SAN SALVADOR, 12 de marzo de 2013 (SIEP). “Estaba aquí en la U y ví que venía el Chino Quan con cara de preocupado, aquí mismo frente a la Escuela de Artes, y me pregunto: ¿y vos con quien te vas a quedar? ¿Con el ERP o con la RN? Le respondí sin dudar un momento: yo me quedo con la RN…eran los tiempos de la ruptura…año 1975” nos comparte Oscar Fernández, actual asesor en seguridad pública del FMLN en la Asamblea Legislativa.
“Era mi primer día de clases, iniciaba el primer ciclo de Medicina en la Universidad de El Salvador, el 19 de julio de 1972, y entre por el portón de Derecho y me dije: voy a ir al local de la SEBUS a comprarme un poster del Che Guevara, que era un poster a colores con la cara del Che y de fondo el mapa de Sudamérica…valía cincuenta centavos, un tostón como se decía antes.
Y cuando volteo a ver hacia el parque veo una tanqueta del ejército, ¡puta! que raro me digo, y al momento escucho: pac, pac, pac, pac…cuando oí los balazos retrocedí… cuando veo una fila de estudiantes que los conducen hacia el paraninfo…¿ qué estará pasando? pero decido siempre ir a la SEBUS, porque en las residencias era que vivía la mara, …y llego y ahí estaba Carlos Ascensio, el actual embajador en México, semi dormido, en calzoncillo todavía…ahí vivía también Alfonso Hernández. De pronto vi que en fila india lo soldados llevaban a otros estudiantes…
Decidí salirme de la U, enfrente estaba de la entrada si te acordás, una Pizza Boom en la esquina y salí y me fui caminando para mi casa. Desde entonces empecé a radicalízarme…ese fue el debut del presidente Molina, yo había salido de bachiller en el 71. Todavía no estaba organizado pero ya me reunía con algunos compañeros que había conocido como Rigoberto, por cierto ya no lo he visto. Es medico, progresista. También con cheros de la colonia para platicar sobre la situación del país. De Rigoberto me acuerdo que era de Santa Cruz Porrillo.
Vivía en la Colonia Médica, en el Boulevard María Cristina, cerca de la U. Antes no había ahí negocios ni oficinas sino casas, ahí estaba mi mara…En esa época conocí a Carlos Arias, nos reunimos con él. Para ese entonces solo había una sola organización, el ERP. No estaba la RN: Éramos del ERP. Era de la Resistencia Estudiantil Universitaria, la REU, que formaba parte entonces del ERP.
Y como la U estaba cerrada me puse a buscar trabajo y conseguí de vender Enciclopedias, la famosa Enciclopedias Rolher. Así que salía con mi respectivo maletín y un vergo de prospectos. No vendí ni una sola enciclopedia. Una vez iba a hacerlo con una señora pero a la hora del cierre me arrepentí. Ya la había convencido y le dije: mire, mejor no me la compre. Y ella sorprendida me dijo: bueno y Usted ¿anda vendiendo o no? Le explique que le iba a salir muy cara, casi 500 colones de aquella época. El gerente se enojaba porque no seguía sus recomendaciones: habla así y asa, hace así la voz…y me tocaba andar a puro bus, con mi attaché de vendedor. Pero ¡el que nace hijueputa rebelde, muere rebelde!
Fíjate que me servía el trabajo para reunirme, nos veíamos en el Skandia, en La Corona, hasta en el parque El Roble, nos confundíamos con los grupos de moteros, aunque en ese tiempo todavía le ponía… ¿y vos no fumaste marihuana? Era de rigor en esa época. El ritual de nuestra generación…
Bueno en el 74 abrieron de nuevo la U…y empecé a estudiar. Y llegaron también los de nuevo ingreso. Y me buscó Alba Amaya, la mujer de Víctor Amaya ¿lo conoces? Para que le ayudara a boicotear los exámenes de nuevo ingreso. Y formamos la Coordinadora Estudiantil de Nuevo Ingreso, CENI. Nuestro fuerte eran Medicina y Derecho. El día del examen ante la sorpresa de las autoridades y la rabia de los “verdes” los jóvenes rompieron los exámenes, los rompimos. Fue una actividad cachimbona, de ruptura ¿y qué?
En esa coyuntura conocí a Carlos Arias, nos reunimos con él. Para ese entonces solo había una sola organización, el ERP. También conocí a Raúl Hernández, que solo se pasaba riendo, incluso en los momentos de mayor peligro estaba riéndose. No estaba todavía la RN: éramos del ERP. La Resistencia Estudiantil Universitaria, la REU. La reunión fue en la Facultad de Derecho. Nos habló sobre la necesidad de impulsar la lucha por los estudiantes de nuevo ingreso. Era muy importante.
Y quizás por mi participación destacada en este esfuerzo con los de nuevo ingreso, a principios del 74, me invitaron también a una reunión clandestina nada menos que con la Lil Milagros Ramírez. Ahí fue que la conocí por primera vez…
Ingrese a un colectivo del Ejercito Revolucionario del Pueblo a principios de 1975. El responsable era Raúl Hernández. Lo integraba el Seco Villena, que hoy vive en Canadá; el León Peche que se me olvida el nombre pero era el presidente de la AED, chelito, originario de Atiquizaya.
Fíjate que Raúl aunque se reía como te conté, era bastante enérgico, estricto en alguna cuestiones: no seas burgués te decía si te veía con un cincho chivo, o con solo que anduvieras cincho; y quizás para forjar carácter nos convocaba a reuniones a las 5 de la mañana… ¿Y por qué a esa hora? Le preguntábamos inquietos. Esta célula posteriormente fue trasladada bajo la responsabilidad de Lil, que era mayor que nosotros, pero guapa, muy guapa, había sido compañera de Roque y luego lo fue de Carlos Arias.
Fíjate que una vez me encontré al Vaquerito (Vladimir Rogel) en un bus y se me acercó y me dijo: vos me caes bien. Y yo le respondí: vos también me caes bien. Y era verdad. Pero al nomás verlo metí la mano en la mariconera y agarre mi pistola. Los dos andábamos armados. Nos quedamos viendo, me miraba mi mariconera, estábamos midiendo nuestras reacciones. Al final decidió bajarse del bus. Nos vemos, cuídate. Pero ya no volvimos a vernos. Eran momentos difíciles, después de la ruptura, los que se quedaron en el ERP nos andaban buscando para cohetearnos, nos andaban cazando a los de la naciente RN.