Schafik No. 8

Schafik No. 8 – Lunes, 05 de Marzo de 2007 hora 10:24

Dagoberto Gutiérrez

La huelga de los maestros sacudió todo el año de 1968 y contribuyó a quebrar el aparato educativo, no hay que olvidar que el consenso necesario para dirigir e imponer la voluntad de una clase dominante requiere del aparato educativo y esta huelga magisterial quebró, precisamente, este aparato; años después los médicos quebrarían la segunda pata de este mecanismo que es el aparato de salud.
Amanecíamos en los alrededores de la biblioteca nacional, luego de noche con sobresaltos, con muchas pláticas y mucho frío porque al fin y al cabo dormir en las calles de una ciudad resultara siempre muy aleccionador.
Éramos muy jóvenes porque apenas sobrepasábamos los 20 años pero fervorosamente convencidos que el bien requiere de lucha contra el mal y que los maestros tenían la razón y estaban construyendo la fuerza que le da a esta la posibilidad de ser atendida y entendida.
Yo no era miembro de ningún organismo de dirección del partido comunista pero si dirigente del PR y por allí tenia una relación muy encendida con Schafik, sabia muy bien que en estas acciones de masas se estaba jugando el futuro también encendido, de la dictadura militar.
Schafik vivía sus mejores momentos y su capacidad analítica vigorosa y descollante parecía crecer al mismo ritmo que las manifestaciones.
Una parte importante de los profesores era Demócrata Cristiano, pero solo una parte de ellos era anticomunista aunque todos eran huelguistas y opositores a la dictadura del PCN.
Fue en esta huelga memorable en la que se sentaron las bases políticas de la Unión Nacional Opositora. Que pelearía en 1972, cuatro años después por la presidencia de la república , en estas huelgas nos encontramos los comunistas y los demócratas cristianos y la represión no hizo distingos y a ambos nos trato por igual, la sangre corrió y el miedo se estableció pero la resistencia también descolló, aquí hubo una especie de acuerdo político desde abajo y mas allá de los logros inmediatos de la huelga se logro el conocimiento, la confianza y el acercamiento fundamental para poder pelear juntos, cuatro años después por la candidatura presidencial de José Napoleón Duarte
Schafik descollaba todo el entusiasmo imaginable y todo era energía , entusiasmo y construcción lejos estábamos de imaginarnos que 12 años después protagonizaríamos la tercera guerra de la historia política de nuestro país.
Esta huelga fue una escuela organizativa porque nos permitió pensar sobre la mejor forma de construir la mejor fuerza política, fue una escuela del miedo porque nunca, hasta ese momento, la represión se había soltado y desenfrenado de, manera tan perversa ; fue escuela de dignidad e indignación y permitió agrupar a dignos e indignos de manera cada vez mas definida y terminante, esta separación seria determinante varios años después; fue también escuela política porque enseño que mas allá de la ideología son los entendimientos políticos los que aseguran las unidades y los acuerdos, aunque la ideología siga siendo la savia fundamental de la conducta política.
Las derechas aplicaron el terror de manera masiva y años después lo harían de manera total; pero el terror gubernamental fracaso y no fue suficiente, se trataba de sectores intelectuales y de clases medias; es decir de una categoría social intelectual y de una clase social medial; pero en una relación estrecha con obreros (todavía existía esa clase en el país y eran estos los proletarios, porque hoy los proletarios son los médicos, los ingenieros los economistas, porque todos son asalariados).
La sociedad salvadoreña era diferente a la sociedad actual y ese ejercito de intelectuales que son los profesores estaba desconociendo al ministerio de educación y al poder ejecutivo como su estado mayor; y ese poder ejecutivo no entendía ni entiende todavía la soledad en que encontraba y se encuentra.
La huelga se introdujo en todos los corredores polvorientos de la sociedad y estremeció los púlpitos de las iglesias y los salones de los seminarios , porque no hay que olvidar que los sacerdotes y las monjas son intelectuales de la clase media y era esta clase la que estaba desafiando a la dictadura en las calles; también sacudió los patios de los cuarteles porque los militares también son profesionales y de la clase media ya que la oligarquía no propicia el que sus hijos sean militares como ocurre en otros países, estremeció los talleres de las fabricas y en realidad, conmovió a todos los hogares de la sociedad salvadoreña, la familia como aparato político ideológico no volvió a ser la misma a partir de esta huela.
Para los campesinos y campesinas el sobresalto fue trascendente porque nunca pensaron que los “ señores “ y las “ señoritas” como se llamaba a los profesores y profesoras en las escuelas tuvieran que reclamar sus derechos en las calles, porque si ellos tenían que hacer eso, que no tenían que hacer los campesinos a los que nadie miraba ni escuchaba, a los que eran olvidados de la mano de Dios .
Todos estos ingredientes que caminaban revueltos con el polvo de los caminos , la sangre de los asesinados, el miedo y la indignación, la protesta y la organización no fueron entendidos ni atendidos por las oligarquías cafetaleras del país.
En definitiva esta huelga memorable separo las aguas y ayudo a establecer las correctas fronteras políticas e ideológicas ; al desatar los nudos del poder permitió construir nuevos poderes, esta vez desde abajo y desde adentro de la vida .
El partido comunista era pequeño, ilegal , clandestino y perseguido como deben ser las cosas dignas en este mundo pero sus militantes estábamos en la hora y en el lugar donde debíamos estar y, verdaderamente estos hornos donde se cocinaba este pan estaba fabricando los panaderos adecuados para cocinar el pan necesario.
La huelga termino con mas desacuerdos que acuerdos y el único acuerdo fundamental fue la huelga misma aunque finalizarla se convirtió en una decisión necesaria e inevitable.
Las luchas sociales en su desarrollo deben transformarse en cada vez mas diferentes maneras de lucha y no estaban dadas todavía las condiciones para formas superiores de confrontación.
El año de 1969 fue la época de la guerra con Honduras y aquí es necesario capturar la existencia de un hilo conductor que va vinculando y amarrando amorosamente un acontecimiento con otro como quien construye un collar con los diamantes puros de las contradicciones mas reales porque la guerra con Honduras no fue, en realidad, una confrontación externa sino, verdaderamente, fue el desarrollo de conflictos internos no resueltos, y al mismo tiempo fue el agravamiento de esos conflictos. Veamos por qué.

Schafik (No. 7)

Schafik (No. 7) – Lunes, 26 de Febrero de 2007 hora 10:26

Siendo la educación un recurso clave para la construcción del consenso necesario para dominar y dirigir, el ejército político de maestros y maestras sustentaba desde las aulas la ideología dominante. Este edificio se empieza a romper lentamente, y el profesorado, así liberado, inicia un inédito proceso de organización gremial que rápidamente llegaría a ser organización política.
La Asociación Nacional de Educadores Salvadoreños, “ANDES 21 de Junio” nace en 1968, es decir, un año después de la fulgurante campaña electoral del Partido Acción Renovadora y fue fruto de la efervescente coyuntura socio política de la decisiva década de los años 60. Hay que decir que aquí se quiebra la posibilidad de la clase dominante salvadoreña de ser al mismo tiempo clase dirigente porque perdió el control de este ejército de educadores que decidieron enfrentarse a la dictadura militar de derecha desde sus propias reivindicaciones gremiales.
Schafik y otros miembros de la Comisión Política del Partido Comunista participaron activamente en la elaboración y el diseño de los fundamentos políticos de la nueva organización. Este fue un trabajo lento, semi clandestino y con muchos acercamientos. Siendo una actividad política de clases medias intelectuales se trabajaba con una categoría social muy propensa a altibajos en sus posiciones políticas; pero todo el ambiente político del país y la hirviente oposición social hacían ineludible los acuerdos fundamentales en y con el gremio magisterial.
Los fines del sesenta y los principios de la década del setenta del siglo pasado estuvieron poderosamente influidos por las luchas magisteriales y la historia de El Salvador no podrá ser contada jamás sin referirse al peso decisivo de ANDES 21 de Junio. Los profesores eran la gente de confianza del Partido Revolucionario de Unificación Democrática (PRUD) y los militares presidentes siempre contaban con ellos para sus gestiones, los festejaban, los homenajeaban, y en los momentos de mayor precio internacional del café, les construyeron grupos escolares en varias partes del país. Pero, las poderosas ganancias de la exportación del café engordaron los bolsillos de unos cuantos oligarcas y el PRUD se olvidó de los salarios de los profesores, de su atención médica, y de reformar el sistema educativo para enseñar a pensar a los estudiantes, y así, cuando los oligarcas pensaban que todo estaba bien, sus profesores estaban pensando que todo estaba mal.
El mismo año que se funda ANDES 21 de Junio, en 1968, estalla la primera huelga nacional magisterial y se realiza el notable ejercicio político de la solidaridad de la clase obrera con los profesores levantados. Este era un gigantesco paso adelante en la lucha política del país porque los obreros hicieron suyas las reivindicaciones de los profesores y éstos descubrieron que ellos eran también asalariados, al igual que los obreros.
Nunca antes las campanas de las escuelas habían enmudecido porque ningún maestro abandonaba sus aulas, pero ahora entendiendo que la educación es un poderoso instrumento político de dominación o de liberación, los profesores cerraron sus escuelas, contando con el apoyo de la mayor parte de los padres y madres de familia, y aquí tenemos ya una huelga de profesores que se convierte en una huelga popular. Y al paralizar el sistema educativo se cerró el funcionamiento de la más poderosa maquinaria de control ideológico. Miles de maestros, alumnos, padres y madres de familia, obreros y profesionales, fueron movidos y conmovidos por el poderoso movimiento huelguístico. Se trataba de abrir el camino para una negociación, tal como ocurriría veinte años después, durante la ofensiva militar de 1989.
El partido de gobierno era el Partido de Conciliación Nacional, que gobernaba desde el golpe de estado de 1960, y el gobierno del Gral. Fidel Sánchez Hernández, que entraría en guerra con Honduras al año siguiente, en 1969, desató una represión criminal, que no tenía hasta ese momento precedentes en la historia del país. Y los profesores, hasta hacía poco mimados por los gobiernos del PCN, se convirtieron en los mayores enemigos del régimen y se negó toda posibilidad de entendimiento a menos que los maestros rindieran su lucha y se declararan derrotados.
En los primeros días de la huelga fueron asesinados dos dirigentes obreros comunistas: Saúl Santiago Contreras y Oscar Gilberto Martínez Carranza.

Llegué a los 75 sin darme cuenta

Juan Gelman
Llegué a los 75 sin darme cuenta
Por Susana Viau Página 12/Prensa Latina
Si Juan Gelman tuviera que hacerse una entrevista, se enfrentaría a dos dificultades. La primera, obtenerla; la segunda, la voz, “porque hablo muy bajo”. Pero en esta oportunidad se ha sometido al encuentro con resignación. Sabe que el mal trago es parte de un paquete que incluye su designación como profesor honorario de la Universidad de Buenos Aires, Doctor Honoris Causa de la Universidad de Quilmes y embajador cultural de la ciudad de Buenos Aires.
La elección del momento no es arbitraria: se cumplen cincuenta años de la edición de su primer volumen de poesía, Violín y otras cuestiones, y otros tantos de su iniciación como periodista. En cuanto a la voz, de a ratos inaudible, Gelman tomará sus precauciones y mantendrá muy cerca el micrófono.

Es una mañana soleada, a metros de la Plaza San Martín; el lobby del hotel es tranquilo y Gelman está de buen humor, esto es, filoso, irónico, burlón, aunque aproveche los tramos iniciales para clavar una pica en Flandes y recordar que aún queda por recuperar el cuerpo de su nuera, María Claudia García Iruretagoyena, una tarea que se ralentiza en los cuarteles uruguayos. “Y todo muy bien”, dirá con desencanto.

La charla, involuntariamente, llevó a otro descubrimiento: también hace 50 años, cuando Juan Gelman tenía 26, nacía el mayor de sus dos hijos, el varón, Marcelo, secuestrado y asesinado por la dictadura militar. La hija, Nora, vendría al mundo un año después. El hallazgo periodístico, sin embargo, no había sido sino una secuela de la distracción. Porque el dato estaba escrito allí, en uno de los últimos poemas de Violín… que dice “Talvez el mundo cabe en la cocina/donde hablamos del hijo./El futuro es un rostro, un dulce nombre,/una sangre en camino a este camino”.

Viene poco, últimamente.

En realidad, hasta el año 2000, cuando encontramos a mi nieta, yo venía a la Argentina dos o tres veces por año, siempre en función de la investigación. Después, en el 2001, 2002, volvimos tranquilos, de vacaciones. En el 2003 estuvimos una semana, para ver a Kirchner por el tema de los restos de mi nuera.

Despreocúpese del micrófono. Lo importante es la respuesta, no la pregunta. Yo no soy Victoria Ocampo.

Tenés suerte… Y encima te quejás.

Hablábamos de los regresos.

En ese tiempo se creó una situación delicada. Kirchner se enfrentó con Batlle, hubo tensiones muy fuertes. Tampoco quise ir a la asunción de Tabaré, aunque la gente del Frente me lo insinuó. ¡Bah! Me dijeron directamente: “Tenés que venir”. No lo hice. Preferí ver cómo evolucionaban las cosas. Bueno, ya sabemos cómo está el asunto de los derechos humanos en Uruguay.

O cómo no está.

Sí, más bien cómo no está. Tabaré quitó el caso de mi nuera de la Ley de Caducidad. Todo muy bien, pero la Justicia uruguaya volvió a archivarlo. Y todo muy bien. Igual, hay ciertos hechos positivos: por ejemplo, que estén buscando en los cuarteles. Claro que el ex comandante en jefe Bertolotti (¿te acordás de ese programa de radio que popularizó lo de “Bertolotti, no me mientas”?) llevó a mi nieta al Batallón 14 y le dijo: “Acá, en un radio de cinco metros cuadrados, están los restos de tu madre”. Cinco metros cuadrados.

Ya llevan cavados dos mil quinientos. La otra cosa positiva es que encontraron e identificaron a dos personas desaparecidas. Una la ubicó el jefe de la Fuerza Aérea, que contó que “en una chacra de Pando están enterrados dos desaparecidos”. En el Batallón 13, donde se suponía que no había nada y donde nosotros insistimos en que están los restos de mi nuera, apareció una osamenta completa, que se identificó y es el padre de Javier Miranda.

Después encontraron restos que se supone son de mujer pero no sabemos todavía a quién corresponden. Esto sirve en el sentido de que la sociedad uruguaya está empezando a saber públicamente suponiendo que antes no lo supiera qué barbaridades se cometieron durante una dictadura de la que se decía era una dictadura buena porque no secuestraba niños ni fusilaba.

En el informe de la Comisión para la Paz, los que murieron por tortura “fallecieron”. Dicen que no hubo ejecuciones y el caso de mi nuera demuestra lo contrario. Y está el llamado “segundo vuelo”, del que el propio comandante en jefe de la Fuerza Aérea dijo que había existido y estuvo a cargo de la OCOA, del ejército. En ese vuelo, más de veinte uruguayos secuestrados en la Argentina fueron trasladados al Uruguay y fusilados.

Sin ese objetivo concreto, ¿cómo siguió la relación con Buenos Aires?

Hubo dos años en que volvimos, como siempre. Luego vino esta situación delicada. Yo no podía aparecer presionando a Kirchner. El tema ya está ubicado a nivel de gobiernos.

¿Qué tal se vive tan lejos de Dios?

Yo creo que Dios estuvo lejos de mí desde hace mucho. De manera que… éste es el lado del asunto que no tiene solución.

Si lo prefiere, tan cerca de Estados Unidos.

Bueno, yo no sé qué lugar queda lejos de Estados Unidos. Fijate vos lo que está pasando en Irak, que parecería estar tan lejos de Estados Unidos. En México estoy cómodo. Tengo una vida recoleta, leo, trabajo, escribo…

…De noche, como casi todos los de su generación.

Sí, en general, sí. ¿Eh, qué querés decir?, que toda mi generación escribía de noche?

Bueno… era una mala costumbre.

A falta de… ¿O vos lo decías por la edad? Porque… sí, lo decías por la edad. Con el tema de la edad, ¡qué te puedo contar! Me distraje. Llegué a los 75 sin darme cuenta. La única ventaja es que el tiempo envejece con uno. Así, no hay problema.

Cincuenta años con la poesía o con el periodismo, es un número…

Por eso te digo, me distraje. No encuentro otra explicación.

Fue una vida, digamos, movida. ¿Queda alguno de los amigos de Villa Crespo?

Mirá, algunos hay todavía. Otros fallecieron, por causas naturales y de las otras. Cada vez que vengo a Buenos Aires, voy para allá.

A la casa de sus padres…

La casa de mis padres ahora es un negocio. Vivíamos en Canning al 300. Ahí, en esa misma cuadra, nació Pugliese.

Era el escritor del grupo.

Yo fui el único que salió escritor y lo tenía que ocultar cuidadosamente. Pero los muchachos fueron cariñosos conmigo. Como éramos todos de Atlanta había una cierta solidaridad en la desgracia. Y fijate que en Atlanta me hicieron el homenaje más grande de mi vida: inauguraron una biblioteca y le pusieron mi nombre. Claro, después de todo lo que Atlanta me hizo sufrir, me lo debían, fue una especie de compensación.

A la esquina de Canning y Vera le siguió El Pan Duro.

El grupo inicial de El Pan Duro éramos Héctor Negro, Hugo Di Taranto, Juan Hierba, que en realidad se llama Nemirosky, que se exilió en España y se quedó, Carlos Somigliana, que después derivó a la dramaturgia, y yo.

Había un sexto, del que no acabo de acordarme. Muy poco después se agregaron Juana Bignozzi, Atilio Castelpoggi. Eramos gente de la Juventud Comunista y alrededores, nos reuníamos en cafés y, como nadie nos publicaba, decidimos autopublicarnos. Empezamos a hacer actos, lecturas.

A una de ellas, la que hicimos en el viejo teatro La Máscara, asistió Raúl González Tuñón y de algún modo nos apadrinó. El orden de publicación de los libros lo decidíamos entre todos, en votación secreta. A mí me tocó ser el primero con Violín y otras cuestiones. Necesitábamos sello editorial y por intermedio de González Tuñón llegamos al viejo Gleizer, Manuel Gleizer, que era un viejo absolutamente extraordinario. Era de Odessa.

Como su madre…

Sí, mi madre era de un pueblito muy cercano a Odessa. Gleizer tenía en Triunvirato, que entonces era Corrientes, un bolichito donde vendía ropa. Era un lector empedernido y empezó a vender libros también. Ese lugar se convirtió en una peña donde iban pintores, intelectuales. El editó los primeros libros de los desconocidos de entonces: Borges, Marechal, la generación del 22.

Cuando llegamos nosotros, Gleizer ya no editaba más, pero generosamente nos prestó el sello y se ocupó. Fue uno de los primeros editores que tuvo la Argentina, porque antes los libros los editaban las imprentas. El tuvo esa audacia.

¿El oficio de periodista cuándo arranca?

En el 56. En Orientación, que era un semanario, órgano oficial del Partido Comunista. Escribía de todo, porque era un semanario donde, que yo recuerde, se tocaban temas obreros, temas sociales, temas internos a veces.

¿Y en la prensa comercial?

Empecé en el año 1966 en Confirmado. Después trabajé en Panorama y en La Opinión.

Si no recuerdo mal, en Panorama, al caer la tarde, se escapaba con Paco Urondo a tomar calvados a un boliche del Bajo que mantenían en secreto. Paco decía que el calvados le recordaba a Ingrid Bergman y Charles Boyer. Eran muy peliculeros ustedes.

Si vos lo decís… Y también a mediodía nos escapábamos a una parrilla que estaba en Belgrano y Costanera Sur. Ibamos con El Moro (Edgardo) Da Mommio, Edmundo Eichelbaum y Paco, a comer vacío del ala. El boliche era de un asturiano muy simpático y pedíamos “del ala” porque era el más tierno.

Entre esos compañeros de trabajo estaban algunos de sus grandes amigos…

Claro. El Moro Da Mommio, Paco Urondo. Los otros eran José Luis Mangeri, Juan Carlos Portantiero, Andrés Rivera. Con algunos de ellos habíamos formado el grupo Nueva Expresión y después La Rosa Blindada, un invento de Mangeri y de Brocato. Ellos nos editaban. La Rosa Blindada jugó un papel político en ese momento. Eramos gente que se había ido del PC. En mi caso, me echaron porque me fui. Una medida higiénica necesaria: si un tipo se va, hay que echarlo.

Será porque el que se va sin que lo echen, vuelve sin que lo llamen.

Sí, debe haber sido así, me echaron por las dudas. Pero lo de la Rosa Blindada fue muy interesante, escribía gente como el gordo Cooke, era un esfuerzo transversal, como se dice ahora, de la izquierda. Después Mangeri se dedicó a una tarea editorial muy importante.

Por esos años volvió a militar.

Sí, después de años de no andar en nada. Porque del 64 al 67 hubo un vacío tremendo en la izquierda. Vos dirás si ese vacío sigue o no…

¿Quién fue el contacto con las FAR, si se puede saber?

Paco y yo teníamos un pacto: el primero que se enteraba de algo le avisaba al otro. El se enteró primero por la hija y me avisó. Antes de eso, en el 64, se había producido el intento del Comandante Segundo, que fracasó. Después, cuando también falla lo del Che en Bolivia, gente que estaba relacionada con ese proyecto y había quedado suelta, sin organización en la Argentina, forma lo que se llamó las proto FAR y luego dio origen a las FAR.

¿Y el pasaje a Montoneros?

Después del triunfo de Perón tratan de fusionarse Descamisados, Montoneros y FAR. Digo tratan porque en realidad esa conducción, que constituían dos hombres por organización, nunca se fusionó realmente. Era una especie de sincresis, no de síntesis. En las FAR, que eran guevaristas antes del regreso de Perón, existía la preocupación por llegar a una clase obrera que era en su mayoría peronista pero, ante todo, era clase obrera. Nunca pudimos resolverlo. La fusión con Montoneros permitía eso, de algún modo.

¿Cuántos años tenía al nacer su primer hijo?

Cuando nació mi hijo yo tenía… 26.

O sea que también de eso hace medio siglo…

Así es, hace cincuenta años del nacimiento de mi hijo también. Nora, mi hija, nació un año después.

Este 2006 tiene su…

… su densidad. Sí, tiene su densidad.

¿Cómo compatibilizó la vida familiar con la militancia?

Bueno, no eran demasiado compatibles.

La poesía tampoco.

Mirá, la poesía es una situación más o menos inevitable. Afortunadamente, para el lector es evitable. Para el que la escribe, no. A mí me admiraba lo de Rodolfo Walsh o lo de Paco Urondo, que seguían escribiendo. Y eso que Paco tenía una responsabilidad grande en la organización, yo no.

Urondo admiraba a René Char. Siempre que lo nombraba agregaba: “el comandante Alejandro”

… que era el nombre de guerra de Char en la Resistencia francesa. Paco dejó un libro inédito, que desgraciadamente se perdió y del cual se publicaron sólo algunos poemas en la revista Crisis: Poemas de Batalla. Paco escribió hasta último momento y Rodolfo igual.

¿Y usted?
Yo también, ¡cómo no!

Había un puñado de poetas militantes. Miguel Angel Bustos, del PRT, desaparecido en 1976, era un poeta exquisito. Sin embargo, la poesía no se cotizaba bien en las organizaciones. Quizá fuese porque las direcciones no eran muy cultas en ese aspecto. ¿Usted qué cree?

Bustos era muy bueno, ya lo creo. En cuanto a lo de las direcciones, sos generosa, muy generosa con eso. En todos esos organismos había el mismo obrerismo que en el Partido Comunista. El intelectual, de entrada, era sospechoso. Paco me hacía reír contándome de las reuniones que él tenía y donde “te hacían la autocrítica”. Cuando la autocrítica le tocaba a él, decía: “Yo no tengo ningún defecto pequeñoburgués… porque yo soy un gran burgués”.

¿Se sorprendió cuando las radios difundieron que habían incautado el Diario del Che y Juan Gelman figuraba en él como uno de sus hombres en la Argentina?

Yo no sabía nada. Esa mañana estaba trabajando en Panorama y me llamó Pajarito García Lupo para decirme, “Juan, figurás en un best-seller”.

¿Resultó tolerable el exilio?
Yo, en realidad, no me exilié, la organización me mandó al exterior para hacer relaciones políticas y denunciar la situación de los derechos humanos en la Argentina, con Isabel. Salí en el 75 por esa razón. La salida se convirtió en exilio con el golpe de Estado. Conseguimos la primera condena de la dictadura militar. Yo trabajaba en una agencia de noticias, en Interpress. El dueño, Savio, decidió trasladarla y se aprovechó esa circunstancia para que yo viajara.

Aprovechando mi trabajo entrevisté a Mitterrand, a Palme e hicimos firmar una declaración que, en verdad, era para denunciar lo que pasaba con Isabelita. Ocurrió el golpe y los términos seguían vigentes. Fue lo primero que apareció en el campo internacional sobre la dictadura militar.

No teníamos dinero, el Tata Cedrón hizo un concierto y con eso publicamos un avisito en Le Monde.

En ese entonces Pinochet tenía más prensa que Videla.
Es verdad y, además, en el exilio cada quien tenía su internacional: la demócrata-cristiana, la socialista, la comunista. ¿Y nosotros qué internacional teníamos? Ninguna.

En Roma le preocupó la posibilidad de contaminación lingüística.
Mirá. Fue una casualidad porque en el 63, en el gobierno de Guido, me metieron preso. Estaba en el pabellón de castigo de Villa Devoto y no dejaban pasar libros. El único que me permitieron fue una gramática italiana. Y no tuve más remedio que aprender gramática italiana. Eramos cuatro en el calabozo. Me miraban como pensando “este tipo tiene la mandarina oxidada”, así dice mi nieto.

Después me tocó ir a Italia y, efectivamente, el italiano me jorobaba porque es muy líquido; me molestaba la oreja porque yo venía con todo el sentimiento, la derrota, las pérdidas familiares, la muerte de los compañeros. Entonces, para sacármelo de encima escribía sonetos pornográficos.

¿Sería capaz de recitarme alguno?

Hice un soneto sobre Romeo y Julieta explicando por qué murió Julieta. Decía, para rimar con Romeo, que tenía “un cazzo /lungo come magnifico corteo” y que Julieta “Non murio da tristizia/ma da cazzo”. Se los recitaba a los muchachos que trabajaban en la sala de teletipos.

¿Quién es su padre poético?

César Vallejo. Y Raúl González Tuñón, también. Yo creo que hay, sobre todo, cercanías, afinidades, miradas parecidas. Y en el caso de Vallejo lo que más importó fue esa voluntad de destruir los límites de la lengua, de trascenderlos, en especial en Trilce, pero no sólo en Trilce. Después lo que pasa es que uno trata de hablar por uno mismo… con la ayuda de los padres.

¿Nunca se animó con la narrativa?

Mirá, una vez intenté escribir una novela que se llamaba “Diario de un poeta”. El personaje era un tipo que escribía poesía por holgazán, porque era cortito. Hice treinta páginas y la dejé, porque yo también soy fiaca. Luego escribí cuentos, pero tuvo más que ver con una suerte de experimentación verbal.

Bailaba tango en los años de Villa Crespo, ¿no?

Uno iba a los bailes para muchas cosas, sacabas a las mujeres con el cabeceo y preguntabas “¿vino sola o acompañada?”, preparabas el terreno para después. Y escuchábamos tango. Me acuerdo de una confitería que se llamaba Las Violetas, que no es la de Medrano. Ahí tocaba Pracánico. Cuando terminaba el tema, Pracánico se daba vuelta y una vez de espaldas al público agarraba de un platito la dentadura postiza. Se la colocaba y volvía a darse vuelta y saludaba. Le gritaban “Pracánico, ponete la sonrisa”.

¿Piensa devolverme alguna vez el libro de Stephen Spender que le presté hace 38 años?

Y… si querés, te compro uno.

Schafik (6)

Schafik (6) – Lunes, 29 de Enero de 2007 hora 10:41

Dagoberto Gutiérrez

En la sala de reuniones del PR se trabaja febrilmente y Schafik revisaba cada papelito y texto que se elaboraba, en realidad mostraba una permanente vocación por la escritura, la propia y la ajena, se preocupaba por la puntuación y la ortografía, y buscaba que el texto tuviera suficiente claridad y que dijera, de entrada, el mensaje central.
Las asambleas reunían a militantes de todo el país, generalmente trabajadores del campo y de la ciudad y la pasión con que se discutían los temas testimoniaban la ascendente temperatura de la caldera social, frecuentemente llegaban a ese pequeño local habitantes de diferentes comunidades de San Salvador y del interior del país, buscaban apoyo para sus luchas y la mayoría de los reclamos tenía que ver con los problemas de tierras y se trataba de campesinos desalojados por terratenientes voraces de las tierras en posesión durante largos años.
Eran abundantes los reclamos de los campesinos habitantes de la zona costera del país y del partido salía equipos que visitaban las zonas en donde la lucha crecía, la costa siempre calurosa y polvorienta, mostraba sus habitantes llenos de energía y ánimo y las reuniones eran con gente que generalmente no tenían puesta su camisa, con corvos y sin sombreros y las discusiones costeras se hacían rodeados de bandadas de niños y niñas que correteaban en medio de los reunidos; en esos años la Guardia Nacional asolaba las zonas campesinas.
Suchitoto fue el escenario de una prolongada confrontación entre el trabajo partidario de denuncia y conciencia y la Guardia Nacional. Un día domingo organizamos un mitin en uno de los portales de la ciudad, frente a la clínica de un dentista de la localidad; el pueblo reunido escuchaba muy atentamente y sus ojos, llenos de inteligencia, comprobaban paso a paso el discurso político que denunciaba. A las once de la mañana la guardia se hace presente, disuelve el mitin y dispersa a los pobladores y nos captura a los militantes, rápidamente los uniformados liberaron a los detenidos y me retuvieron a mi, del parque a la comandancia habían unas cuatro cuadras y en toda la ruta, mientras avanzaba en medio de dos guardias el pueblo de Suchitoto acompañó a la patrulla captora y al cautivo; una vez en la comandancia el pueblo ocupó las cuatro esquinas e inicio una vigilia permanente porque se necesitaba saber el destino que finalmente la guardia iba a dar al prisionero.
Las horas pasaron con lentitud, como caen las arenas en un reloj, y el comandante de guardia mientras tanto me acompañaba conversando en una banca; en un determinado momento el pueblo que rodeaba la comandancia empezó a gritar consignas y el comandante ordenó la represión. Desde el banco se oía el movimiento de las armas y de los arneses ajustándose, las botas resonaban y cuando salió la unidad represora, su jefe era un guardia muy joven originario de Chalchuapa, mi pueblo, bastante conocido mío, al verme, “Pinocho” se sorprendió (este era el apodo con que se le conocía) y me preguntó ¿Qué le pasa a Don Dago? Ya vez Rafael, en las mismas cosas que vos conoces y cuidado como maltratas a la gente que esta afuera en la calle. No me contestó nada pero me lanzo una mirada que no tenía odio aunque su jefe estaba sentado a mi lado en el banco que ya me parecía blandito.
En efecto, el sargento Rafael Retana, que así se llamaba pinocho, salió con su unidad se apostó en la esquina de la comandancia y custodio las puertas del pequeño cuartelito mientras en el banco blandito la plática procedía como si tratará de un encuentro de conocidos que no se preocupaban por almorzar.
A las tres de la tarde sonó el teléfono y se informó que al lugar se dirigía el Coronel Acevedo jefe de esa región militar, el era quien tomaría la decisión sobre mi destino, espere en suspenso mientras el Teniente jefe de la comandancia apresuraba sus pasos y se mostraba nervioso por la llegada de su jefe; a los cuarenta y cinco minutos después de la llamada un ruido de tacones chocando sacudió la estancia porque había llegado el Coronel.
Moreno, de baja estatura y fornido, de pelo blanco y de rostro suave, de voz tranquila y mirada serena el Coronel Acevedo platicó conmigo en un terreno político y algo dijo de que era necesario que el pueblo escuchara las criticas necesarias y que un mitin, en definitiva no bastaba para derribar un gobierno y que a su juicio yo podía marcharme sin preocupaciones; nos despedimos afectuosamente y una vez en la puerta de la comandancia con el Coronel Acevedo el pueblo que mantenía la vigilia prorrumpió en gritos y alegría y de victoria.
En el partido, valoramos lo ocurrido y decidimos organizar una respuesta política para reconocer la valentía del pueblo, denunciar la conducta represiva y anunciar la necesidad de la organización permanente y concientizadora.
El vehículo Ron Ron de Schafik fue preparado para hacer un viaje de madrugada a Suchitoto, miles de volantes se editaron, los contactos en la ciudad se prepararon y el viaje se le puso fecha, era el año de 1970 y la agitación del pueblo crecía y la tensión política filtraba todos los pálpitos de la sociedad.
Un día jueves, a las once de la noche salimos del local del PR, Napoleón Martínez, que sería desaparecido días después del asesinato de Monseñor Romero, Manejaba el Ron Ron en medio de una ruta larga y desierta. Entramos por San José Guayabal y bandadas de perros ladradores rompieron el cristal del silencio mientras se lanzaban con miedo atacando las llantas del carro. En la entrada de Suchitoto estaba un pequeño equipo de pobladores de la ciudad y de las zonas rurales; era la una y media de la madrugada cuando distribuimos los manifiestos para la zona rural y determinados barrios de la ciudad, luego de lo cual entramos al pueblo y llenamos las calles de denuncia y protesta y algunos lugares tiramos los manifiestos debajo de las puertas, en otros los pegamos en los postes y en el parque los pusimos en los bancos, todo duro cerca de una hora y la madrugada corría tranquila como pequeño arroyuelo que puede volverse torrente.
Salimos sin novedad de la ciudad hasta que un kilómetro antes de salir de San José Guayabal se poncho una llanta y empezamos en la oscuridad a cambiarla, afortunadamente tanto Napoleón como Julio Salazar el otro acompañante tenían suficiente habilidad y fuerza, a la cinco pasamos por Guayabal, tomamos café cerca del parque y a la seis y media o siete entramos a San Salvador.
En la tarde de ese día Schafik esperaba impaciente los resultados de nuestro viaje nocturno y ya estaban ahí varios de los participantes que eran pobladores del Cerro de Guazapa, años después este cerro sería un escenario heroico de la guerra heroica que ya había nacido en el corazón de la lucha política.

ILPES convoca a Culto Ecuménico pro libertad de los 13 de Suchitoto

SAN SALVADOR; 8 de julio de 2007 (SIEP) “Hacemos una invitación pública para que nos acompañen este próximo sábado 14 de julio a las 2p.m. a un gran Culto Ecuménico frente a Cárcel de Mujeres, en Ilopango, para que como iglesias progresistas exijamos la libertad de los 13 de Suchitoto” informó el rev. Ricardo Cornejo, de la Iglesia Luterana Popular de El Salvador.

Agregó que “como ILPES oramos esta mañana en nuestro Culto de adoración para que nuestro Señor Jesucristo nos de la fuerza y la sabiduría para liberar a nuestros hermanos y hermanas, capturados el 2 de julio en una protesta pacífica contra la privatización del agua, y condenados ayer a continuar tres meses más en cautiverio. Como Iglesia nos hemos declarado en oración y acción permanente.”

Expresó que “la lucha por la defensa del agua de las comunidades es una lucha justa, es una lucha sagrada, que como Iglesia siempre vamos a apoyar así como condenamos esta campaña represiva del gobierno que pretende atemorizar al movimiento popular.”

“Vamos a acompañar con nuestra presencia y oraciones a Lorena Martínez, Rosa María Centeno y Haydee Chicas, de la Asociación de Comunidades Rurales para el desarrollo de El Salvador (CRIPDES). Sepan que no están solas, hay todo un pueblo que las acompaña y las liberara…”

Por su parte, el Rev. Luís Guzmán en su predicación condenó esta ola represiva “de estos lobos que en nuestro país están encarcelando a las ovejas. Ya Jesús lo decía: los envío como ovejas entre los lobos. Y hoy los lobos de la PNC, los lobos de la Fiscalía, los lobos de ARENA encarcelan a estos hermanos y hermanas que se atreven a protestar contra la privatización del agua…”

¡Exigimos libertad de los 14 de Suchitoto! ¡Repudiamos decisión de jueza! ¡Vienen tres meses de lucha!

SAN SALVADOR, 7de julio de 2007(SIEP) La Jueza Ana Lucila Fuentes de Paz dictaminó esta tarde a las 6:30 p.m. que de los 14 detenidos el pasado lunes 2 en Suchitoto, que protestaban contra la privatización del agua y fueron acusados de actos de terrorismo, solo uno, Facundo García, sea puesto en libertad.

Los demás 13 continuaran detenidos por tres meses de manera provisional mientras continúen las averiguaciones.

El Rev. Roberto Pineda, de la Iglesia Luterana Popular, señaló que “nos sentimos muy tristes, preocupados…repudiamos esta resolución, es una resolución ordenada por ARENA, por Saca…estamos aquí desde en la mañana, realizamos una marcha desde El Salvador del Mundo, hasta este tribunal especial.”

“El Señor va a escuchar nuestras oraciones y el pueblo va seguir defendiendo a sus hijos e hijas. Esta es una lucha popular. La lucha continúa…Vamos a estar tres meses en la calle hasta lograr la libertad de nuestros hermanos y hermanas.”

Por su parte, Guadalupe Erazo, dirigente campesina del Bloque Popular Social opinó que “esta demostración de apoyo popular nos comprueba que nuestro pueblo no ha sido atemorizado y no va a abandonar a sus dirigentes. Vamos a apelar esta resolución. Este es un día histórico, un día de resistencia…No nos van a doblegar.”

El Coordinador del FMLN, Medardo Gonzáles expresó que “aquí hemos estado y vamos a seguir estando con ustedes. Vamos a acompañarlos. De donde estén los vamos a sacar con el apoyo popular. Vamos a unirnos para sacar a todos los presos políticos encarcelados por este régimen…”

Desde tempranas horas de la mañana diversas organizaciones populares se concentraron frente al tribunal, ubicado en la exclusiva zona de la Colonia Escalón, mientras una marcha popular salió del Salvador del Mundo hacia la instalación judicial.

La situación era tensa ya que desde tempranas horas de la mañana la PNC había establecido controles en las carreteras que conducían hacia esta capital. Y la PNC había detenido buses que venían de San Vicente, Chalatenango, Suchitoto, Sonsonate y Usulutan, amenazando a sus pasajeros.

Miguel Marmol: 102 años en la historia revolucionaria

MIGUEL MÁRMOL: CIENTO DOS AÑOS EN LA HISTORIA REVOLUCIONARIA

Una luciérnaga contra el oscurantismo

(Tomado del art, publicado en el Co-latino Sabado, 23 de julio, 2005)

Este 4 de julio de 2007 0se cumple 102 años del nacimiento en Ilopango, de Miguel Mármol. Después de superar las pruebas de mayor gravedad como el fusilamiento, se convirtió en un revolucionario comunista ejemplar que con su actividad creadora enriqueció la experiencia de la revolución, y marcó con claridad a la izquierda, como el verdadero sujeto histórico de la lucha del pueblo salvadoreño.

La trayectoria de Miguelito Mármol, como le decíamos sus compañeros, es admirable y aleccionadora por su actividad participativa en las propias vertientes sociales, donde se producía la historia político-revolucionaria del pueblo, y por su calidad ética y moral que siempre sustentó ante los principios que guiaron su vida de luchador social.
Con su prodigiosa memoria contribuyó a la elaboración teórica de la trayectoria popular que sirve de divisa, inspiración y orgullo al pueblo salvadoreño. El desempeño social y revolucionario de Miguel Mármol, dieron grandes aportes las tradiciones democráticas que configuran la tendencia nacional-popular de la rebeldía salvadoreña, impulsada por las organizaciones revolucionarias en sucesivas etapas del proceso de lucha, y de la cual, el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, FMLN, es fiel e inclaudicable representante.

Miguel Mármol vivió una riquísima vida en materia de actividad social, siendo un salvadoreño de legítima extracción popular, con grandes esfuerzos y preclaras intuiciones personales logró cultivar importantes aspectos del conocimiento.
Las relaciones con la naciente clase obrera nacional, de tipo artesanal en un inicio agrupada en talleres de zapatería, panadería, etc. fueron escuela vital para su espíritu de joven inquieto que deseaba servir a su clase y a su pueblo.
Así lo encontró la historia de las primeras décadas del siglo XIX, a los 17 años, arengando a grupos de trabajadores de Ilopango, San Martín, Soyapango, San Salvador y otros municipios, como propagandista de la revolución y organizador de grupos de trabajadores a quienes orientó a fin de que crearan organizaciones proletarias para que fueran el instrumento que les serviría para defender sus derechos ante las patronales explotadoras del trabajo ajeno. Apenas tenía conocimientos muy rudimentarios y escasos acerca de la lucha revolucionaria en aquellos años, pero era uno de sus mayores impulsadores.
En aquel ambiente el joven Miguel Mármol formó parte de clubes de artesanos que le permitían hacer contacto con los trabajadores que era su objetivo principal, a fin hablarles de que sólo con los cambios revolucionarios operados por los propios trabajadores podían los pueblos conquistar su liberación y les ponía de ejemplo las revoluciones mexicana, rusa y luego la lucha ejemplar del General Sandino, combatiendo en las selvas nicaragüense contra los marines invasores de Estados Unidos.

La actividad organizadora y participativa de Miguel Mármol en los acontecimientos laborales ya en los años 1925, era importante. A los 24 años viajó a la recién fundada Unión Soviética que apenas practicaba sus primeros planes quincenales, y Vladimir Ilich Lenin, su creador, había sido asesinado pocos años atrás, en 1924.
Para entonces, Mármol había conocido al dirigente histórico de los revolucionarios salvadoreños, Agustín Farabundo Martí, quien a pesar de provenir de una familia acomodada, acogió como suya la causa del pueblo por liberarse de la opresión de los ricos terratenientes.

Los acontecimientos de 1932, debidos a la crisis estructural del sistema capitalista, (1929/1934) repercutieron en El Salvador, porque el país dependía de la venta de café en el exterior. En primer lugar vendía en Estados Unidos que una década antes sustituyó al imperialismo inglés en el ejercicio de la hegemonía política en la región centroamericana.
Las demandas del pueblo salvadoreño que exigía trabajo y tierra para sembrar, fueron reprimidas por el general Maximiliano Hernández Martínez que había asaltado el gobierno, el 2 de diciembre de 1931. De ese modo a los 27 años de edad, Miguel Mármol, se vio una noche ante el paredón de fusilamiento en el cantón El Matasano de Soyapango. De allí logró salir herido de entre sus compañeros muertos. Después de su odisea con que regresó a la vida, se repuso y tomó las medidas necesarias para su seguridad. En vez de acobardarse, Miguel Mármol, retomó sus actividades de organizador revolucionario. A partir de aquel 1932, cuando fueran fusilados, Farabundo Martí, Alfonso Luna y Mario Zapata; y ahorcados Feliciano Ama, Francisco Sánchez y 30 mil compatriotas más fueron asesinados. Los pocos comunistas que sobrevivieron a la masacre de los militares y terratenientes, con mucha actividad y mayor inteligencia reorganizaron los grupos dirigentes y continuaron llevando el mensaje de liberación al pueblo a través de la clase trabajadora.
La tenacidad de Miguel Mármol en lucha revolucionaria del pueblo salvadoreño contribuyó de manera importantísima a enriquecer la historia del movimiento revolucionario y al mismo tiempo, aportó a la memoria histórica su labor y vida de un comunista ejemplar, fiel a los principios del Marxismo- Leninismo, y sobre todo, leal a la causa liberadora del pueblo salvadoreño.

Jamás, se la pasó por la cabeza, a Miguel Mármol, exigir un empleo de diputado, alcalde o concejal, en nombre del pueblo.

¡Gloria infinita a la memoria de Miguel Mármol!

Carta Abierta a Ernesto Che Guevara

CARTA ABIERTA A ERNESTO CHE GUEVARA
Frei Betto

Querido Che:

Ya han pasado cuarenta años desde que la CIA te asesinó en la selva de Bolivia, el 8 de octubre de 1967. Tenías entonces 39 años. Pensaban tus verdugos que, al meterte balas en tu cuerpo, después de haberte capturado vivo, condenarían al olvido tu memoria. Ignoraban que, al contrario de los egoístas, los altruistas nunca mueren. Los sueños libertarios no quedan confinados en jaulas cual pájaros domesticados. La estrella de tu boina brilla más fuerte, la fuerza de tus ojos guía a generaciones por las rutas de la justicia, tu semblante sereno y firme inspira confianza a quienes combaten por la libertad. Tu espíritu trasciende las fronteras de Argentina, de Cuba y de Bolivia y, cual llama ardiente, inflama aún hoy el corazón de muchos revolucionarios.

En estos cuarenta años ha habido cambios radicales. Cayó el muro de Berlín y sepultó al socialismo europeo. Muchos de nosotros sólo ahora comprenden tu osadía al señalar, en Argel en 1962, las grietas en las murallas del Kremlin, que nos parecían tan sólidas. La historia es un río veloz que no ahorra obstáculos. El socialismo europeo trató de detener las aguas del río con el burocratismo, el autoritarismo, la incapacidad para llevar a la vida cotidiana el avance tecnológico derivado de la carrera espacial y, sobre todo, se revistió de una racionalidad economicista que no hincaba sus raíces en la educación subjetiva de los sujetos históricos: los trabajadores.

Quién sabe si la historia del socialismo no sería distinta hoy si hubieran prestado oído a tus palabras: “El Estado se equivoca a veces. Cuando sucede una de esas equivocaciones se percibe una disminución del entusiasmo colectivo debido a una reducción cuantitativa de cada uno de los elementos que lo forman, y el trabajo se paraliza hasta quedar reducido a magnitudes insignificantes: es el momento de rectificar”.

Che, muchos de tus recelos se han confirmado a lo largo de estos años y han contribuido al fracaso de nuestros movimientos de liberación. No te escuchamos lo suficiente. Desde África, en 1965, le escribiste a Carlos Quijano, del periódico Marcha de Montevideo: “Déjeme decirle, aún a costa de parecer ridículo, que el verdadero revolucionario está guiado por sentimientos de amor. Es imposible pensar en un auténtico revolucionario sin esta cualidad”.

Esta advertencia coincide con lo que el apóstol Juan, exiliado en la isla de Patmos, escribió en el Apocalipsis hace dos mil años, en nombre del Señor, a la Iglesia de Éfeso: “Conozco tu conducta, el esfuerzo y la perseverancia. Sé que no soportas a los malos. Aparecieron algunos diciendo que eran apóstoles. Tú los probaste y descubriste que no lo eran. Eran mentirosos. Ustedes han sido perseverantes. Sufrieron por causa de mi nombre y no se desanimaron. Pero hay una cosa que repruebo en ti: abandonaste el primer amor” (2, 2-4).

Algunos de nosotros, Che, abandonaron el amor a los pobres, que hoy se multiplican en la Patria Grande latinoamericana y en el mundo. Dejaron de guiarse por grandes sentimientos de amor para ser absorbidos por estériles disputas partidarias y, a veces, hacen de los amigos, enemigos, y de los verdaderos enemigos, aliados. Corroídos por la vanidad y por la disputa de espacios políticos, ya no tienen el corazón encendido por ideas de justicia. Permanecieron sordos a los clamores del pueblo, perdieron la humildad del trabajo de base y ahora cambian utopías por votos.

Cuando el amor se enfría el entusiasmo se apaga y la dedicación se retrae. La causa como pasión desaparece, como el romance entre una pareja que ya no se ama. Lo que era ‘nuestro’ resuena como ‘mío’ y las seducciones del capitalismo reblandecen los principios, cambian los valores y si todavía proseguimos en la lucha es porque la estética del poder ejerce mayor fascinación que la ética del servicio.

Tu corazón, Che, latía al ritmo de todos los pueblos oprimidos y expoliados. Peregrinaste desde Argentina a Guatemala, de Guatemala a México, de México a Cuba, de Cuba al Congo, del Congo a Bolivia. Todo el tiempo saliste de ti mismo, encendido de amor, que en tu vida se traducía en liberación. Por eso podías afirmar con autoridad que “es preciso tener una gran dosis de humanidad, de sentido de justicia y de verdad, para no caer en extremos dogmáticos, en escolasticismos fríos, en aislamiento de las masas. Es necesario luchar todos los días para que ese amor a la humanidad viva se transforme en hechos concretos, en gestos que sirvan de ejemplo, de movilización”.

Cuántas veces, Che, nuestra dosis de humanidad se ha resecado, calcinada por dogmatismos que nos hincharon de certezas y nos dejaron vacíos de sensibilidad para con los dramas de los condenados de la Tierra. Cuántas veces nuestro sentido de justicia se perdió en escolasticismos fríos que proferían sentencias implacables y proclamaban juicios infamantes. Cuántas veces nuestro sentido de verdad cristalizó en el ejercicio de autoridad, sin que correspondiésemos a los anhelos de quienes sueñan con un trozo de pan, de tierra y de alegría.

Tú nos enseñaste un día que el ser humano es el “actor de ese extraño y apasionante drama que es la construcción del socialismo, en su doble existencia de ser único y miembro de la comunidad”. Y que éste no es “un producto acabado. Los defectos del pasado se trasladan al presente en la conciencia individual y hay que emprender un continuo trabajo para erradicarlos”. Quizá nos ha faltado destacar con más énfasis los valores morales, las emulaciones subjetivas, los anhelos espirituales. Con tu agudo sentido crítico cuidaste de advertirnos que “el socialismo es joven y tiene errores. Los revolucionarios carecen muchas veces de conocimientos y de la audacia intelectual necesarios para enfrentar la tarea del desarrollo del hombre nuevo por métodos distintos de los convencionales, pues los métodos convencionales sufren la influencia de la sociedad que los creó”.

A pesar de tantas derrotas y errores, hemos tenido conquistas importantes a lo largo de estos cuarenta años. Los movimientos populares han irrumpido en todo el Continente. Hoy en muchos países están mejor organizados los campesinos, las mujeres, los obreros, los indios y los negros. Entre los cristianos, una parte significativa ha optado por los pobres y engendró la Teología de la Liberación. Hemos sacado considerables lecciones de las guerrillas urbanas de los años 60; de la breve gestión popular de Salvador Allende; del gobierno democrático de Maurice Bishop, en Granada, masacrado por las tropas de los Estados Unidos; de la ascensión y la caída de la Revolución Sandinista; de la lucha del pueblo de El Salvador. En México los zapatistas de Chiapas ponen al desnudo la política neoliberal y se propaga por América Latina la primavera democrática, con los electores repudiando a las viejas oligarquías y eligiendo a aquellos que son a su imagen y semejanza: Lula, Chaves, Morales, Correa, Ortega, etc.

Falta mucho por hacer, querido Che. Pero conservamos con cariño tus herencias mayores: el espíritu internacionalista y la revolución cubana. Una y otra cosa se presentan hoy como un solo símbolo. Comandada por Fidel, la Revolución cubana resiste al bloqueo imperialista, la caída de la Unión Soviética, la carencia de petróleo, los medios de comunicación que pretenden satanizarla. Resiste con toda su riqueza de amor y de humor, salsa y merengue, defensa de la patria y valoración de la vida. Atenta a tu voz, ella desencadena un proceso de rectificación, consciente de los errores cometidos y empeñada, a pesar de las dificultades actuales, en hacer realidad el sueño de una sociedad donde la libertad de uno sea la condición de justicia del otro.

Desde donde estás, Che, bendícenos a todos nosotros los que comulgamos en tus ideales y tus esperanzas. Bendice también a los que se cansaron, se aburguesaron o hicieron de la lucha una profesión en su propio beneficio. Bendice a los que tienen vergüenza de confesarse de izquierda y de declararse socialistas. Bendice a los dirigentes políticos que, una vez destituidos de sus cargos, nunca más visitaron una favela ni apoyaron una movilización. Bendice a las mujeres que, en casa, descubrieron que sus compañeros eran lo contrario de lo que ostentaban fuera, y también a los hombres que luchan por vencer el machismo que los domina. Bendícenos a todos nosotros los que, ante tanta miseria que siega vidas humanas, sabemos que no nos queda otra vocación más que la de convertir corazones y mentes, revolucionar sociedades y continentes. Sobre todo bendícenos para que, todos los días, estemos motivados por grandes sentimientos de amor, de modo que podamos recoger el fruto del hombre y la mujer nuevos.

Frei Betto es escritor, autor de “La mosca azul. Reflexiones sobre el poder”, entre otros libros.

Traducción de J.L.Burguet

Las citas del Che tienen como fuete el texto El socialismo y el hombre en Cuba, publicado en “Ernesto Che Guevara, escritos y discursos”, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1977, pp.253-272

QUIÉN ES FREI BETTO

El escritor brasileño Frei Betto es un fraile dominico. Conocido internacionalmente como teólogo de la liberación. Autor de 53 libros de diversos géneros literarios novela, ensayo, policíaco, memorias, infantiles y juveniles, y de tema religioso en dos acasiones en 1985 y en el 2005 fue premiado con el Jabuti, el premio literario más importante del país. En 1986 fue elegido Intelectual del Año por la Unión Brasileña de Escritores.

Asesor de movimientos sociales, como las Comunidades Eclesiales de Base y el Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra, participa activamente en la vida política del Brasil en los últimos 45 años. En los años 2003 y 2004 fue asesor especial del Presidente Luiz Inácio Lula da
Silva y coordinador de Movilización Social del Programa Hambre Cero

Iglesia Luterana Popular exige liberación de los 14 de Suchitoto

SAN SALVADOR; 6 de junio de 2007 (SIEP) “Invitamos a todos los sectores populares a hacernos presentes mañana desde las 8 a.m. a el Salvador del Mundo para que de allí marchemos a los Tribunales de Instrucción Especial (11 calle y 85 Ave. Norte, por el Radisson) para solidarizarnos con los 14 de Suchitoto” indicó el Rev. Roberto Pineda, de la Iglesia Luterana Popular.

“Y esta noche hagámonos presentes en la estación de Montserrat de la PNC para manifestar nuestra solidaridad combativa. Allí están los compañeros, allí estará su pueblo acompañándolos. Ellos deben saber que no están solos” enfatizó.

Agregó que “exigimos la inmediata liberación de estos hermanos y hermanas que fueron capturados el pasado lunes mientras realizaban una pacifica demostración en protesta contra la decisión de Saca de impulsar la privatización del agua.”

Subrayó el religioso que “esta captura masiva pone de manifiesto la voluntad de Saca de reprimir cualquier expresión de protesta popular, ya que la profunda crisis que vive el país impulsa e impulsara a la gente aún más a la calle y desean detener esto a sangre y fuego…”

Puntualizo que “de fondo de esta crítica situación se encuentra el temor de la derecha de perder el ejecutivo en el 2009, ante la desastrosa gestión de Saca, lo cual empieza ya a manifestarse en las encuestas y provoca el pánico de los sectores que viven de la corrupción y el tráfico de influencias construido en 18 años de gobiernos areneros.”

“Esta decisión de reprimir y encarcelar, de atemorizar y desprestigiar al movimiento popular y al FMLN, crea una peligrosa situación de inestabilidad y se une a campañas publicitarias como la realizada con la figura del joven Mario Belloso.”

“Como Iglesia Luterana Popular condenamos esta escalada represiva y manifestamos nuestra solidaridad con estos 14 presos políticos. Exigimos

que se respeten sus derechos fundamentales y se garantice su integridad física y moral.”

“Hacemos un llamado a la madurez. Nos parece que la derecha esta jugando con fuego. Confunde el espíritu pacífico de nuestro pueblo con cobardía. Olvida que este es un pueblo con una larga trayectoria de lucha. Es el pueblo de Monseñor Romero y Schafik Handal. Están provocando la cólera de un pueblo con mucha dignidad.”

“Es un momento definitorio. Estamos ante la disyuntiva de hundirnos en una nueva espiral de violencia provocada por la represión, de manchar de nuevo el nombre de las fuerzas armadas, de cárceles llenas de presos políticos o de buscar un nuevo acuerdo que fortalezca el proceso iniciado en enero de 1992 con los Acuerdos de Paz.”

“Manifestamos que no vamos a descansar en nuestras oraciones y acciones hasta lograr la libración de nuestros 14 hermanos y hermanas capturados, entre los que se encuentra nuestra compañera y amiga Lorena Martínez, dirigente histórica desde CRIPDES del movimiento popular salvadoreño.”

Finalmente, el religioso luterano hizo un llamado a “congregarnos masivamente mañana en los tribunales y estar pendientes de las convocatorias que seguirá realizando el recién constituido Frente de Unidad Social por un Nuevo País.”

CEM publica Informe Internacional de V Congreso del PCS de abril de 1964

SAN SALVADOR, 4 de julio de 2007 (SIEP) “Con la publicación de esta parte internacional del Informe del Comité Central al V Congreso del Partido Comunista realizado en abril de 1964, concluimos la presentación del primer documento de un listado de 42 documentos del PCS” informó el Maestro Roberto Pineda, docente de la UES y Coordinador del Centro de Estudios Marxistas “Sarbelio Navarrete.”

Añadió que “es muy interesante constatar el optimismo histórico que caracteriza a este documento, era la época del avance impetuoso del campo socialista a cuya cabeza se encontraba la Unión Soviética, no obstante que ya había aparecido la disputa entre los partidos comunistas chino y soviético.”

Asimismo recalcó que “se pone de manifiesto el profundo sentido antiimperialista de los comunistas salvadoreños y su solidaridad con la primera revolución socialista, con la Cuba rebelde de Fidel y del Che. También la solidaridad con el pueblo panameño y su lucha por recuperar el Canal.”

Finalizó el catedrático universitario reiterando “el compromiso que hemos asumido como Centro de Estudios Marxistas de rescatar nuestra herencia revolucionaria, y de recuperar documentos, discursos, fotografías y reportajes sobre esa época gloriosa de nuestra historia de resistencia en el siglo pasado.”

INFORME DEL

COMITÉ CENTRAL AL QUINTO CONGRESO

DEL PCS

Parte Internacional

Trece años han transcurrido desde la celebración del IV Congreso de nuestro Partido, lapso durante el cual se han registrado profundos y esenciales cambios en el campo internacional, que favorecen a las fuerzas de la paz, del progreso, de las luchas de liberación nacional y de las fuerzas que construyen victoriosamente el socialismo y el comunismo.

Desde el año de 1950 a esta fecha, nuestro Partido no ha permanecido al margen de esos cambios experimentados. Parte fundamental de la actividad del mismo ha quedado relatada en páginas anteriores de este informe, restándonos decir solamente, y en forma general, que durante los trece años transcurridos nuestro Partido ha experimentado avances notables en su sensibilidad a los problemas que afronta el Movimiento Comunista Internacional. Tales avances es fácil de comprobarlos en el afianzamiento de sus relaciones con otros Partidos hermanos; con la participación en sus congresos; con la concurrencia a reuniones y conferencias regionales y mundiales del Movimiento Comunista Internacional; así como en las distintas manifestaciones y por los más diversos medios de nuestra solidaridad con los pueblos que luchan por la democracia, el progreso y la liberación nacional.

A fin de ordenar debidamente esta parte, relativa a las cuestiones fundamentales dentro del plano internacional y de nuestras relaciones, la dividiremos en cuatro apartados, a saber:

Situación mundial de la correlación de fuerzas entre el socialismo y el capitalismo.

El imperialismo norteamericano y las luchas de liberación nacional en América Latina. La Revolución Cubana.

Relaciones internacionales de nuestro Partido, en general, y, en especial, con los Partidos Comunistas y Obreros centroamericanos.

Acerca de las discrepancias surgidas en el seno del movimiento comunista internacional. Posición de nuestro Partido.

Situación general mundial de la correlación de fuerzas entre el socialismo y el capitalismo

El más completo y profundo análisis marxista – leninista de la presente época está contenido en los documentos aprobados por las Conferencias de los Partidos Comunistas y Obrero celebradas en Moscú en los años de 1957 y 1960. Las declaraciones surgidas de dichas conferencias, a la vez que presentan a la humanidad el panorama exacto del mundo actual, trazan las líneas generales que debe observar el Movimiento Comunista Internacional para el mejor éxito de luchas de los Partidos Comunistas dentro de cada uno de los países en los que actúan; y se señalan las normas y principios que rigen las relaciones entre partidos hermanos:

la unidad, la igualdad y el internacionalismo proletario.

“Los principales rasgos distintivos de estos años son el impetuoso crecimiento del poderío y de la influencia internacional del sistema socialista mundial, el proceso activo de disgregación del sistema colonial bajo los golpes del movimiento nacional – liberador, el incremento de las batallas de clase en el mundo capitalista y la continuación de la decadencia y la descomposición del sistema capitalista mundial. En la arena mundial se va poniendo más y más de manifiesto la superioridad de las fuerzas del socialismo sobre el imperialismo, de las fuerzas de la paz sobre las de la guerra”

Esto dice en su preámbulo la Declaración de los Partidos Comunistas y Obreros, suscrita en Moscú en 1960. La caracterización medular de nuestra época está contenida en los párrafos de esa misma Declaración, que extractamos enseguida:

“Nuestra época, cuyo contenido fundamental lo constituye el paso del capitalismo al socialismo, iniciado por la Gran Revolución Socialista de Octubre, es la época de la lucha de dos sistemas sociales diametralmente opuestos; la época de las revoluciones socialistas y de las revoluciones de liberación nacional; la época del hundimiento del imperialismo, de la liquidación del sistema colonial; la época del paso de más y más pueblos al camino socialista; la época del triunfo del socialismo y del comunismo en escala universal.

“El principal rasgo de nuestra época consiste en que el sistema socialista mundial se va convirtiendo en el factor decisivo del desarrollo de la sociedad humana”, y, más adelante:

“El contenido principal, la dirección principal y las principales peculiaridades del desarrollo histórico de la sociedad humana, lo determinan actualmente el sistema socialista mundial y las fuerzas que luchan contra el imperialismo, por la reorganización socialista de la sociedad. El imperialismo, por más que se empeñe en ello, no podrá detener el progreso de la historia. Se han sentado firmes premisas para nuevas victorias decisivas del socialismo. La victoria absoluta del socialismo es inevitable”.

Para llegar a la síntesis expresada se partió de la realidad, esta fue sometida a un análisis científico exhaustivo y, finalmente, en párrafos breves se enunciaron al mundo las conclusiones, que ahora son para todas las fuerzas amantes del progreso de la humanidad, banderas ideológicas tras las cuales se suman día a día enormes masas.

La certeza del análisis marxista – leninista de nuestra época está a la vista:

Mientras el socialismo logra éxitos sin precedentes en la producción, la ciencia y en la técnica, y conquista la verdadera libertad para los hombres al satisfacer sus necesidades materiales y espirituales; el sistema capitalista, por otra parte, se halla en proceso de decadencia y descomposición. El sistema capitalista ha tenido que transformarse de capitalismo monopolista en capitalismo monopolista de Estado. Con esto se ha logrado fundir la fuerza de los monopolios con la fuerza del Estado en un mecanismo único salvar el régimen capitalista y para aumentar al máximo los beneficios de la burguesía imperialista mediante la explotación de la clase obrera y el saqueo de vastas capas de la población” (Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros).

Pese a la fusión del poder de los monopolios con el poder estatal, el objeto de lograr aunque sea una cura temporal del capitalismo, esta no se logra y, por el contrario, la situación se agrava. Evidencia clara de esta agravación se puede constatar a diario: las luchas clasistas dentro de los países capitalistas más y menos desarrollados se agudizan a grados extremos. Ejemplos de esta agudización los tenemos en los formidables movimientos huelguísticos de los últimos años, que han movilizado a decenas de millones de hombres en los Estados Unidos, en Inglaterra, en Francia, en Italia y muchos países más de diversos continentes. Están asimismo, como ejemplo la decidida, heroica y pujante lucha de los negros norteamericanos por su completa libertad e igualdad dentro de la sociedad norteamericana.

La sociedad capitalista no solamente padece esas grandes contradicciones entre las clases explotadoras y las clases explotadas, sino también dentro de las mismas clases explotadoras. Para poderlas analizar certeramente a éstas, debemos tener en cuenta el criterio de que no son un todo monolítico, sino que existen apreciables fisuras en el frente que presentan. Asimismo, los antagonismos dentro del sistema capitalista se perciben muy agudamente en las relaciones entre las potencias capitalistas. Ejemplos de esos tipos de contradicción, los tenemos entre los monopolios guerreristas y monopolios de escala media de los Estados Unidos; en las rivalidades interimperialistas manifestadas en organizaciones agresivas como la OTAN y la SEATO, jefeadas por el imperialismo norteamericano; y en organizaciones económicas como el Mercado Común Europeo.

Dentro de los propios estados capitalistas, sus economías son incapaces de resolver el conflicto entre las fuerzas productivas y las relaciones de producción. Las crisis menudean, pese a la tendencia oficial de ocultarlas con datos optimistas y con un lenguaje estereotipado. Los avances científicos solamente se utilizan en mínima proporción y en cuanto a ellos sirven para aumentar las ganancias de los monopolios. Tales son los casos de la energía termonuclear que de ponerse al servicio de la humanidad acarrearían a ésta grandes e incalculables beneficios; y el de la automatización de la producción, que lanza a la desocupación a millones de trabajadores.

En el cuadro analítico del sistema capitalista, la Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros destaca que “la mayor putrefacción del capitalismo se manifiesta en el principal país del imperialismo contemporáneo: los Estados Unidos de América”. El paro crónico, la utilización incompleta del potencial industrial norteamericano, la militarización de la economía, el descanso del nivel de vida de los trabajadores, el lento ritmo del incremento de la producción y el bajo aumento de la población, son algunas de las características principales de los Estados Unidos de América, en lo interno. En lo externo, los Estados Unidos “son el país que mayores riquezas succiona de los países de Asia, y, particularmente, de América Latina, frenando su desarrollo”. De aquí, que la Declaración, apunte: “El imperialismo estadounidense se ha convertido en el mayor explotador internacional”, y, además, que “el curso de los acontecimientos internacionales en los últimos años ha suministrado muchas nuevas pruebas de que el imperialismo norteamericano es el principal bastión de la reacción mundial y un gendarme internacional, enemigo de los pueblos del mundo entero”.

Frente al sistema capitalista y su bastión principal, el imperialismo norteamericano, ¿Cuáles son las fuerzas que se conjugan para asestarle demoledores golpes?

Son las fuerzas de la tercera parte de la humanidad que vive bajo el socialismo y que forman el Campo Mundial del Socialismo;

son las fuerzas de la clase obrera internacional que luchan por el socialismo en el mundo entero;

son los movimientos nacional – liberadores, que demuelen el edificio colonial y semi – colonial del imperialismo;

son los movimientos generales democráticos;

son, en fin, las fuerzas amantes del progreso, de la paz, de la independencia, de la democracia, del socialismo y del comunismo las “que se funden en un torrente único que socava y destruye el sistema imperialista mundial”.

El ascenso creciente e indetenible de estas fuerzas y la crisis de la economía, la política e ideología burguesas que se están dando simultáneamente, como bien se apunta en la Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros, prueban que el desarrollo de la crisis general del capitalismo ha entrado en una nueva etapa”, y que “lo peculiar de esta etapa es que no ha surgido vinculada a una guerra mundial, sino en una situación de emulación y de lucha entre los dos sistemas (el socialista y el capitalista), en la que la correlación de fuerzas cambia más y más a favor del socialismo, todas las contradicciones del imperialismo se agudizan bruscamente y la eficaz lucha de las fuerzas pacificas por la realización y consolidación de la coexistencia pacifica no ha permitido a los imperialistas frustrar con sus acciones agresivas la paz general; ha surgido en una situación de ascenso de la lucha de vastas masas populares por la democracia, la liberación nacional y el socialismo”.

En la presente etapa histórica, como se apunta en la Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros, “el sistema socialista mundial ha entrado en una nueva etapa de su desarrollo. La Unión Soviética lleva a cabo con éxito la construcción de la sociedad comunista en todos los frentes. Los otros países del campo socialista sientan felizmente los cimientos del socialismo y algunos de ellos han entrado ya en el periodo de la construcción de la sociedad socialista desarrollada”.

Los éxitos alcanzados por los países socialistas con la Unión Soviética a la cabeza, atestiguan el triunfo del marxismo – leninismo en escala mundial, y son fuente de inspiración para todos los pueblos que viven bajo la égida de la “explotación del hombre por el hombre”.

El sistema socialista ha demostrado ser, en la practica, posible y no una utopía. Las montañas de calumnias lanzadas por sus enemigos se estrellan ante la evidencia de sus triunfos en todos los campos de la actividad humana.

Las distintas formas de la dictadura del proletariado han demostrado su fortaleza e indestructibilidad; la política de industrialización, su ventaja, la eliminación de la miseria, la atención de los niños, de las madres, el fomento de la cultura y otras actividades espirituales, confirman la justicia socialista.

A la cabeza de todas las transformaciones exitosas del campo mundial del socialismo se encuentra la Unión Soviética y su glorioso Partido Comunista, la Unión Soviética es más fuerte que nunca. En su territorio el socialismo ha triunfado en forma completa y definitiva y el pueblo soviético, dirigido por el PCUS, se ha lanzado ya a la construcción desplegada de la sociedad comunista.

El nivel de vida del pueblo soviético se eleva día a día en forma acelerada. La jornada general de siete horas de trabajo ha llegado a ser una realidad para millones de obreros, así como la automatización en gran escala. Sin embargo, la sociedad soviética se propone instaurar la jornada de cinco horas sin que todo esto signifique disminución de las prestaciones salariales y otra naturaleza para los trabajadores, ni la desocupación. Todo lo contrario. Al tiempo que se disminuyen las jornadas de trabajo en todas las ramas, aumenta, por otra parte, la oportunidad de mayor culturización de las masas, mayor acceso a todas las ramas del saber humano y de las artes, con la finalidad de borrar los vestigios de barreras entre el trabajo material y el trabajo intelectual.

La marcha exitosa del Plan Septenal, augura que las cifras de control aprobadas en el XXI Congreso serán cumplidas de tal manera que, por ejemplo en el año de 1970 la URSS tendrá una producción industrial por habitante mayor que la de los Estados Unidos. Esto significará que la URSS será para ese año la primera potencia industrial del mundo y a los países socialistas en conjunto corresponderá más de la mitad de la producción industrial mundial, estas transformaciones materiales están cambiando radicalmente el panorama a favor del socialismo, de la liberación nacional y de la democracia, y cuando el campo mundial del socialismo logre inclinar totalmente la balanza de la producción industrial a su favor facilitará a los pueblos, grandes y pequeños, la marcha final hacia la conquista de su felicidad.

Dicho en breves palabras, en la correlación de fuerzas entre el campo capitalista y el campo socialista, este sale más favorecido. Y esto no es una mera declaración literaria, antojadiza, como hemos tenido oportunidad de verlo aunque sea a grandes rasgos. Por otra parte, tal situación se objetiva de un hecho vital para la Humanidad de que, en las condiciones históricas presentes, la guerra no es fatalmente inevitable.

Sobre este tema, que importa a todos los pueblos de la tierra, la Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros, apunta:

“De poder cumplir su voluntad, los imperialistas hubieran precipitado ya a la humanidad en la vorágine de las calamidades y de los horrores de una nueva guerra mundial. Pero han pasado ya los tiempos en que los imperialistas podían determinar a su arbitrio que hubiese o no hubiese guerra”. Y se subraya:

“Ha llegado la época en que es posible poner coto a los intentos de los agresores imperialistas dirigidos a desencadenar la guerra mundial. Se puede conjurar la guerra mundial mediante los esfuerzos mancomunados del campo socialista, de la clase obrera internacional, del movimiento de liberación nacional, de los países que se pronuncian contra la guerra y de todas las fuerzas pacificas”.

Al lado de la paz se encuentran la Unión Soviética, el campo socialista, los Estados pacíficos de Asia, África y de América Latina, la clase obrera internacional y los Partidos Comunistas, los movimientos de liberación nacional, el movimiento mundial de los partidarios de la paz, los países no alineados a bloques militares; y cierta parte de la burguesía de los países capitalistas desarrollados.

Ha llegado el momento en que el poder destructor de las armas termonucleares es tan inmenso, que todo paso que se de a favor de la coexistencia pacifica de los Estados de distinto régimen social y del desarme, lo mismo que en el terreno de la disminución de las tensiones internacionales, es una contribución altamente valorada por todos los pueblos.

“Coexistencia pacifica de los Estados con distinto régimen o guerra destructora, así se plantea hoy día la cuestión. No hay otra alternativa”.

Así dice la Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros con toda justeza.

El Imperialismo norteamericano y las luchas de liberación nacional en América Latina. La Revolución Cubana

Los movimientos de liberación Nacional en Asia, África y América Latina han logrado bajo sus golpes, el desmoronamiento acelerado del sistema colonial y sometimiento semi – colonial en decenas de países; y, con ello, el imperialismo ha perdido vastas zonas de saqueo y de explotación, debilitándose así considerablemente.

La contradicción entre los países coloniales y semicoloniales, por un lado, y el imperialismo y el régimen colonial, por el otro, es una de las principales contradicciones que ocupan la escena mundial y que configura nuestra época. Tal contradicción, expresada en los movimientos de liberación nacional, es sumamente aguda.

Los éxitos que las luchas de liberación nacional están obteniendo, así como las dimensiones alcanzadas, sólo se conciben por la existencia y poderío creciente del Campo Mundial del Socialismo, a su contribución dada a las colonias y países dependientes por emanciparse del yugo imperialista. “El sistema socialista es ahora un escudo seguro, que protege el desarrollo nacional independiente de los pueblos que se han emancipado. El movimiento obrero internacional presta un gran apoyo al movimiento de liberación nacional” (Declaración de los 81 Partidos Comunistas y Obreros).

El arrollador torrente revolucionario de la época, está integrado por la lucha de los países socialistas, por la lucha de la clase obrera y de los pueblos de los países capitalistas de alto desarrollo industrial, por los luchadores de la paz y de la democracia y por los movimientos de liberación nacional. Pero entre todo ellos, el papel rector y de vanguardia lo llevan los pueblos que construyen el socialismo y el comunismo.

No es casual, que posteriormente a la Segunda Guerra Mundial y en las nuevas condiciones de la correlación de fuerzas mundiales, las luchas de liberación nacional en América Latina hayan experimentado un poderosos ascenso hasta el grado de hacer posible en el caso del pueblo cubano no sólo la liquidación del yugo imperialista y de la oligarquía criolla explotadora, sino que la revolución haya llegado hasta la creación del Primer Estado Socialista de América.

El glorioso ejemplo de la Revolución Cubana es fuente de inspiración de las luchas de los pueblos latinoamericanos. Estos han elevado su conciencia y su disposición combativa al percatarse que el pueblo cubano fue capaz de realizar una lucha armada prolongada exitosa contra un ejercito profesional, adiestrado y dirigido por el imperialismo norteamericano; de liquidar el poder de la oligarquía interna, echando a andar rápidamente una profunda reforma agraria; y de lanzar de su patria el poder de los monopolios imperialistas. Y no quedarse solamente en esta etapa, sino que llevando adelante su revolución, el pueblo cubano fue capaz de tomar el camino socialista de su desarrollo. Y todo esto apenas a noventa millas de distancia de la madriguera principal del imperialismo y con una base naval en su territorio.

Más, debemos apuntar, que muy lejos ha estado de ser idílico el triunfo de la revolución cubana y de su consolidación y avance. Todos sabemos de las diversas clases de agresiones de que ha sido objeto el pueblo cubano; agresiones unas, que han sido rechazadas con las armas en la mano; otras, detenidas a tiempo por el poderío de la Unión Soviética; y las más, de carácter económico que se están venciendo gracias a la ayuda fraternal, desinteresada y oportuna del campo socialista y de su bastión principal, la Unión Soviética.

Precisa destacarse que el imperialismo norteamericano, ante la perspectiva histórica de perder el dominio económico y su marcada influencia política en los países de América Latina, ha tratado de aplicar nuevos métodos de sometimiento de nuestros pueblos, uno de los cuales es la Alianza para el Progreso. Sin embargo, en la política exterior de los Estados Unidos con respecto a América Latina, dos posiciones se disputan el predominio: 1) La línea de que en todo se debe evitar que se sigan produciendo revoluciones en América Latina modificando para este fin la envoltura de la política imperialista hacia otros países en el sentido de hacerla más “inteligente” y menos descarada; y 2) la línea despiadada del gran garrote, para meter en cintura a nuestros pueblos y lanzarse al asalto de Cuba y a la agresión en escala mundial.

El Departamento de Estado norteamericano, ha venido sosteniendo la primera; el Pentágono, o sea el Estado Mayor del Ejercito de los Estados Unidos, ha apoyado e inspirado la segunda.

Las discrepancias en el seno del gobierno norteamericano son el resultado de la distinta posición en que están colocados los monopolios respecto de la carrera armamentista: son el reflejo de la creciente movilización de las masas populares de los Estados Unidos, particularmente de las masas de trabajadores negros, y son un efecto de la desfavorable correlación de fuerzas en la arena mundial.

Algunos monopolios están mucho mas ligados que otros a las grandes ganancias que producen los pedidos gubernamentales de armamento. Los impuestos de todo tipo para alimentar la carrera armamentista absorben una gran parte de la capacidad de compra del pueblo norteamericano, reduciendo su consumo de artículos de uso personal y familiar. Esto repercute contra los intereses de los monopolios ligados a la producción de bienes de consumo. Los precios de los productos agrícolas han sufrido así una presión hacia la caída, que solamente ha podido ser evitada mediante subsidios y la compra de los excedentes por parte del gobierno. Gran número de capitalistas, incluyendo a muchos grandes, están fuertemente interesados en que se reduzcan los impuestos y se afloje el bloqueo comercial a los países socialistas. La distensión internacional, el clima de las negociaciones, acerca la posibilidad de establecer tal comercio; mientras que la agravación de la guerra fría crea las condiciones para el mayor incremento de la carrera armamentista.

Los capitalistas que están ligados a la carrera armamentista, son, en cambio, partidarios de mantener un clima tenso y “al borde de la guerra”.

Las contradicciones apuntadas revelan que el imperialismo se encuentra a la defensiva; que ya no puede determinar omnímodamente su propia política. Revelan que el socialismo se convierte más y más en el factor determinante de la historia contemporánea.

Los bandos que apoyan una u otra línea en los Estados Unidos son la expresión de los intereses de los monopolistas y, en conjunto, están en el mismo bando de los enemigos de nuestros pueblos, aunque discrepen en cuestiones de métodos. No se trata, pues, de que, respecto a la América Latina, haya en Estados Unidos un grupo civilista y otro militarista; uno que pregona la tolerancia a los comunistas, a la revolución de liberación nacional; y otro que abandera la intolerancia.

De lo que se trata es de que, encontrándose ya en desventaja en escala mundial los diversos grupos monopólicos, actuando impulsados por sus propios intereses de explotación, no se pueden poner totalmente de acuerdo acerca de cómo mantener su dominio sobre América Latina.

Ejemplo de la línea “inteligente”, es la Alianza para el Progreso; ejemplo de la línea del gran garrote, son los “gorilazos” y “madrugones” tipo 25 de enero. Todo lo dicho no significa que los que apoyan la línea inteligente no echen mano del recurso de los golpes de Estado cuartelarios.

Los pueblos latinoamericanos no reciben pasivamente la explotación y dominio del imperialismo norteamericano.

Las vanguardias organizadas de varios pueblos latinoamericanos, aprovechando el desarrollo y condiciones propias de su lucha, se han lanzado ya a la acción armada.

Los movimientos de liberación nacional se crean, se consolidan y marchan; lo mismo que los movimientos democráticos generales.

Crece el descontento contra las oligarquías criollas, el militarismo y el imperialismo, no sólo entre las masas del pueblo, sino aún entre capas de la burguesía nacional cuyos intereses han entrado en choque con los intereses de los monopolios norteamericanos.

Hasta existen gobiernos latinoamericanos burgueses que se resisten con dignidad a uncirse a los dictados del Departamento de Estado norteamericano, defendiendo así la soberanía de sus países.

Se ha dado el caso de gobiernos latinoamericanos que, forzados por las masas, han tenido que dar algunos pasos contrarios a los intereses imperialistas, denotándose así el alto valor no sólo de la lucha armada, sino también de la lucha pacífica y reivindicativa.

En este panorama de lucha cruenta de los pueblos latinoamericanos, no debemos olvidar ni por un instante, la realidad histórica de la nueva correlación de fuerzas en la arena mundial, favorable más y más al socialismo; y el ejemplo inspirador entre las masas de explotados, de la gloriosa Revolución Cubana.

Esa nueva correlación de fuerzas ha abierto a los Partidos Comunistas y Obreros de América Latina, variadas posibilidades en sus luchas por la paz, la independencia nacional, la democracia y el socialismo.

Los comunistas salvadoreños así lo hemos entendido y, por ello, pese a nuestras debilidades y errores cometidos, tratamos de’ superarlos seria y rápidamente, poniendo en práctica múltiples formas de lucha que respondan a los intereses fundamentales de las masas de nuestro pueblo, tanto en sus aspectos reivindicativos de carácter económico, como en los de carácter político y social, sin esperar hasta que alumbre en nuestra tierra el sol del socialismo.

Las masas son eminentemente objetivas y prácticas. El ejemplo de la Revolución Cubana ha invadido sus conciencias y, ante todo, les ha presentado la perspectiva de tomar la vía del desarrollo socialista de la sociedad, es tan patente la ayuda del Campo Mundial del Socialismo y, en primer término de la URSS, al desarrollo de la economía socialista de Cuba, y a la defensa de su revolución contra el imperialismo, que las dudas que pudieron existir entre las amplias masas de América Latina acerca de las posibilidades de éxito y de consolidación de una revolución contra el imperialismo y por el socialismo en nuestro Continente, han quedado destruidas, así como las montañas de calumnias fabricadas por los enemigos del socialismo.

En estas circunstancias, el imperialismo norteamericano recrudece con mayor empeño el anticomunismo en escala continental; busca desesperadamente la liquidación de la Revolución Cubana; pretende obstaculizar los movimientos de liberación nacional; aumenta las presiones contra los gobiernos con línea exterior independiente; utiliza el guante de seda y la manopla de acero. Sugiere y amenaza.

La agresión armada del imperialismo yanqui contra el pueblo indefenso de Panamá, desatada el 9 de enero anterior, pone al desnudo la hipocresía del imperialismo de los Estados Unidos que trata de dorar con supuestas ayudas a los países latinoamericanos el sometimiento de sus soberanías. Esta agresión, que se suma a todas las sufridas, por muchos pueblos latinoamericanos, ha conmovido muy profundamente, no sólo al Continente sino también al mundo entero. El pueblo panameño viene luchando por la recuperación de la Zona- del Canal, territorio usurpado por los Estados Unidos de Norteamérica, en virtud de un Tratado impuesto con la fuerza y la perfidia. La lucha del pueblo panameño es justa y merece nuestro total apoyo y solidaridad.

No podemos caer en la ilusión de que el imperialismo norteamericano dejara fácilmente de considerar a América Latina y de considerarla como a su traspatio. Los monopolios tienen a nuestro Continente como a su mejor campo de saqueo mundial. Suman miles de millones de dólares sus inversiones y son todavía mucho más enormes las utilidades que succionan de la explotación humana y de nuestros recursos naturales. De manera que las luchas de liberación nacional en nuestro continente, lo mismo que las luchas democráticas generales, tienen por delante grandes sacrificios.

De aquí, que la solidaridad de los pueblos latinoamericanos sea más necesaria que nunca. Es preciso que las organizaciones democráticas, y en primer lugar, los Partidos Comunistas y Obreros de América Latina, estén en forma permanente oteando el panorama internacional de nuestro Continente, y haciendo sentir el peso de su solidaridad militante a quien la necesite.

Relaciones internacionales de nuestro Partido, en general, y, en especial con los Partidos Comunistas y Obreros Centroamericanos

Decíamos al principio de este informe, que durante los trece años transcurridos desde el último Congreso de nuestro Partido, hasta la fecha, este ha experimentado en su conjunto avances notables en su sensibilidad a los problemas generales que afronta el movimiento comunista internacional.

Hace trece años nuestro Partido se ocupaba, por decirlo así, casi de tarde en tarde de los problemas internacionales y de sus relaciones con el Movimiento Comunista Internacional. Desde las bases a la Dirección, se percibía un interés marcadamente débil por tales problemas. Ni siquiera estábamos al día de todos los problemas que afrontaban los pueblos centroamericanos ni sus movimientos democráticos. Prácticamente vivíamos dentro de un pozo.

Nuestras relaciones con otros partidos hermanos eran menos que incipientes, aún dentro del Istmo. Lo mismo puede decirse sobre nuestras relaciones con organizaciones democráticas internacionales amplias.

Tal situación correspondía, indudablemente, a nuestro extremo grado de debilidad orgánica e ideológica en que nos encontrábamos. Prácticamente menospreciábamos las relaciones internacionales con otros Partidos hermanos, pues no les dábamos la trascendental importancia que las mismas tienen, tanto para dar cumplimiento al principio del internacionalismo proletario; como para estar al tanto de las experiencias de otros Partidos.

Sin embargo, esa estrechez de criterio fue rota bajo el impacto de la propia vida.

Hoy cuando echamos hacia atrás nuestras miradas, notamos cuanto hemos ganado en nuestras relaciones con otros Partidos hermanos; cuanta demostración de internacionalismo proletario hemos hecho; cuanta experiencia y que formidable ayuda se nos ha prestado para que elevemos nuestro nivel ideológico.

Gracias a esa política de relaciones, nuestro pueblo ha tenido alguna participación en Congresos del Movimiento Mundial de la Paz, aunque debemos reconocer que nuestro Partido no ha logrado impulsar de manera específica el Movimiento de Partidarios de la Paz.

Nuestro partido ha participado en las Conferencias de los Partidos Comunistas y Obreros, celebradas en Moscú en los años de 1957 y 1960. Nuestro delegado a la Conferencia de los 81 Partidos, suscribió el Comunicado, la Declaración y el llamamiento a todos los pueblos del mundo a luchar por la paz y contra el peligro de una nueva guerra mundial.

Mención especial merecen las relaciones con los Partidos hermanos de Centro América. Las mismas han ido en aumento. El avance en estas relaciones que revisten un carácter especial dada la historia común de nuestros pueblos y a la similitud de problemas que en lo interno y en lo internacional afrontan, se ha acelerado después del triunfo de la Revolución Cubana.

Todos los países centroamericanos, menos El Salvador, tienen extensas costas en el área del Caribe. Desde el punto de vista de la estrategia imperialista para ahogar la Revolución Cubana, Centro América ha sido escogida como base de agresión y de bloqueo de la isla de la Libertad. En el famoso muro ofrecido por el extinto Presidente Kennedy alrededor de Cuba, los gobiernos lacayos de Centro América están jugando el papel de carceleros de sus propios pueblos.

Además de estas razones políticas y geográficas, los Partidos Comunistas y Obreros de Centro América, han tenido que velar más cuidadosamente por sus relaciones, en vista de la mayor penetración económica del imperialismo en los últimos diez años en los cinco países del Istmo. Expresión de dicha penetración son los planes ya en marcha de la Integración Económica de Centro América y del Mercado Común Centroamericano.

A la par de los planes agresivos contra Cuba y de la penetración mayor de los monopolios imperialistas, los pueblos centroamericanos han visto en algunos casos desaparecer totalmente sus libertades y derechos democráticos; y, en otros, deteriorarse aceleradamente.

En tales circunstancias los Partidos Comunistas y Obreros no podían permanecer de espaldas a sus problemas comunes.

Fue en el año de 1961 que, a iniciativa de nuestro Partido, se celebró la Primera Conferencia de Partidos Comunistas y Obreros Centroamericanos. Un año después, se celebraba la segunda, incorporándose el Partido del Pueblo de Panamá. Recientemente se celebró la tercera conferencia, ingresando el Partido Comunista Mejicano con plenos derechos en la misma. Estos pasos de gran valor histórico en las relaciones intercentroamericanas de nuestros Partidos, han llevado por finalidad el intercambio de experiencias obtenidas en nuestras luchas; el mejoramiento de nuestras relaciones; el estudio de problemas comunes y la confrontación de criterios sobre problemas generales de la lucha por la paz, la democracia y el socialismo. Tales conferencias se ciñen a las normas de absoluta igualdad, independencia y respeto, que rigen las relaciones entre los Partidos.

Acerca de las discrepancias surgidas en el seno del movimiento comunista internacional. Posición de nuestro Partido

Hemos dejado como parte final de este informe, el punto relativo a las discrepancias surgidas en el seno del Movimiento Comunista Internacional durante los últimos años.

Nuestro Partido definió en diciembre último su posición frente a dicho problema. Para llegar a esa definición, buscó con verdadero empeño, meticulosidad y espíritu comunista, toda la información. El Comité Central estimó prefirible retardar el pronunciamiento unos meses, antes que cometer el error de opinar con ligereza y sin profundizar el problema.

Nuestro Partido vio desde el comienzo con honda preocupación el aparecimiento y desarrollo de divergencias referidas a cuestiones de principio que afectan al Movimiento Comunista Internacional en su conjunto. Tal como se señala en la reunión ampliada del Comité Central, en la cual se analizara el problema, las divergencias han aparecido, lamentablemente, en puntos vitales de la línea estratégica y táctica del Movimiento Comunista Internacional y abarcó todos los aspectos principales de las luchas por la paz, contra el imperialismo y el capitalismo; de las luchas de liberación nacional, por la construcción del socialismo y del comunismo. Comprenden, asimismo, las cuestiones internas del movimiento Comunista Internacional y los principios en que éste se fundamenta; las relaciones entre los Partidos y el internacionalismo proletario. Son por tanto divergencias profundas y no superficiales, que incumben a todo el Movimiento Comunista Internacional.

En estas divergencias de principio, está alineado, por un lado, la inmensa mayoría del Movimiento Comunista Internacional; y, por el otro, el Partido Comunista Chino, el Partido Albanés del Trabajo y otros Partidos. El Partido Comunista Chino y el Partido Albanés del Trabajo han elaborado su línea particular, haciendo múltiples e intensos esfuerzos por sobreponerla a la línea general del Movimiento Comunista Internacional, que está sintetizada en los documentos de las Conferencias de los Partidos Comunistas y Obreros celebradas en Moscú en los años 1957 y 1960.

Nuestro Partido, que guarda por el Partido Comunista Chino y por el heroico pueblo chino, gran afecto y fraternal amistad, ha abrigado la esperanza en el sentido de que la madurez revolucionaria de los camaradas chinos les permitiría encontrar el camino correcto para la solución de sus diferencias con el resto del Movimiento Comunista Internacional. Tal esperanza, desgraciadamente, como lo decimos en nuestro comunicado sobre las divergencias no ha sido confirmada por los hechos. Lo que ha sucedido es un continuo y acelerado desmejoramiento de las posiciones unitarias de los camaradas chinos y un empeoramiento increíble de sus relaciones con el resto del Movimiento Comunistas Internacional al grado de irse separando aceleradamente del resto de países que forman el campo mundial del socialismo y del Movimiento Comunista Internacional.

Una síntesis de las divergencias de principio que se analizaron en el Pleno ampliado del Comité Central, es la siguiente:

El primer problema central del conflicto ideológico entre el Partido Comunista Chino y el Movimiento Comunista Internacional, es el referente al de la paz o la guerra mundial. De este problema, a su vez, se derivan los siguientes: a) la posibilidad de conjurar la guerra mundial; b) el desarme general y completo, aún con la existencia del mundo capitalista; c) la coexistencia de los Estados de diferente régimen social; y d) la interrelación de la lucha por la paz y el desarrollo del movimiento comunista internacional.

El segundo gran problema, es el referente a las luchas de liberación nacional de los pueblos de Asia, África y América Latina, y su relación en las luchas de la clase obrera internacional.

El tercer problema, gira en torno a los medios de lucha que han de seguir los pueblos para conquistar el Poder, ya sea en la etapa de la liberación nacional, como en la etapa del paso al socialismo.

El cuarto problema se refiere a los principios básicos marxista – leninistas que rigen las relaciones entre los diversos destacamentos revolucionarios del proletariado; principios que son los de igualdad de los Partidos Comunistas y Obreros; la no intervención de un Partido en los asuntos internos de otro; la ayuda recíproca en la solidaridad internacional de la clase obrera; las relaciones fraternales.

La unidad del Movimiento Comunista Internacional, como condición básica para el triunfo definitivo de la clase obrera y de los pueblos sobre el capitalismo y el imperialismo, tal es el quinto problema.

Y, por último, la lucha contra el revisionismo, el, sectarismo y el dogmatismo.

El pleno ampliado de nuestro Comité Central analizó cada uno de esos problemas y pudo constatar que los camaradas chinos se han alejado de puntos medulares del marxismo – leninismo y de la línea general aprobada por el Movimiento Comunista Internacional; y que sus posiciones erróneas discrepan, por lo tanto, de la teoría y de su aplicación a la práctica; y, además, que no existe ningún problema de los enumerados sobre los cuales no discrepen profundamente los camaradas chinos.

Merece especial mención el señalamiento que el Pleno ampliado hiciera con relación al culto a la personalidad. En efecto, puntualizó que “los camaradas chinos se han negado a reconocer que exista error en el culto a la personalidad del camarada Mao Tse Tung y se han lanzado a adulterar la justa lucha contra el culto a la personalidad que tan dañinas consecuencias ha tenido para el Movimiento Comunista Internacional.

La posición de nuestro Partido frente a las divergencias, está contenida en la declaración aprobada en el Pleno de diciembre, del Comité Central, declaración que ya fue dada a la publicidad y de la cual solamente nos concretamos a transcribir en esta oportunidad sus conclusiones.

Nuestro Partido ha declarado:

Que está firmemente en las posiciones de principio del Movimiento Comunista Internacional; que tiene como norma y guía las Declaraciones de los Partidos Comunistas y Obreros de 1957 y 1960; y que considera que tales declaraciones están demostrando plenamente su acierto histórico.

Que juzga que la aplicación práctica de los principios del Movimiento Comunista Internacional por parte de los Partidos Comunistas y Obreros ha creado mejores condiciones y perspectivas de lucha para los pueblos.

Que no puede admitir como correctas la línea particular y las posiciones ideológicas adoptadas en estos momentos por los camaradas chinos, las cuales divergen en puntos vitales de la línea general acordada por todo el Movimiento Comunista Internacional.

Que reconoce como vanguardia, inconmovible e invencible del Movimiento Comunista Internacional a la gloriosa Unión Soviética y a su Partido fundado por el jefe del proletariado mundial, Vladimir Ilich Lenin.

Que tiene confianza en que en esta lucha por los principios marxista – leninistas, estos triunfarán indefectiblemente sobre el revisionismo, el dogmatismo y el sectarismo; y, que, incluso, considera que se puede seguir polemizando públicamente pero quitándosele a la discusión su tono hostil.

Que se pronuncia porque sea convocada una Conferencia de Partidos Comunistas y Obreros, con el fin de discutir los casos concretos de errores de aplicación de la línea general en que haya incurrido, real o supuestamente, uno u otro Partido hermano.

Finalmente el Partido Comunista de El Salvador, hace al Partido Comunista de China y a todos los Partidos Comunistas y Obreros, un ferviente llamado a la unidad sobre la base de los principios que norman al Movimiento Comunista Internacional.

Camaradas delegados:

La muchedumbre de acontecimientos internacionales son un fiel reflejo de la razón histórica que asiste a nuestra lucha y una patente demostración de la superioridad del sistema socialista sobre el sistema capitalista. Tales acontecimientos, enfocados correctamente, afirman nuestra fe en el futuro radiante de nuestro pueblo. Los acontecimientos internacionales, que se suceden en los últimos tiempos con rapidez inusitada, nos revelan que dentro del mundo capitalista las contradicciones entre las grandes potencias imperialistas se agudizan cada vez más, hasta llegarse a percibir que el centro del imperialismo mundial, los Estados Unidos de Norteamérica, se están quedando completa e irremediablemente solos en una serie de posiciones de su particular y agresiva política exterior en relación al campo mundial del socialismo. El establecimiento de relaciones diplomáticas y comerciales entre la República Popular China y Francia; y la decisión de varios aliados y amigos de los Estados Unidos de comerciar con Cuba Socialista, no son sino los más recientes ejemplos que confirman el aislamiento de los círculos más agresivos del imperialismo norteamericano.

Los movimientos de liberación avanzan impetuosamente en todo el mundo. No existe rincón de la tierra agredido por el imperialismo en donde no se les haya dado su merecido, o se apresten los pueblos a dárselo en las más variadas formas y en distintos terrenos de la lucha. En fin, todo nos indica que estamos avocados a un futuro inmediato de acelerados sucesos mucho más favorables a la causa de la paz, del socialismo, del comunismo y de los movimientos de liberación nacional en todo el mundo. Los hechos desfavorables para nuestra causa dentro de nuestro país, jamás deben empañar nuestra grandiosa perspectiva del triunfo final de nuestro pueblo bajo las banderas del marxismo – leninismo.

VIVA EL PODEROSO CAMPO MUNDIAL DEL SOCIALISMO!

VIVA LA GLORIOSA UNIÓN SOVIÉTICA!

VIVA LA UNIDAD DEL MOVIMIENTO COMUNISTA INTERNACIONAL!

VIVA LA HERMANDAD DE LOS PARTIDOS COMUNISTAS Y OBREROS CENTROAMERICANOS!

VIVA EL HEROICO PUEBLO CUBANO Y SU INVENCIBLE REVOLUCIÓN!

VIVA LA PAZ, LA COEXISTENCIA PACIFICA!

VIVAN LOS MOVIMIENTOS DE LIBERACIÓN NACIONAL!

Saludos de Partidos Comunistas y Obreros al Quinto Congreso del PCS

Febrero 19 de 1964.

PRESIDIUM DEL CONGRESO NACIONAL

DEL PARTIDO COMUNISTA DE EL SALVADOR,

Presente,

Queridos camaradas.

El Comité Central del Partido Comunista Mexicano, en nombre de todos los comunistas mexicanos, saluda a los delegados al Congreso Nacional del Partido Comunista de El Salvador y les desea el mayor de los éxitos en su importante labor.

Los comunistas mexicanos conocemos de cerca las luchas el hermano pueblo de El Salvador. Sabemos las difíciles condiciones en que tiene que desenvolver su acción el Partido Comunista de El Salvador, uno de los destacamentos probados de la gran familia de comunistas que en todo el mundo marchan a la vanguardia por el progreso y la felicidad del género humano.

Estamos seguros que las deliberaciones y acuerdos de vuestro Congreso, serán una contribución valiosa al desarrollo de las luchas los obreros, campesinos, estudiantes y todo el pueblo de vuestro país, por completa liberación nacional, la democracia y la paz.

Vuestro Congreso se desarrolla en momentos de triunfos sin precedentes de la causa del socialismo y la liberación nacional. Nunca como ahora ha sido tan claro lo que significa el poderoso campo socialista, empezado por la gloriosa Unión Soviética, cuya acción determina el curso de acontecimientos principales en el mundo; la lucha por la paz se anota día a día nuevos éxitos y es evidente que es posible conseguir ya, en nuestra época, que las guerras sean eliminadas de la historia humana; el movimiento de liberación nacional asesta golpes contundentes al colonialismo y al neocolonialismo y cada vez son menos los países sometidos a esta anacrónica situación; las luchas de los obreros en los países capitalistas se desarrollan enlazándose con la lucha de los pueblos coloniales y dependientes y los éxitos del sistema socialista, formando un torrente revolucionario único que aísla el imperialismo y lo lleva de derrota en derrota.

En América Latina, continente donde vivimos más de doscientos millones de seres, la revolución liberadora avanza y se desarrolla teniendo como ejemplo máximo la gloriosa y triunfante Revolución cubana, que por primera vez, en el umbral mismo del imperialismo, ha levantado la bandera del socialismo. Las recientes acciones del pueblo panameño han demostrado que nuestra América ya no hay pueblos grandes y pequeños, pues todos somos capaces igualmente, apoyándonos en la nueva situación, de luchar con éxito contra el imperialismo y llevarlo a la derrota. El triste papel que juega la OEA y la mayoría de los gobiernos del Continente, comprometidos con el imperialismo o agentes serviles del mismo, ha quedado una vez más en evidencia, fracasaron todas las maniobras ante la energía revolucionaria de los estudiantes y el pueblo de Panamá; al que estamos obligados a brindar una solidaridad militante. Otros pueblos, como el venezolano, colombiano, guatemalteco, para citar a los más destacados, luchan con las armas en la mano por los supremos objetivos de paz, independencia nacional y democracia. El pueblo chileno, con su magnifico Partido Comunista al frente, se plantea llegar a la revolución democrática de liberación nacional utilizando principalmente la vía electoral pero sin descuidar otras formas de lucha, para dar una justa respuesta de condiciones varias que existen a lo largo y ancho del Continente, saben utilizar todas las formas de lucha, que no se atan las manos con una sola de ellas y se esfuerzan con éxito por aplicar de manera creadora el marxismo – leninismo, sin dejarse llevar por fórmulas estereotipadas o esquemas preconcebidos.

Nuestro partido, el Partido Comunista Mexicano, acaba de celebrar su XIV Congreso Nacional Ordinario, que culminó la obra renovadora que abriera en nuestras filas el XIII Congreso Nacional, celebrado hace tres años y medio. El XIV Congreso constató los importantes avances que hemos logrado en el camino de reconquistar la dirección de las masas, y dotó al Partido y al pueblo de un Programa científicamente fundamentado, que traza la perspectiva de la clase obrera hasta la realización de la revolución democrática de liberación nacional, que advertimos en un futuro cercano. En nuestro país la burguesía en el poder ha logrado conservar durante muchos años su hegemonía sobre las masas entre otras cosas, utilizando la llamada “ideología de la revolución mexicana” y el sedicente marxismo de líderes oportunistas como Lombardo Toledano. Pero las masas empiezan a despertar y a desarrollar sus luchas de manera independiente. Después de las jornadas de 1959, en que la clase obrera mexicana sufrió una derrota temporal, han surgido y se desarrollan instrumentos de lucha democráticos, en el proceso de acumulación de fuerzas en que nos encontramos. Ha surgido el Movimiento de Liberación Nacional, como germen unitario de las fuerzas revolucionarias del país; hace un año, se formó la Central Campesina Independiente, que agrupa ya a cerca de dos millones de campesinos, que no creen ya más en el Gobierno y sus promesas y se aprestan a luchar por sus derechos en una forma independiente y revolucionaria; en la actual campaña electoral surgió el Frente Electoral del Pueblo, que agrupa a los sectores democráticos no abstencionistas o comprometidos con el Gobierno y a través del candidato lanzado para la Presidencia de la República, se desarrolla con éxito una auténtica campaña electoral de oposición democrática.

Los obreros, los estudiantes y las mujeres, preparan también sus instrumentos de lucha y todo hace prever que en pocos años, muestro pueblo estará en condiciones de ganar la gran batalla de la paz, la democracia y la liberación nacional.

Por otro lado, crecen los efectivos del Partido Comunista Mexicano, cuyo crecimiento y desarrollo es la única garantía del éxito en las luchas de la clase obrera, los campesinos y el pueblo mexicano. Pese a los asesinatos, como el caso del camarada Rubén Jaramillo o Román Guerra Montemayor; o a las prisiones como los casos de los camaradas David A. Siqueiros, J. Encarnación Pérez y otros más, y a toda clase de obstáculos, nuestro Partido se esfuerza por cumplir cada día mejor sus responsabilidades.

En medio de esta situación, es bien claro para todos que crece de una manera muy importante la necesidad de mantener la unidad del movimiento comunista internacional. Nuestro Congreso condenó de manera extraordinariamente unánime, las acciones divisionistas de los dirigentes chinos y señaló al dogmatismo como el peligro principal; en esta etapa, dentro del movimiento comunista internacional. Nos pronunciamos igualmente por la necesidad de celebrar una reunión internacional de los Partidos comunistas del mundo, para defender la unidad, sostener la línea general y pronunciarse conjuntamente ante las acciones divisionistas de quienes están empeñados en dividir al movimiento comunista internacional. Fieles a la línea trazada en las declaraciones de 1957 y 1960; nuestro Congreso llamó a todos los comunistas mexicanos a estar vigilantes para impedir todo intento de romper nuestra unidad interna y aplicar esta línea de manera creadora, en las condiciones peculiares del país.

Estamos ciertos, camaradas, que vuestro Congreso hará también un considerable aporte a la causa de la unidad en el seno del movimiento comunista internacional y que sus resoluciones marcarán un jalón más en el camino de llevar adelante la lucha por la paz, la democracia, la liberación nacional y el socialismo en nuestro Continente.

Una vez más, camaradas, reciban el saludo combatiente de los comunistas mexicanos y los mejores deseos de éxitos para vuestro trabajo.

VIVA LA UNIDAD DEL MOVIMIENTO COMUNISTA INTERNACIONAL!

VIVA EL PARTIDO COMUNISTA DE EL SALVADOR!

VIVA LA AMISTAD ENTRE EL PUEBLO MEXICANO Y EL SALVADOREÑO!

PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNIOS”

El Presidium del Comité Central del Partido Comunista Mexicano

Saludo al IV Congreso del Partido Comunista Salvadoreño

Queridos camaradas:

Antes que nada quiero manifestarles que soy portador de un caluroso y fraterno saludo del Comité Central del Partido Comunista de Honduras para todos y cada uno de los aquí presentes.

Saludamos este Congreso del Partido Comunista de El Salvador, como un jalón más en la gloriosa lucha del pueblo salvadoreño en el camino de su verdadera independencia, el socialismo, la democracia y la paz.

Estamos seguros que de las discusiones sobre los documentos presentados por vuestro Comité Central, saldrá enriquecida vuestra concepción teórica y la práctica será para ustedes más fructífera en el futuro, acercará cada día más el momento feliz en que la fuerza creadora del pueblo forjará la nueva sociedad; con la que soñaran Marx y Engels y en la que ya vieron más de mil millones de seres, ensanchada en forma cualitativa recientemente, con la revolución socialista de Cuba, que liquida arcaicos fatalismos geográficos y confirma en la práctica de la vida algunas de las valiosas tesis planteadas en el XX Congreso del PCUS y desarrolladas más tarde en la línea general del movimiento comunista internacional, expuesta en las declaraciones de 1957 y 1960 en Moscú.

Conozco los documentos presentados por vuestro Comité Central y me referiré a ellos brevemente.

De las sugerencias y opiniones vertidas por los organismos de base sobre los mismos se puede deducir su gran contenido democrático; plena participación de todo el Partido en su discusión y elaboración; poniendo en práctica, no como formulas muertas, las sabias enseñanzas de Lenin de la vida partidaria.

En los nuevos Estatutos habéis conjugado vuestra experiencia de 17 años, fecha en que fueran aprobados los anteriores, con la experiencia del movimiento comunista internacional.

La piedra angular de nuestra organización: el centralismo democrático aparece armónicamente planteado, conjugando ambos factores sin contraponerlos.

El proyecto, viene enriquecido con un capítulo dedicado a la juventud y embellece, vale el calificativo, vuestro juramento al hacerla parte orgánica del mismo; la lucha por la paz del mundo. Recogiendo en esa lucha permanente la principal tarea de todos los partidos comunistas según lo dice la declaración de 1960 en Moscú.

Con la verdad como principio, despojado de toda actitud el Comité Central considera que el Proyecto de Programa debe continuar como tal, que será un nuevo Congreso el que realice la tarea de elaborar la forma definitiva, cuando la lucha del pueblo lo haya enriquecido aún más.

Sin embargo, no podemos soslayar el conocimiento que de la nación salvadoreña nos da este documento, al caracterizar al país como semicolonial, y de un desarrollo capitalista deforme, este ultimo nos ayudará mucho en la comprensión de los fenómenos en el desarrollo de la sociedad en que les toca actuar; en sus analogías con relación al propio pueblo y en sus peculiaridades.

Al desenmascarar la verdadera faz neocolonial de la Alianza para el Progreso y su expresión concreta en Centroamérica, manifiesta en el contenido de los Tratados de Integración Centroamericana, con el planteamiento de un seudo desarrollo industrial. Señala comunes objetivos a nuestros dos pueblos y a los demás pueblos hermanos de Centro América.

En el mismo documento, se hace un justo enfoque acerca de las vías de desarrollo de la revolución, así como el interesante y necesario planteamiento acerca del periodo de tránsito, en que se hace hincapié en las formas persuasivas en la construcción de las nuevas relaciones de producción.

Al referirse a las nuevas formas de propiedad, lo hace partiendo del enfoque, que Marx y Engels hicieran al elaborar el Manifiesto Comunista y tomando en consideración lo establecido en las declaraciones de 1957 y 1960 en Moscú.

Quiero referirme al Proyecto de Programa Agrario. Sin ser éste el documento central, todos sabemos el lugar que este asunto ocupa en la solución de nuestra problemática revolucionaria en Centro América.

La lectura de este rico documento nos hace accesibles la comprensión del fundamental problema de las masas rurales, de éste para nosotros los hondureños, tradicionalmente amado país hermano.

Plantea este documento una síntesis de las leyes generales, comprobadas en la vida por los pueblos que construyen el socialismo y resuelven el problema más difícil del período de tránsito; abriendo una clara perspectiva y tomando en consideración las peculiaridades nacionales en forma creadora.

Al sentar la necesaria premisa de la “alianza obrero campesina para la realización de las batallas decisivas de la revolución” frena toda posible actitud desesperada que de paso a la realización de acciones aventureras, en las que se reflejan las concepciones pequeño – burguesas acerca del proceso revolucionario y no la segura, serena y objetiva actitud proletaria.

Antes de terminar, quiero queridos camaradas, utilizar esta tribuna para exponer someramente la situación que confronta nuestro pueblo en la actualidad.

De, todos es conocido el cruento asalto al poder llevado a cabo el 3 de octubre recién pasado en mi Patria, por los jefes del ejercito bajo la inspiración y dirección del sector más agresivo del imperialismo norteamericano, representado estatalmente por el Pentágono que, desesperado ante el ascenso revolucionario mundial y fracasado en su afán de ahogar a la gloriosa revolución socialista de Cuba, busca en uno u otro país imponer aunque sea transitoriamente su caduca concepción del mundo; logrando implantar regimenes que como el actual de mi Patria, se dedican a la persecución de los elementos mas honrados de nuestro pueblo, levantando la fracasada bandera del anticomunismo.

Los mejores hijos de mi pueblo son perseguidos, encarcelados, deportados e incluso algunos de los mejores hijos de nuestra clase obrera, asesinados sin más razón que la satisfacción que siente el imperialismo norteamericano cuando tiene a su servicio la barbarie feudal – militar, que confirma una vez más su condición de principal enemigo de los pueblos del mundo.

Los más elementales derechos y las formales libertades burguesas son violadas permanentemente; los derechos humanos incorporados a la Carta de las Naciones Unidas como una conquista de la Humanidad en contra el fascismo durante la segunda guerra mundial, son pisoteados, aunque a nivel nacional se venga afirmando falazmente el respeto a los mismos.

Nuestro amado Partido, bajo estas difíciles condiciones lucha en todos los frentes y sin dejarse llevar por la desesperación, aplica una justa política de frente único y supera debilidades propias de su juventud.

Con absoluta confianza en nuestra clase obrera, en nuestras masas campesinas y en los demás sectores patrióticos, sabremos estructurar un amplio frente de unidad nacional, necesaria base para la realización de tareas que nos llevarán a nuestra liberación.

En estas actividades contamos con la solidaridad proletaria internacional de la cual nos dan ustedes muestras a menudo.

Recibid queridos camaradas salvadoreños, en nombre del Comité Central del Partido Comunista de Honduras, nuestras felicitaciones por la celebración de este Congreso y el éxito de sus trascendentales deliberaciones.

Personalmente agradezco las atenciones que el Comité Central del Partido Salvadoreño ha tenido para con mi Partido y para mí, en la práctica de una militante solidaridad proletaria internacional.

PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNIOS”

Salud, Camaradas

Jorge Díaz -en nombre del Comité Central del Partido Comunista de Honduras

Comité Central del Partido Comunista Salvadoreño

En nombre del Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba y de todo el pueblo cubano, enviamos un fraternal y caluroso saludo al IV Congreso del Partido Comunista de El Salvador, extensivo al pueblo salvadoreño, sus obreros, campesinos, estudiantes, intelectuales y profesionales, a toda su población laboriosa, que tantas muestras de solidaridad han dado a favor de la Revolución que llegó al poder en nuestra patria el 1 de enero de 1959.

Este evento, que esperamos sea un jalón decisivo en la lucha del pueblo salvadoreño por sacudirse el yugo de la dominación feudal e imperialista, tiene lugar en momentos difíciles para las fuerzas progresistas de El Salvador; pero tenemos la seguridad de que esta circunstancia obrará como acicate para redoblar la batalla contra la oligarquía y el imperialismo hasta alcanzar la victoria definitiva.

Les deseamos muchos éxitos en los trabajos del Congreso y abrigamos la confianza de que sus resoluciones y acuerdos serán un estimulo vigoroso al desarrollo de la revolución popular, antifeudal y antiimperialista.

Viva el IV Congreso del Partido de los comunistas salvadoreños!

Viva el Partido de Agustín Farabundo Martí, Mario Zapata y Alfonso Luna!

Viva el internacionalismo proletario!

Viva la unidad de todos los pueblos latinoamericanos!

Viva el socialismo!

Patria o muerte Venceremos

La Dirección Nacional del Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba

Al Comité Central del Partido Comunista de El Salvador

Queridos camaradas:

El Comité Central del Partido Comunista de Bulgaria manda sus calurosos saludos fraternales a los delegados del 4 Congreso del Partido Comunista de El Salvador y a todos los comunistas salvadoreños.

Nuestro pueblo con gran interés sigue la lucha abnegada que el Partido Comunista de El Salvador lleva en las exclusivamente difíciles condiciones ya más de 30 años por los intereses de los obreros, campesinos y todos los trabajadores de El Salvador. Creemos profundamente que la lucha heroica del pueblo salvadoreño contra la explotación imperialista, la oligarquía terrateniente y la casta militar reaccionaria, la lucha por los intereses directos de la clase obrera, por la reforma agraria democrática a favor de los pobres campesinos, por un gobierno popular patriótico y una política exterior independiente va a coronarse inminentemente con la victoria del pueblo.

Nuestro partido aprecia altamente la fidelidad del Partido Comunista de El Salvador a los ideales de la Gran Revolución de Octubre y su lealtad a los principios del marxismo – leninismo y el internacionalismo proletario, su fidelidad a la defensa de la unidad del movimiento comunista internacional.

El Comité Central del Partido Comunista de Bulgaria les desea, queridos camaradas, nuevos éxitos en la lucha por fortalecer la unidad de los trabajadores de El Salvador, por consolidar todas las fuerzas democráticas, patrióticas y progresivas en un gran frente nacional antiimperialista, frente que lucha por el renacimiento político, económico, social y cultural, por el triunfo de la causa de la paz, democracia y socialismo.

Viva el Partido Comunista de El Salvador!

Que fortalezcan la solidaridad internacional y la unidad del movimientos comunista internacional!

Comité Central del Partido Comunista de Bulgaria

Al Presidente del IV Congreso Nacional del Partido Comunista de El Salvador

Queridos camaradas:

El Comité Central del Partido Popular Revolucionario de Mongolia en nombre de todo el pueblo de Mongolia saluda cordialmente a todos los delegados del IV Congreso Nacional del Partido Comunista de El Salvador y de todo corazón les desea grandes éxitos en el trabajo del Congreso y nuevas victorias en la difícil pero noble lucha de los comunistas contra la cruel tiranía militar en El Salvador, en la lucha por la democracia y el progreso social, por llevar a la práctica los grandes ideales del marxismo – leninismo.

Viva la unidad y cohesión del movimiento comunista mundial!

Viva el Partido Comunista de El Salvador!

Comité Central del Partido Popular Revolucionario de Mongolia

Ulan – Bator, el 23 de diciembre de 1963

A la presidencia del 4 Congreso del Partido Comunista de El Salvador

En nombre del Partido Obrero Unificado de Polonia felicitamos cordialmente a los delegados del 4 Congreso de su partido de combate.

Les deseamos, queridos amigos, que las resoluciones de su Congreso contribuyan a la consolidación de las filas del Partido, al fortalecimiento de los vínculos con las masas en la lucha contra el régimen de la dictadura militar, en la lucha por lograr la independencia del país del imperialismo de EE.UU., por un régimen democrático, por los intereses vitales del pueblo, por la unidad del movimiento comunista internacional y por la paz.

Comité Central del Partido Obrero Unificado de Polonia

Varsovia, diciembre 1963

Queridos camaradas:

En nombre del Partido Comunista de Checoslovaquia saludamos calurosamente el 4 Congreso del Partido Comunista de El Salvador.

Estamos seguros que su 4 Congreso va a ayudar al fortalecimiento ulterior del Partido y lograr nuevos éxitos en la lucha por la paz y el socialismo.

Viva el Partido Comunista de El Salvador!

Viva la indestructible unidad marxista – leninista del movimiento comunista internacional!

Comité Central del Partido Comunista de Checoslovaquia

Queridos camaradas:

El Comité Central del Partido Obrero Socialista de Hungría saluda calurosamente el 4 Congreso del Partido Comunista de El Salvador.

Nuestro Partido y pueblo siguen con profunda simpatía la heroica lucha que ustedes mantienen en su país contra el yugo de la oligarquía interior y neocolonialismo, por liberación nacional, por liquidación de la miseria, por el desarrollo social y material de su pueblo.

Estamos seguros que su 4 Congreso convocado en las difíciles condiciones de clandestinidad tomará decisiones que asegurarán la mayor eficacia de la política marxista – leninista que ustedes llevan en intereses de una causa común de su pueblo y todos los pueblos de la América Latina, en intereses de la unidad del movimiento obrero internacional, de la causa de la paz y el socialismo.

Deseamos fraternalmente y de todo corazón nuevos éxitos al Comité Central y a todos los miembros de su partido.

Con saludo comunista

Comité Central del Partido Obrero Socialista de Hungría

Al Comité Central del Partido Comunista de El Salvador

Queridos camaradas:

El Comité Central del Partido Socialista Unificado de Alemania manda su saludo fraternal de combate a los delegados del 4 Congreso del Partido Comunista de El Salvador y también a todos los miembros de su partido.

Su lucha que se lleva con éxitos a pesar de las difíciles condiciones de clandestinidad encuentra calurosas simpatías de los trabajadores de la República Democrática de Alemania que luchan por la realización del programa de la construcción desplegada del socialismo y con eso hacen su aportación en la lucha general por asegurar la paz y triunfo del socialismo en todo el mundo.

Les deseamos nuevos éxitos en la organización de la clase obrera y en el desarrollo del amplio frente de liberación nacional, en la lucha contra los monopolios americanos, por El Salvador independiente.

Con saludos socialistas

Walter Ulbricht

Primer Secretario del CC del PSUA

Al 4 Congreso Nacional del Partido Comunista de El Salvador

Queridos camaradas:

El Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética saluda fraternalmente de todo corazón a los delegados del 4 Congreso Nacional del Partido Comunista y a todos los comunistas de El Salvador.

Los comunistas salvadoreños llevan en las difíciles condiciones de la dictadura militar y policíaca la lucha sucesiva por los intereses vitales y derechos democráticos de la clase obrera y todos los trabajadores salvadoreños, por la liberación de su patria del yugo imperialista.

Los comunistas de El Salvador mantienen su fidelidad a los principios del internacionalismo proletario. Lo demuestra evidentemente su activa solidaridad con el heroico pueblo cubano y con su gloriosa revolución socialista. El Partido Comunista de El Salvador defiende la pureza de la gran doctrina de Marx – Engels-Lenin, lucha por la unidad del movimiento comunista internacional sobre los principios del marxismo – leninismo, del Manifiesto de 1957 y de la Declaración de 1960.

Les deseamos, queridos amigos, nuevos éxitos en la lucha por los intereses de la clase obrera salvadoreña y de todos los trabajadores del país, por la paz y el progreso social.

Viva el Partido Comunista de El Salvador!

Viva la amistad de los pueblos de la Unión Soviética y El Salvador!

Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética