SAN SALVADOR, 13 de mayo de 2010 (SIEP) “La presentación el 4 de octubre de 1981, por parte del gobierno nicaragüense, presidido por el Comandante Daniel Ortega, de una Propuesta de Paz del FMLN-FDR en la Asamblea General de las Naciones Unidas, y acompañado por el Dr. Guillermo Manuel Ungo, Presidente del FDR, fue una contundente e indiscutible victoria de los revolucionarios salvadoreños.”
“Es por esta razón que publicamos este documento histórico, la primera propuesta de dialogo de la insurgencia salvadoreña, que tuvo la peculiaridad de nacer de manera legitima en el principal escenario diplomático internacional y que despertó múltiples simpatías y adhesiones…” indico el Lic. Roberto Pineda, del Centro de Estudios Marxistas “Sarbelio Navarrete.”
“Con esta acción internacional, que estuvo acompañada por acciones militares internas, la alianza FMLN-FDR asumió la iniciativa en el campo diplomático y arrinconó a la entonces Junta Militar de Gobierno, obligándola a aislarse y dejar al descubierto su naturaleza represiva y guerrerista.”
“Esta propuesta vino a fortalecer el ambiente propicio al diálogo surgido de la Declaración Franco-Mexicana de agosto, y legitimó el carácter de fuerza beligerante de la entonces alianza FMLN-FDR, a la vez que debilitó la tesis norteamericana de un “gobierno democrático luchando contra dos extremas.”
“La propuesta, que iniciaba el largo camino hasta llegar al 16 de enero en Chapultepec, México, presentaba la modalidad de un dialogo entre representantes de la alianza FMLN-FDR y de la Junta de Gobierno salvadoreña, con la presencia de Gobiernos en calidad de testigos, con base en una agenda mutuamente consensuada, con mecanismos para informar al pueblo de su desarrollo y sin ningún tipo de precondiciones.”
“Se presentaban dos puntos concretos que a juicio del FMLN-FDR debían de servir de base para este dialogo: uno, “la definición de un nuevo orden económico, político y jurídico” y dos, el níspero de la discordia: “la reestructuración de las Fuerzas Armadas, en base a los oficiales y tropa del actual ejército que no sean responsables de crímenes y genocidio contra el pueblo, y la integración de los mandos y tropa provenientes del FMLN.”
“Nos dirigimos directamente al Gobierno de Estados Unidos para demandarle que cese su intervención militar en El Salvador, puesto que ésta es contraria a los intereses de los pueblos salvadoreño y norteamericano y pone en peligro la seguridad y la paz en Centroamérica” señalaba esta primera Propuesta de Paz de los revolucionarios salvadoreños, representado por la Dirección Revolucionaria Unificada del FMLN y el Comité Ejecutivo del Frente Democrático Revolucionario, FDR.