los eventos de 1932, considerando que estos son parte fundamental en la existencia contemporánea del Pueblo Indígena de El Salvador.

Desde entonces, cada enero la Fundación Ama, realiza un evento en homenaje a las víctimas de 1932 y al pueblo Nahuat-Pipil, así en enero 2006, fue presentada ante varias organizaciones indígenas de la zona, la iniciativa de crear el Consejo de Pueblos Indígenas (CPI) de Occidente, así como conmemorar el 75 aniversario de los eventos de 1932 con un Foro Internacional sobre el genocidio de 1932 que se realizará en al Atrio de la Iglesia Asunción de Izalco, el 8 de agosto de este año.

Entre los objetivos de FAMA están los de apoyar las organizaciones indígenas de El Salvador; asegurar que el patrimonio ancestral, histórico y cultural de este sea respetado; que el Pueblo Indígena jugué un papel determinante en el nuevo concepto de nación del cual ha sido históricamente marginado y regresarle a Izalco su verdadero valor cultural, de antiguo centro de espiritualidad, conocimiento y aprendizaje. Resistir para que nuestra cultura no se convierta en una mera atracción turística y que se siga denigrando, “folclorizando”, marginando la cultura indígena y manipulando la historia.

Es así como en el marco del 74 aniversario se trabaja no solo con las organizaciones indígenas de la zona, sino también con las organizaciones religiosas y de derechos humanos. A estas últimas se les invita a disertar sobre el tema del genocidio con el propósito de llevar los eventos de 1932 a una amplia discusión e impulsar que estas organizaciones tomen como parte de su labor los Derechos Indígenas y el derecho de este a conocer su verdad.
.
Concientes que el Consejo de Pueblos indígenas (CPI) de Occidente y la Fundación José Feliciano Ama (FAMA), tiene un legado importante que cumplir, como es velar por el derecho del pueblo indígena a organizarse sin injerencias de ninguna clase y exigir que tal derecho sea respetado y jamás nunca vuelva a ser violentado. Estos esfuerzos de organizarnos y exigir “La Verdad” sobre 1932, es una necesidad de ejercer plenamente los derechos que nos corresponden y un llamado de conciencia al pueblo de Cuzcatlan a identificarse con lo mas profundo de su ser.

Dejar una respuesta