SAN SALVADOR, 25 de abril de 2010 (SIEP) “Ingrese a la U en el año 68, a la Facultad de Derecho, y estando ahí me intereso el Teatro Universitario, que dirigía el maestro Edmundo Barbero. Participe en varias obras…”nos relata Víctor Regalado, revolucionario salvadoreño radicado en Canadá.
“Una vez montamos una obra que era bien larga, duraba como dos horas y media, y yo solo hacía pequeños papeles así que para mientras me llegaba el turno me salía a caminar por la U, a descubrirla…mientras se desarrollaba la obra, y luego regresaba a incorporarme. En una de esas caminatas pase por el departamento de Periodismo y descubrí que enseñaban fotografía y me interese y fui a preguntar los horarios bueno y termine cambiándome de carrera…”
En la U fui conociendo a muchos artistas, incluyendo a poetas, conocí al Pichón Cea, ya que éramos del mismo pueblo, de Izalco. Y una vez me atreví a decirle: me gustaría conseguir un contacto para organizarme. Y eso no cayó en oídos sordos porque como una semana después, todo clandestino, me llamó y me dijo: te he conseguido un contacto. Y me dio una dirección y alguien a quien buscar.
Una tarde tome el bus hacia el centro, y me baje en la plaza Barrios y de ahí camine al sitio señalado. Quedaba en la Avenida Cuscatlán numero 630. Era la famosa FUSS. Al llegar vi que se trataba de un local sindical. –Disculpe, el Señor Raúl Padilla Vela. Todos se me quedaron viendo como con desconfianza. –Espérelo, ya va venir. Los notaba desconfiados, veían mi aspecto hippie, el pelo largo, los cuadernos. Cuando llego vi que era un señor. También se me quedo viendo y cuando le dije de parte de quien venía, me dijo: pase adelante, suba. Hacia calor, eran las dos de la tarde. Al fondo del local había unas gradas que conducían a un aula con bancas de madera y una pizarra. Había ya gente esperando la reunión que en realidad era clase.
Llego entonces Padilla Vela y empezó la clase, empezó a hablar de cómo la formula dinero-mercancía-dinero era la característica del capitalismo. En realidad yo esperaba otra cosa. Que hablara de cómo derrocar a la dictadura y de lucha armada. Y había llegado a una charla de economía política. Como a la hora de escucharlo, levante la mano para pedir la palabra, todos me vieron sorprendidos. Le pregunte: disculpe: ¿Qué organización revolucionaria es esta? Se me quedo viendo con un rostro encolerizado y me dijo: ¡esta usted en un círculo de estudio del Partido Comunista de El Salvador! -Ah, gracias. Y me quede meditando en que me había metido. Al final seguí llegando, y fui conociendo a mucha gente, incluso me hice muy amigo del mismo Padilla Vela, que también vive exilado en Canada…y luego te sigo contando.