SAN SALVADOR, 13 de abril de 2025 (SIEP) “Con mucha tristeza hemos conocido este día de fallecimiento de nuestro querido camarada comunista Rolando Orellana…” expresó el escritor salvadoreño Roberto Pineda.
Agregó que “conocí a Rolando a finales de 1981 en Managua, Nicaragua. El ya era de la dirección del Partido (Comunista) y yo como militante trabajaba en la agencia de prensa NOTISAL. Había él salido del país porque iba a realizar una gira por los países socialistas, dado su conocimiento del ruso…”
Lo conocíamos cariñosamente como Semita, dada su baja estatura, y pudimos cultivar una amistad dado que ambos desarrollábamos nuestra labor política en el local del PCS, que quedaba en el residencial Planetarium, en la carretera vieja a León.
Hablábamos largamente sobre política salvadoreña, sobre el movimiento comunista internacional, el desarrollo de la guerra, el original proceso revolucionario nicaragüense, y hasta de poesía y literatura.
Me acuerdo que le bromeaba mucho por su tendencia a expresar la realidad mediante términos jurídicos, dada su formación en Derecho Internacional allá en el lejano Moscú, de la entonces Unión Soviética.
Luego de los Acuerdos de Paz de 1992, nos vimos pocas veces, hasta que por casualidad me lo encontré hace como diez años, y supe que trabajaba en la Corte Suprema de Justicia, y felizmente accedió a concederme varias entrevistas para el SIEP.
En estas entrevistas quedo registrada parte de su larga y fructífera vida revolucionaria, que lo llevó a ser el primer secretario general de la reconstituida segunda Juventud Comunista en 1973, cuarenta años después que la primera fue destruida por la represión de Martínez en enero de 1932.
Querido Rolando, hasta la victoria siempre!