Los que sostuvieron la bandera roja en El Salvador…
Entrevista con Domingo Santacruz (segunda parte)
En convención del FMLN
“En 1933 el santaneco Daniel Castaneda, el Viejo Pío, asume la presencia como Partido Comunista. En 1934 otro santaneco, Virgilio Guerra (1904-1982) se le une a este esfuerzo. En esos mismos años aparece Miguel Mármol activando en Usulutan, Modesto Ramírez, Segundo Ramírez. Y todos los que sobrevivieron a la masacre de 1932.”
Daniel Castaneda, (1906-2002) de oficio sastre, fue secretario general del Partido Comunista de El Salvador, PCS. Fue sustituido en el V Congreso de 1964 por Salvador Cayetano Carpio.
“Y hay que señalar la contribución al proceso revolucionario por muchas décadas del intelectual revolucionario, abogado Miguel Ángel Vásquez, ((circa 1904-1990) quien participó junto con otro abogado, Moisés Castro y Morales en la fundación el 1 de mayo de 1925 del partido Comunista de Centro América en la ciudad de Guatemala, donde estaban exilados. Ellos fueron luchadores desde la década del veinte del siglo pasado.
Miguel Ángel Vásquez luego se exila en México y vivió allá por cuarenta años, era el director del Fondo de Cultura Popular. Muere en la ciudad de México a principios de los noventa.
Moisés Castro y Morales es originario de Chalchuapa pero vivió mucho tiempo en Usulutan. Fue profesor de la Universidad Popular en los años veinte y fundador del Partido Comunista de El Salvador el 30 de marzo de 1930.Muere en 1982 exilado en San José, Costa Rica.
Luis Felipe Recinos, que apoyo al laborista Araujo, anduvo con Alberto Masferrer y fundó a finales de los años veinte el Partido del Proletariado Salvadoreño. En 1921 participó en México en la creación de la Confederación General de Trabajadores.
Hasta Alfonso Rochac que luego fue ministro, se acercaba a los círculos obreros y fue profesor de la Universidad Popular.
El Dr. Salvador Ricardo Merlos, luchador demócrata de muchas décadas. Desde los años veinte hasta la lucha contra el dictador José María Lemus a principios de los años 60.
Y hubo internacionalistas como el mexicano Jorge Fernández Anaya, que era del Partido Comunista Mexicano y del Buró del Caribe de la Internacional Comunista, y a quien pude conocer en México y que jugó un papel destacado en los momentos iniciales del movimiento comunista salvadoreño.
Una vez hicimos un esfuerzo por recoger y sistematizar la experiencia revolucionaria de tres comunistas históricos salvadoreños bajo la orientación de un historiador soviético de nombre Serguei Semionov, que investigaba las luchas iniciales de los comunistas salvadoreños. Lo conocí en la reunión de la OLAS en 1967 en La Habana.
“Ya estando en Moscú los tres instalados surgieron diferencias sobre la metodología a utilizar. Mármol quería escribir una historia a partir del periodo precolombino. Al final no se realizó el proyecto y los tres regresaron a El Salvador. Estoy hablando de Miguel Mármol, Daniel Castaneda y Virgilio Guerra.”
Ingreso en 1964 al Partido Comunista de El Salvador
En 1962 conocí a Carpio. En 1964 nos propone a Pedro mi hermano y a mi que nos organizáramos en el Partido. Ingreso al Partido el 15 de mayo de 1964. Fui juramentado por Virgilio Guerra que era el responsable de la célula. Asumí el peudònimo de Nelson. La reunión fue en el garaje de una casa de esquina entre la 13 Av. Sur y la Calle Gerardo Barrios. La célula a la que me integre se llamaba Julius Fucik.
Otros miembros eran Roberto El Pichón Cea; Darío David Chumbulun Torres, que era sobrino de Lidia Torres Díaz; y el poeta y periodista Santiago Chanti Castellanos, que fue después asistente de Schafik.
Este Chumbulun fue parte de un grupo grande de militantes que fueron a entrenar a Cuba. Fue el segundo destacamento. Eran bastantes…65 compañeros. En el primero habían participado Blas Escamilla, Manlio Argueta, Jorge Arias Gómez, era un grupo más reducido. Les toco estar allá para la crisis de los misiles en octubre de 1962.
“Para esa época el FUAR estaba ya desapareciendo. Solo quedábamos los más curtidos. En agosto de ese año 1964 despedimos a los compañeros Alfredo y Julio, que se iban a estudiar a la Unión Soviética. El Movimiento Revolucionario 2 de Abril todavía existía pero de 225 miembros que llegamos a tener habíamos bajado a 100. Estaba todavía el PRAM con Roberto Carìas Delgado, con Pedro Mancìa Cerritos, y otros.”
“Como célula apoyábamos a la parte sindical, establecíamos contacto con trabajadores de fábricas, personalmente visite varias fábricas…de sacos, dulces, talleres mecánicos. En ese año me volví empresario y puse un negocio de relojería y joyería, me iba bastante bien. El negocio quedaba en el Mercado de san Miguelito. Allí me buscaban bastantes compañeros. A muchos los invitaba a almorzar.”
“Allí llegaba Carpio. El era semiclandestino. Hablaba en los mítines y llegaba a los locales sindicales. Lo visite muchas veces en su casa, en los diversos sitios donde vivió. En la Colonia Ferrocarril, en la Zacamil, en la Santa Ursula. Éramos amigos. El llegaba a la FUSS que se creo bajo su conducción en octubre de 1965.”
“En el FUAR fui responsable de la comisión de organización y esto me permitió conocer el trabajo de las demás comisiones y visitar las columnas. Schafik era el coordinador general. Tula Alvarenga coordinaba la Columna de Mujeres. Mario Moreira, la Columna estudiantil. Mario Medrano, la magisterial. Rafael Aguiñada, la Columna 9 de Mayo, en la que participaban Rafael Lizan, Tirso Canales y otros. Mario Aguiñada, la Columna Juvenil, junto con Armando Herrera, Dagoberto Sosa, Abel Cuenca (que esta en Suecia y es primo de Lucio) y otros. Blas Escamilla, la Columna Obrera.”
1966: en el Comité Departamental de San Salvador del PCS
“A principios de 1966 asisto a una asamblea departamental del PCS y soy electo para integrar el Comité Departamental. También eligieron a Tirso Canales, y a Roberto Armijo. La reunión se celebró en una finca al norte de Cojutepeque. Rafael Aguiñada presidió la reunión. Asumo el cargo de responsable de Organización. Es el área en la que sobresalía. Me dedique a la atención de células, al crecimiento orgánico del Partido…”
“Ese mismo año fui seleccionado para asistir a las celebraciones del 13 aniversario del ataque al Cuartel Moncada, en Cuba. Para estar en La Habana el 26 de Julio representando al PCS. Viaje solo hacia México y allí seguí las instrucciones dadas por Raúl Castellanos: decir un santo y seña en el hemiciclo de Benito Juárez a las 11 de la noche determinado día de julio. Funciono.”
“Y salimos para Paris. Viajábamos tres. Salvador Moncada y Héctor Oquelì Colindres, viajaban a la 4ta. Asamblea de la OCLAE. Conocía a Salvador porque junto con El Peche, Alfredo Castro Quezada, Roberto Vargas y Salvador Linares eran de la célula universitaria Frank Paìz. De Paris viajamos a Praga. Allí estuvimos una semana. Estuvimos platicando con Roque Dalton y Jorge Arias Gómez. Estaba también Miguel Mármol haciendo el libro de su vida, trabajando con Roque. Luego en un Britannia hicimos 23 horas de vuelo hacia La Habana, pasando cerca del Polo Norte.”
“Me impactó mucho el avance del proceso revolucionario cubano. Observar el socialismo en la práctica. Los cambios en la economía. Pude conocer la situación de las provincias. Pude hablar con mucha gente sobre el significado de la responsabilidad del poder. Me entusiasmaba ver el espíritu de entrega a la construcción del socialismo…”
“Visite los hospitales, para ver como habían cambiado y como se diferenciaban de los de nuestros países, que yo conocía. Y fue muy agradable verificar los cambios. Se iniciaba a aplicar el enfoque preventivo. Y había una formación acelerada de cuadros de la salud, de médicos. Estuve dos semanas en la isla. Regrese como vine, Paris, Praga, Panamá, y allí me detienen y me interrogan. Regreso por Honduras.”
“Al regresar al país me integro al esfuerzo del PAR-Nueva Línea, que era un partido opositor credo en los años cincuenta por el Coronel Ascensio Menéndez. Militar antimartinista. Fuimos a platicar con él, vivía en una finca ubicada en una loma, después del mirador de los Planes de Renderos. Me acuerdo que le decían “Cabro Loco.”
“En la directiva del PAR-Nueva Línea estaba Raúl (Castellanos) Schafik (Handal) y Rafael (Aguiñada). Rafael era el responsable político de este esfuerzo. Yo los apoye en el área de organización. El local del PAR estaba frente al Cine Magestic, donde hoy venden piñatas.”
“Fue en esa dirección que un día recibí un telegrama a mi nombre, desde La Habana, en la que los cubanos nos pedían realizar actos de protesta contra los bombardeos norteamericanos a Vietnam, a Hanoi. Inmediatamente fui a enseñárselo a Schafik y nos incorporamos a esta denuncia internacional.”
La campaña del PAR-Nueva Línea
“El esfuerzo político que como PAR realizamos fue muy grande. Llevamos a Fabio Castillo Figueroa como candidato a la Presidencia. Recorrimos todo el país educando, movilizando, organizando. Schafik acompañó toda la campaña. Lo acompañaron como seguridad Pedro Santacruz y Alejandro “Chiricuto” Montano, que vive en Estados Unidos. Fue una campaña muy intensa. Con Fabio nos echamos todo Morazán, que ya yo conocía. Al final logramos sacar 27,000 votos.”
“Como candidato a alcalde de San Salvador llevamos al Dr. Napoleón Rodríguez Ruiz, el papá de Pepe, que le decían “Pistola Cuta” por su baja estatura. Había que llevar una grada para que hablara en las tribunas. A este esfuerzo se unieron muchas personalidades democráticas cercanas al Partido, como José María Méndez padre, el oftalmólogo Roberto Bracamonte y otros.”
“Fabio era muy entusiasta, a la vez que obstinado. Al principio tuvo dificultades para comunicarse por su forma de hablar pausada, reflexiva. Se le puso a la par a Farid Handal para que complementara. Farid hablaba de sobarle el lomo a la bestia…Luego Fabio aprendió y se soltó a hablar y lo hacía muy bien. Se ganó el cariño de la gente…”
“Hay que señalar que con la participación de la izquierda, del Partido en esta campaña del PAR se logro disputarle al Partido Demócrata Cristiano la influencia que había adquirido por el vacío que habíamos dejado en este espacio político electoral. Establecimos vínculos con miles de personas y se incorporaron decenas de cuadros nuevos a la lucha.”
Estuve en 1967 en la reunión de la OLAS
“En 1967 me eligen en el Partido para participar en Cuba en la reunión de la Organización Latinoamericana de Solidaridad, OLAS. Y se decide también enviarme a estudiar a la Unión Soviética, a la Escuela Internacional de Ciencias Sociales en Moscú. Iba a conocer la patria de Lenin, el país de los soviets…”
“En ese tiempo existía un esfuerzo de los cubanos por incidir en el pensamiento revolucionario latinoamericano y empujarlo hacia el apoyo a la lucha armada. Cuestionaban fuertemente la llamada vía pacífica, impulsada por el Partido Comunista de la Unión Soviética, el PCUS. Muchos militantes que iban a estudiar a Moscú regresaban imbuidos con ese pensamiento pacifista, gradualista.”
“Por otra parte, los miembros del Movimiento 26 de Julio, al interior del Partido Unificado de la Revolución Socialista, PURS, que así se llamaba en aquel momento la vanguardia revolucionaria cubana, consideraban la línea de la lucha armada como la única forma de lucha para alcanzar el poder, para tomar el poder.”
“Y había una efervescencia latinoamericana alrededor de la lucha armada que se expresaba en Guatemala con las FAR, con Yon Sosa levantándose en 1962; en Brasil con Carlos Mariguela; en Venezuela con Douglas Bravo y el FLN, en Colombia con las FARC y el ELN; en México con Lucio Cabañas y así en cada país.”
“El libro del francés Regis Debray Revolución en la revolución criticaba fuertemente a los partidos comunistas latinoamericanos, partidarios de la llamada vía pacífica. Hubo declaraciones fuertes de Fidel Castro en contra del Partido Comunista de Venezuela, de Farìas. “
“Es en este marco de debate de ideas que se celebró en marzo-abril de 1966 la Conferencia Tricontinental en La Habana, con delegados de Asia, África y América latina. Nuestro delegado como PCS a esa reunión fue Jorge Arias Gómez. En esta reunión se acordó convocar para julio de 1967 y constituir el capítulo latinoamericano. Se invitó de manera amplia a todas las organizaciones revolucionarias del continente sin descuidar a los partidos comunistas.”
“En nuestro caso decidimos enviar una delegación amplia. Fuimos el único país donde no encontraron otra fuerza política más que el PCS. Integramos una delegación con AGEUS, el PRAM, la FUSS, la JCS y el PCS. Fue una gran experiencia. Un evento muy grande. En una gran sala de conferencias. Con cerca de 800 delegados de todo el mundo aunque la reunión era latinoamericana. Salió la noticia en la revista Bohemia. En la reunión utilice el pseudónimo de Raúl Recinos.”
“Allí conocimos al ruso Serguei Semionov. Al periodista mexicano Mario Menéndez, director de la revista Por esto, que después entrevisto a Cayetano Carpio. También conocimos al periodista español Domingo Lavin, de la revista Siempre. Eran muy interesantes los talleres, conferencias, mesas redondas, debates, etc.”
“Estuvieron participando en la OLAS los cubanos Armando Hart y Osmany Cienfuegos, el uruguayo Rodney Arismendi, el colombiano Gilberto Vieira, el mexicano Arnoldo Martínez Verdugo. Hubo en la reunión muchas consignas. Había una fogosidad tremenda. ¿Estaban las condiciones maduras para la revolución en América Latina? La experiencia del Che en Bolivia nos arroja una evidencia muy significativa.”
“Nosotros decidimos no obstante tener serias diferencias no pelearnos con los cubanos, sino reconocer sus esfuerzos. Y reconocer la perdida de la mística revolucionaria en muchos de nuestros partidos comunistas. Fuimos cuidadosos que nuestras valoraciones no fueran a afectar nuestras relaciones con los revolucionarios cubanos. Schafik jugó un importante papel en esto.”
“En nuestra delegación fueron Mauro Américo Araujo, representando a la JCS, de la cual era coordinador en Moscú donde estaba estudiando; Domingo Mira y Renan Rodas Lazo, representando al PRAM, Federico Baires y Salvador Menéndez Linares representando a AGEUS; Américo Duran conocido como Pelo Pincho, que trabajaba en la UES, representando a la FUSS, y Schafik y yo como PCS.”
“Como hecho curioso fue que durante este encuentro aparecieron en Granma unas declaraciones del escritor Álvaro Menéndez Leal, que supuestamente se encontraba en Cuba, aunque no venía en la delegación en las que criticaba a los partidos comunistas por ser “obstáculos para la revolución.”
Hacia la Unión Soviética…
Al terminar la OLAS salimos con Schafik rumbo a Moscú. En un Iliushin en un vuelo que pasaba por el Polo Norte, fueron 14 horas hasta Murmansk, luego hacia la capital soviética. Estuve estudiando por casi tres años, de julio del 67 a enero del 70. El curso duraba dos años pero me quede otros seis meses para una especialización en aspectos organizativos y experiencias de trabajo clandestino. Me interesaba la experiencia del trabajo de la resistencia soviética a los nazis.”
“Allá fui a encontrarme con otros salvadoreños. Raúl Vargas estaba por dos años también. Emma Guadalupe Carpio por seis meses; Mario Aguiñada por un año. Éramos diez los estudiantes salvadoreños. El responsable era Mario Aguiñada, que era ya miembro de la Comisión Política. Al venirse él yo asumí esa responsabilidad.”
“Regrese a El Salvador en enero de 1970 en plena crisis interna. Allá llegaron los documentos de este debate e hicimos comentarios y críticas. Llegaron tanto Schafik como Cayetano. También llegaba Raúl, y daba conferencias magistrales a todos los estudiantes. Era muy pausado para hablar lo que ayudaba a la traducción simultanea…”