La vez que que el Chele Foremost iba a reclutar a Schafik…. Entrevista con Ricardo Martínez
BRISBANE, Australia, 1 de octubre de 2014 (SIEP) “Era mediados de abril de año 72 y realizaba por la mañana mi recorrido habitual repartiendo productos lácteos de la empresa Foremost en mi furgoneta por la Colonia El Roble, cerca de la U…”nos comparte Ricardo Martínez, revolucionario salvadoreño.
“Cuando de repente veo en una esquina un rollo de volantes diseminados por el suelo, me acerco a leer y alcanzo a distinguir en letras rojas: ¡La paz para los ricos ha terminado! ¡La guerra del pueblo ha comenzado! ¡puta! me digo, ¿qué es esto? Parqueo el carro rápido y me bajo a recogerlos.
“Y decido comenzar a repartirlos, yo ya era sindicalista y enemigo de la dictadura militar y el mensaje me llegaba, me tocaba…y aunque no estaba organizado políticamente andaba buscando donde meterme para luchar.
Tranquilamente me fui por ese pasaje repartiendo bajo las puertas de las casas, como en la quinta casa, cuando me retire oí que abrieron la puerta y salió un señor y me llamó. Ya lo conocía, era el esposo de Doña Blanquita.”
“Al acercarme, me dijo: Hola Chelito ¿cómo has estado? ¿Y vos andás repartiendo esto? Le dijo que sí. ¿Y cómo andas repartiendo esto así? ¿No ves que te van a capturar? Y me invitó a su casa. Por mi mente pasó la idea: ¡aquí tengo ya mi primer reclute para la causa! Le explique como había obtenido los volantes. Nos tomamos un café y luego regrese a mis labores.”
“Quedamos de vernos en la U y fui. Me explicó como estaba la situación política del país y hasta la situación internacional. Me tuvo como tres horas. Le pregunte si era profesor de ahí y me dijo que no. Al final me regaló un folleto con su nombre y entonces descubrí que se trataba del mismísimo Schafik, del que ya había oído hablar. Al pasar lo días fui invitado a un circulo de estudios y finalmente llegue a ser miembro también del PCS.