Costa Rica: republica bananera y luchas revolucionarias

Entrevista con Humberto Vargas Carbonell

-República banana y luchas revolucionarias
-El crimen del Codo del Diablo ! masacres y dictaduras
-Los babies de la CIA con la mafia contra Centroamérica
-El TLC convertirá a Centroamérica en una base militar con el Comando Sur en el golfo
-La Policia trabaja con el DAS y la CIA contra colombianos
-La democracia y los Derechos Humanos aquí, son un mito…
-Medio colombiano y caribeño.

Germán Silva Losada

Asediados por el cerco de policías e informantes de los servicios de inteligencia de Colombia y Estados Unidos logramos llegar a conversar con El secretario General de Vanguardia Popular. Robándole noches y madrugadas a la agotadora campaña electoral en que la nueva coalición de Izquierda Unida presenta a Humberto Vargas Carbonell como su candidato presidencial, lo abordamos cuando llega sudoroso, pero con muchas ganas de contarnos la tragedia de Costa Rica. Nos abrazamos y empezamos un histórico diálogo con quien resulta ser un vibrante y ameno narrador de multitudes. Efraín Valverde y Patricio Aguilar, dos militantes del partido y desterrados de Costa Rica, participan con sus interrogantes en la entrevista.
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“…Meterse en las redes de una campaña electoral burguesa sin los recursos es una aventura, con sentido pero agotadora. Hay que cumplir requisitos burocráticos de acreditación de Izquierda Unida. Imagínate que un partido como el nuestro para poder participar debe realizar asambleas en todos los distritos de todo el país, nombrar los delegados para las asambleas en todos los cantones que nombran los delegados para las provinciales, de ahí salen los miembros de la Asamblea Nacional…. Es para decirle que por ello llegué tarde…!!

República bananera y luchas revolucionarias

-Buenos días Camarada Humberto…¿ Cómo anda el tiempo en San José y en todo Costa Rica a éstas horas?

– El tiempo ha enloquecido, ahora nos obligan a la reprise del diluvio universal y cuando debía llover no hay agua. Este tiempo se daña por la brutalidad de los destructores de la naturaleza, que deja una estela de tragedias y de empobrecimiento, sobre todo en el campo. Cosechas perdidas, vidas humanas arrasadas, casas destruidas y así de mal en peor. Posiblemente sean estas las más viles acciones movidas por la avaricia del gran capital. Así anda el tiempo… !!

-¿ Cuales han sido momentos más decisivos en la formación republicana de Costa Rica y las experiencias de sus luchas sociales. en el siglo pasado ..?

-Somos un país pequeño, en mucho tiempo conocido como un enclave bananero. En esos bananales surgió una clase obrera que abrió rumbos revolucionarios, que siguen siendo importantes hasta el día de hoy. En 1934, en la gran huelga bananera dirigida por los comunistas, directamente por el compañero Carlos Luis Fallas, los trabajadores comenzaron a mirarse a sí mismos y con altibajos de las luchas, forjaron una indisoluble unidad de los trabajadores y las organizaciones revolucionarias. En la primera mitad del siglo XX surgieron las organizaciones antiimperialistas con profundo sentido popular. Se comenzó la lucha por la nacionalización eléctrica y contra los contratos bananeros.

El siglo pasado fue en nuestro país una etapa de grandes luchas obreras. En los cuarenta, bajo el influjo de la situación política creada por la Segunda Guerra Mundial, fue posible la creación de un frente de los vanguardistas con el Gobierno de Calderón Guardia y de importantes sectores de la iglesia católica, encabezados por el Arzobispo Sanabria y Martínez. Esta alianza permitió realizar una reforma social que incluía la creación de los seguros sociales y se dictó un capítulo de Garantías Sociales en la Constitución Política y un Código de Trabajo. Esto provocó una agudización sin precedentes de la lucha de clases que culminó en una guerra civil muy dura.

¡El crimen del Codo del Diablo, masacres y dictaduras !

-¿Cómo fue el proceso de organización de los trabajadores y las agrupaciones políticas?

Antes de la fundación del Partido Comunista surgieron grupos marxistas que recibieron algunas visitas de representantes del Buró del Caribe y sectores progresistas crearon el Partido Reformista y además organizaciones antiimperialistas. El Partido Comunista se fundó el mismo día en que apareció el primer número del periódico TRABAJO, el 16 de junio de 1931. Los fundadores los encabezó el compañero Manuel Mora Valverde, entonces estudiante universitario. Se abrieron cursos para el estudio del marxismo y el partido se vinculó de lleno con el movimiento popular en las luchas de los desocupados.

Aunque no hace mucho la burguesía celebró el centenario de la “democracia costarricense”, lo cierto es que los trabajadores derrotaron la dictadura de los Tinocos y después de la guerra civil de 1948, fueron ilegalizados los sindicatos y se estableció una pena de 10 años de cárcel para los militantes de Vanguardia Popular. Fueron fusilados los principales dirigentes sindicales y comunistas de la Provincia de Limón, zona principal del enclave bananero. Asesinato conocido como el “crimen del Codo del Diablo”.

.Por su participación en estas luchas fue desterrado a Limón el compañero Carlos Luis Fallas y ahí inició un trabajo de organización sindical que desembocó en la gran huelga de 1934, que selló el vínculo del partido con el movimiento obrero. El partido eligió diputados y regidores y en los años cuarenta cambia su nombre por el actual PARTIDO VANGUARDIA POPULAR, pero como partido marxista-leninista, con una orientación claramente revolucionaria. Esa línea se mantiene hasta el día de hoy, pero no hemos caminado siempre por un camino llano. Hemos sufrido tropezones, en ocasiones perdimos el rumbo, padecimos divisiones, pero hemos hecho un esfuerzo, que no termina nunca, por corregir errores y superar fallas. En eso estamos todos los días.

-Se ha hecho alarde de neutralidad, democracia e independencia de Costa Rica, frente al imperialismo… ¿Cual es la posición del Partido…?

-Las relaciones de Costa Rica con el naciente imperio norteamericano comenzaron en 1856, cuando un grupo de filibusteros encabezados por William Walter, pretendieron apoderarse de Centro América. Cuando se tuvo noticia de que invadirían Costa Rica, desde Nicaragua, el Presidente Juan Rafael Mora Porras, llamó al pueblo a tomar las armas y enfrentar a los invasores. El 20 de marzo en la Batalla de Santa Rosa, los improvisados soldados costarricenses derrotaron a los yanquis. Las tropas nacionales unieron sus fuerzas a los nicaragüenses principalmente en la Batalla de Rivas, donde se destacó el soldado Juan Santamaría, héroe nacional.

En esta lucha Centro América mantuvo su independencia, William Walker fue fusilado en Honduras y la lucha por la independencia fue adoptando muchas formas. Es una lucha permanente del pueblo, de la izquierda y los sectores más progresistas de la sociedad, contra el entreguismo de la alta burguesía. Nuestro suelo ha sido utilizado por los yanquis contra los movimientos revolucionarios de esta región. En la región de Tortuguero se establecieron bases para agredir a Cuba, fueron penetradas y denunciadas por el partido. Durante el Gobierno de Luis Alberto Monge (1982-86) hubo bases de agresión contra la Revolución Popular Sandinista y se cometieron crímenes atroces como el de La Penca, organizados y ejecutados por la CIA.

Los babies de la CIA con la mafia contra Centroamérica

Entonces ¿ han usado a Costa Rica para atacar desde ahí a Nicaragua…. Centroamérica y el Caribe?

Durante la actividad de la “contra”, en la finca de John Hill, conocido agente la CIA y avezado terrorista, se produjo un escandaloso negocio de cambio de cocaína por armas. Estos hechos están claramente comprobados, incluso en tribunales norteamericanos. Estados Unidos se ha negado a tramitar las peticiones de extradición presentadas por autoridades costarricenses y éstas guardan silencio. Costa Rica nunca fue un país neutral. Siempre estuvo y está del lado de la política imperialista de los Estados Unidos. El ejército fue abolido después de la guerra civil de 1948, así fue establecido en el artículo 12 de la Constitución Política. La medida se acomodó a la situación que se generó a raíz de los acontecimiento bélicos y la situación política que le siguió. Pero no debe olvidarse que la abolición del ejército como institución permanente, significó el fortalecimiento de los aparatos policiales de todo tipo.

La política internacional de Costa Rica no hace más que seguir los dictados de Washington. El Presidente Pacheco apoyó la fascista invasión norteamericana a Irak y cometió la felonía de trasladar su embajada de Tel Aviv a Jerusalén. Por las condiciones del país y fuertes vínculos de las clases dominantes con el imperio, pensamos que aquí la independencia es inseparable de la revolución popular. Recuperar la plena soberanía nacional es el objetivo central de todas las agrupaciones y partidos que forman la coalición Izquierda Unida.

-Si no hay ejército profesional y con una tradición civilista, ¿como se explica tanta represión y colaboración con el Pentágono…?

En nuestro país no se ha hecho el milagro de la existencia de un Estado dominado por una oligarquía brutal y explotadora, sin un fuerte aparato represivo. Bueno es recordar que al tiempo que se abolía el ejército se creaba un aparato represivo fuerte que ha actuado con eficacia en la represión de las huelgas obreras y de las luchas campesinas y de otros sectores sociales. Cientos de costarricenses pasaron por la Escuela de las Américas, por los cursos político—militares en Taiwán y en otros países.

La policía norteamericana tiene una influencia decisiva en todo el aparato represivo, incluyendo la Policía Judicial y en la Dirección de Inteligencia y Seguridad (dependiente de la Presidencia de la República) los yanquis mantienen grupos de agentes pagados que se les conoce como los babies. En la guerra contra Nicaragua mientras se proclamaba la neutralidad, el Gobierno de Luis Alberto Monge, realizó una intensa actividad bélica, cometiendo crímenes como el de La Penca, con la acción de torturadores enviados por dictaduras suramericanas, la CIA construyó aeropuertos clandestinos, etc.

El TLC convertirá a Centroamérica en una base militar con el Comando Sur en el Golfo

Cuándo y por qué cambió Costa Rica? ¿También tuvieron ustedes su Frente Nacional bipartidista…?

El bipartidismo que dominó la vida política en la mitad del siglo veinte, surgió de la guerra civil de 1948. Ilegalizados el Partido y la Confederación de Trabajadores de Costa Rica (CTCR), se prolongó por 27 años. Se impidió la participación electoral de muchos partidos, por contar con el apoyo de los comunistas. La Embajada de los Estados Unidos decía cuáles partidos debían ser ilegalizados y las autoridades “nacionales” cumplían el mandato. Con los comunistas ilegalizados, dos grupos burgueses, se alternaban el manejo de gobierno, con sus programas políticos se fueron acercando a gran velocidad, convirtiéndose como dice el pueblo, en un “monstruo con dos cabezas”.

El bipartidismo convirtió las elecciones en una ficción electorera, sin contenidos. El fin último de la política interna es la corrupción y estos partidos hermanaron en los negocios sucios y juntos defienden sus cotos ante los embates populares. Aquí no existen sectores burgueses enfrentados al imperialismo. La oligarquía se asocia con las transnacionales yanquis y profundiza la dependencia convirtiéndonos en una neocolonia. Esta es la esencia del Tratado de Libre Comercio Centroamérica, en discusión. Para los Estados Unidos el TLC es una cuestión de “seguridad” según Bush. Hay razones para pensar que el TLC convertirá al istmo centroamericano en una gran base militar con el Comando Sur del ejército ubicado en el Puerto Golfito, en el Pacífico costarricense.

¿Ahora se impone la Academia de Policía de EE.UU. que las organizaciones y los pueblos latinoamericanos vienen denunciando…?

La Academia de Policía es una institución que los yanquis han extendido por el mundo entero y que son conocidas como ILEA por sus siglas en inglés. Después de su fracaso en Costa Rica están tratando de instalarla en El Salvador. Estas escuelas son sucursales, muy enmascaradas, de la famosa Escuela de las Américas, mejor conocida como Escuela de Asesinos.

Cuando el proyecto de convenio llegó a la Comisión de Asuntos Internacionales se inició una importante movilización popular en contra. Algunos diputados presentaron “mociones explicativas” tan inocentes como que en caso de controversia el texto se debía interpretar de acuerdo con los tratados internacionales de derechos humanos o que no se permitiría que militares fueran parte del cuerpo docente. Estas “explicativas” resultaron inaceptables para los norteamericanos y así naufragó el proyecto. Eso fue revelador de cuáles son los propósitos de estas escuelas, de las cuales ya están instaladas en Hungría, en África y en otras regiones. Son signo de la globalización de la represión contra los pueblos. Aquí ganamos, Ahora la bola está en la cancha salvadoreña y esperamos que ahí también gane el pueblo.

En la ardua batalla con el TLC, el ALCA y el Plan Colombia, ¿que nuevos desarrollos ha habido..?

—Aquí la lucha está centrada en la oposición al TLC. Hay varias redes constituidas por diversas organizaciones. La Comisión Nacional de Enlace, punto de encuentro abierto de organizaciones sindicales, campesinas, ONGes, organizaciones estudiantiles, pacifistas, ambientalistas, femeninas, políticas, asambleas populares, etc. con todos los que se oponen al TLC y con una orientación antiimperialista. Contra el TLC juega un importante papel el Movimiento Cívico Nacional, que agrupa a organizaciones sindicales, pequeños empresarios, campesinos, algunos colegios profesionales.

El parlamento costarricense no ha conocido aún el Tratado. Se han realizado miles de encuentros con el pueblo y manifestaciones masivas. Este es un tratado anexionista y esa es la razón de la oposición. La gran burguesía, con financiamiento yanqui hace una intensa campaña a favor del TLC. El principal impulsor es Oscar Arias, ahora candidato a la presidencia por el Partido Liberación Nacional. Hace unos días este personaje llegó a la Universidad de Costa Rica para un programa en la radioemisora y se formó una cadena de estudiantes y no lo dejaron ingresar. Hace dos meses se realizó una “Cumbre Social” a la que asistieron cientos de dirigentes de organizaciones populares contra el TLC.

La lucha contra el TLC lleva implícita la lucha contra el Plan Puebla Panamá y contra el ALCA. El enorme esfuerzo de Bush de hacer aprobar el TLC se explica como una punta de lanza contra los esfuerzos del Presidente Chávez y del compañero Fidel Castro por la Alternativa Bolivariana para las Américas ALBA es decir, auténticamente latinoamericana frente a los planes del imperio.

El Plan Colombia, es un proyecto agresivo contra todos los pueblos latinoamericanos. La más violenta vulneración de los derechos soberanos de los pueblos en esta región. Este plan es inseparable del criminal bloqueo a la Cuba Revolucionaria y los atentados contra la Revolución Bolivariana de Venezuela. La explotación del imperio sobre los nuestros pueblos es el principal factor de pobreza y el mayor freno a las posibilidades de un desarrollo económico con justicia social. En Latinoamérica la distribución del “ingreso” es el más injusto por la explotación de los monopolios imperialistas. Para defender su dominio financian y dirigen las más brutales dictaduras. El costo siempre lo han pagado los más humildes, los obreros o desocupados, los campesinos arruinados, los jóvenes sin futuro.

La Policía trabaja con el DAS y la CIA contra colombianos

Tenemos evidencias plenas de la colaboración de la policía política costarricense, que depende de la Presidencia de la República, con el DAS colombiano. Esta colaboración se activó con el secuestro del compañero Granda y la persecución fue hasta las amenazas de muerte. Tal fue el caso del Dr. Vanegas, asediado y perseguido hasta que le toco salir. Esta situación constituye un peligro para los refugiados colombianos. En el caso Granda se trataba del interés del DAS de conseguir en Costa Rica falsas “pruebas” para inculparlo de actividades delictivas. En toda esta maniobra estaba metida hasta el fondo la mano sucia de la CIA.

-A pesar de sus dificultades ustedes desarrollan la solidaridad internacional, en forma muy amplia…

La solidaridad internacional es uno de los pilares del Partido Vanguardia Popular y la practicamos sin condiciones. Estamos del lado de todos los pueblos y las personas que luchan contra el imperialismo y por las causas populares en general. Así nos educamos y tratamos de educar a las nuevas generaciones. Los compañeros caídos en luchas internacionalistas son nuestros héroes y guardamos su memoria con el mayor respeto. Derramaron su sangre en Nicaragua, en El Salvador y en otras regiones del mundo.

Nuestro principal deber internacionalista es la solidaridad con la Revolución Cubana. Somos muy orgullosos, junto a otros partidos y grupos solidarios, de haber impedido un acto contrarrevolucionario organizado por el grupo de AZNAR con la presencia de los expresidentes Lacalle de Uruguay, Calderón Sol de El Salvador, Luis Alberto Monge de Costa Rica, el Presidente del Parlamento Checo y otros agentes de CIA como Alberto Montaner. Apoyamos la Revolución Bolivariana que encabeza el Presidente Chávez. La solidaridad desde un país dirigido por la derecha tiene siempre grandes dificultades. La experiencia enseña que se pueden vencer.

Dentro de las dificultades y obstáculos, cuales son las murallas mas duras. ? ¿La represión.. la unidad por ejemplo..?

—En nuestras luchas hemos enfrentado muchas dificultades. Las que más daño nos han hecho han sido nuestros propios errores, sobre todo para resolver los conflictos internos. La división del partido en 1983-84 nos produjo un daño del que apenas comenzamos a recuperarnos. Debemos decir que aprendimos a tener especial cuidado con las manifestaciones negativas y entendimos que la unidad del partido es cuestión que debe defenderse y cuidarse cotidianamente.

Nuestro partido cumplió el 16 de junio, 74 años. Hemos pasado por muchas experiencias, luchas urbanas, luchas campesinas, clandestinidad y luchas parlamentarias y una guerra civil. Han pasado por nuestro partido personas maravillosas y también execrables traidores. Nuestra lucha por el socialismo es irrenunciable y hacemos un esfuerzo por encontrar caminos originales para alcanzar la meta. Estamos trabajando en la preparación del 19 Congreso que se realizará en abril del año próximo. Consideramos fundamental la unidad de las fuerzas populares para la unidad de todo el pueblo. Por ello formamos parte de Izquierda Unida, que agrupa a seis partidos y agrupaciones populares.

“.. La democracia y los Derechos Humanos aquí, son un mito…”

La burguesía costarricense con un uso abusivo de particularidades positivas y escondiendo lacras ha construido un mito. Es cierto que desde el siglo XIX los liberales dieron una lucha contra los bienes eclesiásticos sin contar las gigantescas plantaciones bananeras de la United Fruit Company y la Standard Fruit Company. Es cierto que la coalición de los comunistas con el Presidente Calderón Guardia y un sector de la Iglesia hicieron que se diera una legislación social con los planteamientos programáticos del Partido Comunista. Con la integración de Centro América, se permitió un desarrollo de las fuerzas productivas.

Pero las conquistas de esa época están en crisis. La legislación laboral no se respeta, la pequeña y mediana empresa han sido arrasadas por grandes monopolios, las llamadas clases medias están en un acelerado proceso de extinción, se ha entrado en una nueva etapa de la crisis agraria y la pobreza ha alcanzado niveles, tanto cualitativos como cuantitativos, sin precedentes. La burguesía sigue “vendiendo” un mito, pero las realidades populares siguen su propio curso. Las luchas populares llegarán muy lejos. Las masas más pobres están desesperadas.

-En la campaña usted viene denunciado la tragedia de los niños, las mujeres y la situación social en general….. ¿cual es el cuadro real en estos momentos..?

—El cuadro de la infancia es terrible, son los niños las primeras víctimas de la pobreza y de la explotación. Muchos miles de niños están trabajando en diversas actividades y por lo mismo no asisten a la escuela. La explotación sexual de los niños y niñas es un mal que ya ha trascendido las fronteras; no es difícil encontrar a pequeños durmiendo en las calles o consumiendo drogas. Esta es en pocas palabras la situación de muchos miles de niños y niñas.

Las mujeres siguen padeciendo discriminación y el Estado es cada vez más demagógico e hipócrita sobre el tema. Las mujeres siguen recibiendo salarios inferiores por el mismo trabajo, en las maquilas reciben un trato inhumano, no tienen derecho a decidir sobre la maternidad y sobre muchos otros asuntos que les son inherentes. Las conquistas en derechos humanos para las mujeres no llegan a las pobres. En la situación de los ancianos y de otros grupos con algún tipo de incapacidad es donde en primer lugar se manifiesta la condición económico-social, como es obvio.

-Que problemas mas difíciles encuentran para el proceso unitario y perspectivas de Izquierda Unida…?

El problema principal para los revolucionarios es lograr la unidad popular, así como para la derecha es dividir al pueblo. Ellos aplican el viejo adagio de “divide y vencerás” y nosotros trabajamos con la idea contraria: “une y vencerás”.Ellos cuentan con el poder estatal y el monopolio sobre los grandes medios de información, con todo el dinero para compra de conciencia y el soborno de los dirigentes corruptos y con el aparato represivo. Toda la prensa al servicio del sistema hace una campaña brutal y calumniosa contra las organizaciones sindicales. La oligarquía es usufructuaria de la corrupción de dirigentes sindicales y no pierde oportunidad para atacar y desprestigiar a los sindicatos.

Aquí no hay libertad sindical y han anulado el derecho a la concertación de convenciones colectivas por parte del Ministerio de Trabajo. El gobierno y los patrones promueven las llamadas “Asociaciones solidaristas”, como arma contra la organización sindical. A pesar de eso existen organizaciones y dirigentes realmente fieles a la clase obrera. El reciente congreso de la CGT fue una demostración de que existe una verdadera resistencia a la política patronal—gubernamental.

Toda la prensa al servicio del sistema hace una campaña abierta,
brutal y calumniosa contra las organizaciones sindicales….

Dos organizaciones unitarias de suma importancia son la Comisión Nacional de Enlace y el Movimiento Cívico Nacional. En el movimiento campesino han surgido nuevas organizaciones unitarias y muy combativas: La Federación Nacional Campesina (FENAC), la Unión Nacional de Agricultores y Ganaderos (UNAG) y el Movimiento Agrario Nacional (MANA) y muchas organizaciones independientes que están luchando por la tierra, contra los desalojos.

La crisis agraria se agudiza terriblemente. Miles de campesinos luchan contra el remate judicial de sus fincas, muchos de ellos afectados por la crisis de los precios del café y la ausencia absoluta de protección estatal. El capitalismo salvaje, la oligarquía y las transnacionales están arrasando las pequeñas empresas, la pequeña burguesía se está extinguiendo, el proceso de proletarización engendra nuevas contradicciones por la falta de puestos de trabajo y por otros fenómenos como la migración incontrolada que es utilizada para aumentar el “ejército industrial de reserva”.

-La Alternativa de Izquierda Unida es una apuesta para las elecciones o contempla metas estratégicas…?

El surgimiento de Izquierda Unida lo consideramos un gran éxito del movimiento popular. Trabajamos para que sea un proyecto de largo aliento, independientemente de los resultados electorales. De esta unidad forman parte, el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), Partido del Pueblo Costarricense (PPC), Partido Socialista de los Trabajadores (PST), Movimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU) y el Partido Alajuelense de los Trabajadores (PATRA) y nuestro Partido…

Esperamos que esta unidad tenga cada vez un reflejo más vivo y activo en las organizaciones populares. El trabajo unitario permitió que, hayamos ganado las recientes elecciones sindicales en la Universidad de Costa Rica. Se presentan cambios importantes. La oligarquía, la cúspide de los más ricos, que no pasa de treinta familias, llegó a la conclusión que el juego electoral de los últimos años, no le era eficaz ante el gran movimiento de masas que impidió la privatización del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y que mostró las debilidades del bipartidismo. El objetivo estratégico de hacer desaparecer el monopolio estatal de telecomunicaciones y producción de energía eléctrica fue un fracasó.

-La derecha también se reagrupa con los imperialistas. ¿ Como ve los nuevos cambios políticos..?

Para liderar este proceso se escogió a Oscar Arias Sánchez, quien ya fue presidente (1986-90), que pertenece a una de las familias de oligarquía tradicional, ahora es propietaria de empresas financieras, ingenios azucareros, productores de alcohol, propietarios de la mayor empresa productora de carne de pollo, de las principales emisoras, presidente de la bolsa nacional de valores y tienen participación en un sinnúmero de empresas más. Arias tenía prohibición constitucional para reelegirse, sin embargo lograron un pronunciamiento de la Sala Constitucional que lo permitió. Algunos han considerado esto un “golpe de Estado”. Efectivamente se trata de una fechoría judicial.

Unido al Gobierno de Pacheco, aprovechó el escándalo de los actos de corrupción de los expresidentes Calderón y Rodríguez para apoderarse del control del Partido Unidad Socialcristiana. Arias centra su campaña en la defensa del TLC. Esperan imponer así un poder abierto de la derecha que, podría conducir, fácilmente a un poder autoritario y represivo. El movimiento popular ha declarado que un posible gobierno de Arias, será espurio y frente a él se llamara al no reconocimiento de su autoridad.

-Cual es su posición frente al proceso liberador en Venezuela y los cambios en Latinoamérica…?

La Revolución Bolivariana es una fuente de inspiración y de permanente solidaridad internacionalista. Estudiamos con profunda atención el proceso, su originalidad y su valentía. El programa semanal de televisión de Vanguardia Popular y el semanario EL POPULAR han dedicado mucho tiempo y espacio a divulgar los logros de la revolución y de la extraordinaria obra del Presidente Chávez. Ahí han estado funcionarios de la Embajada Venezolana, autoridades oficiales, especialistas, etc. Un foco antiimperialista en el corazón del continente es de importancia estratégica enorme. ..

….El ALBA está abriendo nuevos rumbos, porque señala nuevas posibilidades. Basta comparar el TLC que nos amenaza a los centroamericanos con el convenio firmado por Fidel Castro y Hugo Chávez. Aquél es anexionismo y brutalidad imperialista, éste verdadera cooperación fraternal y humanismo….

La fraternidad y el humanismo son el cemento que deberá unir a todos los pueblos del Caribe y a todos los pueblos de América Latina. Cuba y Venezuela dan el buen ejemplo. La lucha contra el imperialismo es también la lucha contra los oligarcas traidores. Los pueblos centroamericanos estamos en la obligación de unirnos más y esta responsabilidad corresponde a las organizaciones revolucionarias. A lo largo de la historia en esta región se han acumulado acciones y pensamientos que nos conducen a la colaboración y al combate, somos caribeños y somos latinoamericanos.

Para los centroamericanos es imprescindible seguir el ejemplo de los héroes que vencieron a los filibusteros yanquis en 1856. Esta es una gesta poco conocida, primero por el carácter de la dominación yanqui y por otro lado porque la burguesía, las clases dominantes en estos países han sido siempre vendepatrias y no han estado interesadas en estimular los sentimientos patrióticos de los pueblos. Por otro lado las fuerzas populares y en particular los revolucionarios no hemos hecho suficiente por dar a conocer la obra del Presidente Juan Rafael Mora Porras y el General José María Cañas quienes fueron fusilados por la oligarquía y tampoco el heroísmo de Juan Santamaría, Pancha Carrasco y miles de héroes todavía anónimos que con su esfuerzo contribuyeron a la derrota de los yanquis.

…La Revolución Bolivariana en Venezuela es un fenómeno social y político extraordinariamente original, no ha copiado nada y es precisamente la autenticidad de sus derroteros populares lo que le abre camino al socialismo…..

Fidel y Chávez están derrumbando murallas imperialistas, han logrado que Martí y Bolívar se den el abrazo que los pueblos latinoamericanos han esperado, ante figura sonriente y un poco enigmática de Carlos Marx. Pronto a ese abrazo se sumaran muchos otros y la unidad de los próceres señalara el momento de la verdadera libertad. Seguramente que el ALBA será el anuncio de la nueva época y lo que en América se hace contra el imperialismo tiene repercusión universal.

Obviamente los procesos progresistas de América del Sur tienen una influencia muy positiva en Centroamérica. Cuando el centro de gravedad de la revolución latinoamericana se había colocado en esta región tuvo una influencia significativa en los procesos suramericanos. No fue una abstracción, tuvo manifestaciones muy concretas. Jamás olvidaremos a los compañeros que llegados de otras latitudes acompañaron a los pueblos centroamericanos.

-Y la iniciativa del ALBA, es una integración que puede caminar por Centroamérica, el Caribe y el Sur?

Pues yo pienso que ALBA es una alborada. Esto no es una metáfora, porque es así en el sentido más directo de la palabra. En esta campaña contra el TLC me ha correspondido visitar muchísimos pueblos, centros de estudio y de trabajo, etc. A todas partes llevo los convenios firmados por Fidel y Chávez. La manera en que el pueblo los recibe es lo que me permite decir que es el anunció de un nuevo día. Conozco la ferocidad de los enemigos y que nada será fácil. Pero creo que no se puede ser revolucionario sin optimismo. Este es el gran valor de la Alternativa Bolivariana para las Américas.

– Ahora, como Secretario del Partido y candidato de IU. ¿Cuéntenos quien ha sido, quién es Humberto Vargas?, su entorno familiar, se divierte con los amigos..?

….Hombre, como la mayoría, pero muy orgulloso de mi origen proletario. Soy hijo y nieto de obreros, vinculados siempre a los sindicatos y al partido. Tengo cinco hijos y muchos nietos más. Hemos cumplido con los deberes demográficos con creces..! Una gran esposa, ya por más de cuarenta y cinco años, a quien estimo y quiero porque en las buenas y sobre todo en las malas llevó con honor su carga, que además de la mía era la suya propia. Soy un hombre sencillo. Los ratos libres, en la ciudad, son para la buena literatura, sobre todo la nuestra, la de aquí.

Ingresé a la juventud cuando todavía era un adolescente. Me pilló en plena guerra civil. Hice poco, pero siempre lo que me mandaron a hacer. Durante algunos años fui dirigente y hasta Secretario General de la Juventud. En el Partido trabajé en muchos frentes. En la década de los cincuenta fui director del periódico clandestino “Adelante” y en la Universidad fui dirigente de la Asociación General de Estudiantes.

El partido me “obligó” a hacer muchas cosas, trabajé en muchos frentes y hasta donde alcanzaron mis capacidades aprendí mucho. El partido fue mi mejor escuela, con los obreros, los campesinos y los sindicatos, aprendí más que en escuelas y universidades. En 1983 fui nombrado Secretario General del Partido. Ese año y el siguiente fueron terribles. Algunos compañeros fueron arrastrados por elementos divisionistas y provocaron una tragedia. Después aparecieron los fenómenos traicioneros liderados por una auténtica basura infiltrada en el PCUS, y nos vimos obligados a pagar “deudas políticas” ajenas, y muy caro.

Con compañeros generosos, valientes y fieles a los intereses de los obreros y del pueblo, hemos logrado mantener la barca a flote. No nos rendimos ni siquiera ante las incomprensiones que duelen y dañan más que los ataques enemigos. Aquí estamos de pie, entregando los últimos años a lo que más amamos, la lucha por la igualdad y la auténtica justicia para los trabajadores y, por supuesto, por la independencia nacional.

Medio colombiano y caribeño

– Sus compañeros nos dicen que usted es apasionado del campo y su gente… ¿Que vive muy enamorado de Colombia…?

Me gusta trabajar en el campo, ya casi no puedo hacerlo. Pero me encanta sembrar y ver crecer las plantas. A veces me enamoro de una hojita o de una hierba. A veces pienso que las tonalidades de verde en nuestros bosques tropicales son realmente infinitas. Gozo como un niño cuando descubro una nueva tonalidad…es increíble. El hechizo mágico de la naturaleza tropical es enternecedora. Son como los gritos de un niño recién nacido…

¡Fuera de la entrevista ! le cuento que soy medio colombiano. Mi abuela y mi mamá nacieron en Barranquilla. Soy un poquillo costeño. Espero llegar algún día por esas tierras para recordar a la buena abuela, comiéndome un bocachico. Los bocachicos con plátanos verdes eran el símbolo de sus nostalgias.

Maestría en Derechos Humanos de UES recibe reconocimiento

SAN SALVADOR, 4 de diciembre de 2004 (SIEP) La Maestría en Derechos Humanos de la Universidad de El Salvador recibirá un reconocimiento especial por “fomentar el reconocimiento y respeto de los derechos fundamentales de la población.”

El reconocimiento será otorgado por la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos en el marco del 57° Aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que será celebrado el próximo 8 de diciembre en el Hotel Presidente.

La Dra. Beatrice de Carrillo, Procuradora de Derechos Humanos, manifestó que esta distinción a la Maestría en Derechos Humanos de la UES obedece a “la encomiable labor que realiza en la formación de ciudadanos comprometidos con la construcción de la democracia salvadoreña.”

Por su parte el Msc. Guillermo Campos agradeció la distinción y señaló que “hace diez años iniciamos este esfuerzo de preparar académicamente a profesionales salvadoreños y extranjeros, civiles y militares, hombres y mujeres en los principios del Derecho Internacional de los Derechos Humanos.”

Agregó que “la formación de decenas de profesionales en el área de los Derechos Humanos, los cuales laboran en la mayoría de instituciones del estado es la contribución que como Alma Mater ofrecemos al pueblo salvadoreño.”

“Somos un programa académico-sostuvo- que enfatiza el rigor académico con el compromiso ciudadano, la tolerancia ideológica y el pluralismo político y hemos graduado a decenas de profesionales en estos principios rectores de nuestra vida como universitarios.”

Informó que “iniciaremos el próximo año con mucho orgullo la décima generación de nuestra Maestría, por lo que exhortamos a los interesados en cursarla a visitarnos en la tercera planta del Edificio de Filosofía de la Universidad de El Salvador.”

Mensaje a los cristianos

Mensaje a los Cristianos

Las convulsiones producidas por los acontecimientos políticos, religiosos y sociales de los últimos tiempos, posiblemente han llevado a los creistianos de Colombia a mucha confusión. Es necesario que en este momento decisivo para nuestra historia, los cristianos estemos firmes alrededor de las bases esenciales de nuestra religión.

Lo principal en el Catolicismo es el amor al prójimo. “El que ama a su prójimo cumple con su ley.” (S. Pablo, Rom. XIII, 8). Este amor, para que sea verdadero, tiene que buscar eficacia. Si la beneficencia, la limosna, las pocas escuelas gratuitas, los pocos planes de vivienda, lo que se ha llamado “la caridad”, no alcanza a dar de comer a la mayoría de los hambrientos, ni a vestir a la mayoría de los desnudos, ni a enseñar a la mayoría de los que no saben, tenemos que buscar medios eficaces para el bienestar de las mayorías.

Esos medios no los van a buscar las minorías privilegiadas que tienen el poder, porque generalmente esos medios eficaces obligan a las minorías a sacrificar sus privilegios. Por ejemplo, para lograr que haya más trabajo en Colombia, sería mejor que no se sacaran los capitales en forma de dólares y que más bien se invirtieran en el país en fuentes de trabajo. Pero como el peso colombiano se desvaloriza todos los días, los que tienen el dinero y tienen el poder nunca van a prohibir la exportación del dinero, porque exportándolo se libran de la devaluación.

Es necesario entonces quitarles el poder a las minorías privilegiadas para dárselo a las mayorías pobres. Esto, si se hace rápidamente es lo esencial de una revolución. La Revolución puede ser pacífica si las minorías no hacen resistencia violenta. La Revolución, por lo tanto, es la forma de lograr un gobierno que dé de comer al hambriento, que vista al desnudo, que enseñe al que no sabe, que cumpla con las obras de caridad, de amor al prójimo, no solamente en forma ocasional y transitoria, no solamente para unos pocos, sino para la mayoría de nuestros prójimos. Por eso la Revolución no solamente es permitida sino obligatoria para los cristianos que vean en ella la única manera eficaz y amplia de realizar el amor para todos. Es cierto que “no haya autoridad sino de parte de Dios” (S. Pablo, Rom. XXI, 1). Pero Santo Tomás dice que la atribución concreta de la autoridad la hace el pueblo.

Cuando hay una autoridad en contra del pueblo, esa autoridad no es legítima y se llama tiranía. Los cristianos podemos y debemos luchar contra la tiranía. El gobierno actual es tiránico porque no lo respalda sino el 20% de los electores y porque sus decisiones sales de las minorías privilegiadas.

Los defectos temporales de la Iglesia no nos deben escandalizar. La Iglesia es humana. Lo importante es creer también que es divina y que si nosotros los cristianos cumplimos con nuestra obligación de amar al prójimo, estamos fortaleciendo a la Iglesia.

Yo he dejado los privilegios y deberes del clero, pero no he dejado de ser sacerdote. Creo que me he entregado a la Revolución por amor al prójimo. He dejado de decir misa para realizar ese amor al prójimo, en el terreno temporal, económico y social. Cuando mi prójimo no tenga nada contra mí, cuando haya realizado la Revolución, volveré a ofrecer misa si Dios me lo permite. Creo que así sigo el mandato de Cristo: “Si traes tu ofrenda al altar y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda” (S. Mateo V, 23-24).

Después de la Revolución los cristianos tendremos la conciencia de que establecimos un sistema que está orientado por el amor al prójimo.

La lucha es larga, comencemos ya…

Camilo Torres

Continuan conmemoraciones masacre misioneras estadounidenses

San Salvador, 3 de Diciembre- Con misas, musica religiosa, conferencias de prensa sobre la situacion de los derechos humanos en El Salvador y visitas a las comunidades del bajo Lempa, continuaron las conmemoraciones del 25 aniversario de la cruel masacre de las cuatro religiosas estadounidenses asesinadas el 2 de Diciembre de 1980 por los militares salvadoreños.

Las conmemoraciones comenzaron el mes de Noviembre como parte de la temporada de martirio en El Salvador, en Cleveland, Ohio y otros estados de la region norteamericana, en donde las misioneras Ursulinas entregaron, en la nefasta escuela de las Americas, la pancarta del 25 aniversario, la cual recorrio mas de 6 mil millas en Estados Unidos junto con la caravana por la justicia del Proyecto Alto A La Impunidad para luego llegar a la capilla situada en un caserio de La Paz, en El Salvador, lugar donde se encontraron los cadaveres cruelmente torturados de las cuatro misioneras estadounidenses el 4 de diciembre de 1980. Las cuatro misioneras catolicas trabajaban con las comunidades pobres cuando fueron capturadas por los militares salvadoreños por tomar la opcion preferencial por los pobres.

Las conmemoraciones aqui en El Salvador, comenzaron el dia 30 de Noviembre cuando cientos de religiosas de todas las regiones de america, comenzaron a llegar al pais para unirse al evento a las misioneras Mariknoll y de la congregacion de las misioneras Ursulinas . Ayer, se hizo un peregrinaje a la capilla que se ha levantado en el lugar en donde se encontraron los cadaveres de “las monjitas” como les llaman los pobladores de la region, luego se hicieron visitas a las comunidades del bajo Lempa, en donde las hermanas Mariknoll Ita Ford, y Maura Clark acompañaban al pueblo antes de ser asesinadas por el gobierno de facto en El Salvador.

Hoy, se oficio una misa concelebrada por 13 sacerdotes y dos Obispos en la catredral Metropolitana de San Salvador, a la cual asistieron la Procuradora de Derechos Humanos Dra. Beatrice de Carrillo quien ha sido amenazada de muerte repetidas veces este año por denunciar la situacion de derechos humanos que se vive actualmente en El Salvador, y el representante de Massashussets, Jim Mcgovern quien se opone en el congreso a que se siga con las practicas de tortura y violacion a los derechos humanos por parte de Estados Unidos en el mundo entero.

En los eventos conmemorativos de ahora participaron diferentes comunidades como la comunidad de la Libertad, en donde trabajaba la Hermana Dorothy Kazel y Jean Donovan, y la de Armenia, con niños marchando en procesion con la pancarta de las misioneras Ursulinas en donde se pide el cierre de la Escuela de Las Americas, lugar donde se entrenaron los asesinos de las cuatro religiosas.

Mañana, se oficiara la misa principal en la capilla que se erigio en el lugar donde se encontraron los cadaveres de las religiosas en donde llegaran peregrinaciones de todas partes. La conmemoraciones, son parte del rescate de la memoria historica de El Salvador, a la cual se opone el gobierno derechista de ARENA actualmente en el poder.
El mes pasado, el Gobierno salvadoreño, llamo heroe por la democracia al ex vice-ministro de defensa Nicolas Carranza, quien fue encontrado culpable de crimenes de lesa humanidad y torturas durante los años 80´s, por el jurado de una corte estadounidense.

Las conmemoraciones de masacres cometidas por los militares salvadoreños continuan la proxima semana, con la conmemoracion de la masacre de El Mozote, en donde el Batallon Atlacatl, entrenado en la escuela de las Americas, asesino a casi mil personas entre ellas a niños mujeres y ancianos, en una operacion de tierra arrasada; con el apoyo de Los Estados Unidos. Durante las pesquisas de la masacre de El Mozote, se encontraron casquillos y cajas de municiones en donde se podia leer la palabra OTAN.

Carta abierta al camarada Burnham

Me han informado que, ante mi artículo sobre la oposición pequeñoburguesa, usted ha reaccionado diciendo que no quiere discutir conmigo sobre dialéctica, sino sobre “cuestiones concretas”. “Dejé de elucubrar sobre religión hace mucho tiempo”, añadió usted irónicamente. Oí una vez a Max Eastman hacer la misma afirmación.

¿Es lógico identificar la lógica con la religión?

A mi modo de ver, esto significa simplemente que usted incluye la dialéctica de Marx, Engels y Lenin en la esfera de la religión. ¿Qué significa esto? La dialéctica, permítame recalcarlo una vez más, es la lógica de la evolución. La lógica indispensable para todas las esferas del conocimiento humano, lo mismo que el almacén de una fábrica proporciona instrumentos para todos los departamentos. Si no considera la lógica en general es un prejuicio religioso (aunque sea feo el decirlo, los contradictorios escritos de la oposición le inclinan a uno cada vez más a esa lamentable idea), ¿qué lógica acepta usted? Conozco sólo dos sistemas lógicos dignos de atención: la lógica de Aristóteles (lógica formal) y la lógica de Hegel (la dialéctica). La lógica aristotélica parte la inmutabilidad de los objetos y los fenómenos. El pensamiento científico de nuestra época estudia los fenómenos en origen, cambio y desintegración. ¿Afirma usted que el progreso de las ciencias, incluyendo el darwinismo, el marxismo, la física y la química modernas, no tiene nada que ver con un cambio en la estructura de nuestro pensamiento, nuestra forma de pensar? En otras palabras, ¿mantiene usted que, en un mundo donde todo cambia, sólo el silogismo permanece, eterno e inmutable? El Evangelio según San Juan comienza con estas palabras: “En el principio, era el Verbo”, es decir, en el principio era la Razón del Verbo (razón expresada en palabras, es decir, el silogismo). Para San Juan, el silogismo es uno de los pseudónimos literarios de Dios. Si usted considera que el silogismo es inmutable, no tiene origen ni desarrollo, el silogismo es para usted producto de la revelación divina. Pero si reconoce usted que las formas del pensamiento lógico se desarrollan en nuestro proceso de adaptación a la naturaleza, haga el favor de decirnos quién, siguiendo a Aristóteles, ha analizado y sistematizado el progreso consiguiente de la lógica. Hasta que no clarifique usted este punto me tomaré la libertad de afirmar que identificar la lógica (dialéctica) con la religión indica superficialidad y un profundo desconocimiento de los problemas básicos del pensamiento humano.

¿Está el revolucionario obligado a luchar contra la religión?

Imaginemos, sin embargo, que su insinuación más que presuntuosa es correcta. Esto no le da ninguna ventaja. La religión, espero que esté de acuerdo conmigo, distrae la atención del conocimiento correcto a la ficción, y de la lucha por una vida mejor a falsas esperanzas en el Más Allá. La religión es el opio del pueblo. Quien no lucha contra la religión no merece el nombre de revolucionario. ¿Cómo justifica usted su renuncia a luchar contra la dialéctica, si es una variedad de la religión?

Hace mucho tiempo que dejó usted de preocuparse por el tema de la religión, dice usted. Pero dejó de hacerlo por usted mismo solamente; y, además de usted, hay otros seres en el mundo. Unos pocos más. Nosotros, los revolucionarios; nunca dejamos de preocuparnos del problema de la religión, ya que nuestra tarea consiste en emancipar de la influencia de la religión no sólo a nosotros mismos, sino también a las masas. Si la dialéctica es una religión, ¿cómo no lucha usted contra la difusión de ese opio dentro de su propio partido?

¿O pretende usted insinuar que la religión no tiene importancia política? ¿Es posible ser religioso y a la vez un comunista coherente y un luchador revolucionario? Naturalmente mantenemos la actitud más considerada del mundo los principios religiosos de un trabajador, de la retaguardia no consciente. Si desea luchar por nuestro programa, le admitimos como miembro del partido; pero, al mismo tiempo, el partido tratará persistentemente de educarle en los principios del materialismo y el ateísmo. Si está de acuerdo con esto, ¿cómo se niega usted a luchar contra la “religión” que profesan los miembros de su partido que, a mi entender, más se interesan en cuestiones teóricas? Obviamente ha olvidado usted el aspecto más importante de la cuestión.

Entre la burguesía educada hay mucha gente que ha roto con la religión, pero cuyo ateísmo es sólo para su consumo privado: guardan sus pensamientos para sí mismos, pero en público suelen mantener que es bueno que el pueblo sea religioso. ¿Es posible que usted mantenga este punto de vista hacia su propio partido? ¿Es posible que esto explique su negación a discutir con nosotros los fundamentos filosóficos del marxismo? Si es así, bajo su desdén por la dialéctica se esconde un tono de desprecio hacia el partido.

Por favor, ahórrese decir que he basado mis argumentos en una frase dicha en una conversación privada y que no ha rechazado públicamente el materialismo dialéctico. No es verdad. Su desafortunada frase me ha servido sólo de ejemplo. Por lo menos en una ocasión usted se ha negado a aceptar, por varias razones, la doctrina que constituye la base teórica de nuestro programa. Esto lo sabe todo el mundo en el partido. En el artículo “Intelectuales en retirada”, escrito por usted en colaboración con Schatman y publicado en el teórico del partido, afirma usted categóricamente que rechaza el materialismo dialéctico. ¿No tiene el partido derecho a saber por qué? Usted asume de hecho que en la IV Internacional un editor de un órgano teórico puede confinarse a sí mismo a decir: “Rechazo definitivamente el materialismo dialéctico”, como si se tratase de preferir una determinada marca de cigarrillos. Una doctrina filosófica correcta, esto es, un método de pensamiento adecuado, es de importancia tan significativa para un partido revolucionario como un buen almacén es importante para la producción. Es todavía posible defender la vieja sociedad con los métodos materiales e intelectuales heredados del pasado. Pero es absolutamente imposible pensar que podamos destruir esta sociedad levantar una nueva sin analizar críticamente los métodos se utilizaban antes. Si el partido ha establecido erróneamente las bases de su pensamiento, es deber elemental de da militante señalar el camino correcto. De otro modo, conducta podría ser interpretada como la actitud de un caballero académico hacia una organización proletaria que, después de todo, es incapaz de crear una doctrina realmente “científica”. ¿Y qué puede ser peor que esto?

Los dados eternos

Para Manuel Gonzales Prada, esta
emoción bravía y selecta, una de las
que, con más entusiasmo, me ha aplau-
dido el gran maestro.

Dios mío, estoy llorando el sér que vivo;
me pesa haber tomádote tu pan;
pero este pobre barro pensativo
no es costra fermentada en tu costado:
¡tú no tienes Marías que se van!

Dios mío, si tú hubieras sido hombre,
hoy supieras ser Dios;
pero tú, que estuviste siempre bien,
no sientes nada de tu creación.
¡Y el hombre sí te sufre: el Dios es él!

Hoy que en mis ojos brujos hay candelas,
como en un condenado,
Dios mío, prenderás todas tus velas,
y jugaremos con el viejo dado.
Tal vez ¡oh jugador! al dar la suerte
del universo todo,
surgirán las ojeras de la Muerte,
como dos ases fúnebres de lodo.

Dios míos, y esta noche sorda, obscura,
ya no podrás jugar, porque la Tierra
es un dado roído y ya redondo
a fuerza de rodar a la aventura,
que no puede parar sino en un hueco,
en el hueco de inmensa sepultura.

Mensaje a la Tricontinental

Mensaje a los pueblos del mundo a través de la Tricontinental

Ernesto Che Guevara

Crear dos, tres… muchos Vietnam, es la consigna.
Es la hora de los hornos y no se ha de ver más que la luz.
José Martí

Ya se han cumplido ventiún años desde el fin de la última conflagración mundial y diversas publicaciones, en infinidad de lenguas, celebran el acontecimiento simbolizado en la derrota del Japón. Hay un clima de aparente optimismo en muchos sectores de los dispares campos en que el mundo se divide.

Ventiún años sin guerra mundial, en estos tiempos de confrontaciones máximas, de choques violentos y cambios repentinos, parecen una cifra muy alta. Pero, sin analizar los resultados prácticos de esa paz por la que todos nos manifestamos dispuestos a luchar (la miseria, la degradación, la explotación cada vez mayor de enormes sectores del mundo) cabe preguntarse si ella es real.

No es la intención de estas notas historiar los diversos conflictos de carácter local que se han sucedido desde la rendición del Japón, no es tampoco nuestra tarea hacer un recuento, numeroso y creciente, de luchas civiles ocurridas durante estos años de pretendida paz.

Bástenos poner como ejemplos contra el desmedido optimismo las guerras de Corea y Vietnam.

En la primera, tras años de lucha feroz, la parte norte del país quedó sumida en la más terrible devastación que figure en los anales de la guerra moderna; acribillada de bombas; sin fábricas, escuelas u hospitales; sin ningún tipo de habitación para albergar a diez millones de habitantes.

En esta guerra intervinieron, bajo la fementida bandera de las Naciones Unidas, decenas de países conducidos militarmente por los Estados Unidos, con la participación masiva de soldados de esa nacionalidad u el uso, como carne de cañón, de la población sudcoreana enrolada.

En el otro bando, el ejército y el pueblo de Corea y los voluntarios de la República Popular China contaron con el abastecimiento y asesoría del aparato militar soviético. Por parte de los norteamericanos se hicieron toda clase de pruebas de armas de destrucción, excluyendo las termonucleares pero incluyendo las bacteriológicas y químicas, en escala limitada. En Vietnam, se han sucedido acciones bélicas, sostenidas por las fuerzas patrióticas de ese país casi ininterrumpidamente contra tres potencias imperialistas: Japón, cuyo poderío sufriera una caída vertical a partir de las bombas de Hiroshima y Nagasaki; Francia, que recupera de aquel país vencido sus colonias indochinas e ignoraba las promesas hechas en momentos difíciles; y los Estados Unidos, en esta última fase de la contienda.

Hubieron confrontaciones limitadas en todos los continentes, aun cuando en el americano, durante mucho tiempo, sólo se produjeron conatos de lucha de liberación y cuartelazos, hasta que la Revolución cubana diera su clarinada de alerta sobre la importancia de esta región y atrajera las iras imperialistas, obligándola a la defensa de sus costas en Playa Girón, primero, y durante la Crisis de Octubre, después.

Este último incidente pudo haber provocado una guerra de incalculables proporciones, al producirse, en torno a Cuba, el choque de norteamericanos y soviéticos.

Pero, evidentemente, el foco de las contradicciones, en este momentos, está radicado en los territorios de la península indochina y los países aledaños. Laos y Vietnam son sacudidos por guerras civiles, que dejan de ser tales al hacerse presente, con todo su poderío, el imperialismo norteamericano, y toda la zona se convierte en una peligrosa espoleta presta a detonar.

En Vietnam la confrontación ha adquirido características de una agudeza extrema. Tampoco es nuestra intención historiar esta guerra. Simplemente, señalaremos algunos hitos de recuerdo.

En 1954, tras la derrota aniquilante de Dien-Bien-Phu, se firmaron los acuerdos de Ginebra, que dividían al país en dos zonas y estipulaban la realización de elecciones en un plazo de 18 meses para determinar quienes debían gobernar a Vietnam y cómo se reunificaría el país. Los norteamericanos no firmaron dicho documento, comenzando las maniobras para sustituir al emperador Bao Dai, títere francés, por un hombre adecuado a sus intenciones. Este resultó ser Ngo Din Diem, cuyo trágico fin —el de la naranja exprimida por el imperialismo— es conocido de todos.

En los meses posteriores a la firma del acuerdo, reinó el optimismo en el campo de las fuerzas populares. Se desmantelaron reductos de lucha antifrancesa en el sur del país y se esperó el cumplimiento de lo pactado. Pero pronto comprendieron los patriotas que no habría elecciones a menos que los Estados Unidos se sintieran capaces de imponer su voluntad en las urnas, cosa que no podía ocurrir, aun utilizando todos los métodos de fraude conocidos.

Nuevamente se iniciaron las luchas en el sur del país y fueron adquiriendo mayor intensidad hasta llegar al momento actual, en que el ejército norteamericano se compone de casi medio millón de invasores, mientras las fuerzas títeres disminuyen su número, y sobre todo, han perdido totalmente la combatividad.

Hace cerca de dos años que los norteamericanos comenzaron el bombardeo sistemático de la República Democrática de Vietnam en un intento más de frenar la combatividad del sur y obligar a una conferencia desde posiciones de fuerza. Al principio los bombardeos fueron más o menos aislados y se revestían de la máscara de represalias por supuestas provocaciones del norte. Después aumentaron en intensidad y método, hasta convertirse en una gigantesca batida llevada a cabo por unidades aéreas de los Estados Unidos, día a día, con el propósito de destruir todo vestigio de civilización en la zona norte del país. Es un episodio de la tristemente célebre escalada.

Las aspiraciones materiales del mundo yanqui se han cumplido en buena parte a pesar de la denodada defensa de las unidades antiaéreas vietnamitas, de los más de 1,700 aviones derribados y de la ayuda del campo socialista en material de guerra.

Hay una penosa realidad: Vietnam, esa nación que representa las aspiraciones, las esperanzas de victoria de todo un mundo preterido, está trágicamente solo. Ese pueblo debe soportar los embates de la técnica norteamericana, casi a mansalva en el sur, con algunas posibilidades de defensa en el norte, pero siempre solo. La solidaridad del mundo progresista para con el pueblo de Vietnam semeja a la amarga ironía que significaba para los gladiadores del circo romano el estímulo de la plebe. No se trata de desear éxitos al agredido, sino de correr su misma suerte; acompañarlo a la muerte o la victoria.

Cuando analizamos la soledad vietnamita nos asalta la angustia de este momento ilógico de la humanidad.

El imperialismo norteamericano es culpable de agresión; sus crímenes son inmensos y repartido por todo el orbe. ¡Ya lo sabemos, señores! Pero también son culpables los que en el momento de definición vacilaron en hacer de Vietnam parte inviolable del territorio socialista, corriendo, así, los riesgos de una guerra de alcance mundial, pero también obligando a una decisión a los imperialistas norteamericanos. Y son culpables los que mantienen una guerra de denuestos y zancadillas comenzada hace ya buen tiempo por los representantes de las dos más grandes potencias del campo socialista.

Preguntemos, para lograr una respuesta honrada: ¿Está o no aislado el Vietnam, haciendo equilibrios peligrosos entre las dos potencias en pugna?

Y ¡qué grandeza la de ese pueblo! ¡Qué estoicismo y valor, el de ese pueblo! Y qué lección para el mundo entraña esa lucha.

Hasta dentro de mucho tiempo no sabremos si el presidente Johnson pensaba en serio iniciar algunas de las reformas necesarias a un pueblo —para limar aristas de las contradicciones de clase que asoman con fuerza explosiva y cada vez más frecuentemente. Lo cierto es que las mejoras anunciadas bajo el pomposo título de lucha por la gran sociedad han caído en el sumidero de Vietnam.

El más grande de los poderes imperialistas siente en sus entrañas el desangramiento provocado por un país pobre y atrasado y su fabulosa economía se resiente del esfuerzo de guerra. Matar deja de ser el más cómodo negocio de los monopolios. Armas de contención, y no en número suficiente, es todo lo que tienen estos soldados maravillosos, además del amor a su patria, a su sociedad y un valor a toda prueba. Pero el imperialismo se empantana en Vietnam, no halla camino de salida y busca desesperadamente alguno que le permita sortear con dignidad este peligroso trance en que se ve. Mas los “cuatro puntos” del norte y “los cinco” del sur lo atenazan, haciendo aún más decidida la confrontación.

Todo parece indicar que la paz, esa paz precaria a la que se ha dado tal nombre, sólo porque no se ha producido ninguna conflagración de carácter mundial, está otra vez en peligro de romperse ante cualquier paso irreversible e inaceptable, dado por los norteamericanos. Y, a nosotros, explotados del mundo, ¿cuál es el papel que nos corresponde? Los pueblos de tres continentes observan y aprenden su lección en Vietnam. Ya que, con la amenaza de guerra, los imperialistas ejercen su chantaje sobre la humanidad, no temer la guerra es la respuesta justa. Atacar dura e ininterrumpidamente en cada punto de confrontación, debe ser la táctica general de los pueblos.

Pero, en los lugares en que esta mísera paz que sufrimos no ha sido rota, ¿cuál será nuestra tarea? Liberarnos a cualquier precio.

El panorama del mundo muestra una gran complejidad. La tarea de la liberación espera aún a países de la vieja Europa, suficientemente desarrollados para sentir todas las contradicciones del capitalismo, pero tan débiles que no pueden seguir ya seguir el rumbo del imperialismo o iniciar esa ruta. Ahí las contradicciones alcanzarán en los próximos años carácter explosivo, pero sus problemas y, por ende, la solución de los mismos son diferentes a las de nuestros pueblos dependientes y atrasados económicamente.

El campo fundamental de la explotación del imperialismo abarca los tres continentes atrasados, América, Asia y África. Cada país tiene características propias, pero los continentes, en su conjunto, también las presentan.

América constituye un conjunto más o menos homogéneo y en la casi totalidad de su territorio los capitales monopolistas norteamericanos mantienen una primacía absoluta. Los gobiernos títeres o, en el mejor de los casos, débiles y medrosos, no pueden imponerse a las órdenes del amo yanqui. Los norteamericanos han llegado casi al máximo de su dominación política y económica, poco más podrían avanzar ya. Cualquier cambio de la situación podría convertirse en un retroceso en su primacía. Su política es mantenerlo conquistado. La línea de acción se reduce en el momento actual, al uso brutal de la fuerza para impedir movimientos de liberación de cualquier tipo que sean.

Bajo el slogan, “no permitiremos otra Cuba”, se encubre la posibilidad de agresiones a mansalva, como la perpetrada contra Santo Domingo o, anteriormente, la masacre de Panamá, y la clara advertencia de que las tropas yanquis están dispuestas a intervenir en cualquier lugar de América donde el orden establecido sea alterado, poniendo en peligro sus intereses. Esa política cuenta con una impunidad casi absoluta; la OEA es una máscara cómoda, por desprestigiada que esté; la ONU es de una ineficiencia rayana en el ridículo o en lo trágico; los ejércitos de todos los países de América están listos a intervenir para aplastar a sus pueblos. Se ha formado, de hecho, la internacional del crimen y la traición.

Por otra parte las burguesías autóctonas han perdido toda su capacidad de oposición al imperialismo —si alguna vez la tuvieron— y solo forman su furgón de cola.

No hay más cambios que hacer; o revolución socialista o caricatura de revolución.

Asia es un continente de características diferentes. Las luchas de liberación contra una serie de poderes coloniales europeos, dieron por resultado el establecimiento de gobiernos más o menos progresistas, cuya evolución posterior ha sido, en algunos casos, de profundización de los objetivos primarios de la liberación nacional y en otros de reversión hacia posiciones proimperialistas.

Dado el punto de vista económico, Estados Unidos tenía poco que perder y mucho que ganar en Asia. Los cambios le favorecen; se lucha por desplazar a otros poderes neocoloniales, penetrar nuevas esferas de acción en el campo económico, a veces directamente, otras utilizando al Japón.

Pero existen condiciones políticas especiales, sobre todo en la península indochina, que le dan características de capital importancia al Asia y juegan un papel importante en la estrategia militar global del imperialismo norteamericano. Este ejerce un cerco a China a través de Corea del Sur, Japón, Taiwan, Vietnam del Sur y Tailandia, por lo menos.

Esa doble situación: un interés estratégico tan importante como el cerco militar a la República Popular China y la ambición de sus capitales por penetrar esos grandes mercados que todavía no dominan, hacen que el Asia sea uno de los lugares más explosivos del mundo actual, a pesar de la aparente estabilidad fuera del área vietnamita.

Perteneciendo geográficamente a este continente, pero con sus propias contradicciones, el Oriente Medio está en plena ebullición, sin que se pueda prever hasta dónde llegará esa guerra fría entre Israel, respaldada por los imperialistas, y los países progresistas de la zona. Es otro de los volcanes amenazadores del mundo.

El África ofrece las características de ser un campo casi virgen para la invasión neocolonial. Se han producido cambios que, en alguna medida, obligaron a los poderes neocoloniales a ceder sus antiguas prerrogativas de carácter absoluto. Pero, cuando los procesos se llevan a cabo ininterrumpidamente, al colonialismo sucede, sin violencia, un neocolonialismo de iguales efectos en cuanto a la dominación económica se refiere. Estados Unidos no tenía colonias en esta región y ahora lucha por penetrar en los antiguos cotos cerrados de sus socios. Se puede asegurar que África constituye, en los planes estratégicos del imperialismo norteamericano su reservorio a largo plazo; sus inversiones actuales sólo tienen importancia en la Unión Sudafricana y comienza su penetración en el Congo, Nigeria y otros países, donde se inicia una violenta competencia (con carácter pacífico hasta ahora) con otros poderes imperialistas.

No tiene todavía grandes intereses que defender salvo su pretendido derecho a intervenir en cada lugar del globo en que sus monopolios olfateen buenas ganancias o la existencia de grandes reservas de materias primas. Todos estos antecedentes hacen lícito el planteamiento interrogante sobre las posibilidades de liberación de los pueblos a corto o mediano plazo.

Si analizamos el África veremos que se lucha con alguna intensidad en las colonias portuguesas de Guinea, Mozambique y Angola, con particular éxito en la primera y con éxito variable en las dos restantes. Que todavía se asiste a la lucha entre sucesores de Lumumba y los viejos cómplices de Tshombe en el Congo, lucha que, en el momento actual, parece inclinarse a favor de los últimos, los que han “pacificado” en su propio provecho una gran parte del país, aunque la guerra se mantenga latente.

En Rhodesia el problema es diferente: el imperialismo británico utilizó todos los mecanismos a su alcance para entregar el poder a la minoría blanca que lo detenta actualmente. El conflicto, desde el punto de vista de Inglaterra, es absolutamente antioficial, sólo que esta potencia, con su habitual habilidad diplomática —también llamada hipocresía en buen romance— presenta una fachada de disgustos ante las medidas tomadas por el gobierno de Ian Smith, y es apoyada en su taimada actitud por algunos de los países del Commonwealth que la siguen, y atacada por una buena parte de los países del África Negra, sean o no dóciles vasallos económicos del imperialismo inglés.

En Rhodesia la situación puede tornarse sumamente explosiva si cristalizaran los esfuerzos de los patriotas negros para alzarse en armas y este movimiento fuera apoyado efectivamente por las naciones africanas vecinas. Pero por ahora todos sus problemas se ventilan en organismos tan inicuos como la ONU, el Commonwealth o la OUA.

Sin embargo, la evolución política y social del África no hace prever una situación revolucionaria continental. Las luchas de liberación contra los portugueses deben terminar victoriosamente, pero Portugal no significa nada en la nómina imperialista. Las confrontaciones de importancia revolucionaria son las que ponen en jaque a todo el aparato imperialista, aunque no por eso dejemos de luchar por la liberación de las tres colonias portuguesas y por la profundización de sus revoluciones.

Cuando las masa negras de Sudáfrica o Rhodesia inicien su auténtica lucha revolucionaria, se habrá iniciado una nueva época en el África. O, cuando las masas empobrecidas de un país se lancen a rescatar su derecho a una vida digna, de las manos de las oligarquías gobernantes.

Hasta ahora se suceden los golpes cuartelarios en que un grupo de oficiales reemplaza a otro o a un gobernante que ya no sirva sus intereses de casta y a los de las potencias que lo manejan solapadamente pero no hay convulsiones populares. En el Congo se dieron fugazmente estas características impulsadas por el recuerdo de Lumumba, pero han ido perdiendo fuerza en los últimos meses.

En Asia, como vimos, la situación es explosiva, y no son sólo Vietnam y Laos, donde se lucha, los puntos de fricción. También lo es Cambodia, donde en cualquier momento puede iniciarse la agresión directa norteamericana, Tailandia, Malasia y, por supuesto, Indonesia, donde no podemos pensar que se haya dicho la última palabra pese al aniquilamiento del Partido Comunista de ese país, al ocupar el poder los reaccionarios. Y, por supuesto, el Oriente Medio.

En América Latina se lucha con las armas en la mano en Guatemala, Colombia, Venezuela y Bolivia y despuntan los primeros brotes en Brasil. Hay otros focos de resistencia que aparecen y se extinguen. Pero casi todos los países de este continente están maduros para una lucha de tipo tal, que para resultar triunfante, no pueda conformarse con menos que la instauración de un gobierno de corte socialista.

En este continente se habla prácticamente una lengua, salvo el caso excepcional del Brasil, con cuyo pueblo los de habla hispana pueden entenderse, dada la similitud entre ambos idiomas. Hay una identidad tan grande entre las clases de estos países que logran una identificación de tipo “internacional americano”, mucho más completa que en otros continentes. Lengua, costumbres, religión, amo común, los unen. El grado y las formas de explotación son similares en sus efectos para explotadores y explotados de una buena parte de los países de nuestra América. Y la rebelión está madurando aceleradamente en ella.

Podemos preguntarnos: esta rebelión, ¿cómo fructificará?; ¿de qué tipo será? Hemos sostenido desde hace tiempos que dadas sus características similares, la lucha en América adquirirá, en su momento, dimensiones continentales. Será escenario de muchas grandes batallas dadas por la humanidad para su liberación.

En el marco de esa lucha de alcance continental, las que actualmente se sostienen en forma activa son sólo episodios, pero ya han dado los mártires que figurarán en la historia americana como entregando su cuota de sangre necesaria en esta última etapa de la lucha por la libertad plena del hombre. Allí figurarán los nombres del comandante Turcios Lima, del cura Camilo Torres, del comandante Fabricio Ojeda, de los comandantes Lobatón y Luis de la Puente Uceda, figuras principalísimas en los movimientos revolucionarios de Guatemala, Colombia, Venezuela y Perú.

Pero la movilización activa del pueblo crea sus nuevos dirigentes: César Montes y Yon Sosa levantan la bandera en Guatemala, Fabio Vázquez y Marulanda lo hacen en Colombia, Douglas Bravo en el occidente del país y Américo Martín en El Bachiller, dirigen sus respectivos frentes en Venezuela.

Nuevos brotes de guerra surgirán en estos y otros países americanos, como ya ha ocurrido en Bolivia, e irán creciendo, con todas las vicisitudes que entraña este peligroso oficio de revolucionario moderno. Muchos morirán víctimas de sus errores, otros caerán en el duro combate que se avecina; nuevo luchadores y nuevos dirigentes surgirán al calor de la lucha revolucionaria. El pueblo irá formando sus combatientes y sus conductores en el marco selectivo de la guerra misma, y los agentes yanquis de represión aumentarán. Hoy hay asesores en todos los países donde la lucha armada se mantiene y el ejército peruano realizó, al parecer, una exitosa batida contra los revolucionarios de ese país, también asesorado y entrenado por los yanquis. Pero si los focos de guerra se llevan con suficiente destreza política y militar, se harán prácticamente imbatibles y exigirán nuevos envíos de los yanquis. En el propio Perú, con tenacidad y firmeza nuevas figuras aún no completamente conocidas, reorganizan la lucha guerrillera. Poco a poco, la armas obsoletas que bastan para la represión de pequeñas bandas armadas, irán convirtiéndose en armas modernas y los grupos de asesores en combatientes norteamericanos, hasta que, en un momento dado, se vean obligados a enviar cantidades crecientes de tropas regulares para asegurar la relativa estabilidad de un poder cuyo ejército nacional títere se desintegra ante los combates de las guerrillas. Es el camino de Vietnam; es el camino que deben seguir los pueblos; es el camino que seguirá América, con la característica especial de que los grupos en armas pudieran formar algo así como Juntas de Coordinación para hacer más difícil la tarea represiva del imperialismo yanqui y facilitar la propia causa.

América, continente olvidado por las últimas luchas políticas de liberación, que empieza a hacerse sentir a través de la Tricontinental en la voz de la vanguardia de sus pueblos, que es la Revolución cubana, tendrá una tarea de mucho mayor relieve: la de la creación del segundo o tercer Vietnam o del segundo y tercer Vietnam del mundo.

En definitiva, hay que tener en cuenta que el imperialismo es un sistema mundial, última etapa del capitalismo, y que hay que batirlo en una gran confrontación mundial. La finalidad estratégica de esa lucha debe ser la destrucción del imperialismo. La participación que nos toca a nosotros, los explotados y atrasados del mundo, es la de eliminar las bases de sustentación del imperialismo: nuestros pueblos oprimidos, de donde extraen capitales, materias primas, técnicos y obreros baratos y a donde exportan nuevos capitales —instrumentos de dominación—, armas y toda clase de artículos, sumiéndonos en una dependencia absoluta. El elemento fundamental de esa finalidad estratégica será, entonces la liberación real de los pueblos; liberación que se producirá, a través de la lucha armada, en la mayoría de los casos, y que tendrá, en América, casi indefectiblemente, la propiedad de convertirse en una revolución socialista.

Al enfocar la destrucción del imperialismo, hay que identificar a su cabeza, la que no es otra que los Estados Unidos de Norteamérica.

Debemos realizar una tarea de tipo general que tenga como finalidad táctica sacar al enemigo de su ambiente obligándolo a luchar en lugares donde sus hábitos de vida choquen con la realidad imperante. No se debe despreciar al adversario; el soldado norteamericano tiene capacidad técnica y está respaldado por medios de tal magnitud que lo hacen temible. Le falta esencialmente de motivación ideológica que tienen en grado sumo sus más enconados rivales de hoy: los soldados vietnamitas. Solamente podremos triunfar sobre ese ejército en la medida en que logremos minar su moral. Y ésta se mina inflingiéndole derrotas y ocasionándole sufrimientos repetidos.

Pero este pequeño esquema de victorias encierra dentro de sí sacrificios inmensos de los pueblos, sacrificios que debe exigirse desde hoy, a la luz del día, y que quizás sean menos dolorosos que los que debieron soportar si rehuyéramos constantemente el combate, para tratar de que otros sean los que nos saquen las castañas del fuego.

Claro que, el último país en liberarse, muy probablemente lo hará sin lucha armada, y los sufrimientos de una guerra larga y tan cruel como la que hacen los imperialistas, se le ahorrarán a ese pueblo. Pero tal vez sea imposible eludir esa lucha o sus efectos, en una contienda de carácter mundial y se sufra igual o más aún. No podemos predecir el futuro, pero jamás debemos ceder a la tentación claudicante de ser los abanderados de un pueblo que anhela su libertad, pero reniega de la lucha que ésta conlleva y la espera como un mendrugo de victoria.

Es absolutamente justo evitar todo sacrificio inútil. Por eso es tan importante el esclarecimiento de las posibilidades efectivas que tiene la América dependiente de liberarse en formas pacíficas. Para nosotros está clara la solución de esta interrogante; podrá ser o no el momento actual el indicado para iniciar la lucha, pero no podemos hacernos ninguna ilusión, ni tenemos derecho a ello de lograr la libertad sin combatir. Y los combates no serán meras luchas callejeras de piedras contra gases lacrimógenos, ni de huelgas generales pacíficas; ni será la lucha de un pueblo enfurecido que destruya en dos o tres días el andamiaje represivo de las oligarquías gobernantes; será una lucha larga, cruenta, donde su frente estará en los refugios guerrilleros, en las ciudades, en las casas de los combatientes —donde la represión irá buscando víctimas fáciles entre sus familiares— en la población campesina masacrada, en las aldeas o ciudades destruidas por el bombardeo enemigo.

Nos empujan a esa lucha; no hay más remedio que prepararla y decidirse a emprenderla.

Los comienzos no serán fáciles; serán sumamente difíciles. Toda la capacidad de represión, toda la capacidad de brutalidad y demagogia de las oligarquías se pondrá al servicio de su causa. Nuestra misión, en la primera hora, es sobrevivir, después actuará el ejemplo perenne de la guerrilla realizando la propaganda armada en la acepción vietnamita de la frase, vale decir, la propaganda de los tiros, de los combates que se ganan o se pierden, pero se dan, contra los enemigos.

La gran enseñanza de la invencibilidad de la guerrilla prendiendo en las masas de los desposeídos. La galvanización del espíritu nacional, la preparación para tareas más duras, para resistir represiones más violentas.

El odio como factor de lucha; el odio intransigente al enemigo, que impulsa más allá de las limitaciones del ser humano y lo convierte en una efectiva, violenta, selectiva y fría máquina de matar. Nuestros soldados tienen que ser así; un pueblo sin odio no puede triunfar sobre un enemigo brutal.

Hay que llevar la guerra hasta donde el enemigo la lleve: a su casa, a sus lugares de diversión; hacerla total. Hay que impedirle tener un minuto de tranquilidad, un minuto de sosiego fuera de sus cuarteles, y aún dentro de los mismos: atacarlo donde quiera que se encuentre; hacerlo sentir una fiera acosada por cada lugar que transite. Entonces su moral irá decayendo.

Será más bestial todavía, pero se notarán los signos del decaimiento que asoma.

Y que se desarrolle un verdadero internacionalismo proletario; con ejércitos proletarios internacionales, donde la bandera bajo la que se luche sea la causa sagrada de la redención de la humanidad, de tal modo que morir bajo las enseñas de Vietnam, de Venezuela, de Guatemala, de Laos, de Guinea, de Colombia, de Bolivia, de Brasil, para citar sólo los escenarios actuales de la lucha armada, sea igualmente gloriosa y apetecible para un americano, un asiático, un africano y, aún, un europeo.

Cada gota de sangre derramada en un territorio bajo cuya bandera no se ha nacido, es experiencia que recoge quien sobrevive para aplicarla luego en la lucha por la liberación de su lugar de origen. Y cada pueblo que se libere, es una fase de la batalla por la liberación del propio pueblo que se ha ganado.

Es la hora de atemperar nuestras discrepancias y ponerlo todo al servicio de la lucha.

Que agitan grandes controversias al mundo que lucha por la libertad, lo sabemos todos y no lo podemos esconder. Que han adquirido un carácter y una agudeza tales que luce sumamente difícil, si no imposible, el diálogo y la conciliación, también lo sabemos. Buscar métodos para iniciar un diálogo que los contendientes rehuyen es una tarea inútil. Pero el enemigo está ahí, golpea todos los días y amenaza con nuevos golpes y esos golpes nos unirán, hoy, mañana o pasado. Quienes antes lo capten y se preparen a esa unión necesaria tendrán el reconocimiento de los pueblos.

Dadas las virulencias e intransigencias con que se defiende cada causa, nosotros, los desposeídos, no podemos tomar partido por una u otra forma de manifestar las discrepancias, aún cuando coincidamos a veces con algunos planteamientos de una u otra parte, o en mayor medida con los de una parte que con los de la otra. En el momento de la lucha, la forma en que se hacen visibles las actuales diferencias constituyen una debilidad; pero en el estado en que se encuentran, querer arreglarlas mediante palabras es una ilusión. La historia irá borrando o dándoles su verdadera explicación.

En nuestro mundo en lucha, todo lo que sea discrepancia en torno a la táctica, método de acción para la consecución de objetivos limitados, debe analizarse con el respeto que merecen las apreciaciones ajenas. En cuanto al gran objetivo estratégico, la destrucción total del imperialismo por medio de la lucha, debemos ser intransigentes.

Sinteticemos así nuestras aspiraciones de victoria: destrucción del imperialismo mediante la eliminación de su baluarte más fuerte: el dominio imperialista de los Estados Unidos de Norteamérica. Tomar como función táctica la liberación gradual de los pueblos, uno a uno o por grupos, llevando al enemigo a una lucha difícil fuera de su terreno; liquidándole sus bases de sustentación, que son sus territorios dependientes.

Eso significa una guerra larga. Y lo repetimos una vez más, una guerra cruel. Que nadie se engañe cuando la vaya a iniciar y que nadie vacile en iniciarla por temor a los resultados que pueda traer para su pueblo. Es casi la única esperanza de victoria.

No podemos eludir el llamado de la hora. Nos lo enseña Vietnam con su permanente lección de heroísmo, su trágica y cotidiana lección de lucha y de muerte para lograr la victoria final.

Allí, los soldados del imperialismo encuentran la incomodidad de quien, acostumbrado al nivel de vida que ostenta la nación norteamericana, tiene que enfrentarse con la tierra hostil; la inseguridad de quien no puede moverse sin sentir que pisa territorio enemigo; la muerte a los que avanzan más allá de sus reductos fortificados, la hostilidad permanente de toda la población. Todo eso va provocando la repercusión interior en los Estados Unidos; va haciendo surgir un factor atenuado por el imperialismo en pleno vigor, la lucha de clases aún dentro de su propio territorio.

¡Cómo podríamos mirar el futuro de luminoso y cercano, si dos, tres, muchos Vietnam florecieran en la superficie del globo, con su cuota de muerte y sus tragedias inmensas, con su heroísmo cotidiano, con sus golpes repetidos al imperialismo, con la obligación que entraña para este de dispersar sus fuerzas, bajo el embate del odio creciente de los pueblos del mundo!

Y si todos fuéramos capaces de unirnos, para que nuestros golpes fueran más sólidos y certeros, para que la ayuda de todo tipo a los pueblos en lucha fuera aún más efectiva, ¡qué grande sería el futuro, y qué cercano!

Si a nosotros, los que en un pequeño punto del mapa del mundo cumplimos el deber que preconizamos y ponemos a disposición de la lucha este poco que nos es permitido dar: nuestras vidas, nuestro sacrificio, nos toca lanzar alguno de estos días el último suspiro sobre cualquier tierra, ya nuestra, regada con nuestra sangre, sépase que hemos medido el alcance de nuestros actos y que no nos consideramos nada más que elementos en el gran ejército proletario, pero nos sentimos orgullosos de haber aprendido de la Revolución cubana y de su gran dirigente máximo la gran lección que emana de su actitud en esta parte del mundo: “qué importan los peligros o sacrificios de un hombre o de un pueblo, cuando está en juego el destino de la humanidad”.

Toda nuestra acción es un grito de guerra contra el imperialismo y un clamor por la unidad de los pueblos contra el gran enemigo del género humano: los Estados Unidos de Norteamérica. En cualquier lugar que nos sorprenda la muerte, bienvenida sea, siempre que ese, nuestro grito de guerra, haya llegado hasta un oído receptivo, y otra mano se tienda para empuñar nuestras armas, y otros hombres se apresten a entonar los cantos luctuosos con tableteo de ametralladoras y nuevos gritos de guerra y de victoria.
Abril de 1967

25 Aniversario de masacre de religiosas estadounidenses

San Salvador, Viernes 2 de Diciembre- Hoy se cumplen 25 años del vergonzoso y cruel asesinato de las cuatro religiosas estadounidenses en El Salvador. Nadie olvidara aquel dia dos de Diciembre, cuando las monjitas fueron interceptadas por los militares salvadoreños varios de ellos graduados en la nefasta Escuela de Las Americas (WHINSEC). La religiosa Ursulina Dorothy Kazel y su compañera seglar Jean Donovan, regresaban del aeropuerto de recoger a las hermanitas Mariknolls Ita Ford y Maura Clark.

La manera como ellas fueron asesinadas conmociono al mundo entero pero su crimen sigue en la impunidad igual que el de Monseñor Romero y el de decenas de Sacerdotes y miles de salvadoreños que aun lloran a los que fueron asesinados por el simple hecho de ser civiles.

Recuerdo en este dia tan especial a Hermana Dorothy y a Jean Donovan, recuerdo sus visitas a la parroquia de Lourdes para impartirnos los talleres de salud, los mismos talleres de salud que me ayudaron a aprender a inyectar a los niños de mi pueblo y que tambien sirvieron para despertar sopechas contra el gobierno y por el cual fui capturado y torturado por la Guardia Nacional. Meses despues de mi liberacion, cuando apenas alcanzaba la frontera con Mexico, caian ellas en manos de los militares para ser violadas, torturadas y cruelmente asesinadas.

En este 25 aniversario de su martirio, 25 años despues, he regresado a El Salvador para rendir homenaje a estas santas, a estas martires por la justicia, con la pancarta que las monjitas Ursulinas hicieron en su honor y que fue presentada en los portones de la Escuela de Las Americas en Fort Benning, Georgia el pasado 19 de Noviembre, para decirle al gobierno Estadounidense que la sangre de nuestros martires no se olvida, en donde exijimos el cierre de la Escuela de asesinos y de todas las Escuelas llamense WHINSEC o ILEA como la que acaban de abrir en El Salvador, para seguir reprimiendo a este pueblo por el que Jean, Dorothy, Ita y Maura murieron.

En este dia tan especial, unamonos en oracion, pero tambien en accion para cerrar la ILEA en El Salvador, para cerra la Escuela de Las Americas en Georgia, el Fort Huachuca en Arizona y todas las escuelas en donde se entrenan los asesinos de los pueblos. Y decirle a los gobiernos asesinos que por mas que traten de esconder nuestra memoria historica no lo lograran, nuestros martires viven ahora mas que nunca, jamas pidieron asesinar su voz y su ejemplo.

Los Olmecas (6)

Los Olmecas (6)

Solo en 1955 pudieron recogerse en La Venta especímenes de madera carbonizada. Sometidos al tratamiento del carbono 14 en los laboratorios de la Universidad de Michigan, esas muestras revelaron fechas escalonadas entre 1154 y 604 antes de nuestra era. Los primeros Olmeca se instalaron en la isla de La Venta hace más de tres mil años.

San Lorenzo, una centena de kilómetros al sudoeste de La Venta, fue descubierto y excavado por Stirling y Drucker en 1945 y 1946. Primera revelación sorprendente: San Lorenzo fue un centro de civilización antes de La Venta. El carbono 14 atribuye a los primeros vestigios Olmecas de este sitio la fecha de 1200 a.C. Antes de esa fecha, la zona ya estaba habitada, la tierra cultivada, la cerámica en uso. Y fue hacia 1200 a.C. cuando un pueblo sumamente civilizado tomó posesión de la meseta de San Lorenzo y esculpió la piedra: no se cuentan menos de setenta y cinco monumentos, entre ellos admirables estatuas y siete cabezas colosales, todos del más puro estilo Olmeca. Aún debemos añadir que una rápida exploración por medio del magnetómetro, en 1968, llevó a Michael Coe a calcular que otros monumentos igualmente valiosos, al menos treinta y cinco, tal vez muchos más, aún permanecen enterrados.

Segunda verificación imprevista: la meseta de San Lorenzo, que se eleva aproximadamente 50 metros por encima de la sabana periódicamente inundada, es artificial. Fue construida por la mano del hombre, a costa de inmensos esfuerzos. Las profundas cañadas que la atraviesan al norte, al sur y al oeste, las veinte lagunas que tachonan su superficie, las largas terrazas que allí se encuentran, todo fue voluntariamente construido en tierra y en piedra volcánica, todo fue modelado. Resulta difícil saber por que. De las mesetas, una de norte a sur, de cerca de 1,200 metros, tiene varias centenas de túmulos que se encuentra repartidos a lo largo de un eje norte-sur, de manera tal que se agrupan en patios rectangulares rodeados de estructuras piramidales. Por último en 1967-1968 se descubrió un sistema de canales subterráneos, hechos de piedras en forma de U minuciosamente ajustadas. La parte descubierta mide cerca de 200 metros de longitud, y se utilizaron al menos 30 toneladas de basalto para construirla. ¿Se trata de canales de riego? Esos conductos, ¿daban a las lagunas o solamente a una de ellas? y, por otra parte, ¿de que servían esas lagunas? Preguntas a las que no podemos responder, dice Soustelle. Lo evidente es que una suma inaudita de ingenio y de trabajo humano entró en acción para fabricar, en todas sus piezas, ese sitio de San Lorenzo.

Por último, tercera sorpresa: después de florecer durante trescientos años, ese centro de civilización fue abandonado. Numerosos monumentos descubiertos por los arqueólogos fueron brutalmente destrozados, las estatuas decapitadas y enterradas, los altares fragmentados; los vándalos también atacaron las cabezas colosales, haciéndoles, con gran trabajo, muescas y agujeros circulares. Uno de los vestigios más asombrosos de lo que debió ser una revolución extraordinariamente violenta, es el monumento 34, muy bella estatua privada de cabeza y de brazos (que debían ser articulados y móviles), que representa a un hombre arrodillado y es testimonio de un excepcional virtuosismo escultural. Coe explica estas destrucciones como “una explosión ‘de odio y de furor contenidos’ contra los dirigentes Olmecas: los monumentos y las estatuas simbolizaban sin duda, a los ojos de un pueblo en rebelión, los amos que les habían impuesto inmensos esfuerzos”.

Aprueban la ILEA en El Salvador

El Salvador, 30 de Noviembre- Con 48 votos a favor, fue aprobada en la asamblea legislativa, la apertura de la Academia Internacional de Policia ILEA (siglas en ingles), en El Salvador.

La ILEA funcionara como un centro de adiestramiento para policias de toda latinoamerica, la cual servira para reprimir a los movimientos sociales. La ILEA tambien sera abierta en Ecuador y en otro pais centroamericano, para hacer un triangulo de represion a lo largo y ancho de los pueblos latinoamericanos y hacer un frente contra el pueblo Bolivariano de Venezuela. Escuelas similares fueron abiertas en paises como Budapest y otros.

La aprobacion de la apertura de la Escuela de policia Internacional, es una continuacion de lo que fue antes la escuela de Las Americas (ahora con sede en Fort Benning) en donde se entrenaron a militares asesinos para reprimir al pueblo salvadoreño.

Mientras la asamblea legislativa votaba por la aprobacion de la apertura de la nueva escuela de asesinos en El Salvador, miles de campesinos, obreros y estudiantes salian a las calles de todo el territorio salvadoreño a protestar por el alto costo de la vida, el regreso del Colon como moneda nacional, el TLC, el robo de la ayuda internacional para los damnifcados por el huracan Stan y la represion desatada por el gobierno.

Durante las protestas fueron parailzadas varias carreteras principales como la carretera panamericana, la del Litoral, la carretera que conduce de Santa Ana a Santa Tecla, el puente de Oro, y el Boulevard del Ejercito Nacional en San Salvador.

Al mismo tiempo, el gobierno del Bachiller Saca, por medio del Ministro de Gobernacion Rene Figueroa, salio condenando a los manifestantes amenazando con tomar acciones policiacas contra los manifestantes.

Con la apertura de la ILEA en El Salvador, las organizaciones sociales como el BPS, ANTA, y grupos de estudiantes universitarios, tendran mas latente el peligro de represion, pues el gobierno implementara mas acciones para hacer callar la voz del pueblo. y continuar con sus politicas neo-liberales contra el pueblo salvadoreño con el pretexto del problema de las Maras y el terrorismo internacional.