Conmemoran 30 de julio con marcha masiva, combativa y unitaria

SAN SALVADOR, 30 de julio de 2004 (SIEP) La actividad fue convocada por la Coordinadora Revolucionaria Estudiantil, el Frente Universitario Roque Dalton y la Juventud del FMLN. La marcha inici en la Universidad de El Salvador y se dirigi sobre la 25 Avenida Norte hasta la altura del Seguro Social, donde se realiz un homenaje a los estudiantes cados en esa fecha.
Como es ya tradicin desde la poca del conflicto armado, los estudiantes quemaron una replica de una tanqueta para simbolizar su repudio contra una de las principales masacres cometidas por la dictadura militar, en la dcada de los setenta y que fue el detonante de un poderoso movimiento popular de denuncia y resistencia.
Durante la manifestacin, los estudiantes exigieron al gobierno de Antonio Saca la liberacin de dos estudiante de secundaria desaparecidos desde la semana pasada en el occidental departamento de Santa Ana, el aumento del presupuesto de la UES y que no se modifique la actual Ley de Educacin Superior.
Asimismo se solidarizaron con los procesos revolucionarios de Cuba y de Venezuela, exigieron la independencia de Puerto Rico, expresaron su apoyo a las luchas de los pueblos de Irak, Palestina y Afganistn por su autodeterminacin y el retiro de tropas extranjeras de sus territorios ocupados. Condenaron la presencia de tropas salvadoreas en Irak.
Ovidio Martnez, dirigente del Bloque Popular Juvenil y de la CRE, consider que con esta movilizacin comprobamos que el movimiento estudiantil se esta recuperando de la crisis en que se encontraba y podr de nuevo acompaar al movimiento popular en sus justas luchas por la democracia y la liberacin.
Boris Pineda, dirigente del Frente Universitario Roque Dalton opin que estamos contentos por la respuesta estudiantil a nuestra convocatoria, estn presentes todos los gremios de las facultades y los frentes estudiantiles, es una demostracin de fuerza, de unidad y de lucha combativa.
Elas Segura, coordinador de la Juventud del FMLN, expres que acompaamos esta demostracin estudiantil por que consideramos que es importante rendir homenaje a los mrtires y hroes que derramaron su sangre para que en El Salvador desapareciera el militarismo. Con nuestra presencia les decimos que seguimos luchando y que su esfuerzo no fue en vano.
Guadalupe Erazo, dirigente del Bloque Popular Social dijo que debemos seguir luchando para conseguir un presupuesto justo para la Universidad de El Salvador, que es donde estudian nuestros hijos e hijas, los hijos de los campesinos y obreros. Y siempre recordar a nuestros mrtires y hroes.
Luego de la demostracin, se realiz un acto poltico-cultural en la UES con la participacin de dirigentes populares como el lder del FMLN y sobreviviente del 30 de julio de 1975, Medardo Gonzles, as como agrupaciones musicales como los Torogoces de Morazn.
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Foto: La simblica quema de la tanqueta militar

Samuel, el profeta que denuncia a la monarqua

Reflexin sobre 1 libro de Samuel, captulo 8

El oficio de profeta en el Antiguo Testamento aparece en conflicto con el surgimiento de la monarqua. Y le corresponde a Samuel vivir ese confuso momento en que las tribus de Israel deciden establecer un rey que las gobierne y que a la vez las oprima como a los dems pueblos. Es un cambio radical. Samuel advierte sobre los peligros de esta decisin pero al final acepta cumplir su papel ungiendo a Sal.

Samuel como dirigente religioso experimenta el transito de una sociedad dirigida por jueces, por jefes poltico-militares surgidos de las milicias populares a una sociedad dirigida por reyes, por jefes poltico-religiosos, que construyen una ejercito profesional y establecen un sistema poltico unificado. Samuel aunque comprende la necesidad de centralizar el aparato estatal para enfrentar las amenazas externas, les advierte y denuncia los peligros de autoritarismo de esta decisin.

Y tambin Samuel con mucha claridad comprendi que esta decisin iba a tener un profundo significado en la visin religiosa, ya que conducira irremediablemente a un monopolio del poder religioso y del poder poltico, lo cual estara en contraposicin con la voluntad manifestada por Yahv y representada en el sistema de jueces populares. En este nuevo esquema, la corona controlara la espada y tambin el altar. El rey sera el jefe de lo terrenal y lo celestial.

Samuel era una persona con mucha autoridad moral para advertir acerca de estos desarrollos ya que era juez y tambin era profeta. Desde nio sus padres lo dedicaron al servicio de Yahv. Siendo muy joven Yahv se comunic con l. Y desde entonces se dedic a predicar la conversin al Dios verdadero. Yahv lo escuchaba. El pueblo lo escuchaba.

Pero cuando Samuel estaba ya anciano, sus hijos se aprovecharon de su posicin para obtener privilegios. Buscaban el dinero, aceptaban regalos y violaban la justicia. Aprovechndose de esta situacin, un sector poderoso de la comunidad le reclama por el proceder de sus hijos y le exige: danos un rey para que nos gobierne, como hacen los reyes en todos los pases. Era una peticin atrevida, hasta blasfema porque Yahv era el rey reconocido de Israel. Y abiertamente pedan estos sectores poderosos que se renunciara a las tradiciones populares y se estableciera una dictadura.

Samuel se encoleriz con justa razn. Se trataba de un golpe de estado. Y se encontraba debilitado por sus propios errores para responder enrgicamente. La conducta de sus hijos le haba hecho perder el apoyo popular. Tena que aceptar la nueva situacin o rebelarse. Samuel consulta esta situacin con Yahv.

Yahv le responde: dale a tu pueblo lo que te pide. Pues no te rechazan a ti, sino que es a m a quien han rechazado para que no reine sobre ellos. Para Yahv era claro que esta situacin obedeca a un alejamiento de los principios comunitarios en que se basaba la sociedad hasta entonces y su desplazamiento por un sistema jerrquico basado en la divisin de clases sociales y la explotacin.. Me abandonan para ir tras otros dioses reflexiona con justa razn Yahv.

Samuel trasmiti al pueblo la opinin de Yahv sobre la monarqua, una brillante denuncia histrica del significado de la realeza y del poder poltico que sigue vigente. Hoy con ms fuerza en este mundo unipolar. Samuel denuncia a los reyes de todos las pocas y pases. Les dijo: Miren lo que les va a exigir su rey. Hoy podemos decir: miren lo que les va a exigir la globalizacin neoliberal.

Les tomara a sus hijos y los destinar a sus carros de guerra o a sus caballos, o bien los har correr delante de su propio carro. Samuel denuncia el militarismo. A lo largo de la historia millones de jvenes han muerto en guerras injustas. Hace algunos meses un joven pobre salvadoreo, campesino de Guaymango, muri en Irak defendiendo los intereses de las compaas petroleras y de los Estados Unidos. Miles de negros, hispanos y blancos pobres integran el ejercito de ocupacin norteamericano en Irak.

Los emplear como jefe de mil y como jefe de cincuenta. Samuel denuncia la explotacin. Los jvenes salvadoreos tienen que huir de su patria y vender su fuerza de trabajo en las fabricas de Chicago o Nueva York o en las fincas de California o Texas para ganarse el pan. La globalizacin impone un orden mundial en el que se destruye nuestra agricultura y soberana para favorecer el comercio de alimentos.

Los har labrar y cosechar sus tierras. Samuel denuncia la concentracin de la tierra. En El Salvador, a finales del siglo XIX los poderosos amigos del rey presidente expropiaron las tierras ejidales y de las comunidades indgenas para cultivar caf. Se apoderaron de la tierra como el rey Ajab. Y asesinaron a muchos Nabot. Ah naci la oligarqua agroexportadora y tambin la pobreza de las comunidades rurales.

Los har fabricar su armas y los aperos de sus caballos. Samuel denuncia el armamentismo. La guerra es un gran negocio. Existen pases que se benefician de los conflictos internacionales para la venta de armas. En 1969, en una breve guerra entre El Salvador y Honduras los proveedores de armas eran los mismos. La guerra de Irak, y antes Afganistn, fueron grandes negocio para las compaas productoras de armamento.

Les tomar sus hijas para peluqueras, cocineras y panaderas. Samuel denuncia la opresin de las mujeres. En las maquilas instaladas en El Salvador, miles de jvenes mujeres son explotadas por compaas coreanas o taiwanesas, y se les niegan sus derechos ms elementales. No pueden organizarse en sindicatos. No pueden alzar su voz por la amenaza del despido.

Les tomara sus campos, sus vias y sus mejores olivares y se los dar a sus oficiales. Samuel denuncia el saqueo de nuestros recursos naturales.

Les tomar la dcima parte de sus sembrados y de sus vias para sus funcionarios y servidores. Samuel denuncia la corrupcin de funcionarios pblicos.

Les tomar sus sirvientes y sirvientas, sus mejores bueyes y burros y los har trabajar para l.

Les sacar la dcima parte de sus rebaos y ustedes mismos sern sus esclavos.

Y concluye Samuel dicindoles: Ese da se lamentaran del rey que hayan elegido, pero Yahv ya no les responder.

Todo un programa antimonrquico. Samuel logr reflejar el espritu popular del pueblo hebreo. Y su mensaje tiene mucha actualidad para enfrentar las acometidas de la ofensiva neoliberal que amenaza a la humanidad incluso con su desaparicin. Con el espritu de Samuel que es el espritu de Dios gritamos con todas nuestras fuerzas: Otro mundo es posible.

San Salvador, 30 de julio de 2004

Celebran noveno aniversario de Iglesia Luterana Manantiales del Desierto

Guazapa, 5 de julio de 2004 (SIEP) Un grupo de pastores luteranos fueron ordenados este da por el Obispo luterano Medardo Gmez, en el marco de la celebracin del noveno aniversario de fundacin de la Iglesia Luterana Manantiales del Desierto.
Santiago Rodrguez padre, pastor local agradeci a todos aquellos que nos estn visitando este da, sean bienvenidos, estn en su casa, esta es una iglesia que proclama la fe en nuestro Seor Jesucristo, una iglesia que acompaa a sus comunidades en la lucha por la vida, por el alimento, espiritual y material.
Agreg que nos sentimos muy halagados de tenerlos en nuestro humilde templo, es esta una ocasin para darle gracias a Dios por todo lo que l nos ha dado, es un honor que estas ordenaciones de pastores se realicen aqu en esta casa de Dios.
Entre los pastores ordenados a nivel diconos se encuentra Efran Cerna, responsable de la Iglesia Luterana de Ahuachapan, y un reconocido organizador de comunidades campesinas y cooperativas. Dirigente del Bloque Popular Social. Pastore anteriormente la Iglesia Luterana de Guaymango.
Expres que para m esta ordenacin es una responsabilidad que asumo con la claridad que implica ms esfuerzos, ms energa, ms dedicacin a la comunidad eclesial y a la proclamacin del Evangelio, a la organizacin y la movilizacin popular.
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Foto: Obispo luterano Medardo Gmez impone manos a pastor Efran Cerna, dirigente de Comunidades de Fe y Vida y pastor de Iglesia Luterana de Ahuachapan.

Celebran 18 aniversario de Obispado Luterano salvadoreo

SAN SALVADOR, 6 de agosto de 2004 (SIEP) Nuestro Seor Jesucristo nos ha guiado para llegar hasta aqu dijo el Obispo de la Iglesia Luterana salvadorea, Dr. Medardo Gmez al iniciar esta maana la peregrinacin desde el Parque Cuscatln con la que se conmemora el 18 aniversario de haber sido consagrado como obispo.

Agreg que somos una iglesia proftica que acompaa a nuestro pueblo salvadoreo en su dolor y en su esperanza para caracterizar la obra que realiza esta comunidad de fe, que vincula la predicacin del Evangelio con el acompaamiento a las luchas de los sectores populares.

Desde Los Angeles, Estados Unidos acompa a esta celebracin religiosa el Lic. Salvador Gmez, dirigente de la influyente organizacin SANA, la cual organiza ao tras ao las celebraciones del Salvador del Mundo en esa ciudad norteamericana.

Sabemos del trabajo que realiza la Iglesia Luterana y le tenemos mucho respeto, es una iglesia que tambin nos ha acompaado en los esfuerzos porque no se deporte a nuestros compatriotas y porque se respeten nuestros derechos humanos en el Norteexplic el Lic. Gmez.

Finalmente, el Rev. Ricardo Cornejo indic que con esta peregrinacin este 6 de agosto estamos manifestando nuestro testimonio como una iglesia que sale a las calles a exigir justicia en una sociedad muy injusta, a ser luz en las tinieblas de este modelo neoliberal que condena a la pobreza a nuestro pueblo, a ser la sal que alimenta nuestro corazones para seguir trabajando por el reino de Dios.
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Foto: Pastores Eliseo Rodrguez, Roberto Pineda, Ricardo Cornejo, Obispo Medardo Gmez, Lic. Salvador Gmez, director ejecutivo de Asociacin Nacional salvadoreo-Americana (SANA) y pastor Carlos Najera, marchan durante peregrinacin esta maana.

Cofevi respalda esfuerzo de trabajadores y trabajadoras de Just Garments

San Salvador, 6 de agosto de 2004 (SIEP) Mara Isabel Villegas, dirigente de las Comunidades de Fe y Vida (COFEVI) elogi el esfuerzo realizado por las trabajadoras y trabajadores de Just Garments e hizo un llamado a la solidaridad con esta empresa dirigida por los propios trabajadores.Tenemos que apoyarlos y lograr que su empresa sea exitosa dijo.
JUST GARMENTS es una empresa formada como resultado de la finalizacin de un conflicto laboral en El Salvador. Cuando el sindicato STIT solicit a una empresa Taiwanesa la negociacin colectiva en abril de 2002; esta cerr sus operaciones. STIT y CEAL iniciaron una campaa internacional que fue rpidamente apoyada por organizaciones de Asia, Estados Unidos y Amrica.
El sindicato textil UNITE, la AFL-CIO, la Federacin Internacional Textil (ITGLWF), US-Leap, Campaign for Labour Rigths, USAS, Focus on Globalization y muchas otras organizaciones sumaron esfuerzos e hicieron posible un acuerdo en noviembre de 2002 y la formacin de la empresa a partir de abril 2003.
Just Garments contrata a las trabajadoras afiliadas a STIT que perdieron sus empleos en abril 2002 y luego colocadas en una lista negra por lo que no podan encontrar trabajo (El Workers Rights Consortium realiz un reporte sobre este caso en una fbrica que cose para Lands End). Just Garments ha sido financiada por la corporacin taiwanesa Tainan Enterprises que cerr operaciones en abril de 2002 en El Salvador, la cual luego de muchas gestiones asumi responsabilidad en este caso.
JUST GARMENTS es el fruto de la resistencia de obreras y obreros salvadoreas(os) y de esfuerzos de muchas personas alrededor del mundo. Nunca una empresa en Centroamrica que cerrar sus operaciones cuando se solicit negociacin colectiva volvi a abrirlas antes. Just Garments tiene capacidad hasta para 300 personas actualmente y ha estado lista para producir desde noviembre de 2003. STIT y Just Garments firmarn un contrato colectivo cuando inicie operaciones segn los acuerdos de noviembre 2002. Empresas como GAP y Phillip Van Heusen han ofrecido la posibilidad de colocar pedidos en Just Garments.

La compaa Lands End ha brindado asistencia tcnica y ha donado tela y maquinas. Tainan Enterprises ha provedo la mayoria de las mquinas y el capital necesario para que esta empresa sea posible a travs de Mr. Donald Wu el accionista mayoritario.

I Foro Mesoamericano de las Iglesias San salvador

13 y 14 de julio de 2004
Introduccin

Convocada por la Comunidad Cristiana Mesoamrica, el Consejo Nacional de Iglesias de El Salvador y las Comunidades de Fe y Vida, reunidos en la Universidad Luterana Salvadorea, y en el marco de la realizacin en esta ciudad del V Foro Mesoamericano de los Pueblos, iglesias, organizaciones cristianas y personas de filiacin bautista, luterana, reformada, episcopal y catlica romana, nos hemos encontrado para celebrar nuestra fe en Jesucristo y reflexionar unidos desde el Evangelio, sobre la realidad que nos interpela como seguidores del Dios trino.

Animados del deseo de ser luz en las tinieblas que inundan nuestro mundo globalizado, compartimos con nuestros hermanos y hermanas del camino, las siguientes reflexiones sobre los tratados comerciales, el acompaamiento de las iglesias, la tica cristina y la teologa de la vida.

Nuestra Visin sobre los tratados de libre comercio

Como iglesias reconocemos con humildad que sabemos muy poco sobre los procesos de discusin y aprobacin de tratados comerciales, los cuales afectan directamente la vida de nuestros pueblos y comunidades. Por lo que nos corresponde averiguar ms e informar a nuestras congregaciones, comunidades y sociedad as como tener y divulgar posicin, organizarnos y movilizarnos para enfrentar esta amenaza al pueblo de Dios.

En nuestras comunidades muchos no saben, incluso muchos piensan influidos por la propaganda, que los tratados comerciales como el CAFTA, PPP y ALCA nos van a beneficiar cuando en realidad nos van a perjudicar. Los tratados comerciales van a reducir nuestra capacidad adquisitiva, van a generalizar en la poblacin el pago de un salario mnimo y en el rea rural, sabemos que los campesinos no van a tener a capacidad para competir con las agroindustrias de los pases desarrollados y van a terminar siendo despojados de sus tierras as como se va a destruir nuestro medio ambiente. Y no vamos a tener la capacidad de producir lo que consumimos.

Los tratados comerciales no nos permiten desarrollarnos como personas porque afectan nuestra identidad cultural. Promueven una visin individualista del slvese quien pueda as como la valoracin de las personas por lo que tienen, como objetos desechables y no por lo que son, cuando sabemos que hemos sido creados y creadas a imagen y semejanza de Dios. Afirmamos con temor y temblor que los TLC nicamente benefician a minoras locales y a las grandes corporaciones de los Estados Unidos.

Nuestra visin sobre el compromiso de las iglesias con las luchas de nuestros pueblos

Nos corresponde como iglesias trabajar en los aspectos negativos que en nuestra historia comn nos han daado como son los dogmas, el protagonismo y el proselitismo religioso. Debemos de partir de un compromiso evanglico que nos unifique y nos permita mantener esfuerzos y espacios de reflexin bblico teolgica de la realidad, as como el acompaamiento pastoral a las expresiones del pueblo que luchan a favor de los pobres y del reino de Dios.

Debemos revisar nuestro caminar juntos, nuestra historia como iglesias, para poder identificar las debilidades que nos impiden fortalecer nuestros proyectos de vida. Crear una estrategia que permita el trabajo conjunto y fortalezca nuestras expresiones ecumnicas, para transformar nuestra sociedad. Debemos de hacer una relectura bblica que nos permita analizar nuestra realidad y descubrir las causas, la raz del sufrimiento de nuestro pueblo.

Asumimos el desafo de unir a nuestras iglesias y educarlas sobre los peligros de los proyectos neo-liberales; as como la tarea de despertar a nuestro pueblo y animarlo a la lucha. Debemos de acompaar las iniciativas que denuncien los proyectos de muerte y anuncien alternativas de vida para nuestra gente, que celebren su unidad y diversidad. Debemos de acompaar a nuestras comunidades en sus luchas por la justicia y no limitarnos a las prcticas religiosas. Hay que acercarnos a la gente, a su fe, a su sufrimiento y a su esperanza.

Nuestra tica cristiana frente al modelo neoliberal

Como iglesias que reconocen a Jesucristo como su Seor y Salvador damos testimonio, que frente a la globalizacin neo-liberal que se nos impone, manifestamos la solidaridad de los pueblos y las iglesias, la organizacin y la educacin popular, el amor y la comprensin, la proclamacin de la verdad, el anlisis de la realidad desde la ptica bblica.

Nos pronunciamos por un liderato cristiano comprometido con los valores del Reino; que promueva la oracin y la accin, que fomente la capacidad crtica frente al discurso nico de la globalizacin y rechace la cultura deshumanizante del consumismo y la guerra; que denuncie como pecado la resignacin frente a la opresin y la injusticia, que trabaje con los sectores victimizados.

Nuestras iglesias deben desde sus plpitos y acciones denunciar la injusticia que nos rodea como lo hizo Jess de Nazaret, cuestionar la actitud encubridora y cmplice de algunas iglesias y pastores con el pecado de la opresin. Estudiar con responsabilidad la Biblia porque un texto bblico, sacado de contexto es un pretexto para apoyar a los poderosos.

Nuestra visin sobre la Teologa de la Vida

Como iglesias que acompaan a nuestros pueblos mesoamericanos en sus luchas por la vida, asumimos nuestra responsabilidad proftica de anunciar y denunciar. Anunciamos la vida, la vida abundante (Juan 10:10)en comunidad con una misma fe y una misma esperanza. Esa es nuestra respuesta ante la globalizacin neo-liberal.

Somos un solo pueblo mesoamericano agobiado por la pobreza econmica, pero con mucha riqueza de fe y esperanza, con mucha conviccin colectiva de lucha. Como iglesias debemos de dar testimonio de unidad que nos permita avanzar como sectores populares hacia la liberacin, y para lograr esto debemos de vencer el miedo a los poderosos y a sus mltiples recursos. As lo hizo Jess de Nazaret.

Somos iglesias y pueblos en resistencia, por lo que debemos de divulgar el mensaje liberador del Evangelio, rescatar un movimiento ecumnico que tenga presencia nacional, ir a la gente y escucharla en sus problemas y soluciones, en su testimonio y compromiso liberador.

San Salvador, El Salvador, 14 de julio de 2004