El escandaloso modelo de negocios de la multinacional Wal-Mart
Por María José Gaona / 17.12.2014
La cadena norteamericana de retail, financiamiento e inmobiliaria Wal- Mart, creada por Sam Walton, llegó a Chile en 2008 marcando un profundo quiebre en cómo se concebía el retail. Hasta ese momento, las grandes cadenas no tenían la presencia ni la relevancia en el PIB que hoy muestran. Por ejemplo, la Utilidad de Walmart Chile subió a un 27,6% en el segundo trimestre del 2014, a pesar de la desaceleración del consumo.
Con la llegada de la empresa más grande a nivel internacional, desembarcaron también las prácticas de un modelo que ofrece bajos precios a los consumidores, pero un alto costo para sus trabajadores. La historia de la empresa de Sam Walton es la historia de el avance mundial de la precarización del trabajo.
Sindicatos, enemigos del gigante azul
Manuel Díaz, presidente de la Federación Nacional del Trabajador Walmart asegura que tras 7 días de huelga general, “la compañía Walmart está mostrando su verdadera cara”. Según los trabajadores, la empresa está perdiendo 3.500 millones de pesos por día de movilización. Evidentemente las pérdidas económicas son mayores y críticas en un mes como diciembre, donde el consumo del retail se multiplica. La pérdida entonces, es doble. Sin embargo, y a pesar de que quizás el ahorro de la multinacional sería mucho mayor al llegar a un pronto acuerdo con sus empleados, mantienen una actitud reacia a la negociación.
Walmart es reconocida a nivel mundial por su intensas prácticas antisindicales. En Estados Unidos, la empresa es el empleador privado más grande de Estados Unidos, con más de un millón 300 mil trabajadores.
El uso de varias razones sociales para un mismo giro, más conocido como multirut y la subcontratación de personal son los principales mecanismos que tiene una empresa para evitar la organización sindical. Sin embargo, Walmart en Chile decidió disminuir la enorme cantidad de razones sociales, lo que decantó en una mayor capacidad de organización de sus trabajadores. El resultado: la primera huelga general en la historia de los supermercados Líder.
Alicia Gariazzo, autora de “La Industria del Retail en Chile y el Modelo Walmart”, explica en su documento que “para esta empresa la sindicalización es una conducta grave. Ha instruido a sus administradores no contratar trabajadores que alguna vez hayan pertenecido a algún sindicato, y despedir a los trabajadores que muestren indicios de “aptitud sindical”. Cuando un sindicato trata de organizar a un conjunto de tiendas de WalMart, expertos laborales viajan de inmediato desde Bentonville, su casa matriz, a deshacer lo realizado”.
Las amenazas, la creación de sindicatos pro empresa y el incentivo económico personal también son estrategias que los trabajadores de los supermercados Líder, Ekono y A Cuenta destacan durante el curso de esta movilización.
Paulina Andrade, periodista y co autora del libro “Los pasos del elefante. El Imperio de Herr Paulmann” (Ediciones Radio Universidad de Chile), asegura que “cuando llega Walmart, importa prácticas como la antisindicalización que antes en Chile no estaba tan marcado. Su llegada impacta para todos lados, a través del llamado efecto Walton”.
La investigadora señala que “de acuerdo a un informe de Human Rights Watch del año 2007, entrega instrucciones explícitas a sus gerentes para evitar la constitución de sindicatos. El manual recibe por nombre “Caja de herramientas gerenciales” y es básicamente una guía que explica “cómo permanecer libres de sindicatos en el caso de que los representantes sindicales elijan su establecimiento como el próximo blanco”.
Afuera de un supermercado Líder Express en Av. Rancagua con Seminario, Norma toca un tambor junto a sus compañeros y se pregunta: “¿Acaso el gerente no es una persona racional? Con lo que han perdido en estos días ya nos podrían haber pagado el reajuste”. Manuel Díaz señala que desde su visión, “no es un problema de plata para la compañía…a ellos no les interesa, yo creo que lo que es importante para la compañía hoy no son las lucas, es tratar de destruir las organizaciones sindicales que hoy operan de forma autónoma”.
De Precariedad Laboral a Esclavitud
Walmart-superJumbo. La empresa de la familia Walton se convirtió en 2002 en la corporación más grande del mundo, exhibiendo un capital similar o superior al de 161 economías nacionales. Su estrategia consiste básicamente en ofrecer bajos precios creando un efecto local bajando la calidad de los salarios, especialmente en las comunidades más pequeñas.
Un estudio del National Bureau of Economic Research concluyó que se habían reducido los salarios de todos los miembros de una comunidad en un 5%, en todas aquellos lugares donde Wal-Mart había operado por 30 años.
Manuel Díaz asegura que “es verdad que Walmart es una de las empresas que da más trabajo a nivel mundial, pero yo agregaría un adjetivo a eso: da harto trabajo pero precario en Chile y el resto del mundo”.
El agobio laboral es relatado por el dirigente como una práctica común, donde “se insultaba a los trabajadores, les hacen trabajar ocho horas, marcar la salida y después seguir trabajando, no te puedes ir si no terminas el trabajo. Por ejemplo, el Líder de Gran avenida llegó a tener 730 trabajadores y hoy hay 420 que trabajan el doble. Ejemplos como esos se dan en todo el país”.
Sin embargo, la precarización no solo se ve reflejada en sus propios trabajadores, sino en las estrategias para abaratar los costos desde los proveedores. El modo que ocuparon fue el de instalarse en pequeñas ciudades en crecimiento, multiplicándose y saturando los mercados locales, puesto que los comerciantes más pequeños no podían competir con sus precios. Así, domina el mercado de sus proveedores imponiéndoles bajos precios, la calidad de los productos y el espacio que les adjudicará en sus tiendas.
El abuso de la precarización de los trabajadores que proveen a Walmart es escandaloso. Según los antecedentes de la economista Alicia Gariazzo, la empresa opera campamentos de trabajo esclavo en el extranjero, a través de proveedores, e incluso en su nombre.
“Uno de los campos es la fábrica Daewoosa en Somoa, isla americana en el Pacífico donde 230 trabajadores, la mayoría mujeres jóvenes de China y Vietnam, trabajan en condiciones de servidumbre. Según se informa reciben salarios miserables, son golpeadas, hambreadas, acosadas sexualmente y amenazadas con la deportación si protestan.
En febrero de 2003, en una corte de Hawaii, el propietario de la fábrica, Kil Soo Lee, fue encontrado culpable de contratación bajo condiciones de servidumbre. La fábrica produce para Wal-Mart bajo la marca Beach Cabana de Wal-Mart”.
“Nosotros podríamos decir que el alto costo para los trabajadores termina en consecuencia de los bajos precios al consumidor. Al trabajador de Walmart se le está explotando para poder pagar menos y eso se reduce ni siquiera en los precios bajos, sino en las altas utilidades de esta compañía”, denuncia el presidente sindical, quien asegura que “Nosotros somos creadores de esa riqueza pero nos sacan la cresta, perdón que lo diga así. En otros países esto lamentablemente ocurre pero no vamos a permitir que en Chile ocurran, no señor”.