Reflexiones sobre la historia de la participación de las mujeres en El Salvador

REFLEXIONES SOBRE LA HISTORIA DE LA PARTICIPACIÓN DE LAS MUJERES EN EL SALVADOR.

PONENCIA ANTE EL VI CONGRESO CENTROAMERICANO DE HISTORIA
MESA : HISTORIA Y GENERO
CIUDAD DE PANAMÁ, 22 AL 26 DE JULIO DE 2002.

María Candelaria Navas
Escuela de Ciencias Sociales
Facultad de Ciencias y Humanidades
Universidad de El Salvador
Final 25 Avenida Norte, San Salvador
El Salvador.
Teléfono: ( 503) 2251500, extensión 4309
Fax: (503) 2252999
Email: mcandelariasv@yahoo.

Reflexiones sobre la Historia de la Participación de las Mujeres en El Salvador.

Nos permitimos presentar a consideración de las y los participantes en el VI Congreso Centroamericano de Historia , algunas reflexiones surgidas del seguimiento que hemos dado a la participación de las mujeres salvadoreñas en los ámbitos sociopolítico, económico y cultural, tanto a nivel personal/individual como en su calidad de miembras de alguna organización. Como antecedentes inmediatos hemos tomado los períodos históricos propuestos, en la ponencia que presentamos Liza Domínguez y mi persona, en el V Congreso Centroamericano de Historia realizado en San Salvador en julio de 2000.(“Elementos para una Historia del Protagonismo de las Mujeres en El Salvador”) .

Como complemento , en esta ocasión, presentaré un avance de la investigación
“ La Participación de las Mujeres en Seis Municipios de El Salvador : un análisis comparativo”, (San Salvador, Soyapango, Nejapa, Olocuilta, Tecoluca y El Carmen), realizada durante el año 2001 para la Fundación Nacional para el Desarrollo –FUNDE- en co-autoría con María Elena Moreno investigadora de dicha institución. Para el desarrollo de las reflexiones trataré de responder las siguientes preguntas:

1. ¿ Qué entendemos por participación?
2. ¿ Cual ha sido la historia de la participación de las mujeres en El Salvador?.
3. ¿Cómo participan, en qué espacios?

I. Qué entendemos por participación?

Analizar la participación desde una perspectiva de género, conlleva una forma de mirar y de pensar los procesos sociales, las necesidades y las demandas, los objetivos y beneficios del desarrollo que, como metodología de trabajo, considera a las mujeres agentes de cambio que impulsan una adquisición individual y colectiva de poder (“empoderamiento”) que las posiciona en una situación de equidad frente a los hombres y les posibilita relaciones con diferentes actores y espacios para incidir en los procesos de cambio.

Posición en situación de equidad significa igualdad de oportunidades en lo que se conoce, lo que se sabe hacer y en las cualidades que se tienen. De la misma forma, la igualdad de oportunidades supone poder disfrutar de los logros y beneficios de la participación.

Dicho de otro modo, equidad significa acceso real a las oportunidades que se presentan, condiciones para aprovechar esas oportunidades y disfrute de los productos del trabajo, todo ello apuntando a una participación de las mujeres en igualdad y en pleno ejercicio de su condición ciudadana. Por eso, la ciudadanía (Hábitat:2000,13) tiene que ver con la igualdad de oportunidades de participar activa y plenamente, ejercer derechos y tomar decisiones que influyan en la producción, distribución y apropiación de los recursos materiales y simbólicos de cada sociedad y territorio.

La Ciudadanía de las mujeres habla de participación activa en las instancias de toma de decisiones como sujetos con derechos y como sujetos políticos constructores de democracia. El poder compartido se ha reconocido como requisito esencial para ella. (Hábitat:2000,16)

Este nivel de participación dependerá de factores como:

a) la promoción de estructuras, políticas y esfuerzos organizados de participación de las mujeres; b) la existencia de un tejido socio-institucional que apoye y promueva a las mujeres; c) la capacidad de las mujeres para conformar su propia organización.

Hablar de participación nos lleva también a examinar los aportes de las mujeres en la modificación de estructuras organizativas e institucionales (incluidas las gubernamentales).

La Participación, entonces, son actos protagónicos de las mujeres en los procesos sociales de una localidad o nación . La participación puede ser organizada o no, y puede implicar interactuar con el Estado.

La participación se inicia en el grupo familiar desde el cual contribuye a la reproducción de la fuerza de trabajo de la sociedad local, socializa y fomenta el aprendizaje de normas y valores. La reproducción de la especie humana que implica crianza, apoyo emocional, asistencia a hijos e hijas, pareja, parientes, también es una forma de participación.

Existen diferentes formas o tipos de participación, veamos:

a) Participación Política: es la intervención de ciudadanos y ciudadanas a través de los partidos políticos en órganos de representación como parlamentos y concejos municipales. Se realiza directamente (afiliación o militancia en un partido) e indirectamente (a través de los procesos electorales).

Dentro de la militancia partidaria, las mujeres inciden en instancias de dirección y toma de decisiones, como votar por representantes, acceder a cargos de representación, elaborar y políticas públicas, definir programas de acción y áreas de intervención, por nombrar algunos ejemplos.

b) Participación Social: se ejerce a través de agrupamientos de la sociedad civil en el marco de los movimientos sociales, para resolver necesidades inmediatas.

c) Participación Comunitaria: busaca el desarrollo de la comunidad; las agrupaciones dan respuesta a las limitaciones y carencias en infraestructura y servicios básicos.

a) Participación Ciudadana: es el involucramiento, de ciudadanos y ciudadanas, así como de organizaciones e instituciones que los agrupan, en los procesos de toma de decisiones y ejecución de acciones de carácter estratégico para el desarrollo, junto con el gobierno y otros actores, tanto en los niveles nacionales, como en las regiones o municipios. Se trata, de una participación transformadora de la realidad, en beneficio de las presentes y futuras generaciones.

La ciudadanía tiene que ver con el derecho a proponer y decidir sobre la resolución de problemas en la comunidad, barrio, colonia o municipio. Trasciende el ámbito de lo asociativo o comunitario.

II. Cuál ha sido la participación de las salvadoreñas en la Historia?

La participación debe entenderse como un proceso histórico cultural, de ahí que si quisiéramos profundizar en la historia de la participación de las mujeres en la realidad salvadoreña, atendiendo las opciones antes descritas, nos encontraríamos con una gama de expresiones, pese a que todavía falta examinar a fondo los anales históricos para trazar un retrato firme y claro de dicha participación.

Desde la segunda mitad del siglo XIX y a lo largo del siglo XX, las mujeres aparecen como fuerza organizada o como personas individuales, en distintos espacios: sectoriales, gremiales, corporativistas o literarios.

Para efectos de análisis, la participación de las mujeres se enmarcaría en dos tendencias. Estas manifestaciones se identifican antes del surgimiento del movimiento de mujeres y feminista, como tal, con reivindicaciones propias, organizado por ellas y con cierta dirección autónoma o en su búsqueda y de la especificidad de ser mujeres.

a) Había la consideración de que los sectores subalternos se constituían a partir de su determinación e identidad de clase. Consecuentemente, las mujeres y/o sus organizaciones debían “ sumar fuerzas” a otros movimientos, a otras reivindicaciones de carácter global. Las transformaciones estructurales , a ese nivel, resolverían todas las formas de opresión, incluida la de género. Las mujeres salvadoreñas se integraron a éstas luchas sociales , aproximadamente hasta 1987, momento en que se inician las reflexiones, los debates y organizaciones específicas de mujeres.
b) Hubo otra tendencia muy minoritaria de mujeres feministas que no estaban ligadas a una organización , pero pertenecían a la academia, al ateneo, al periodismo, a las expresiones literarias las cuales hicieron presencia desde su especificidad e identidad femenina. Algunas, como Prudencia Ayala, muy adelantada para su época. Pero ni la coyuntura histórica ni la conciencia colectiva permitieron en aquellos momentos reconocer su labor.

Ninguna de estas dos tendencias han sido estudiadas en profundidad. Lo que se ha recopilado sobre la historia de la participación de las mujeres en El Salvador es realmente poco.(Navas:1983, 1987, 1995, 1999, 2000; Domínguez: 1995;Herrera:1998).

Retomaremos a continuación los períodos propuestos

Primer Período: De la segunda mitad del siglo XIX, con el antecedente de la creación de la Universidad de El Salvador (1841) y el parcial acceso de las mujeres a la educación , hasta la segunda mitad de la década de los años 50 del siglo XX con la creación de Fraternidad de Mujeres (1957).

Destacan en este período : a nivel individual , Antonia Navarro, primera graduada de la Universidad de El Salvador en 1889; Consuelo Suncín , Condesa de Saint Exupéry , intelectual y escritora; Prudencia Ayala, en los años 20; Rubenia de Ruíz , luchadora por los derechos de la mujer , Matilde Elena López , escritora y poeta, Rosa Amelia Guzmán , Ana Rosa Ochoa , ambas periodistas, por mencionar algunas.
A nivel de organización , sobresalen : – 1944: Frente Democrático Femenino, con la publicación “ Mujer Demócrata”, dirigido por Matilde Elena López. – 1945: Asociación de Mujeres Democráticas de El Salvador, con la publicación “ Tribuna Feminista”, bajo la dirección de Rosa Amelia Guzmán y Ana Rosa Ochoa. – 1948: se funda la Liga Femenina, la cual logró el derecho al sufragio sin restricciones para las mujeres salvadoreñas. Tuvo como órgano de divulgación “ Heraldo Femenino”.

Segundo Período: De 1957 a 1975 : primeras organizaciones exclusivamente femeninas, cuyo énfasis era sectorial, aunque elaboraron reivindicaciones y estrategias de acción propias ligadas a la esfera doméstica. Las mujeres se integran a las diferentes organizaciones que conforman el movimiento popular e incluyen sus demandas de clase dentro de la plataforma de las demandas populares. – Destaca la creación, en 1957 , de Fraternidad de Mujeres Salvadoreñas( ligada al Partido Comunista). – 1969: Surge el Comité de Mujeres Sindicalistas. – 1970 : Se crea el Comité provisional de Mujeres Salvadoreñas. – 1975: Las dos organizaciones anteriores constituyen la Asociación de Mujeres Progresistas de El Salvador AMPES que inicialmente concentró su atención en las mujeres trabajadoras.

Tercer Período : De 1975 a 1985: “Primera oleada” de organizaciones femeninas, muchas de ellas conformadas en el exilio y otras dentro del país, para apoyar la lucha popular. La característica principal de estas organizaciones de mujeres es la nula reivindicación de género en sus objetivos, demandas o plataformas. Este período coincide con el auge del conflicto armado y las migraciones masivas , dentro y fuera del país, por razones políticas. Destacan:

– 1980: Asociación de Mujeres de El Salvador-AMES- se podría decir que es la única organización de este período que tiene trabajo en zonas suburbanas y rurales, en las zonas conflictivas. Se involucró de lleno en el esfuerzo revolucionario, realizó importante trabajo educativo y publicó algunos manifiestos sobre la condición social y laboral desde la óptica de la doble explotación : de clase y como mujer trabajadora. – 1980: Asociación de Mujeres por la Democracia Lil Milagro Ramírez. – 1983: Asociación de Mujeres Salvadoreñas-ASMUSA- – 1984: Federación de Mujeres Salvadoreñas. – 1984-85: Organización de Mujeres por la Paz.

Cuarto Período : De 1986 a 1989: “Segunda oleada” de organizaciones que, provenientes de organizaciones políticas de izquierda, comienzan a analizar “la problemática de la mujer ”, lejos de asumirse feministas.

Pasado el Decenio de la Mujer(1975-1985) e iniciadas las primeras pláticas entre las fuerzas guerrilleras y el gobierno, los organismos de cooperación disponen de financiamiento para proyectos con mujeres y en esa coyuntura surgen algunas organizaciones de mujeres como:

1986:- Coordinadora Nacional de la Mujer Salvadoreña-CONAMUS. – Unión Salvadoreña de Mujeres- USUM- – Instituto de Investigación, Capacitación y Desarrollo de la Mujer-IMU-

Entre 1987 y 1989: – Asociación de Mujeres Marginales-AMMA- – Asociación de Mujeres Indígenas-AMIS- – Movimiento Salvadoreño de Mujeres-MSM- – Asociación Democrática de Mujeres-ADEMUSA- – Asociación de Mujeres Salvadoreñas-AMS- – Coordinadora de Organismos de Mujeres-COM- integrada por : CONAMUS, AMS, MSAM y ORMUSA.

Quinto Período: De 1990 a 1993: “Tercera oleada”, que se enmarca en el desenlace de la guerra civil. Con las organizaciones creadas en los períodos anteriores se empieza perfilar el actual movimiento de mujeres y a integrar la perspectiva de género en las demandas y denuncias.

1990 : – CONAMUS crea la primera clínica de atención a mujeres víctimas de
violencia. – Surgen Mujeres por la Dignidad y la Vida –DIGNAS-
1991: Se crea la Concertación de Mujeres por la Paz , la Dignidad y la
Igualdad. – Mujer Ciudadana – Centro de Estudios de la Mujer “Norma Virginia Guirola de Herrera”-CEMUJER- – Iniciativa de Mujeres Cristianas-IMC- – Movimiento Social de Mujeres-MSM- – Grupo de Mujeres Universitarias-MUES- – Asociación de Mujeres de Occidente-AMO-
1992:- Nace el Movimiento de Mujeres Mélida Anaya Montes-MAM-
– Se crea la Red por la Unidad y el Desarrollo de las Mujeres, que llegó
a aglutinar hasta 30 organismos de mujeres, entre gubernamentales y no gubernamentales.
1993: se celebró el VI Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe en
El Salvador.

Sexto Período: De 1993 a 2003: fase de transición de post-guerra. Consolidación del movimiento feminista y de mujeres en EL Salvador y el surgimiento de algunas experiencias organizativas de mujeres rurales, como las siguientes:

1996 : Asociación de Mujeres Rurales del Bajo Lempa-ASMUR-
1998: Mesa Permanente de Mujeres Rurales
1999: esta Mesa presentó a la Asamblea Legislativa el Anteproyecto de Código Agrario con Perspectiva de Género.

Está pendiente el estudio del impacto social de 15 años (de 1987 a 2002) del movimiento feminista y de mujeres en El Salvador. Por ahora nos limitaremos a revisar algunos aspectos de la participación política.

El gobierno de El Salvador se comprometió a cumplir los acuerdos de la Conferencia de Beijing en 1995, por medio de la creación del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU) en 1996, y la aprobación de la Política Nacional de la Mujer PNM, como política de Estado, en 1997. En el área de participación política y ciudadana se plantearon cuatro objetivos específicos:

a) Promover la participación de las mujeres en el diseño de políticas públicas en los ámbitos nacional y municipal.
b) Fomentar el ejercicio y reconocimiento social y político de los derechos ciudadanos de las mujeres.
c) Impulsar la participación igualitaria de las mujeres y los hombres en las estructuras públicas y privadas de poder, desarrollando su capacidad y liderazgo para tener acceso a la toma de decisiones.
d) Promover y fortalecer la organización social y política de las mujeres, potenciando su capacidad asociativa y de interlocución con los poderes públicos y privados.

Varias instituciones han evaluado los avances de la PNM, algunas de ellas son: la CEPAL, el Instituto de Investigación y Capacitación de la Mujer-IMU-, el Movimiento Salvadoreño de Mujeres –MSM- y la Iniciativa Centroamericana de Seguimiento a Beijing. Esta última plantea que “existen graves obstáculos en la implementación, en la decisión y en la acción política para operar la justicia hacia las mujeres. Ni en los altos niveles gubernamentales ni en las estructuras intermedias, existe política alguna para superar los mecanismos culturales en los comportamientos, y la visión de operadores de la gobernabilidad del país impide el acceso de las mujeres a altos puestos públicos” ( PNUD: 2001,66).

Si bien se reconocen logros oficiales en la implementación de acciones que incentiven la participación política y ciudadana de las mujeres, sin embargo, los indicadores cuantitativos de avances sobre la igualdad genérica en este ámbito muestran resultados poco satisfactorios. Veamos:

 Una dimensión para medir la participación política y ciudadana son los partidos políticos. Una evaluación somera de este avance a nivel de los partidos nos muestra resultados pesimistas. El Partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional –FMLN – ha establecido en sus estatutos una cuota del 35% para la incorporación de las mujeres en sus organismos de dirección y en sus candidaturas a puestos de elección popular. El resto de partidos se sigue caracterizando por una actitud de indiferencia en torno a la participación de las mujeres en sus estructuras de poder. En 1999, las mujeres tenían una participación global del 36% con respecto al total de miembros que integraban los organismos de dirección de los partidos inscritos. En ese mismo año el Partido Alianza Republicana Nacionalista –ARENA- actualmente en el gobierno, reportó uno de los índices más bajos: una mujer en el Consejo Ejecutivo Nacional, donde hay 13 miembros.

 En los Gobiernos Locales, la situación es grave: las mujeres representan apenas un 8% del total de alcaldes y alcaldesas, el 12.6% de los síndicos/as, el 20.6 de los regidores/as propietarios y el 22.8% de los regidores/as suplentes. Los datos anteriores podrían establecer una tendencia progresiva en la medida en que las posiciones implican menos autoridad y capacidad de decisión. La mayor representación de mujeres en los Concejos Municipales se dá en el municipio de San Salvador, con el 27%. (PNUD: 2001,66)

 En la Asamblea Legislativa, período 1991-2001, las mujeres han representado en promedio el 11.31% del total de parlamentarios y los hombres han mantenido el 88.69%.

 En lo que corresponde al Organo Ejecutivo, las mujeres ocupan el 23% de los puestos ministeriales y apenas un 12% en los viceministerios.

 El Organo Judicial no muestra, en equidad genérica, mucha diferencia respecto a los otros órganos del Estado. En la Corte Suprema de Justicia, la participación de la mujer alcanza el 16% del total de las magistraturas. Pero su participación es menor cuando se trata de los magistrados y magistradas titulares o propietarios, entre quienes la proporción de mujeres es apenas del 13%.

Analizando los datos anteriores, podemos concluir que la participación de las mujeres en la vida política y ciudadana es baja. Una encuesta reciente puso de manifiesto que, en el ámbito nacional, la participación de las mujeres llega al 22%.Su participación se concentra en actividades religiosas (15%); seguidas de lejos por actividades políticas (2%), comunitarias (2%), gremiales y sindicales (2%). (Quintana y García del Corral: 2000).

Con respecto a la experiencia organizativa de las mujeres rurales( FUNDE, 2000: 173) , es reciente, es decir muy nueva y específica en cuanto a su identidad genérica , sin embargo, ellas conciben su experiencia organizativa como el mecanismo que, en el corto o mediano plazo, les permitirá acceder a oportunidades de mejorar sus condiciones de vida, tanto la satisfacción de sus necesidades prácticas como sus intereses estratégicos

Si bien es cierto que se necesitan espacios y mecanismos institucionales para incrementar la participación de las mujeres, consideramos también importante un clima de subjetividad política que los propicie y estimule. En este sentido vale la pena mencionar que según un estudio realizado por la empresa Gallup en el año 2000, la población salvadoreña residente en San Salvador expresó tener mayor conciencia de las desigualdades genéricas y aceptó tener una mayor inclinación hacia la participación de las mujeres en política.

Como lo hemos resumido, la participación social, comunitaria y política de las mujeres salvadoreñas, ha contribuido a ir estructurando un marco referencial teórico y práctico para la construcción de ciudadanía.

III. Ejercicio de la participación

Con el objetivo de compartir un avance de los resultados de la investigación sobre “ La Participación de las Mujeres en los Municipios de : San Salvador, Olocuilta, Soyapango, Nejapa, Tecoluca y El Carmen: un Estudio Comparativo”, presento a continuación un resumen.

Se aplicaron 154 encuestas a mujeres de los 6 municipios entre 20 y 50 años , con nivel educativo entre educación primaria y superior universitaria. El 62.3% de las mujeres encuestadas participan activamente en por lo menos un tipo de espacio a nivel local. Tomando en cuenta que son espacios cuya naturaleza y funciones están vinculados a actividades de índole social, es un nivel de participación (entendida como involucramiento comprometido y conciente) bastante alto.

¿Dónde participan?

Espacio de participación Total en %
Grupo Religioso
Concejo Municipal
Alcaldía
Consejo de Desarrollo Municipal
Comité de emergencia municipal
Directiva Municipal
Partido Político
Sindicato
Organización de mujeres
Cooperativa y sistema de apoyo a la prod.
Comités escolares, de salud, deportivos
ONG´s 27.6
7.5
6.0
5.2
3.7
18.7
7.5
1.5
6.0
7.4
6.0
2.9
TOTAL 100.0

Aunque en términos porcentuales el espacio de mayor confluencia de mujeres es el religioso, la mayoría (41.1%) participan en espacios vinculados a las estructuras de los Gobiernos Locales como la alcaldía, concejo, comités y directivas municipales.

Un reagrupamiento entre lo que se puede clasificar como Comités de Servicios y de Asistencia y las Organizaciones Productivas, nos daría un sugestivo 14% orientado a cubrir demandas, expectativas, necesidades de sobrevivencia, desarrollo comunal y los servicios.

Otros espacios como las Organizaciones Políticas y Sindicales y las Organizaciones de Mujeres, indican los caminos que se van abriendo hacia la participación en asuntos específicos relacionados tanto a la condición de las mujeres, como con los de intereses estratégicos. Si relacionamos estos dos últimos espacios con el de los Gobiernos Locales, vemos reforzada la tendencia a la participación en espacios de empoderamiento: con representatividad, legitimidad, nivel de decisión y de incidencia, donde las capacidades, habilidades y disposición se ponen en evidencia, se pueden reconocer y legitimar. De hecho también significan lo mismo a la hora de valorar las expectativas y demandas mencionadas al principio.

El nivel de participación en grupos religiosos es más alto que en partidos, sindicatos y organizaciones de mujeres juntos, lo cual indica que la religión sigue siendo un espacio socialmente reconocido y aceptado entre los roles tradicionales de las mujeres, ya que no representan amenazas en cuanto a descalificaciones, desprestigios o desconfianzas.

La demanda de actividades, pensamientos y sentimientos de orden espiritual, si bien desde unos años atrás ha tenido como factor de incidencia intereses externos (sectas, gobiernos extranjeros, etc.), expresa también una necesidad inmediata y un canal de salida para enfrentar angustias, depresiones y encontrar respuesta a lo no explicable, como los desastres naturales vividos en los meses de enero y febrero del 2001.

La poca participación de las mujeres en partidos políticos se podría explicar de dos formas: a) desprestigio de los partidos por su mala actuación en los últimos dos períodos de gobierno: riñas de poder, prebendas electorales, diputados incapaces, divisiones internas, ect.; b) las cúpulas de los partidos son mayoritariamente masculinas, difíciles de permear, sobre todo porque se carece de mecanismos de promoción de las mujeres.

Aunque la participación en ONG´s es muy baja o poco significativa en el plano numérico, cualitativamente indica otra brecha que se abre. Es interesante distinguir entre lo que sería una participación asalariada y una voluntaria, como también considerar la posibilidad mixta (asalariada y voluntaria). Un ejemplo de ello son las ONG´s donde, aunque las mujeres que trabajan en ellas las reportan como espacios de participación, en la práctica son trabajos asalariados. Lo mismo ocurre con la alcaldía y las cooperativas.

Es importante indagar si este hecho incrementa o no la participación y si la cualifica, así como explorar en los casos voluntarios o mixtos, de qué viven y cómo organizan su tiempo para participar de esa manera.

La mayoría de las mujeres que participan, lo hace en un sólo espacio (70.8%), sin embargo, hay quienes lo hacen en dos espacios (21.9%) y hasta en 3 ó 4 (7.3%).

A pesar de las cargas del trabajo y responsabilidades domésticas, familiares y laborales, las mujeres tienen tiempo para participar en más de un espacio de acción. Lo más frecuente es que pertenezca a una directiva comunal más otro espacio, o a un Grupo religioso más otro espacio, que bien puede ser el COEM, una organización de mujeres, una cooperativa o un comité escolar.

Las que forman parte del Concejo Municipal o trabajan en la alcaldía, generalmente son militantes de un partido político.

a) Cargos que ostenta y actividades que realiza: El tipo de cargo que las mujeres tienen en los espacios donde participan se puede clasificar en 3 grupos: – Cargos Principales: de dirección, como presidentas, vice-presidentas, jefas o coordinadoras – Cargos secundarios: asistencia a cargos de dirección, como tesoreras, secretarias, vocales o suplentes, promotoras, concejalas y miembras de directivas. – Cargos de apoyo: actividades de colaboración, socias de organizaciones, enlaces institucionales, catequistas, etc.

Las actividades que realizan en los diferentes espacios son de cuatro tipos: – Planificación, dirección y toma de decisiones sobre actividades a realizar: 20.1%. – Organización de actividades: 17.9% – Asistencia a actividades (reuniones, cultos, misa, etc.): 32.1% – Atención y trabajo con comunidades, gestión de proyectos: 15% – Promoción, Capacitación y Asesoría: 6.7%

El tipo de actividades está en relación con el cargo que ocupan, es decir, no conllevan poder de decisión en cuanto a políticas, estrategias, metodologías y contenidos. Continúan en actividades operativas, de servicio y atención directa.

Razón para participar % Total
Mejorar condiciones de vida familiar: mejorar ingresos, involucrarse en proyectos
Solucionar problemas de la comunidad
Compromiso religioso: ayudar a los demás
Ayudar a tomar decisiones en el municipio
Representar a las mujeres en cargos de dirección
Informarse, saber lo que pasa
Capacitarse y conocer sus derechos
Otros 23.9

16.7
15.8
14.5
10.3
8.1
9.0
1.7
Total 100.0
Solucionar problemas de la comunidad denota un anhelo de servicio, de contribución, de aporte, de cooperación que, por supuesto, también cubre a quienes participan, por ser parte de la comunidad, en la búsqueda de soluciones a problemas relacionados con necesidades prácticas, infraestructura, servicios, productividad. Pero de acuerdo a los datos del cuadro, la motivación principal tiene que ver con la solución de necesidades prácticas de las mujeres y sus familias.

El compromiso religioso, según esa concepción de ayuda, apunta a cubrir necesidades espirituales para entender la vida y el mundo, pero en concordancia con las demandas de la población sobre alguna necesidad sentida y expresada claramente.

Ayudar a tomar decisiones en el municipio y representar a las mujeres en cargos de dirección, son dos razones de índole política por cuanto se trata de una participación conciente, voluntaria y dirigida al ejercicio del poder; al parecer tienen claro que el estar allí es necesario y va a producirles un beneficio.

Reagrupadas las variables de manera más global, esos mismos datos nos arrojan lo siguiente:
• Un 32.5% participa por anhelo de servicio social y religioso
• Un 24.8% para incidir políticamente (representar al pueblo, que haya mujeres en cargos de dirección, participar en toma decisiones de organismos de gobierno)
• Un 23.97% por interés de mejoras en las condiciones materiales de vida
• Un 17.1% por superación y crecimiento personal.
Tales datos muestran la proporción entre los aspectos claves de la vida de las mujeres y, por otro lado, con aspectos claves de la vida de la comunidad . Por lo tanto, participar en soluciones de la comunidad; utilizar espacios de empoderamiento (comprensión de la dimensión de los espacios políticos); buscar y cubrir espacios relacionados con las condiciones materiales de vida, y entenderse a sí mismas como sujetas con derechos, de incidencia en cambios sociales y personales, son los principales móviles en la participación de las mujeres.
condiciones que han facilitado la participación:
Condiciones que facilitan la participación %
Contar con el reconocimiento comunitario del liderazgo y capacidad de la mujer 22.7
Contar con experiencia en organización y participación 17.8
Contar con apoyo de familiares, esposo e hijos/as 13.5
La creación de espacios para que las mujeres puedan participar 11.4
Contar con el apoyo de organizaciones de mujeres e instituciones que apoyan el trabajo de mujeres 9.2
Privilegiar la contratación de mujeres locales 5.4
Cuotas de participación al interior de los Partidos Políticos y de las organizaciones 3.2
Valores religiosos 3.2
Otros 13.6
Total 100.0
El reconocimiento comunitario del liderazgo y capacidad de las mujeres, la experiencia previa en organización y participación, y el apoyo de esposos, hijos, hijas y familiares, son las variables que más han incidido en el ejercicio de la participación.

Estas tres variables apuntan a factores importantes en la construcción de identidad de mujeres con una visión integral: contar con reconocimiento social, estar legitimadas social y políticamente al tener un espacio de participación propios, y sentirse apoyadas en el ámbito de sus relaciones afectivas, son tres componentes de su personalidad que las hace fuertes, convencidas de lo que hacen y respaldadas.

Vemos en los tres primeros lugares, factores condicionantes de la participación de las mujeres. Integrar al nivel macro, lo que al nivel micro tanto cuenta para ellas: afecto, conocimientos y reconocimiento (liderazgo y capacidad, apoyo de todo tipo).
Dificultades enfrentadas en la participación:
a) A nivel personal
Dificultades personales Total en %
Carga de trabajo laboral y necesidades económicas: 14.2
Carga de trabajo doméstico y cuido de familiares e hijos/as 11.1
Falta de tiempo y horarios: 11.1
Actitudes sexistas como la oposición de su pareja, compañeros de militancia, y estilos autoritarios de las estructuras partidarias: 9.0
Falta de apoyo expresado en indiferencia, apatía, desinterés, críticas no constructivas y sobrecarga de responsabilidades socio-políticas: 5.0
Problemas de salud 5.1
Falta de capacitación y analfabetismo 5.1
Ninguna 27.3
No contestó 12.1
Total 100.0

Este es un rubro (como muchos otros) donde los porcentajes de mujeres que no contestaron y las que dijeron no tener ninguna dificultad, son los más altos, lo cual hace pensar, a quienes conozcan de cerca el trabajo con mujeres, que, como es común en rubros donde lo que se pregunta pudiese generarles conflictos, prefieran abstenerse de contestar. De todos modos es un indicador de inseguridad o de temor frente a represalias, que dejaría ver entre líneas la existencia de un clima cultural de coerción.

Las respuestas señalan dificultades cotidianas concretas como la carga de trabajo laboral y doméstico, carga que automáticamente se traduce en falta de tiempo, limitante que figura como la primera de la lista (36.4%).

Aunque los resultados son cuantitativos, tienen una connotación cualitativa, ya que las mujeres expresan una práctica cultural genéricamente discriminatoria por parte de su pareja, de la gente de la comunidad y de las estructuras partidarias.

Al final, las mujeres señalaron lo referente a su salud, a lo que habría que poner atención por la referencia misma y lo que implica, como también a una valoración relacionada con problemáticas específicas de las mujeres con su cuerpo, ya que generalmente cuando hablan de estos temas, se refieren a niños, a la familia, a necesidades de la comunidad y muy raras veces (aquí lo demuestran) aluden a lo suyo.

Por otro lado, la falta de educación es una limitante que no tiene mayor peso en las respuestas, lo que refuerza la afirmación hecha en el apartado 4.1.2., de que el grado académico no es un indicador determinante de la participación.

b) A nivel de la comunidad o municipio:

Nuevamente el porcentaje mayor se da en las personas que no contestan (36.5%) y en quienes responden no tener ninguna dificultad en la comunidad que les impida participar(28.1%), lo cual permite deducir que la indisposición a responder está asociada con los temores ya señalados, máxime si trabajan en espacios de este tipo, donde opinar sobre lo que no les parece podría resultar amenazante para la permanencia en su trabajo. En todo caso, las observaciones hechas en el literal anterior, son válidas aquí también.

Las principales limitantes de las mujeres dentro de la comunidad se ubican en la falta de cooperación de la población; en formas no adecuadas de abordar desacuerdos, críticas y problemas; marginación, discriminación y falta de confianza hacia las mujeres; el poco involucramiento en la toma de decisiones y, finalmente, en que los cargos de dirección están ocupados por hombres.

Si observamos atentamente las respuestas, exceptuando la primera, todas aluden a actitudes, estilos y prácticas que tienen que ver con la ausencia de equidad de género.

Aunque muy pocas (2.1%) manifestaron involucramiento en la toma de decisiones, se refleja un pequeño cambio en la concepción de la participación, es decir, en la necesidad de involucrarse en los espacios locales de toma de decisiones.

c) A nivel del trabajo:

Cuando se les pregunta a las mujeres sus limitaciones para participar a nivel del trabajo, la mayoría de las respuestas vuelven al ámbito personal (falta de tiempo, y carga de trabajo doméstico). Son muy pocas (4.1%) las que señalan la falta de apoyo de los patronos y la discriminación que sufren por la concepción de que el “trabajo de los hombres es mejor”.

Parece que la limitante de la carga doméstica sigue siendo tan fuerte que se olvidan de los problemas laborales y de la importancia que tienen las intervenciones del orden político y social para mejorar su situación (leyes laborales no discriminatorias, seguridad en y fuera del centro de trabajo, participación de utilidades, promoción de la fuerza de trabajo con capacitaciones, pagos de horas extra, organización de la actividad productiva que no obligue a labores extenuantes, etc. etc.)

b) Algunos indicadores para la superación de limitantes:

Para que las mujeres participen o asistan a actividades, requieren de ciertos apoyos tanto en las tareas domésticas, como en la planificación de las actividades que se realizan dentro de los espacios.
Las encuestas dan cuenta de 3 indicadores importantes a los que valdría la pena tomarles el pulso:

– Realización de tareas en casa: Un 35.2% de las mujeres que participan dejan las tareas del hogar hechas antes de ir a las actividades o al trabajo, y un 51.8% recibe ayuda de otras mujeres como son la trabajadora doméstica, madre, hija o hermana. O sea que en un 87% de los casos, las tareas del hogar las realizan las participantes y otras mujeres, lo cual apunta a la necesidad de una mayor intervención que impacte en la población masculina. Al respecto algo se ha logrado, ya que un 13% de hombres contribuye o apoya en el trabajo doméstico (3.7% los esposos y 9.3% los hijos).

– Planificación de actividades: Un abrumador 64.4% señaló que su participación depende mucho de los horarios, los lugares y las distancias donde se celebran las actividades. Cuestiones como la seguridad al trasladarse, la cercanía de su centro de trabajo y/o su vivienda, y el acortar tiempo de transporte, requieren considerarse a la hora de planificar actividades, si se quiere que las mujeres participen.

Y aunque cuantitativamente no parezca significativo (un 6% relacionado con resolver asuntos del trabajo doméstico y cuidados del hogar, más un 3% el que sea incluida o invitada), las mismas mujeres dan la pauta sobre los factores que influyen en su participación. Por tanto un trabajo de sensibilización y formación en equidad de género y la promoción de su participación en las decisiones que se toman, formaría parte de lo que ya se ha venido señalando como líneas para la acción en la promoción de la participación y organización.

– Hombres que obstaculizan: El 25% de las respuestas aluden a hombres que quieren imponer su voluntad (figura de autoridad no elegida, autoimagen de ser portadores del poder de decisión sobre lo que hay que hacer)
Un 20% aluden a los casos a nivel político partidario, de directiva o de gobierno. O sea, hombres que ocupan cargos y detentan un poder que les permite decidir a quién incluyen, qué “debe hacerse” y todavía más, contar con recursos para que todo lo anterior se haga efectivo.

Un 10% lo expresa en intervenciones menos directas pero no menos agresivas: Falta de apoyo de los hombres a iniciativas de las mujeres.

Las restantes si bien en términos porcentuales no son muy significativas, en lo cualitativo vuelven a poner en evidencia las carencias de formación masculina en cuestiones de equidad de género: dicen que las mujeres no son capaces, no las toman en cuenta o no valoran sus opiniones. Aquí también podría hablarse de los hombres que manejando un discurso de género por verse obligados por el entorno, en la práctica no lo aplican porque sencillamente no están convencidos de que así sea ni están dispuestos a perder el poder que hasta ahora han ejercido.

Abonando a lo anterior un grupo de concejalas señalan que las principales dificultades para desempeñar sus cargos en el gobierno municipal son: la descalificación, la desconfianza y marginación de que son objeto por parte de los hombres alcaldes y concejales.

Beneficios obtenidos con la participación:

Beneficios de la participación Total en %
Adquisición de conocimientos técnicos, vocacionales, políticos, religiosos, derechos y autoestima: 27.0
Evidenciar presencia de las mujeres por su capacidad y aportes en el fortalecimiento de las organizaciones de mujeres y de gobiernos municipales: 42.2
Mejoras económicas, infraestructurales y de servicios en la comunidad: 15.2
Salir de casa, satisfacción personal y espiritual, conocer más personas 13.8
Ninguno 0.4
No contestó 1.4
Total 100.0

En cuanto a los beneficios, sucede al contrario que con el rubro de las limitantes: el porcentaje de mujeres que no contestan o que dicen que no han obtenido ningún beneficio, es muy bajo. Cuando se trata de hablar de beneficios no hay ningún temor a expresar lo que se siente y se piensa.

Es importante observar cómo valoran los beneficios que obtienen y el orden en que los señalan. El primero y segundo son logros que tienen que ver directamente con su crecimiento personal y el nivel de incidencia, así como con el alcance de su participación. El tercero referido al ámbito de lo económico y material, complementa lo anterior. En la medida que también en su entorno esta situación mejora, el tiempo y el esfuerzo dedicados a su consecución puede ya quedar libre y ser empleado en superarse y superar su participación.

Es curioso ver el peso que le dan al “salir de casa y conocer nueva gente”, casi equiparable con los beneficios de índole económica. A ellas el simple hecho de salir de la casa les genera una gran satisfacción personal y espiritual.

Avances en la participación:

Un primer avance de la participación de las mujeres es el hecho de no “tener que pedir permiso al esposo”. Es bastante alentador que un 79.2% de las mujeres encuestadas ya no tengan que pedir permiso para participar, lo que habla de una mayor independencia y autonomía para tomar decisiones, aunque también habría que analizar con qué condiciones cuentan y si antes tenían que hacerlo y ahora ya no y por qué. Pero en comparación con épocas anteriores es un avance en las libertades democráticas de las mujeres y en su autoafirmación.

Las pocas mujeres que aún piden permiso, lo piden al esposo, a la madre o al jefe. Aunque solamente 3 mujeres hayan señalado que lo tienen que hacer con el jefe, buena parte de las intervenciones puede hacerse con empresarios y patrones sensibles que consideran positiva la participación de su empleada sobre todo cuando de capacitaciones se trata, o incluso, sensibilizarlo para que capacite en sus propias instalaciones.

Los cambios estructurales tanto a nivel socioeconómico como económicos son extremadamente lentos en El Salvador, las estructuras económicas son poderosas. Probablemente los espacios a nivel local nos podrían permitir romper barreras y potenciar la participación de las mujeres.

Referencias Bibliográficas

-Cáceres Prendes, Jorge, “Género, ciudadanía y cultura política en El Salvador, 1930-1959”, Ponencia en el Seminario Balance Histórico del Estado-Nación Centroamericano, (San Salvador, 22-26 de noviembre de 1993).

– Camacho Granados, Rosalía , Lara P., Silvia y Ester Serrano M.(1996),
Las Cuotas Mínimas de Participación de las Mujeres: Un mecanismo de Accion Afirmativa. Aportes para la Discusión, Centro Nacional para el Desarrollo de la Mujer y la Familia. PROCAM, San José, Costa Rica 1a. Ed.

-Cañas-Dinarte, Carlos, Las hijas de Minerva. Notas para una historia educativa y cultural de las mujeres salvadoreñas (San Salvador, Premio Ensayo Juegos Florales Nacionales Casa de la Cultura de Panchimalco, 1999).

-Diario de Occidente Entrevista realizada a Prudencia Ayala por Federico Oliva s/f (San Salvador, materiales proporcionados por el Museo de la Imagen y la Palabra).

– Fundación Heinrich Bôll,(2001) Gènero, Feminismo y Masculinidad en América
Latina, San Salvador, El Salvador.

-García, Ana Isabel y Enrique Gomáriz Mujeres Centroamericanas Tomo II: Efectos del conflicto (San José, FLACSO, 1989).

-Gargallo di Castell Lentini, Francesca, “Las transformaciones de conducta femenina bajo el impacto del conflicto socio-militar en El Salvador” (México D.F Tesis doctoral Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional Autónoma de México, 1987).

-Herrera, Morena, “Pensándose a sí mismas”. Ana Leticia, Blanca Estela Dole, Morena Herrera, Sofía Montenegro, Lorena Camacho y Lorena Flores, Movimiento de mujeres en Centroamérica (Managua, Programa Regional La Corriente/Fundación Buntstift, 1997).

-Genevieve Fraisse y Michelle Perot : (1993) Introducciòn de Historia de las Mujeres, Tomo VII, El Siglo XIX La Ruptura Política y los Nuevos Modelos Sociales, editado por George Duby y Michelle Perot, Editorial Taurus, España.

PNUD. “Informe sobre Desarrollo Humano, El Salvador 2001.”.

– La Prensa Gráfica “Consuelo Suncín”. San Salvador, Suplemento Ventana Dominical (2/07/00), pp. 23-26.

– Montenegro , Sofía (2000) : “ Primer Seminario de Formación Teórica del Comité Nacional Feminista” Managua, Nicaragua, mimeo.

– Navas , María Candelaria (1983) :” Los Movimientos Femeninos en Centro América” en Movimientos Populares en Centro América, Rafael Menjivar y Daniel Camacho ( compiladores) FLACSO, San Josè, Costa Rica.

– Navas, María Candelaria (1987): “ Las Organizaciones de Mujeres en El Salvador 1975-1985” , tesis para optar al tìtulo de Maestrìa en Estudios Latinoamericanos. UNAM, México.

-Navas, Candelaria, y otras(2000) “ La experiencia organizativa de las Mujeres Rurales en la Transición Post -Guerra: 1992-1999” , IMU/FUNDE/OXFAM América, Ediciones Maíz, San Salvador, El Salvador.

Navas, María Candelaria y Domínguez Liza “ Elementos para una Historia del Protagonismo de las Mujeres en El Salvador”. Ponencia presentada en V Congreso Centroamericano de Historia, San Salvador, El Salvador 18-21 de julio /2000.

-Red Mujer y Habitat para América Latina HIC , Quito, CISCSA, UNIFEM Oficina Regional para Brasil y Cono Sur: Guia para la Formulación y Ejecución de Políticas Municipales dirigidas a Mujeres.
Programa de Gestión Urbana, Mayo 2000. 85 p. (Cuaderno de Trabajo
No 72).

– Ungo , Urania (2000): “ Para Cambiar la Vida : Política y Pensamiento del feminismo en América Latina”, Producciones Gráficas, Panamá.

-Villars, Rina (2001): Para la casa más que para el Mundo: Sufragismo y Feminismo en la Historia de Honduras, Editorial Guaymuras, Tegucigalpa, Honduras.

Cuba en Efraín Huerta

CUBA EN EFRAÍN HUERTA

Por Adys Cupull y Froilán González

Conocimos al destacado poeta mexicano Efraín Huerta en la década de 1970. Le debemos, parte del amor que sentimos por su pueblo, a través de su propia obra poética que como él mismo refiere, son cronologías de varias décadas, notas rememorativas que semejan fotografías de archivo. De semejante forma lo explica en su libro Poemas prohibidos y de amor que nos obsequió, en el año 1976, reafirmando en la dedicatoria el amor y amistad por Cuba: “con la mexicanota amistad de Efraín” la que enfatiza en su poema titulado: “Farsa trágica del presidente que quería una isla,” el que hemos escogido para este 50 Aniversario del Granma que une a Cuba y a México.
En la nota introductoria Efraín explicó: “ni me arrepiento ni me avergüenzo. He vuelto a leer este complejo poemario y ratificado mi decisión de que se publique porque lo considero un testimonio sentimental y político que en cierta forma me retrotrae a mejores años líricos.” 1)
El poema que escogimos en esta ocasión, es expresión de denuncia que escrito en el año 1961, adquiere una vigencia tal, que resulta ser la fiel narración de los hechos que persisten actualmente, en circunstancias aún peores para la humanidad. Efraín Huerta afirmó en la explicación que mucho tiempo ha corrido desde el 20 de noviembre de 1935, “cuando los fascistas camisas doradas nos apalearon ellos también se llevaron lo suyo, hasta el Octubre de 1968 y el ya citado Diez de Junio. Ahora no quiero pensar en lo que puede venir.“2)

FARSA TRÁGICA DEL PRESIDENTE QUE QUERÍA UNA ISLA.
Autor: EFRAÍN HUERTA.
Silao, estado de Guanajuato,
México, en el año 1914

George Washington no dijo nunca una
mentira.
Thomas Jefferson fue un alto y claro río de
pueblos.
Abraham Lincoln bebió el vino del Hombre, el pan del Hombre
y el martirio del
Hombre.
Franklin Delano Roosvelt sonreía por la paz
-y las rosas de su muerte y las rosas de
su nombre fueron la paz.
Entonces los hombres tenían luz en la voz
y se sacrificaban en el hielo del Potomac y del
Hudson.
Decían oraciones por los muertos
y hacían de la Biblia el libro de sus sueños.
Eran hombres.

A ninguno de ellos su padre le compró un
imperio.
Ninguno de ellos dijo jamás una mentira
Eran hombres y bronce.
Fueron hombres de verdadera hombría.
No mentirosos, no asesinos, no hipócritas,
no hacedores de infamias,
no criminales de espaldas al mundo;
ni jugadores de golf ni rezanderos.
¡Hombres de bronce y rosas,
de amor y de piedad!
Ni tenderos arrojadores de bombas atómicas
ni piratas, ni cínicos, ni salteadores.
Abraham Lincoln jineteaba el Mississippi
con la suave arrogancia del bebedor de whisky
-pero hombre.
Murió como un árbol crecido al amparo
de la bondad y de la dulzura,
y Walt Whitman
se arrodilló y sus rodillas germinaron
y dieron más árboles y más capitanes
y más fuego y más belleza
y más libertad.
Lincoln fue el adorable apóstol de madera
y de llanto.
Roosvelt tenía la rosa en la sonrisa
y hablaba las palabras que salían de los siglos,
de lo profundo y duro de los siglos.
¡Rocas de fría y cálida belleza,
cabezas tiernas de belleza son ahora
en el atormentado paisaje de su patria!
Eternos y macizos como la voz República
y el mármol estatuario de la palabra
Democracia.

A ninguno de ellos su padre les regaló un
imperio.
Les bastaba el imperio de la salud
y la república de la bondad.
Hoy no le basta al presidente su capilla
su Casa Blanca ennegrecida
ni la bendita oración ni todos los sacramentos
ni la limosna ni el perdón
ni el amor al semejante.
El presidente quiere una isla.
Quiere la isla
donde el pueblo es una lámpara de alegría.
El presidente quiere,
el presidente quiere una isla,
¡una isla, por Dios!

Y entonces, el presidente y el ex presidente
y el ex vicepresidente
y toda la horda de magnates y toda
la jauría de jugadores de golf y de bolsa
y todos los renegados y mercenarios
y todos los militares
y prostitutas
y capellanes
se alistaron
para tomar la isla
y regalarla al presidente…
Pero la isla, que se nombra Cuba
y es una isla larga como una verde danza
tendida hacia el amor de México,
¡la isla de esmeralda dijo NO!
y NO, dijeron en las playas y en las bahías
y las penínsulas alargaron su penetrante NO
y los milicianos y los guajiros
y el estudiante y la maestra
y el poeta y el obrero
y el soldado
y cuanto había de humano y de vegetal
y de tierra y de mar
y de cielo en la encantada isla
dijo NO.
NO con el arma y la sangre.
Un NO con toda el alma.
Un NO que aturdió y enloqueció al muy
cristiano presidente
de la muy aturdida y enloquecida pero no
muy cristiana
Unión de Sodomas y Gomorras del Norte.

El Robot-presidente no entró en órbita.
El cimarrón y rebelde presidente sin causa
se quedó sin la isla de su católico capricho…
(Pero en tanto, en el Zócalo de la ciudad de
México
un general ocioso el Diez de Mayo
azuza a sus bomberos, sus heroicos bomberos,
sus despiadados y dulces granaderos,
sus celestiales y beatíficos mariguanos de la
policía montada
y a todos sus cherifes de huarache
contra el pueblo de México)
Porque el presidente de allá ha sido lastimado.
Porque el presidente se persigna.
Porque el presidente lo ha perdido todo.
Al señor presidente le han quitado un juguete.
El papá y el hermano y la esposa del presidente
lo sienten mucho.
El presidente se da golpes de pecho…
Al señor presidente le han hundido los ojos.
Le han hundido los ojos al señor presidente.
Para siempre,
los ojos le han hundido
al señor presidente,
al ilustre y embustero señor presidente.

Verde aire del Caribe, huracán del estrecho,
puñal de la península,
brisa de las bahías,
azúcar y palmera,
Cuba hermana.
Voz del pueblo de América,
suprema voz del mundo.
Gritos, barras y estrellas destrozados
frente a las embajadas del imperio.

Todos los rumbos, todos
los vientos y todos
los sollozos
de todas las raíces de la tierra.
Todos los rostros
miran hacia los ojos desolados
y hundidos
del señor presidente.
El presidente está ya muerto de cansancio
y de vergüenza y de mentira.
(¡Yo no fui!, ha dicho el presidente.)
Pero ya el presidente
es sólo polvo,
rabia y seca espuma,
espuma y seca rabia,
farsa y ceniza…
El presidente arde
en su pequeño y mustio infierno
¡Que arda y sufra por siempre
el señor presidente! 3)

26 de abril de 1961

Notas:
1- Efraín Huerta, Poemas Prohibidos y de amor, Siglo XXI, México,1976 P. 7
2- Ob. Cit. P.14
3.- Ob. Cit. P. 136 a 141.

Investigan sobre Movimiento de Mujeres en El Salvador 1985-2005

SAN SALVADOR, 23 de noviembre de 2006 (SIEP) “La historia del movimiento de mujeres en El Salvador es muy importante” señala la Licda. Candelaria Navas, investigadora de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la Universidad de El Salvador.

La Licda. Navas es una de las principales investigadoras sobre la situación de la mujer salvadoreña y se encuentra en la actualidad realizando una investigación sobre el movimiento de mujeres en El Salvador en el período 1985-2005.

Revela que “para esta investigación hemos seleccionado a mujeres destacadas y organizaciones. Hemos buscado en el Diario Oficial que organizaciones de mujeres obtuvieron personería jurídica así como hemos revisado los periódicos de los años estudiados. En los años 40 surge una Organización de Obreras Costureras en Santa Ana. También detectamos que no existió un movimiento sufragista que luchara por el voto de la mujer…”

Señala que “debemos superar la tendencia a invisibilizar el rol de la mujer en la historia. La participación debe verse o debe entenderse como un proceso histórico cultural, de allí que si quisiéramos profundizar en la historia de la participación de las mujeres en la realidad salvadoreña deberíamos rastrear los documentos que dan cuenta de su accionar y visibilizar así su protagonismo.”

Asegura que “su participación en términos políticos se inició formando parte de gremios, sindicatos partidos desde una perspectiva eminentemente clasista desde esta óptica las necesidades e intereses de las mujeres estaban subsumidos en los intereses de clase, se partía de la concepción marxista que liberándose la clase, las mujeres también nos liberaríamos del patriarcado y del machismo, no es sino hasta aproximadamente hace unos 15 años que se reivindican los intereses de las mujeres como sector discriminado y marginado en términos de género.”

Opina que “sin embargo hurgando la historia nos encontramos con una gama de expresiones de la participación de las mujeres a título individual y como grupos organizados, pese a que todavía falta ver a fondo los anales históricos para poder tener un retrato firme y claro de lo que ha sido hasta ahora dicha participación. Podemos dividir en seis grandes períodos esta participación. “

1. De la segunda mitad del siglo XIX que tiene como antecedente la creación de la Universidad de El Salvador (1841) y la relativa apertura al acceso educativo de las mujeres, hasta la segunda mitad de la década de los años 50 del siglo XX con la creación de Fraternidad de Mujeres (1957).

Destacan en este período: a nivel individual, Antonia Navarro, primera graduada de la Universidad de El Salvador en 1889; Consuelo Suncín, Condesa de Saint Exupéry, intelectual y escritora y Prudencia Ayala, en los años 20; Rubenia de Ruiz, luchadora por los derechos de la mujer, en los años 40; Matilde Elena López, Rosa Amelia Guzmán, Ana Rosa Ochoa por mencionar algunas.
A nivel de organización podríamos mencionar: – 1944: Frente Democrático Femenino, con la publicación “Mujer Demócrata”, dirigido por Matilde Elena López. – 1945: Asociación de Mujeres Democráticas de El Salvador, con la publicación “Tribuna Feminista”, bajo la dirección de Rosa Amelia Guzmán y Ana Rosa Ochoa. – 1948: se funda la Liga Femenina, la cual logró el derecho al sufragio sin restricciones para las mujeres salvadoreñas. Tuvo como órgano de divulgación “Heraldo Femenino”.

2. De 1957 a 1975: primeras organizaciones exclusivamente femeninas, cuyo énfasis era sectorial, aunque elaboraron reivindicaciones y estrategias de acción propias. Las mujeres se integran a las diferentes organizaciones que conforman el movimiento popular e incluyen sus demandas de clase dentro de la plataforma de las demandas populares. – Destaca en este período la creación en 1957 de Fraternidad de Mujeres Salvadoreñas (ligada al Partido Comunista). – 1969: Surge el Comité de Mujeres Sindicalistas. – 1970: Se crea el Comité provisional de Mujeres Salvadoreñas. – 1975: Las dos organizaciones, anteriores, constituyen la Asociación de Mujeres Progresistas de El Salvador.AMPES que inicialmente concentró su atención en las mujeres trabajadoras. La realización del Concurso Miss Universo generó un movimiento de toma de conciencia. La Dra. Melida Anaya Montes escribe en este año de 1975 un interesante trabajo titulado Las Dos caras de El Salvador.

3. De 1975 a 1985: “primera oleada” de organizaciones femeninas, muchas de ellas conformadas en el exilio y otras dentro del país, para apoyar la lucha popular. La característica principal de estas organizaciones de mujeres es su nula reivindicación de género en sus objetivos, demandas o plataformas.

– 1980: Asociación de Mujeres de El Salvador-AMES- se podría decir que es la única organización de este período que tiene trabajo en zonas suburbanas y rurales, en las zonas conflictivas. Se involucró de lleno en el esfuerzo revolucionario, realizó importante trabajo educativo y publicó algunos manifiestos sobre la condición social y laboral desde la óptica de la doble explotación: de clase y como mujer trabajadora. La AMES se vinculó al Bloque Popular Revolucionario. – 1980: Asociación de Mujeres por la Democracia Lil Milagro Ramírez. – 1983: Asociación de Mujeres Salvadoreñas-ASMUSA- – 1984: Federación de Mujeres Salvadoreñas. – 1984-85: Organización de Mujeres por la Paz.

4. De 1986 a 1989: “segunda oleada” de organizaciones, que surgiendo de las organizaciones políticas de izquierda, comienzan a analizar “la problemática de género”, lejos de asumirse feministas.
5. De 1990 a 1993: “tercera oleada”, que se enmarca en el desenlace de la guerra civil. Aquí se inicia el florecimiento de las organizaciones de mujeres
6.De 1993 a 2004: fase de transición de post-guerra, se registran una gama de organizaciones de variadas acciones y propuestas para el cambio social.

Concluyó la Licda. Navas explicando que “es urgente seguir investigando sobre los obstáculos o nudos que impiden la participación equitativa y poder definir las acciones concretas para superarlos o desatarlos. Aquí juegan un papel importante no solamente el movimiento amplio y feminista de mujeres, sino instituciones como el ISDEMU, la Procuraduría de Derechos Humanos y otros.”

Elementos para Elevar la Participación Política de las Mujeres

Martes 22 de febrero de 2005.
Ciudad Universitaria
Elementos para Elevar la Participación Política de las Mujeres

Presenta: María Candelaria Navas
Encuentro Internacional de Mujeres, San Salvador, El Salvador
Auspiciado por Mujeres Radicales Cuzcatlecas

Como sabemos la participación política y ciudadana de las mujeres abarca una amplia gama de acciones y estrategias que podría incluir:
• el voto y la educación de las votantes.
• la candidatura en elecciones nacionales y locales.
• apoyo a candidatas/os en elecciones nacionales y locales.
• campañas contra quienes se pueden oponer a los derechos de las mujeres.
• promoción y defensa de la integración de una agenda de derechos de las mujeres.

Las estrategias de participación política incluyen mecanismos que potencian la participación política de las mujeres . Ejemplos de éstas son las cuotas de género que dan a las mujeres un porcentaje en la participación , acá en El Salvador dos partidos han adoptado en sus estatutos cuotas de participación de las mujeres en sus organismos de dirección y en sus candidaturas de elección popular : el FMLN 35% y el CDU en sus estatutos recogen que ningún género puede tener una representación mayor del 65% , aunque todavía no lo están alcanzando en la práctica.

Las cuotas ha sido consideradas como una de las acciones afirmativas más eficaces para aumentar la participación política de las mujeres. Es importante ya que la visibilización de las liderezas da un perfil más elevado a los derechos de las mujeres en general y posibilitan los cambios de actitudes acerca de los roles y habilidades de ellas, abriendo posibilidades de educación y trabajo.

Otra estrategia ha sido la de incorporar la perspectiva de género y la meta de la igualdad de género en la toma de decisiones, planificación, implementación y estrategias gubernamentales y no gubernamentales, aquí han jugado un papel importante el movimiento amplio y feminista de mujeres lo cual se puede evidenciar en la presión para el logro de la Política Nacional de la Mujer que se ejecuta a través del Instituto Salvadoreño de Desarrollo de la Mujer-ISDEMU-, desde 1997, para ello se han presentado 3 Planes 1997-2000; 2001-2004;2005-2009(pendiente).

También se han realizado iniciativas legislativas. LAS MELIDAS ahora mismo están en el esfuerzo de reformular los presupuestos con perspectiva de género como una herramienta que pretende analizar las asignaciones presupuestarias, el gasto público y los impuestos con óptica de género, por lo tanto puede ser utilizada para abogar por la reasignación de presupuestos con el fin de dar una mejor respuesta a las necesidades de las mujeres y las niñas.

En general estos presupuestos aportan una contribución para potenciar las estrategias de transversalización de género.

Creemos que tanto los presupuestos como la transversalización de género no son un fin en sí mismos sino que un medio para el logro de la equidad

Otra estrategia importante la han constituido las políticas de equidad de género a nivel local, LAS MELIDAS están impulsándolas en el municipio de Santa Tecla, en Cojutepeque, San Rafael Cedros, Ataco entre otros.

Para el desarrollo del tema que me ocupa me permito preguntarme:

1. ¿ Qué vamos a entender por participación?
2. ¿Cual ha sido la historia de la participación de las mujeres en El Salvador?.
3. ¿Qué hacer para potenciar la participación política y ciudadana de las mujeres?

1.Qué vamos a entender por participación?

Hablar de participación nos obliga a ubicarnos en los procesos sociales y políticos que ha vivido y vive el país en torno a la participación y organización de las mujeres con las implicaciones de la misma en términos de aporte, de modificación de estructuras organizativas e institucionales (incluidas las gubernamentales) y de las formas de concebir e implementar los procesos mismos.

Especialmente a partir de los Acuerdos de Paz en 1992, ha comenzado a desencadenarse en El Salvador, procesos de participación en diferentes ámbitos y espacios tanto a nivel local, municipal, regional y nacional muchos municipios, que tienen como una de sus características la creciente participación de la ciudadanía y de las comunidades. Las condiciones generadas por estos procesos, han ido sacando a la mujer de “lo privado” hacia “lo público”.

Así, las mujeres comienzan a prestar interés y realizar intervenciones para lograr objetivos y empiezan a descubrir cómo establecer “correas de transmisión” que les permitan transitar en los dos ámbitos sin descuidar ninguno, lo cual contribuye a no escindir su participación y reforzar la confianza y seguridad en sí mismas y en sus decisiones.

La Participación será entendida como todos aquéllos actos o quehaceres que hacen de las mujeres protagonistas de los diversos procesos sociales mediante su intervención en actividades socio-económicas, políticas y culturales de la vida de una localidad o de la nación . La participación puede ser organizada o no, y puede implicar interactuar con el Estado o no.

Existen diferentes formas o tipos de participación, veamos:

a) Participación Política: es toda aquélla intervención de ciudadanos y ciudadanas a través de los partidos políticos en órganos de representación como parlamentos y concejos municipales. Este tipo de participación se realiza directamente (afiliación o militancia en un partido) e indirectamente (a través de las elecciones electorales).

Dentro de la militancia partidaria, las mujeres inciden en instancias de dirección y toma de decisiones, tal es el caso de votar por representantes elegidos, acceder a cargos de representación, elaborar y proponer políticas públicas, definir programas de acción y áreas de intervención, por nombrar algunos ejemplos.

b) Participación Social: tipo de participación que se ejerce a través de agrupamientos de la sociedad civil en el marco de los movimientos sociales para resolver necesidades inmediatas. A este nivel se establecen coordinaciones entre ellos pero no necesariamente con el Estado. Algunos ejemplos son los comités de emergencia creados en y durante los terreomotos, de educación (EDUCO), de salud y grupos religiosos)

c) Participación Comunitaria: participación para el desarrollo de la comunidad, en donde las agrupaciones se ven en la necesidad de dar respuesta a limitaciones y carencias en infraestructura y servicios básicos. Con este tipo de participación la comunidad se empodera en cuanto resuelve una problemática partiendo de los recursos conque cuenta y la disposición o compromiso que asume, pero sin descuidar la gestión ante el gobierno local y Estado, dado que son obligaciones de los mismos.

d) Participación Ciudadana: “es el involucramiento, en distintos niveles y formas de ciudadanos y ciudadanas, así como de organizaciones e instituciones que los agrupan, en los procesos de toma de decisiones y ejecución de acciones de carácter estratégico para el desarrollo, junto con el gobierno y otros actores, ya sea en los niveles nacionales, como en las regiones o los municipios. Se trata, en consecuencia, de una participación que debe ser transformadora de la realidad en beneficio de las presentes y futuras generaciones.

Lo anterior implica que la participación es un instrumento de construcción de ciudadanía, es decir, de forjamiento de ciudadanos y ciudadanas que conscientes de sus derechos y deberes, asumen un papel activo y creativo en la construcción de su municipio, su región y su país.

2. Cuál y cómo ha sido la participación de las salvadoreñas en la Historia?

La participación debe verse o debe entenderse como un proceso histórico cultural, de allí que si quisiéramos profundizar en la historia de la participación de las mujeres en la realidad salvadoreña deberíamos rastrear los documentos que dan cuenta de su accionar y visibilizar así su protagonismo.

Su participación en términos políticos se inició formando parte de gremios , sindicatos partidos desde una perspectiva eminentemente clasista desde esta óptica las necesidades e intereses de las mujeres estaban subsumidos en los intereses de clase, se partía de la concepción marxista que liberándose la clase, las mujeres también nos liberaríamos del patriarcado y del machismo, no es sino hasta aproximadamente hace unos 15 años que se reivindican los intereses de las mujeres como sector discriminado y marginado en términos de género.

Sin embargo urgando la historia nos encontramos con una gama de expresiones de la participación de las mujeres a título individual y como grupos organizados, pese a que todavía falta ver a fondo los anales históricos para poder tener un retrato firme y claro de lo que ha sido hasta ahora dicha participación.

1. De la segunda mitad del siglo XIX que tiene como antecedente la creación de la Universidad de El Salvador (1841) y la relativa apertura al acceso educativo de las mujeres, hasta la segunda mitad de la década de los años 50 del siglo XX con la creación de Fraternidad de Mujeres (1957).

Destacan en este período : a nivel individual , Antonia Navarro, primera graduada de la Universidad de El Salvador en 1889; Consuelo Suncín , Condesa de Saint Exupéry , intelectual y escritora y Prudencia Ayala, en los años 20; Rubenia de Ruíz , luchadora por los derechos de la mujer , en los años 40; Matilde Elena López , Rosa Amelia Guzmán ,Ana Rosa Ochoa por mencionar algunas.
A nivel de organización podríamos mencionar:
– 1944: Frente Democrático Femenino, con la publicación “ Mujer Demócrata”, dirigido por Matilde Elena López.
– 1945: Asociación de Mujeres Democráticas de El Salvador, con la publicación “ Tribuna Feminista”, bajo la dirección de Rosa Amelia Guzmán y Ana Rosa Ochoa.
– 1948: se funda la Liga Femenina, la cual logró el derecho al sufragio sin restricciones para las mujeres salvadoreñas. Tuvo como órgano de divulgación “ Heraldo Femenino”.

2.De 1957 a 1975 : primeras organizaciones exclusivamente femeninas, cuyo énfasis era sectorial, aunque elaboraron reivindicaciones y estrategias de acción propias. Las mujeres se integran a las diferentes organizaciones que conforman el movimiento popular e incluyen sus demandas de clase dentro de la plataforma de las demandas populares.
– Destaca en este período la creación en 1957 de Fraternidad de Mujeres Salvadoreñas( ligada al Partido Comunista).
– 1969: Surge el Comité de Mujeres Sindicalistas.
– 1970 : Se crea el Comité provisional de Mujeres Salvadoreñas.
– 1975: Las dos organizaciones, anteriores, constituyen la Asociación de Mujeres Progresistas de El Salvador.AMPES que inicialmente concentró su atención en las mujeres trabajadoras.

3.De 1975 a 1985: “primera oleada” de organizaciones femeninas, muchas de ellas conformadas en el exilio y otras dentro del país, para apoyar la lucha popular. La característica principal de estas organizaciones de mujeres es su nula reivindicación de género en sus objetivos, demandas o plataformas.

– 1980: Asociación de Mujeres de El Salvador-AMES- se podría decir que es la única organización de este período que tiene trabajo en zonas suburbanas y rurales, en las zonas conflictivas. Se involucró de lleno en el esfuerzo revolucionario, realizó importante trabajo educativo y publicó algunos manifiestos sobre la condición social y laboral desde la óptica de la doble explotación : de clase y como mujer trabajadora.
– 1980: Asociación de Mujeres por la Democracia Lil Milagro Ramírez.
– 1983: Asociación de Mujeres Salvadoreñas-ASMUSA-
– 1984: Federación de Mujeres Salvadoreñas.
– 1984-85: Organización de Mujeres por la Paz.

4. De 1986 a 1989: “segunda oleada” de organizaciones, que surgiendo de las organizaciones políticas de izquierda, comienzan a analizar “la problemática de género”, lejos de asumirse feministas.
5.De 1990 a 1993: “tercera oleada”, que se enmarca en el desenlace de la guerra civil. Aquí se inicia el florecimiento de las organizaciones de mujeres
6.De 1993 a 2004: fase de transición de post-guerra , se registran una gama de organizaciones de variadas acciones y propuestas para el cambio social.

3. Qué hacer para potenciar la participación política y ciudadana de las mujeres?

El gobierno de El Salvador se comprometió a cumplir los acuerdos de la Conferencia de Beijing en 1995, por medio de la creación del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU) en 1996, y la aprobación de la Política Nacional de la Mujer PNM, como política de Estado, en 1997. En el área de participación política y ciudadana se plantearon cuatro objetivos específicos: promover la participación de las mujeres en el diseño de políticas públicas en los ámbitos nacional y municipal, fomentar el ejercicio y reconocimiento social y político de los derechos ciudadanos de las mujeres; impulsar la participación igualitaria de las mujeres y los hombres en las estructuras públicas y privadas de poder, desarrollando su capacidad y liderazgo para tener acceso a la toma de decisiones y promover y fortalecer la organización social y política de las mujeres, potenciando su capacidad asociativa y de interlocución con los poderes públicos y privados.

No obstante se reconocen logros oficiales en la implementación de acciones que incentiven la participación política y ciudadana de las mujeres, sin embargo, los indicadores cuantitativos de avances sobre la igualdad genérica en este ámbito nos muestran resultados poco satisfactorios.

Si bien es cierto que se necesitan espacios y mecanismos institucionales para incrementar la participación de las mujeres, consideramos también importante un clima de subjetividad política que los propicie y estimule. En este sentido vale la pena mencionar que según un estudio realizado por la empresa Gallup en el año 2000, la población salvadoreña residente en San Salvador expresó tener mayor conciencia de las desigualdades genéricas y aceptó tener una mayor inclinación hacia la participación de las mujeres en política.

Para la construcción de una democracia verdadera es necesario que desaparezcan los obstáculos que están impidiendo una participación más representativa de las mujeres en los ámbitos políticos, económicos y otros espacios de toma de decisión. Estos obstáculos pueden ser de dos formas:

—aquellos de carácter subjetivo que impiden el ejercicio activo de la ciudadanía de las mujeres

Estos obstáculos inhiben el ejercicio activo de la ciudadanía de las mujeres. Entre éstos se podrian citar algunos:

1. Inseguridad de las mujeres en sus capacidades para participar en estos espacios.
2. Las resistencias de algunos hombres políticos al acceso de las mujeres porque se considera una invasión a un espacio tradicionalmente masculino.
3. La difícil compatibilidad para muchas mujeres entre su vida familiar y la carrera política.

-aquellos que tienen que ver con las barreras impuestas por el poder político y social patriarcal.

Estos son de carácter formal: Aquí los partidos políticos, los sindicatos, los ministerios , las empresas, las organizaciones y asociaciones gremiales las leyes, los procedimientos o las instituciones cerradas al acceso de las mujeres.

Es urgente seguir investigando sobre los obstáculos o nudos que impiden la participación equitativa y poder definir las acciones concretas para superarlos o desatarlos. Aquí juegan un papel importante no solamente el movimiento amplio y feminista de mujeres, sino instituciones como el ISDEMU , la Procuraduría de Derechos Humanos y otros.

Asimismo instamos a las mujeres presentes, al movimiento amplio y feminista de mujeres a estudiar y aplicar en nuestras demandas los instrumentos internacionales que ya han sido ratificados por el Estado salvadoreño, aunque ya lo sabemos, me permito a continuación presentar sucintamente estos tratados y sus mandatos en torno a la participación política y ciudadana de las mujeres,

LAS ESTRATEGIAS DE NAIROBI
(1985)

Orientan a los gobiernos para que aseguren una igualitaria participación femenina en todos los cuerpos legislativos nacionales y locales .También llamó a la equidad en el nombramiento, la elección y promoción a puestos de alto nivel en los Organismos Ejecutivo, legislativo y Judicial.

LA PLATAFORMA DE ACCION DE BEIJING
( 1995)

Esta llama a los Gobiernos , los cuerpos nacionales, el sector privado, partidos políticos, sindicatos, organizaciones patronales, instituciones de investigación y académicas, organismos subregionales y regionales y organizaciones no gubernamentales e internacionales a “ adoptar medidas para garantizar a la mujer igualdad de acceso y la plena participación en las estructuras de poder y en la adopción de decisiones “ y a “ aumentar la capacidad de la mujer de participar en la adopción de decisiones y en los niveles directivos”.

Las medidas que se recomiendan a los gobiernos incluyen: establecer el “ objetivo del equilibrio entre mujeres y hombres” en los órganos y comités gubernamentales, así como en las entidades de la administración pública y en la judicatura ; adoptar medidas que “ aliente a los partidos políticos a integrar a las mujeres en los cargos públicos electivos y no electivos en la misma proporción y en las mismas categorías de los hombres”; proteger y promover “ la igualdad de derechos de las mujeres y los hombres en materia de participación en actividades políticas y libertad de asociación”; vigilar y evaluar los progresos logrados en la representación de las mujeres , y apoyar a las organizaciones no gubernamentales y los institutos de investigación que realicen estudios sobre la participación y la influencia de las mujeres en la adopción de decisiones..partes de la tarea de abogar por una representatividad equilibrada son el reconocimiento y la promoción del trabajo y las responsabilidades domésticas compartidas entre mujeres y hombres.

LA CONVENCIÓN SOBRE LA ELIMINACION DE TODAS LAS FORMAS DE DISCRIMINACION CONTRA LA MUJER-CEDAW. 1979.

Este es un importante tratado internacional que refrenda la importancia del involucramiento de las mujeres en aparato político de los Estados Parte. La División para el Avance de las Mujeres de las Naciones Unidas reporta hasta el junio de 2004, 177 países –el 90 por ciento de los miembros de Naciones Unidas-habían suscrito la Convención.

Los Artículos 2 al 4 de la CEDAW exhortan a los Estados parte a buscar activamente la eliminación de la discriminación en la participación política de las mujeres a través de medidas legales y temporales especiales y de acciones afirmativas. Un ejemplo de una medida especial para acelerar el logro de la igualdad de facto son las cuotas de los Partidos.

El Artículo 7 de la CEDAW instruye a los Estados Parte a tomar “ todas las medidas apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer en la vida política y pública del país”.Les garantiza a las mujeres , “ en igualdad de condiciones con los hombres ,el derecho a :

a. Votar en todas las elecciones y referendums públicos y ser elegibles para todos los organismos cuyos miembros sean objeto de elecciones públicas;
b. Participar en la formulación de las políticas gubernamentales y en la ejecución de éstas , y ocupar cargos públicos y ejercer todas las funciones públicas en todos los planos gubernamentales; y
c. Participar en organizaciones y en asociaciones no gubernamentales que se ocupen de la vida pública y políticas del país”.

El Artículo 8 lleva los derechos políticos de las mujeres al plano internacional. Instruye a los Estados Parte a tomar” todas las medidas apropiadas para garantizar a la mujer, en igualdad de condiciones con el hombre y sin discriminación alguna, la oportunidad de representar a su gobierno en el plano internacional y de participar en la labor de las organizaciones internacionales”.

La Recomendación general 23 adoptada por el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer ,16º período de sesiones ,1997, referida a la vida política y pública , da observaciones sobre las vidas y necesidades políticas y públicas de las mujeres en varias partes del mundo. Es importante anotar que las Recomendación clarifica cómo pueden ser implementadas , a los niveles nacional y local e internacional , las disposiciones de la CDAW sobre la participación política de las mujeres y las medidas prioritarias.

En la página 5 del documento que contiene la Recomendación, se afirma que entre los factores que obstaculizan el ejercicio del derecho a votar y ser elegida, figuran los siguientes

a. Las mujeres reciben menos información que los hombres sobre los candidatos y candidatas y sobre los programas de los partidos políticos y los procedimientos del voto, información que los gobiernos y los partidos políticos no han sabido proporcionar. Otros factores importantes que impioden el ejercicio del derecho a la mujer al voto de manera plena y en condiciones de igualdad son el analfabetismo y el desconocimiento e incomprensión de los sistemas políticos .
b. La doble carga de trabajo de la mujer y los apuros económicos limitan el tiempo o la oportunidad que puede tener de seguir las campañas electorales y ejercer con plena libertad el derecho al voto.
c. En muchas naciones, las tradiciones y los estereotipos sociales y culturales se utilizan para disuadir a la mujer a ejercer su derechos al voto. Incluso muchos hombres ejercen influencia y control sobre el voto de la mujer, ya sea por persuasión o por acción directa.
d. En algunos países prevalecen actitudes negativas respecto a la participación política de la mujer, o la falta de confianza del electorado en las candidatas o de apoyo a éstas.

HECHOS Y CIFRAS

EN EL SALVADOR

Colocar cuadros y gráficas del Cuaderno de Género del PNUD

– Solamente 2 de cada 10 personas en puestos claves son mujeres.

– Unicamente el 6.5% de alcaldes/as son mujeres (período 2003-2006).En el período 1997-2000, el 22% eran mujeres.

– La Asamblea Legislativa sigue siendo un espacio con participación predominantemente masculina:
– Fuerte retroceso en la Junta Directiva de 33% paso al 18%.
– La participación femenina en las comisiones se reduce al 9.47%.

El Salvador ratificó la CEDAW en 1981, es decir que tiene caracter de ley
Sin embargo no ha tenido voluntad política para ratificar el Protocolo Facultativo de la CEDAW, que es de vital importancia para eliminar la discriminación contra la mujer, pues permite, entre otras cosas, a las personas que consideren que el Estado salvadoreño no ha velado adecuadamente por los derechos de las mujeres que se encuentran incluidos en la Convención acudir a una instancia internacional, el Comité para la Eliminación de la Discriminación a la Mujer. Sin la ratificación de este protocolo, no se puede acceder a ese mecanismo internacional, de carácter no vinculante pero que emite principalmente recomendaciones a los países

EN EL MUNDO:

– Actualmente hay 77 países que tienen cuotas constitucionales , electorales o de partidos políticos para mujeres.
– En el 2002, las mujeres todavía constituian alrededor del 14 % de integrantes de los parlamentos a nivel mundial.
– De 180 países , 14 son encabezados por mujeres.
– En mayo de 2003 Qatar , es una península en Asia que colinda con los Emiratos Arabes Unidos, nombró a Sheika Almahud como la primera ministra del gabinete de Estado. El nombramiento surgió después de un referendum del 29 de abril en el cual la población aprobó de manera abrumadora una constitución escrita que reconoce el derecho de las mujeres a votar y a postularse para cargos públicos. En este país se les permitió a las mujeres votar a partir de 1999.
– Kuwait y los Emiratos Arabes Unidos no otorgan a las mujeres el derecho a votar y ser electas.
– El 7 % del total de ministros y ministras de gabinete en el mundo está conformado por mujeres.Las ministras continuan concentradas en áreas sociales: 14%, , en comparación con las áreas legales:9.4%; económicas: 4.1% y de asuntos políticos:3.4%.
– Entre las naciones en desarrollo que no han ratificado la CEDAW están: Emiratos Arabes Unidos, Palestina, Siria , entre otros.
– Estados Unidos es el único país industrializado que no ha ratificado la CEDAW.

Para equilibrar la tendencia de baja representación femenina en las diferentes esferas públicas y siguiendo las indicaciones sobre las oportunidades provistas por las Estrategias de Nairobi orientadas hacia el Futuro para el Adelanto de las Mujeres (1985); la Plataforma de Acción de Beijing(1995) y de la Convención sobre todas las formas de Discriminación Contra la Mujer mejor conocida como CEDAW (1979), sería recomendable lo siguiente:

1. Impulsar leyes de acción positiva o sea leyes de cuota a favor de las mujeres en los cargos de representación que tuvieran por objeto compensar el desequilibrio que desfavorece a las mujeres.
2. Sistemas de rendición de cuentas y evaluaciones sobre fondos destinados a incrementar el acceso de las mujeres a puestos de toma de decisión.
3. Las mujeres en el gobierno central y en los gobiernos locales deberían continuar esforzándose por compartir estrategias y recursos de información además de formar redes y fortalecer vínculos con lel movimiento amplio y feminista de mujeres.
4. Estudiar las crecientes complejidades en las políticas y las economías producto de la globalización que afectan directamente a las mujeres.
5. Conocer en profundidad y aplicar las recomendaciones de los instrumentos estratégicos que establecieron las bases para el empoderamiento político de las mujeres.

Referencias:

PNUD (2004) La Equidad de Género en El Salvador. Cuadernos sobre Desarrollo Humano No 03.
• Navas, María Candelaria: “Elementos para Analizar el Sufragismo y el Feminismo en El Salvador”. Ponencia presentada en el XXIV Congreso de la Asociación Latinoamericana de Sociología, Arequipa, Perú , Noviembre de 2003.
• Navas, María Candelaria: “Reflexiones sobre la Historia de la Participación de las Mujeres en El Salvador”.Ponencia presentada en el VI Congreso Centroamericano de Historia , realizado en Ciudad de Panamá, Panamá, julio de 2002.
• Navas , María Candelaria y Moreno, María Elena:(2003). Mujeres , Participación y Desarrollo Local. FUNDE, San Salvador, El Salvador.
• http// CEDAW. Recomendación general 23, adoptada por el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer,16º período de sesiones, 1997,U.N. Doc. A/52/38.
• Estrategias de Nairobi Orientadas hacia el Futuro de la Mujer. PNUD.1985.
• Plan de Acción de BEIJING. PNUD. 1995.
• Molina, Natacha: “ Las Mujeres en la Política , Cultura, Objetivos y Contenidos desde el Género”, Conferencia dictada en las Jornadas de Reflexión Liderazgos Políticos con Perspectiva de Género, realizada en Santiago, Chile el 9 de agosto de 2004.

J-FMLN Ayutuxtepeque recuerda mártires caídos en la lucha

AYUTUXTEPEQUE; 18 de noviembre de 2006 (SIEP) “Me siento muy emocionada, no me esperaba esto. Mi hermana se entregó a la lucha cuando tenía quince años, se fue de la casa y los militares la mataron…” expresó emocionada Carmen Flores, hermana de Ana Elizabeth Flores Piche.

Carmen Flores junto con otras familiares de desaparecidos y asesinados por la dictadura militar, recibieron esta noche un reconocimiento por parte de la Juventud del partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) de esta localidad, en el marco del III Festival Cultural.

“Como un acto de reconocimiento público por su compromiso político y sacrificio por los intereses populares, realizamos este acto, para honrar la memoria de los que fueron asesinados por los escuadrones de la muerte o murieron combatiendo…“indicó Sergio Peñate, coordinador de la J-FMLN de Ayutuxtepeque.

“Como jóvenes su memoria nos sirve para fortalecer nuestros valores revolucionarios y nunca olvidar que la lucha revolucionaria que impulsa nuestro pueblo por la democracia esta llena de mucho heroísmo, de mucha entrega, de mucho sacrificio” recalcó.

Entre los mártires y héroes de esta población fueron homenajeados los siguientes: Valbino Marroquín Galan, Reyes Escobar, Douglas Cabrera, Margarita Peña Mendoza, Esteban Antonio García Girón, marina Quinteros, Jorge Castaneda, Francisco García Grande, José Neri Girón Chávez, Carlos Martínez, Carlos y José Ramiro, Rodolfo Sánchez, Ana Elizabeth Flores Piche y Ricardo Portillo.

Por su parte, el Rev. Roberto Pineda, de la Iglesia Luterana Popular realizó un Devocional en el que proclamó que “ya nuestros hermanos y hermanas aquí homenajeados se encuentran en presencia de nuestro Padre celestial, están ya en la gloria de la eternidad reservada para los que sueñan y luchan y entregan su vida por los demás como ellos y ellas lo hicieron.”

“! Que su sacrificio nos recuerde siempre el compromiso que hemos adquirido de luchar por los más débiles y de no dejarnos aprisionar por la ideología dominante, de ser siempre solidarios y humildes, como lo fue Jesús, de siempre mantenernos en pie de lucha por la paz y la justicia! concluyó el pastor luterano.

Moses calls for general strike in Egypt…

Moses calls for general strike in Egypt…
Reflection on Exodus 5 and 6
“It lets go to my people to the desert,
there so that it makes a celebration in my honor… “
Call to General Strike

General strike, popular insurrection and war of guerrillas have been diverse modalities of struggle implemented by the social movements throughout history, for conquering independence or to free itself of the yoke of a brutal tyranny. The liberating experience of Moses in Egypt was in its initial phase a general strike against the Pharaoh.

The popular sectors have used with much creativity the most varied methods to impel the revolutionary transformations and the defense of their national identity, that are going from the rejection to speak the language of the invader to the assault to the colonial quarters of the empire.

The responsibility of the revolutionary vanguard is to systematize the different forms of struggle by means of which, the popular sectors and the oppressed classes respond, political, ideological and military to the economic aggressions that arise from the systems of oppression to the service of the powerful ones. This was what they Moses and Aaron made.

The last century was a time of intense social fights that even lead to the formation of an ample one and varied socialist field that by their same contradictions collapse in 1989. Amongst the most excellent experiences of that period excel the Great Socialist Revolution of October that in 1917 with Lenin at the head formed the first proletarian state; the Chinese Revolution of 1949 and the Cuban Revolution of 1959.

In the history of the Hebrew people, the patriotic resistance before the empires and the class struggle of the oppressed sectors included the wars against the cannaneans local dictators; against the philistines invaders between which it was Goliath; against the cruel Assyrians, against the Chaldeans.

Against Persian and the Roman ones until arriving at the prophetic denunciation of the injustice, pronounced by Isaiah, Jeremiah and Amos; from the clandestine revolutionary work in Babylonia to the return to construct the destroyed walls of Jerusalem. In each one of these moments certain fight method was the main one.

The revolutionary experience of Moses and Aaron

But between the diverse revolutionary experiences of the Hebrew people, it excels by its wealth and depth, the process lead by Moses and Aaron and a group of revolutionaries who faced the more powerful military machinery of that time, the one of the Pharaoh of Egypt and managed to defeat it. The exodus from Egypt was the Dien Bien Fu that underwent the empire of the Pharaoh.

The Hebrew were enslaved in Egypt. They had arrived looking for food and they were put under the slavery. And the existing tributary system forced them to work like laborers in the construction of great cities of wheat storage. These Hebrew farmers turned workers of the construction were a mass of people, oppressed and exploited by the powerful ones who incarnated themselves in the Pharaoh.

Moses that was exiled in Median receives the divine mandate to return to Egypt and to put itself to the front of the liberation movement. When returning, first thing that does it is to maintain a meeting with the elders Hebrew-Israelites and to share with them his plans. The elders listen to it with attention and they rejoice before the news that Yahweh has listened to its moans and was ready to accompany them.

Moses looks first of all for its people to organize the resistance. And it manages to gain them to the idea of the revolution. They thank Yahweh for its solidarity. When people organize themselves and assuming tasks as leading force it turns in a people in resistance, and begin to walk with dignity. Where there is oppression there is resistance.

Immediately afterwards they meet with the Pharaoh of Egypt. It was an encounter between the Hebrew resistance and the Egyptian empire. They were already two powers, one that rose and other that lowered. It was the power of the weak and of the powerful ones. When the oppressed ones are organized they become a force and allow that the dignity of the exploited ones emerge challenging the pride of the powerful ones. It is then that arises the flower of the victory.

Moses, speaking in the name of the oppressed ones, talks to the Pharaoh with much authority, with the force of the people: This says the Lord; let’s go to my people to the desert so that it makes a celebration in my honor. This was a bold demand. The slaves reivindicates the right to celebration; they demanded the right to practice its religion, demanded its liberation of the chains of slavery. And they did it in the name of a God that listened to them and it accompanied them.

The Nicaraguan theologian Jorge Pixley teaches that “the knowledge that God is in the side of the oppressed ones is always an impact for the oppressor; and most of the times this experience is denied with an indignation that appears of a guilty sense.”

And who is the Lord?

And the Pharaoh responds furious: And who is the Lord? In its imperial mentality the only God is he. In his world of ideas it did not fit that the slaves were organizing and rebelling. Moses breaks the schemes to him. And Moses and Aaron respond to him: the God of the Hebrews has come to our encounter, so we will go to a distance of three days away to offer sacrifices to him.

And then the Pharaoh understands the magnitude of the threat and reacts angry: Moses and Aaron, so you are distracting the people of his work? Go to continue working! And it adds, revealing his true fears: now that is as much people are going you to cause that they stop working? The Pharaoh discovers his basic interest to follow exploiting them and to avoid the development of a General Strike.

It is probable to the light of the text, that while these representatives of the empire and the resistance were engaged in a dialog, the General Strike broke through by all the constructions and the hammers of these workers of the construction became paralyzed by the subversive call.

The oppressed ones showed the force of their unit. And the Pharaoh soon would show the repressive answer of the empire. And the workers learned that the fruit of the struggle is the victory, but that the fight is difficult. It was the shock of two wills.

And to the call to General Strike the Pharaoh responds hardening the already hard conditions of work of the Hebrews and orders his overseers: no longer give straw to the Israelites. Now they themselves are going to gather the straw! But demand them the same amount of bricks that they have done until now. Neither a single one brick less! They are idlers and for that reason they shout: we want to go to offer sacrifices to our God! Make them work harder to that people, keep them occupied so that they do not pay attention to lies.

The Pharaoh took them away the raw material. They were enslaved and they also had to look for the construction equipments. They were mechanisms to deepen the exploitation. Of the same form the landowners thought and acted when our farmers demanded their rights. And of the same form the Taiwanese and South Koreans owners act today in the sweatshops, where they exploit to our women in the free duties zones. It is the globalization of the exploitation.

And this repression that bit the Hebrew workers also hit its leading team and even to Moses. It happened that when the heads of the Hebrews went to the Pharaoh to protest these repressive actions, He responded to them: idle, to work! And he managed to divide them, to open a breach between the organized sectors since these said to Moses: you are the guilty. And then Moses also vacillates and complaint with Yahweh, the liberating God.

Yahweh does not get impress or confuse, it is sure of the strategic course and it responds to Moses with much authority: this says the Lord; it will be only by force that the Pharaoh will let them to leave its country. The Pharaohs, the powerful, the czars, the generals, the capitalists are only expelled from their situation of privilege by means of force. Yahweh was clear of the situation, was necessary to confront. The word had to be accompanied by action. And the action was the General Strike.

And Yahweh added with much authority: I will say to the Israelites that I, the Lord, am going to free them of his slavery and the hard works that they have been put under by the Egyptians. It will unfold my power and it will save them with great acts of justice. You will be my people and I will be your God. I will take them to the country that I promised to give them. I am the Lord.

When Moses returned with the Israelite leaders to inform them this, they did not listen to him. The fear had seized already of its souls, the majority were discouraged by the hardness of its slavery. And then the Lord reiterates to Moses the order to go to the to the Pharaoh and ask him to lets leave the Israelites. It was a fight until the end.

Our experience

As Salvadoran people in diverse occasions we have made use of General Strike. In May of 1944 we managed to overthrow a dictatorship of thirteen years by means of general strike of Fallen Arms that paralyzed the country. It was a successful experience. In August of 1980 the call to General Strike was made by the Democratic Revolutionary Front (FDR) and did not obtain the predicted result because people already had been struck by the repression and did not have confidence in the force of the popular vanguard.

Since 1992 the electoral struggle happened to occupy in our country the main place in the strategic design for building and taking power displacing armed warfare as it main mechanism of struggle. As the basis of this were the openings of democratic spaces through one long war of twelve years, from the 1980 to the 1992.

At the present time, on the verge of concluding year 2006, the closing of those same spaces because of the crisis of the political and social system, originates a permanent social protest, and it can lead again to the search of modalities of social mobilization that guarantee the self-defense of the popular sectors. The right threat again with jail to the popular fighters, the left must be prepared for new challenges. Like Popular Lutheran Church we can said that in any situation, we will continue accompanying our people.

Rev. Roberto Pineda

Popular Lutheran Church

San Salvador, November 18th 2006

Conocí a Julio Cesar (Castro Belloso) en las luchas contra Lemus… Entrevista con Julia Ramirios (I)

AYUTUXTEPEQUE, 18 de noviembre de 2006 (SIEP) Con la vista debilitada por la edad, pero con el corazón henchido de entusiasmo por los avances de la lucha revolucionaria en América Latina, conversamos con Julia Ramirios, de 72 años, veterana sindicalista y militante comunista. Junto con Blas Escamilla, otro veterano revolucionario, visitamos a esta ejemplar salvadoreña.

Estuve en la fundación del Sindicato de Panificadores

En 1948 se cambio de Sociedad Mutual de Panificadores a Sindicato Nacional de Panificadores. La reunión fue en el Cine Popular, que después fue Libertad al costado sur de la Iglesia El Rosario. Yo asistí a este acto, me acuerdo que solo tenía 14 años pero ya era aprendiz de panadería. Nací en el 1934. En esta foto aparece también Matilde Díaz, ella vive en Los Ángeles, USA. Era la jefa de nosotras. También esta Emma Castellanos de Camporeales

El que esta presidiendo el acto es Orfelio Monterrosa, él era el secretario general del sindicato. En 1952 salió exilado para Guatemala, en 1954 luego que Arbenz había sido derrocado se refugió en la Embajada argentina, y le dieron asilo y se fue para allá, allá se casó y se quedo a vivir…A Fide (Fidelina Raimundo) la mandaron para Costa Rica. Por cierto Fidelina esta enterrada frente a el cementerio de Los Ilustres. A Daniel para El Salvador. A Chamba y la Tulita (Alvarenga) para México. Y de allí se fueron para la Unión Soviética, estuvieron tres años allá, y regresaron hasta 1960.

¿Te acordas Blas, cuando Chamba (Salvador Cayetano Carpio) estaba preso y se recogía en las asambleas sindicales para sus niñas? El estuvo un año preso luego de la represión de Osorio en septiembre de 1952. (De esta experiencia escribió Secuestro y Capucha)

Conocí a Julio Cesar (Castro Belloso) mi esposo, en las luchas contra Lemus. El se había venido de Santa Ana para acá, era dirigente de la Confederación general de trabajadores salvadoreños (CGTS). El local de la CGTS quedaba frente a la Iglesia de Concepción. ¿Te acordás Blas, que a la entrada te capturaron? A Cesar lo capturan el 19 de agosto de 1960, los de la Policía Nacional, lo atropelló una Willis y herido se lo llevan. En octubre lo liberaron. A Schafik y a Roque también los sacaron pero de la Penitenciaría, que estaba al costado poniente del Parque Bolívar.

¿Te acordas de Carlos Cativo, que era esposo de Toñita, la de Fraternidad de Mujeres, que tuvieron un niño y la gente les decía que le pusieran Vitamina, porque fue a pura vitamina?

Mi mamá se llamaba Dominga García, (Mamá Minga) es la que esta en esta foto, ella fue esposa de uno de los fundadores en 1930 del Partido Comunista de El Salvador allá en Asino, en el lago de Ilopango, que era mi papá.Y conoció a Farabundo Martí. Y daba testimonio de él. Mi papá se llamaba Juan Gilberto Ramirios Santamaría, y era de origen chapín (guatemalteco). O sea que el apellido es chapín.

(¿Usted conoció a mi hijo Héctor? Si, le decían El esclavo porque era actor e hizo ese personaje en una obra y desde entonces le decían así…

BPS demanda cierre de Escuela de las América y apoya a Hugo Chávez

SAN SALVADOR, 18 de noviembre de 2006 (SIEP) En una fría mañana centenares de manifestantes se movilizaron para expresar su repudio a la Escuela de las Américas y su respaldo a la reelección del presidente Hugo Chávez el próximo 3 de diciembre en Venezuela.

La movilización fue convocada por el Congreso Bolivariano de los Pueblos y el Bloque Popular Social y adoptó la modalidad de cadena Humana desde el Parque Cuscatlan hasta el Parque Bolívar donde se realizó un Festival Político-Cultural.
En el Parque Bolívar diversos sectores sociales manifestaron su rechazo a toda forma de militarismo que en nuestro caso se manifiesta en la presencia de tropas salvadoreñas en Irak, la base Militar estadounidense de Comalapa y la ILEA, los ejercicios militares conjuntos entre USA y El Salvador, presencia de oficinas del FBI y la DEA, etc.

“Exigimos que se cierra la Escuela de las Américas que esta en Estados Unidos porque es una amenaza para la vida de nuestros pueblos, porque allí fueron entrenados los asesinos de Monseñor Romero, de los padres jesuitas, de las cuatro monjas norteamericanas, los que realizaron las masacres de Sumpul, del 30 de julio, es una escuela de asesinos” dijo la dirigente campesina Guadalupe Erazo.

Por su parte, el Rev. Roberto Pineda indicó que “nos hemos movilizado también para expresar la solidaridad del pueblo salvadoreño con la reelección del presidente Hugo Chávez, en Venezuela, este próximo 3 de diciembre.”

Chile: basta de lecciones en Escuela de las Americas

SANTIAGO, 17 nov (IPS) – Activistas chilenos se disponen a poner el grito en el cielo para que el gobierno de la socialista Michelle Bachelet deje de enviar militares a la estadounidense Escuela de las Américas, famosa por impartir técnicas de torturas entre otros conocimientos especializados.

Unas 40 organizaciones de la sociedad civil pedirán a la presidenta Bachelet que ponga fin al envío de militares al Instituto de Cooperación para la Seguridad Hemisférica de Estados Unidos, ex Escuela de las Américas, que este año ha capacitado a un centenar de uniformados de este país.

“A lo largo de sus cincuenta y nueve años (sic), la Escuela de las Américas ha entrenado a más de 61.000 soldados latinoamericanos (más de tres mil de ellos son chilenos), en cursos tales como técnicas de combate, tácticas de comando, inteligencia militar y técnicas de tortura. La experticia adquirida por estos graduados ha dejado un rastro de sangre y sufrimientos imborrables en sus propios países”.

El anterior es uno de los párrafos de la carta abierta dirigida a la presidenta por 37 organizaciones sociales y un centenar de ciudadanos, exigiendo que se prohíba el envío militares al Instituto, cuyas siglas en inglés son Whinsec.

El Instituto reemplazó en 2001 a la cuestionada Escuela de las Américas, establecida inicialmente en Panamá en 1946 bajo otro nombre y trasladada luego al sureño estado estadounidense de Georgia, en 1984.

El Instituto funciona en el mismo lugar que la Escuela, Fort Benning, y con los mismos instructores y técnicas aplicadas por las sangrientas dictaduras latinoamericanas de los años 70 y 80, afirman los activistas.

“Cientos de miles de latinoamericanos han sido torturados, violados, asesinados y desaparecidos por oficiales entrenados en dicha academia militar”, continúa la misiva, que entregarán el lunes 20 a la mandataria.

Entre los firmantes están Amnistía Internacional Chile (AI), la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y el Comité de Refugiados Políticos Peruanos, además de un centenar de ciudadanos chilenos y extranjeros, entre los que destaca el lingüista e intelectual estadounidense Noam Chomsky.

El interés de los activistas se reactivó con la visita realizada en agosto de este año por una delegación del no gubernamental Observatorio de la Escuela de las Américas de Estados Unidos (SOAW, por sus siglas en inglés), liderada por su fundador, el sacerdote católico Roy Bourgeois.

Miembros del SOAW se reunieron con la ministra de Defensa, Vivianne Blanlot, quien se comprometió a “sugerir”, pero no “imponer” al ejército que cancelara el envío de efectivos a la polémica academia militar.

El Observatorio asegura haber convencido ya a los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Brasil, Uruguay y Argentina de no seguir remitiendo a oficiales, suboficiales y soldados a Fort Benning.

El lunes 13, se inició en la capital de Chile una campaña de información y denuncia contra la Escuela, con la exhibición del filme “Secreto a voces”, un debate entre los que apoyan y rechazan la existencia de ese centro de entrenamiento, con entrevistas a Chomsky y el escritor uruguayo Eduardo Galeano.

Este sábado se efectuará una caminata de repudio por las calles de la capital, que concluirá con un acto político cultural en Londres 38, sede de un ex centro de tortura de la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990).

El asunto también se tratará en el II Foro Social de Chile, que se llevará a cabo el 25 y 26 de noviembre, en el panel “Por el fin de la Escuela de las Américas: cierre de la escuela de torturadores”.

“Hace dos o tres décadas que AI y otras organizaciones como SOAW vigilan a la Escuela de las Américas y hay evidencias de que un importante número de militares que pasaron por esa institución están implicados en graves violaciones a los derechos humanos”, dijo a IPS el director ejecutivo del capítulo chileno de Amnistía, Sergio Laurenti.

Chile no escapa. Entre sus graduados figura Manuel Contreras, director entre 1974 y 1977 de la represiva Dirección Nacional de Inteligencia (DINA) y condenado por el asesinato en Estados Unidos del ex canciller chileno Orlando Letelier, y Humberto Gordon, fallecido ex director de la Central Nacional de Inteligencia, sucesora de la DINA.

En la lista de ex alumnos también sobresalen los mayores retirados Alvaro Corbalán Castilla, condenado por varios crímenes de derechos humanos, y Carlos Herrena Jiménez, autor material del asesinato del dirigente sindical Tucapel Jiménez en 1982.

Inclusive el actual comandante en jefe del ejército, Oscar Izurieta Ferrer, nombrado por el ex presidente Ricardo Lagos (2000-2006), se formó en Fort Benning.

“Hay una correlación entre la Escuela de las Américas y militares implicados en golpes de Estado, violaciones sistemáticas a los derechos humanos, torturas, posiciones claves en gobiernos dictatoriales”, añadió Laurenti.

El director de Amnistía Chile aclaró que no todas las personas que recibieron instrucción en ese centro de adiestramiento tienen automáticamente un “interés golpista”, ya que “depende de la moral de cada individuo”, pero hay evidencias de la conexión.

Además, sostiene que la presencia de entrenadores y asesores estadounidenses en conflictos armados de todo el mundo no es casual.“La cooperación militar es funcional a los intereses políticos de Estados Unidos”, afirmó Laurenti.

Pese a que la campaña ha tenido una importante adhesión y difusión en Chile, las organizaciones no se atreven a asegurar que la respuesta de Bachelet sea positiva.

Mientras el secretario de la Comisión Ética contra la Tortura, Patricio Quevedo, cree que la mandataria se sensibilizará, dado que ella y su familia fueron víctimas de la dictadura de Pinochet, Laurenti se muestra más escéptico.

“Chile ha sido muy cauteloso en la relación con Estados Unidos, y si consideramos como antecedente la larga demora que ha sufrido la ratificación del tribunal (Corte) Penal Internacional (por las presiones de Washington), es altamente improbable que se tomen medidas efectivas contra la Escuela de las Américas”, indicó el director de AI Chile.

Las movilizaciones continuarán a cargo de un capítulo nacional del SOAW hasta conseguir que el gobierno suspenda el envío de personal militar a Fort Benning.

“La ciudadanía en general no sabe que Chile sigue mandando a un centenar de miembros del ejército y de Carabineros (policía uniformada) a la Escuela de las Américas”, dijo a IPS Quevedo.

Laurenti apuntó la necesidad de generar conciencia de que la postura que se tome en torno a la Escuela de las Américas está relacionada con el tipo de sociedad de y democracia que se pretende construir.(FIN/2006)

Moisés convoca a la huelga general en Egipto…

Moisés convoca a la huelga general en Egipto…
Reflexión sobre Éxodo 5 y 6
“Deja ir a mi pueblo al desierto,
para que haga allí una fiesta en mi honor…”
Llamado a la Huelga general

La huelga general, la insurrección popular y la guerra de guerrillas han sido diversas modalidades de lucha implementados por los movimientos sociales a lo largo de la historia, sea para conquistar la independencia o para liberarse del yugo de una brutal tiranía. La experiencia liberadora de Moisés en Egipto fue en su fase inicial la de una huelga general contra el faraón.

Los sectores populares han usado con mucha creatividad los más variados métodos para impulsar las transformaciones revolucionarias y la defensa de su identidad nacional, que van desde el rechazo a hablar el idioma del invasor hasta el asalto a los cuarteles coloniales del imperio.

La responsabilidad de la vanguardia revolucionaria es sistematizar las diferentes formas de lucha mediante las cuales, los sectores populares y las clases oprimidas responden a las agresiones económicas, políticas, ideológicas y militares que surgen de los sistemas de opresión al servicio de los poderosos. Esto fue lo que realizaron Moisés y Aarón.

El siglo pasado fue una época de intensas y multifacéticas luchas sociales que incluso condujeron a la formación de un amplio y variado campo socialista que por sus mismas contradicciones colapsó en 1989.Entre las más relevantes experiencias de ese período sobresalen la Gran Revolución Socialista de Octubre que en 1917 con Lenin a la cabeza formó el primer estado proletario; la Revolución China de 1949 y la Revolución Cubana de 1959.

En la historia del pueblo hebreo, la resistencia patriótica ante los imperios y las luchas de clases de los sectores oprimidos, abarcaron desde las guerras contra los dictadores locales cananeos; contra los invasores filisteos entre los que estaba Goliat; contra los crueles asirios, contra los caldeos.

Contra los persas y romanos hasta llegar a la denuncia profética de la injusticia, pronunciada por Isaías, Jeremías y Amós; desde el trabajo revolucionario clandestino en Babilonia hasta el regreso para construir los muros destruidos de Jerusalén. En cada uno de estos momentos determinado método de lucha fue el principal.

La experiencia revolucionaria de Moisés y Aarón

Pero entre las diversas experiencias revolucionarias del pueblo hebreo, sobresale por su riqueza y profundidad, la gesta liberadora conducida por Moisés y Aarón y un grupo de revolucionarios que se enfrentaron a la maquinaria militar más poderosa de esa época, la del faraón de Egipto y lograron derrotarlo. La salida de Egipto fue el Dien Bien Fu que sufrió el imperio del faraón.

Los hebreos eran esclavos en Egipto. Habían llegado buscando comida y fueron sometidos a la explotación. Y el sistema tributario existente los obligó a trabajar como peones en la construcción de grandes ciudades de almacenamiento de trigo. Estos campesinos hebreos convertidos en obreros de la construcción eran una masa abandonada, oprimida y explotada por los poderosos que se encarnaban en el faraón.

Moisés que estaba exilado en Madian recibe el mandato divino de regresar a Egipto y ponerse al frente del movimiento de liberación. Al regresar, lo primero que hace es sostener una reunión con los ancianos hebreo-israelitas y ponerlos al tanto de sus planes. Los ancianos lo escuchan con atención y se regocijan ante la noticia que Yahvé ha escuchado sus lamentos y esta dispuesto a acompañarlos.

Moisés busca primero a su gente para organizar la resistencia. Y logra ganarlos a la idea de la revolución. Ello le agradecen a Yahvé su solidaridad. Al organizarse y asumir tareas como núcleo dirigente dejan de ser masa y se convierten en un pueblo en resistencia, empiezan a caminar con dignidad. Donde hay opresión hay resistencia.

Acto seguido se reúnen con el faraón de Egipto. Es un encuentro entre la resistencia hebrea y el imperio egipcio. Eran ya dos poderes, uno que subía y otro que bajaba. El poder de los débiles y el de los poderosos. Cuando los oprimidos se organizan construyen poder popular, se convierten en una fuerza y permite que la dignidad de los explotados se coloque frente a frente con la soberbia de los poderosos. Es entonces que surge la flor de la victoria.

Moisés, desde los oprimidos, le habla al faraón con mucha autoridad, con la fuerza del pueblo: Esto dice el Señor, deja ir a mi pueblo al desierto para que haga una fiesta en mi honor. Era una demanda atrevida. Los esclavos revindicaban el derecho a la fiesta; exigían el derecho a practicar su religión, demandaban su liberación de las cadenas de la esclavitud. Y lo hacían a nombre de un Dios que los escuchaba y los acompañaba.

El teólogo nicaragüense Jorge Pixley nos enseña que “saber que Dios esta de lado de los oprimidos es siempre un impacto para el opresor; y la mayoría de las veces esta experiencia es negada con una indignación que brota de un sentido de culpa.”

¿Y quien es el Señor?

Y el faraón responde furioso: ¿Y quien es el señor? En su mentalidad imperial el único dios es él. En su mundo de ideas no cabía que los esclavos pensaran y se rebelaran. Moisés le rompe los esquemas. Y le responden Moisés y Aarón: el Dios de los hebreos ha venido a nuestro encuentro, así que iremos a una distancia de tres días de camino para ofrecerle sacrificios.

Y entonces el faraón comprende la magnitud de la amenaza y reacciona airado: Moisés y Aarón, ¿por que distraen a la gente de su trabajo? ¡Vayan a seguir trabajando! Y agrega de manera reveladora de sus verdaderos temores: ahora que hay tanta gente ¿van ustedes a hacer que dejen de trabajar? El faraón descubre su interés básico que es el de seguirlos explotando y evitar el desarrollo de la Huelga General.

Es probable a la luz del texto, que mientras dialogaban estos representantes del imperio y del trabajo, la Huelga General se abriera paso por todas las edificaciones y los martillos y piochas de estos trabajadores de la construcción se paralizaran por el llamado subversivo. Los oprimidos mostraban la fuerza de su unidad. Y el faraón pronto mostraría la respuesta represiva del imperio. Y los trabajadores aprendieron que el fruto de la lucha es la victoria, pero que la lucha es difícil. Era el choque de dos voluntades.

Y frente al llamado a la Huelga General el faraón responde endureciendo las ya críticas condiciones de trabajo de los hebreos y ordena a sus capataces: ya no les den paja a los israelitas para que hagan adobes, como se ha estado haciendo ¿Qué vayan ellos mismos a recoger la paja! pero exíjanles la misma cantidad de adobes que han hecho hasta ahora. ¡Ni un solo adobe menos! Son unos holgazanes y por eso gritan: ¡Vayamos a ofrecer sacrificios a nuestro Dios! Hagan trabajar más duro a esa gente, mantengalos ocupados para que no hagan caso de mentiras.

O sea que el faraón les quitó la materia prima. Eran esclavos y tenían también que buscar los materiales de construcción. Eran formas de profundizar la explotación. De la misma forma opinaban y actuaban los terratenientes cuando nuestros campesinos exigían sus derechos. Y de la misma forma actúan hoy los dueños taiwaneses y surcoreanos de las maquilas, donde explotan a nuestras mujeres en las zonas francas. Es la globalización de la explotación.

Y esta represión que mordió a los trabajadores hebreos impactó también a su núcleo dirigente e incluso a Moisés. Sucedió que cuando los jefes de los hebreos fueron a reclamarle al faraón por esta medida represiva el les respondió: ¡holgazanes, a trabajar! Y logró dividirlos, abrir una brecha entre los sectores organizados ya que estos le dijeron a Moisés: ustedes tienen la culpa. Y entonces Moisés vacila también y se queja con Yahvé, el dios liberador.

Yahvé no se deja impresionar ni confundir, tiene claridad del rumbo estratégico y le responde a Moisés con mucha autoridad: esto dice el Señor, solo por la fuerza les dejara salir de su país. Los faraones, los mandarines, los zares, los generales, los capitalistas solo son expulsados de su situación de privilegio por medio de la fuerza. Yahvé estaba claro de la situación, había que topar, había que confrontar. La palabra debía estar acompañada de a acción. Y la acción era la Huelga General.

Y Yahvé agregó con mucha autoridad: iré a decirle a los israelitas que yo, el Señor, voy a librarlos de su esclavitud y de los duros trabajos a que han sido sometidos por los egipcios. Desplegare mi poder y los salvare con grandes actos de justicia. Ustedes serán mi pueblo y yo seré su Dios. Los llevará al país que prometí darles. Yo soy el Señor.

Cuando Moisés regresó con los jefes israelitas para informarles de esto, no le hicieron caso. El miedo se había apoderado ya de sus conciencias., estaban muy desanimados por la dureza de su esclavitud. Y entonces el Señor le reitera a Moisés la orden de decirle al faraón que deja salir a los israelitas. Era una lucha hasta el final.

Nuestra experiencia

Como pueblo salvadoreño en diversas ocasiones hemos hecho uso de la Huelga General. En mayo de 1944 logramos derrocar una dictadura de trece años por medio de una Huelga general de Brazos Caídos que paralizó el país. Fue una experiencia exitosa. En agosto de 1980 el llamado a la Huelga General realizado por el Frente Democrático Revolucionario (FDR) no logró el resultado previsto porque la gente ya había sido golpeada por la represión y no tuvo confianza en la capacidad de respuesta de la vanguardia popular.

A partir de 1992 la lucha electoral pasó a ocupar en nuestro país el lugar principal en el diseño estratégico para la construcción y toma del poder, desplazando a la lucha armada como forma principal de lucha. Como fondo de esto estuvo la apertura de espacios democráticos conquistados a través de una larga guerra de doce años, del 1980 al 1992.

En la actualidad, a punto de concluir el año 2006, el cierre de esos mismos espacios como resultado de la crisis del sistema político y social que origina una permanente protesta social, puede conducir de nuevo a la búsqueda de modalidades de movilización social que garanticen la autodefensa de los sectores populares. La derecha amenaza de nuevo con cárcel a los luchadores populares, la izquierda debe prepararse para nuevos desafíos. Como Iglesia Luterana Popular en cualquier situación, seguiremos acompañando a nuestro pueblo.

Rev. Roberto Pineda

Iglesia Luterana Popular

San Salvador, 18 de noviembre de 2006