Unicornio azul

Unicornio azul
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Por Marvin Galeas * Miércoles, 27 de Noviembre de 2013

Una de las más hermosas canciones de Silvio Rodríguez y quizá de las mejores escritas en lengua hispana en las últimas décadas es “Unicornio azul”. La primera vez que yo la escuché no fue precisamente en voz del cantautor cubano, sino cantada por Claudio Armijo, que fusil terciado y guitarra en mano la cantaba con un sentimiento que bordeaba las lágrimas. Era el año de 1982, año duro de la guerra. Un copioso invierno anegaba los montes y las almas.

Chico, seudónimo del primer hijo del poeta Roberto Armijo, era uno de los principales comandantes de campo de la guerrilla. Se había destacado en los difíciles frentes de guerra de San Vicente y Guazapa. Pero en los primeros meses de 1982 fue llamado a Morazán para junto a Jorge Meléndez, y Juan Ramón Medrano conducir la campaña militar “Comandante Gonzalo”, la que terminó siendo una de las más complejas y exitosas operaciones de las fuerzas guerrilleras.

Pero ese mediodía, para mí la hora más melancólica del día, no sé por qué, Claudio Armijo, no parecía un guerrero, sino un trovador con el corazón roto. Y no era para menos, hacía sólo unas semanas, en hechos separados, su mamá había sido secuestrada y su entrañable hermano Manlio, de seudónimo Juan, había muerto combatiendo a las fuerzas élites del batallón Cobra en Tegucigalpa.

“Mi unicornio azul ayer se me perdió/ pastando lo dejé y desapareció/ cualquier información/ bien la voy a pagar/ las flores que dejó, no me han querido hablar…” Cantaba el espigado y miope comandante rasgando la guitarra y desgarrando la voz. Su único público era yo, que lo escuchaba asombrado por el sentimiento que ponía en cada sílaba y sabiendo, claramente, que se refería a la pérdida de un ser amado, en este caso dos.

Manlio, el segundo hijo del poeta, Armijo, era el más irreverente de todos los guerrilleros. Pero uno de los más osados. Es famoso a nivel mundial el afiche donde se eternizó apostado en una esquina de San Salvador, disparando a la Guardia Nacional con una subametralladora UZI. Tenía 21 cuando perdió la vida. Y ese mediodía Claudio, su hermano, lo recordaba: “Mi unicornio azul ayer se me perdió/ no sé si se me fue/ no sé si se extravió/ y yo no tengo más que un unicornio azul”.

Y luego quizá pensando en su madre desaparecida en ese momento decía “si alguien sabe de él/ le ruego información/ cien mil o un millón yo pagaré/ mi unicornio azul, se me ha perdido ayer, se fue…” Pero en las guerras nadie puede permitirse el lujo del dolor por la pérdida de un ser querido por mucho tiempo. Porque eso ocurre a cada momento y porque el espíritu no puede ni debe flaquear o por lo menos hay que luchar contra ese sentimiento.

Después de terminar la canción cantando con especial énfasis la parte que dice: Mi unicornio y yo hicimos amistad/ un poco con amor/ un poco con verdad/ con su cuerno de añil pescaba una canción/ saberla compartir era su vocación”, Claudio me miró con profunda tristeza.

Puso la guitarra a un lado y, fusil en mano, se fue a estudiar junto a otros comandantes los mapas que dibujaban los escenarios donde se librarían las próximas sangrientas batallas. He escuchado decenas de explicaciones sobre la canción “Unicornio azul”. Desde una, creo que es la más certera, que habla sobre la amistad entre Silvio y Roque Dalton, hasta algunas que se refieren a la pérdida de un bolígrafo o un capotasto azules.

Para mí que se refiere al dolor que provoca una pérdida más profunda: Una muerte, marcharse de la patria, una casa que se deja, un hijo que se va, un amor de pareja que se rompe. Los últimos versos de la canción son un escándalo de imágenes en ese sentido: “Mi unicornio azul ayer se me perdió/ y puede parecer acaso una obsesión/ pero no tengo más que un unicornio azul/ y aunque tuviera dos/ yo sólo quiero aquel/ cualquier información la pagaré/ mi unicornio azul se me ha perdido ayer/ se fue…

Samir Amin: “Por su lógica interna, la acumulación capitalista a escala mundial es polarizante”

20 de septiembre de 2010
Samir Amin: “Por su lógica interna, la acumulación capitalista a escala mundial es polarizante”
Durante el pasado mes de marzo, el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México organizó el Seminario Internacional “Las alternativas democráticas y el mundo actual”, entre cuyos asistentes se destacó la presencia del economista Samir Amin (1931). De origen egipcio, Amin a dedicado gran parte de su obra al estudio de las relaciones entre los países desarrollados y los subdesarrollados. Crítico implacable del comunismo estalinista, lo es también de la globalización capitalista. Al primero lo acusa de no haber llegado nunca a ser un sistema socialista y de establecer a un nuevo tipo de burguesía burocrática en el poder. A la segunda le achaca la generación de la mayor desigualdad entre países ricos y pobres que registra la historia de la humanidad. Amin sostiene que la contradicción centro/periferia es inmanente al desarrollo del sistema capitalista mundial y que, así como el capitalismo nació en la periferia de las grandes civilizaciones, el socialismo será posible a escala mundial sólo a condición de una revolución en la periferia del capitalismo. Graduado en París en Ciencias Políticas, Estadística y Economía, es autor de una extensa obra que comprende, entre muchos otros ensayos, a “L’accumulation à l’échelle mondiale” (La acumulación a escala mundial), “L’échange inégal et la loi de la valeur” (El intercambio desigual y la ley del valor), “L’impérialisme et le développement inégal” (El imperialismo y el desarrollo desigual), “La loi de la valeur et le matérialisme historique” (La ley del valor y el materialismo histórico), “La gestion capitaliste de la crise” (La gestión capitalista de la crisis) y “Les défis de la mondialisation” (Los desafíos de la mundialización). Estando en la Ciudad de México, el autor concedió la siguiente entrevista al economista mexicano José Gandarilla Salgado, a la politóloga argentina Karina Moreno y al politólogo italiano Massimo Modonesi:

En su interpretación ¿Cómo estudiar hoy el capitalismo, qué se mantiene vigente de la crítica de la Economía Política y del materialismo histórico, y qué habría necesidad de repensar?

Se trata de una cuestión compleja, que cubre muchas dimensiones del problema. En primer lugar, y no soy el único en pensarlo, el capitalismo es un sistema mundial. El análisis del capitalismo como sistema mundial no se puede reducir al análisis del modo de producción capitalista como modo de producción abstracto, del cual se puede suponer simplemente la extensión geográfica a todo el mundo. El concepto de modo de producción sigue siendo fundamental pero el concepto de capitalismo como sistema mundial es distinto. Este es un punto de partida metodológico muy importante porque en el análisis o en las pretensiones analíticas de la economía dominante, y también desgraciadamente en muchos análisis del capitalismo que se reivindican del marxismo, está presente una confusión entre estos dos niveles, o por lo menos la separación de ambos conceptos no está hecha en términos suficientemente claros. En segundo lugar, si analizamos el capitalismo como sistema mundial, creo que podemos estar de acuerdo en la existencia de un modo de producción capitalista y que, a este nivel de abstracción, el análisis de Marx en “El Capital” es, no solamente primordial, sino que el mismo no ha sido superado. Cabe enfatizar que este análisis sigue siendo fundamental y válido para el capitalismo en todas las etapas de su desarrollo, prescindiendo de las novedades surgidas entre una etapa y la otra. Sin embargo, al observar al capitalismo como sistema mundial constataremos que es un sistema mundial polarizado, en el sentido que ha generado una desigualdad sin precedentes en la historia de la humanidad. En tiempos de la Revolución Industrial la relación de la productividad media anual por familias (las cuales eran en un 80 a un 90% rurales), mostraba una diferencia muy reducida, según varias estadísticas era una relación de 1 a 1.3, una distancia sin importancia, con un 30% de diferencia máxima. Esta distancia creció con el transcurrir de los siglos hasta llegar actualmente a una relación de 1 a 60. Un fenómeno gigantesco, probablemente el hecho social e histórico más impresionante de la historia de la humanidad. A pesar de esto, la economía dominante no se interesa por este hecho y desgraciadamente la economía marxista no le ha reconocido la centralidad que merece. Un hecho de tal amplitud es inmanente a la expansión mundial del capitalismo, no es un producto de la coyuntura, de especificidades concretas locales que de por sí existen. Por su lógica interna, la acumulación capitalista a escala mundial es polarizante. Creo que la razón por la cual es polarizante es muy sencilla de entender. Si observamos el capitalismo como modo de producción, el concepto implica en una zona geográfica cualquiera, que podemos llamar Estado, una integración del mercado en sus tres dimensiones: mercado de las producciones, del trabajo y del capital. Por otro lado, un análisis del capitalismo como sistema mundial nos mostrará que la tendencia a la integración es creciente. Como mercado de los productos, comenzó con las materias primas y después se extendió a los productos terminados, mientras que hoy es evidente una tendencia a la integración de los mercados de capitales. Pero esto no vale para el trabajo, las fronteras continúan existiendo, y los mexicanos lo saben bien, el Río Grande existe. Pienso que un mercado integrado del capital sin un mercado integrado del trabajo produce la polarización. Podríamos demostrarlo en forma muy sencilla. Dicho esto, es necesario analizar el capitalismo como sistema mundial más en detalle. Examinar las distintas fases sucesivas de esta polarización centro/periferia (que se puede nombrar norte/sur, desarrollo/subdesarrollo, primer mundo/tercer mundo, es simplemente una cuestión de vocabulario). Hay que observar el capitalismo fase por fase, cada una con sus características, las cuales dependen principalmente de las relaciones sociales, en los países del centro como en los países de la periferia, con las variantes existentes en cada uno de ellos. Debemos partir de estas relaciones sociales y ver como se articulan con la ley de la expansión mundial del capital y cómo ésta entra en contradicción con las especificidades de las formaciones sociales de los centros y de las periferias en cada una de esas fases. Finalmente, definir cada una de esas fases en función de las características dominantes de esas relaciones sociales. No estoy hablando del desarrollo tecnológico, aunque no niego su relevancia, pero la mayor parte de los análisis de la historia del capitalismo arrancan del desarrollo de la tecnología como si se desarrollara en forma autónoma, como producto de la ciencia, y determinase un tipo de desarrollo de las relaciones sociales. Por el contrario, parto de las relaciones sociales y después observo cómo el desarrollo tecnológico se inserta en ellas, las modela y se ajusta al desarrollo de las mismas. De esta historia del capitalismo, sobre la cual podríamos discutir mucho, tomaré solamente la anteúltima etapa, la que comienza en la segunda posguerra, la etapa abierta por la doble derrota del fascismo y del colonialismo, del viejo colonialismo que negaba la independencia a los pueblos de Africa y de Asia, sin negar la importancia de las rupturas revolucionarias en Rusia, en China y en otros países. Desde ese momento se abre una fase que durará alrededor de medio siglo, de 1945 a 1990, si queremos poner fechas precisas. Esta fase se caracterizó, en los países del centro capitalista desarrollado, por una relación capital-trabajo relativamente menos desfavorable al trabajo como nunca en la historia del capitalismo. Si queremos utilizar una terminología italiana, por un “compromiso histórico” entre capital y trabajo que fue la base objetiva del “estado de bienestar” en occidente. Tenemos después una segunda familia de compromisos históricos en los países del socialismo realmente existente, y un tercer grupo resultado de los movimientos de liberación nacional en Africa y en Asia, mientras en América Latina, que era formalmente independiente, el desarrollismo y el populismo. Se trataba de formas sociales seguramente contradictorias y conflictivas, pero también fundadas sobre ciertos equilibrios. Esta página ya ha sido dada vuelta, aunque no por la caída del Muro de Berlín o por el fin de la Guerra Fría, sino por la erosión gradual de los tres modelos: el modelo soviético, el estado de bienestar y los modelos nacional-populistas de las periferias africanas, asiáticas y latinoamericanas. Esta erosión ha conducido a un desequilibrio en la correlación de fuerzas sociales a favor del capital en todas las regiones del mundo y ha permitido crear las condiciones de la ola neoliberal en la cual nos encontramos.

Volviendo a la última parte de la primera pregunta, que de suyo abre todo un panorama. Pensando en la necesidad (en términos metodológicos y epistemológicos) de reafirmar un pensamiento crítico (incluso de pensar a la economía muy ligada a la ética), en su opinión, ¿cuáles serían las exigencias que debiera cubrir este tipo de pensamiento?

Esta pregunta es todavía más compleja que la primera y plantea varias cuestiones simultáneamente. No voy a poder responder a todos los puntos, voy a escoger solamente algunos. Es necesario distinguir desde el punto de vista epistemológico las Ciencias Naturales de las Ciencias Sociales, del pensamiento social para decirlo en forma más correcta. Para simplificar, en las Ciencias Naturales la naturaleza es el objeto de observación, en las Ciencias Sociales el objeto, la sociedad humana, es al mismo tiempo el sujeto de su propia historia, es un nivel social totalmente distinto. De cualquier manera, sostengo que es necesaria una actitud científica en relación a ese objeto que es también sujeto; no un discurso ético o ideológico sin relación con la realidad, sino un análisis lo más científico posible. En este análisis, creo que estamos frente a una realidad y creo que podemos llamarla capitalista sin equivocarnos, con un determinado número de características fundamentales, que el modo de producción sea el eje central, así como fue analizado históricamente por Marx, o sea el capitalismo como sistema mundial, como he intentado describirlo rápidamente antes. ¿Cómo analizar esta realidad? ¿Cuáles son los instrumentos y por qué escogerlos entre otros? Observamos cómo el pensamiento burgués analiza esa realidad, no sólo la economía, sino el conjunto constituido por la visión filosófica, social, ideológica, política y económica. Para hacerlo hay que remitirse a Adam Smith, que es el fundador del pensamiento burgués moderno, o mejor dicho, el que reunió en forma coherente los fragmentos que circulaban en la época. Adam Smith avanza en la hipótesis, que no es formulada en términos de hipótesis sino de convicción, que existe una convergencia natural, y la palabra natural es suya no mía, entre el mercado y la democracia. El mercado no es visto como autorregulado, como pretende el liberalismo vulgar, sino mediante una regulación estatal que cree las condiciones para una respuesta socialmente aceptada a la expresión de las necesidades. La democracia sería un conjunto de derechos, procedimientos e instituciones a disposición del ciudadano y en la época de Adam Smith, sólo los propietarios eran ciudadanos. La expresión libre de esos ciudadanos tenía que refrendar los resultados del mercado, no había contradicción entre los dos, sino una convergencia paralela. Esta concepción lleva a vaciar de todo contenido el concepto de democracia, porque no hay más capacidad de innovar, que es mi definición de democracia, sino una democracia de baja intensidad que no sirve para nada. Esta visión tiene la pretensión de explicar la nueva realidad del capitalismo y al mismo tiempo la presenta como el fin de la historia; las Luces y la Revolución Francesa establecieron el reino de la razón y si se ha llegado al reino de la razón, la historia no es más que un desarrollo lineal en un cuadro definido. El producto de esto es una teoría económica que es una teoría de la no realidad, del capitalismo imaginario, o sea, del mercado funcionando según esta lógica, esta racionalidad. Por otra parte, los gerentes del sistema, sean los capitalistas, los empresarios o el Estado que toma las decisiones en interés colectivo de esa clase, están sumergidos en la realidad, no en un mundo imaginario. Existe entonces una práctica y la teoría está destinada a legitimarla. Creo que lo que llamamos economía pura es el ejemplo extremo de esa situación. La economía pura es la teoría de una realidad no existente, muy útil porque siendo una teoría de la no realidad permite legitimar cualquier elección pragmática de la gestión del capitalismo realmente existente. En ese sentido y lo digo en “Critique de l’air du temps” (Crítica de nuestro tiempo) digo que el economista puro es al sistema y al poder capitalista lo que es el brujo para el rey. ¿Cuál era su papel? El brujo tenía que adivinar lo que el rey quería hacer, después tenía que hacer cosas raras para decirle al rey lo que tenía que hacer, en realidad, lo que quería hacer, para dar así a la acción del rey legitimidad a los ojos del pueblo. En realidad, no es el brujo quien dicta al rey, sino el rey quien dicta al brujo, y el brujo legitima. El economista hace la misma cosa: es eficaz para el sistema si adivina qué es lo que el sistema necesita y lo legitima. Usa por otra parte, métodos similares como por ejemplo el lenguaje incomprensible, etcétera. Creo que es importante hacer una crítica del pensamiento burgués. En muchos casos, también la izquierda se deja impresionar por la economía liberal que proporciona, por cierto, algunos elementos de la realidad, pero no hacer otra cosa que legitimar los intereses dominantes y sus políticas. Este fenómeno estaba presente también en el socialismo realmente existente, en donde teníamos un discurso sobre la realidad imaginaria, el socialismo, y una práctica de la gestión de la sociedad. El discurso ideológico era usado como discurso de legitimación de la práctica. Espero que se tome conciencia de esto y se intente superarlo, de hacer un análisis del mundo realmente existente. En esta tarea sigo considerándome marxista; pienso que los instrumentos del materialismo histórico siguen siendo muy útiles, pero no necesariamente los del marxismo “histórico”, o sea, el marxismo como fue entendido o puesto en práctica por todas las fuerzas que se han inspirado en él.

En su momento, usted avanzó en la crítica del eurocentrismo, del desarrollismo. Ahora pareciera necesario avanzar en la crítica de los conceptos ordenadores del discurso occidental, su concepto de modernidad, de progreso, de desarrollo, incluso de una recuperación de la dimensión histórica. ¿Cómo observa esta dimensión del pensamiento crítico, necesaria más que nunca en esta época y pensando desde el tercer mundo?

A mi parecer, la modernidad es el momento en donde se proclama que la humanidad hace su propia historia; entonces se atribuye el derecho de innovar, de inventar, se da el derecho a una imaginación creadora en todos los ámbitos. Esta es una idea nueva, una idea moderna. Todas las sociedades, entre el 1500 y el 1800 y en la sociedad medieval europea, la islámica, la de la China confusiana, los aztecas, etcétera, tenían diferencias pero una cosa en común: la creencia, la proclamación de que el orden social formaba parte del orden natural, de un orden cósmico generalmente asociado a una forma religiosa o a una creencia metafísica, y que el ser humano o la sociedad no tenía que inventar sino obedecer a las leyes dictadas por ese orden cósmico. Bien entendido, en realidad la tradición en cuestión tenía que ser constantemente reinterpretada porque la sociedad, a pesar de todo, cambiaba. La modernidad es el momento de ruptura con todo esto, ruptura que, por razones históricas, se desarrolló en una región del mundo en un momento de la historia: en la Europa Occidental. Se expresó claramente en las Luces europeas, con las raíces mediterráneas precedentes, en tres países, Inglaterra, Países Bajos y Francia, entre 1600 y 1800. No es un caso que sea concomitante con el nacimiento del capitalismo. Cuando el capitalismo se vuelve un sistema mundial, esta nueva cultura que llamamos modernidad se vuelve mundial. Sostengo entonces que esta cultura mundial, este nuevo universalismo, no es occidental sino capitalista. Sus características fundamentales no se entienden con relación a las especificidades europeas sino con relación a las especificidades del capitalismo; no tiene nada que ver con los europeos. Habría que usar la expresión dominación de la cultura capitalista en lugar de la cultura occidental. A causa de la polarización que produce la expansión mundial del capitalismo, la expansión de esta cultura está en crisis permanente, promete a todos pero distribuye siempre en forma cada vez más desigual, creando fenómenos de rechazo, de insatisfacción. Este rechazo se expresa contra el Occidente cuando debería hacerlo contra el capitalismo. Por otra parte, los mismos europeos reconstruyen su propia historia como una historia imaginaria que borra la especificidad capitalista de esta modernidad, inventando una historia lineal a partir del antepasado mítico griego y de la especificidad del cristianismo, asegurando que esta modernidad podía solamente ser creada en Europa. La afirmación eurocentrista provoca un rechazo hacia el Occidente, cayendo en el culturalismo: también los otros construyen sus líneas imaginarias, empezando en la prehistoria china, en la prehistoria de los pueblos semitas, los árabes y los indios de América podrían hacer lo mismo. Nos encontraríamos en el culturalismo, o sea, la afirmación de culturas con elementos transhistóricos y específicos que suprimirían completamente el universalismo. Una forma vulgar son las comunidades en los Estados Unidos: vivan la comunidades… pero respetando las jerarquías; vivan las especificidades… pero cada quien a su lugar. Tendríamos que cambiar y desplazar el debate hacia el capitalismo mundial y el socialismo mundial, el pasaje a una sociedad mundial sin clases en el nombre de la modernidad, del derecho de inventar, de imaginar, en el nombre de la utopía creadora, de una nueva fase de desarrollo de la modernidad, de superación de la modernidad trunca del capitalismo, de la cultura universal del capitalismo a la cultura universal del comunismo, para llamarlo por su nombre.

En su libro “Los desafíos de la mundialización”, usted afirma que hace veinte años proponía una alianza del Sur con la Socialdemocracia europea, pero esto no funcionó. En el debate del seminario se vuelve a plantear esta hipótesis, ¿piensa que este tipo de alianza sea viable en la actualidad?

En primer lugar, creo que la erosión de los tres sistemas (el modelo soviético, el estado de bienestar y los modelos nacional-populistas) se manifiesta en la crisis real de las ideologías, de las formas de organización de los partidos, de las tradiciones, de la izquierda o de las izquierdas en las tres partes del mundo. Asistimos a la crisis de la socialdemocracia occidental, del comunismo de la Tercera Internacional y del nacional-populismo radical, nacionalista con contenido social, no socialista, aunque algunos se hayan calificado como tales. La socialdemocracia está entonces en crisis y no veo alianzas posibles en la hora actual porque no hay, ni de un lado ni del otro, nuevas fuerzas de izquierda alternativas cristalizadas. No lo digo desde un punto de vista nacionalista del tercer mundo soy un internacionalista pero hasta que alternativas sociales de izquierda no se cristalicen en el Sur como en el Norte, ¿alianzas de quién con quién? Se pueden tener intercambios de opinión, posiblemente acciones comunes sobre puntos comunes, nada más en este momento. Esto quiere decir, en términos prioritarios, construir nuevos sujetos históricos antisistémicos en cada región del mundo.

¿Cuál es su caracterización de la crisis en curso del sistema? Y en este contexto, ¿cómo pensar e iniciar la construcción de una alternativa?

La fase neoliberal, que haríamos mejor en llamar paleoliberal, es la consecuencia de un desequilibrio de las relaciones sociales a favor del capital. En todas partes, a escala mundial, con la caída del socialismo realmente existente, no importa si no era socialista, con la erosión de los proyectos nacional-populistas de desarrollo, con la erosión del estado de bienestar en Occidente, se genera un desequilibrio brutal en un período histórico muy breve, una decena de años (si queremos poner fechas: de 1980 a 1991 para los países del Sur, desde 1975 cuando es rechazado el reclamo de un Nuevo Orden Económico Internacional). Este desequilibrio produce la crisis porque produce un desfase entre la capacidad de producción y la capacidad de consumo de la sociedad y una nueva repartición de la riqueza, tanto a escala mundial como a escala nacional, tan desigual que se crea un excedente de capital que no puede encontrar colocación en la extensión del sistema productivo. Entonces el sistema está amenazado por una crisis profunda que tiene sus manifestaciones permanentes de estancamiento relativo, de desempleo creciente, de pauperización, etcétera. El sistema está entonces obligado a recurrir a la “gestión capitalista de la crisis”, que es el título de uno de mis libros. El capital dominante, el de las trasnacionales el G7, como su expresión política, y sus empleados: el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial (que no son instituciones importantes sino empleados del G7 y del capital dominante) buscan y fabrican salidas alternativas a la ausencia y achicamiento de las colocaciones productivas en la extensión de los mercados especulativos, en los mercados financieros. Pero, para retomar fórmulas de Marx, sin pasar por la esfera de la producción, lo que quiere decir sobre la base de un estancamiento relativo y, entonces, mediante una desigualdad creciente. Creo que los hechos están ahí: asistimos a un estancamiento relativo, a tasas de crecimiento más débiles que durante el período anterior y a una creciente desigualdad en la repartición de la riqueza. Se trata de una espiral que se agrava y que profundiza la crisis en el sentido que crece el plusvalor para el cual debe ser encontrada una salida en el mercado financiero. Entonces el sistema, que es presentado como la victoria definitiva del capitalismo y de la paz, como el fin de la historia, es una gestión de la crisis que profundiza la crisis misma, retardando la solución natural que sería una desvalorización del capital. Pienso que este paréntesis neoliberal se está cerrando; nos acercamos al final de una fase corta, de veinte a veinticinco años como máximo. El final se anuncia por el costado financiero de la mundialización. La crisis del sureste asiático es más que una crisis regional. La reacción de los gobiernos, de las clases dirigentes, de los estados, pone en discusión, en distintos grados, la mundialización financiera, no la mundialización en general, ni el modelo de producción, ni el modelo de consumo. Pero poniendo en discusión la mundialización financiera, empuja al sistema a enfrentarse con aquella desvalorización masiva del capital que vendrá, aunque no podamos saber en qué forma. Este período se está cerrando y, si queremos pensar en términos de alternativas, hay que comenzar por lo que está pasando, no por los desafíos de ayer, ni de anteayer, ni de hoy, sino de las contradicciones que ya se desarrollan y que se agudizarán mañana. Una estrategia de la formulación de las alternativas tiene que partir de estas contradicciones. Mi tesis, o hipótesis, o intuición es que, con el fin de este periodo llamado neoliberal, entramos en una fase doble caracterizada por el crecimiento de los conflictos y de las luchas. Por conflictos me refiero a conflictos entre las clases dirigentes, en su interior, y potencialmente conflictos entre estados. Veo crecer los conflictos entre Estados Unidos y Asia Oriental y del Sur China, India y Corea, etcétera, y otros conflictos. Crecerán también las luchas porque este desastre social generado por la gestión capitalista de la crisis no puede dejar de provocar movimientos, luchas sociales, políticas e ideológicas de todo tipo, con mucha ambigüedad. Luchas de rechazo, algunas positivas, porque siempre es positivo que los trabajadores defiendan su salario y no acepten el argumento por el cual, en nombre de la rentabilidad del capital, habría que aceptar sacrificios. Estos rechazos podrían derivar en ilusiones culturalistas, fundamentalismos religiosos, repliegues etnicistas o de otra naturaleza. Sin embargo, tomando las luchas con potencial progresista, universales o potencialmente universales, aunque no lo sean de hecho -tomo algunos ejemplos que estuvieron presentes en el Anti-Davos: grandes movimientos reales, pero también simbólicos y distintos de los cinco continentes como el MST brasileño, los sindicatos coreanos, las asociaciones campesinas del Burkina Faso, los desempleados franceses y las mujeres canadienses-, ¿cómo se articularán con el crecimiento de los conflictos?, ¿cuáles predominarán?, ¿serán los conflictos de las clases dominantes los que domesticarán las luchas?, ¿las instrumentalizarán para sus estrategias o el crecimiento de las luchas sociales logrará sobreponerse a esos conflictos? No tengo recetas sino algunos principios para pensar algunas alternativas: por ejemplo, debemos aclarar lo que queremos, cuál es nuestro objetivo estratégico. Un mundo policéntrico, con grados de autonomía para los países, las naciones, las regiones, etcétera, que permitan a los pueblos inventar, no solamente sus propias utopías creadoras, sino también sus estrategias y sus etapas, sus contratos sociales, sus compromisos históricos locales, así como las negociaciones para la articulación y la organización de la mundialización coherentemente con estas estrategias. De este proceso nacerá la alternativa, o mejor dicho, las alternativas en plural, así como hemos creado el Foro Mundial de las Alternativas, considerando que las demandas y las situaciones específicas no pueden ser tratadas con una única receta, así como el Banco Mundial ofrece la misma medicina a todos los pacientes por cualquier enfermedad. Este proyecto implica acciones a todos los niveles: local, nacional e internacional; el nivel nacional sigue siendo fundamental porque, se quiera o no, seguirán existiendo Estados por un buen rato, pero no hay que descuidar el nivel mundial, donde se tiene que reconstruir el internacionalismo de los pueblos.

Crece el número de millonarios en Centroamérica y también la desigualdad

Crece el número de millonarios en Centroamérica y también la desigualdad
En seis países de la región hay más de un millar de millonarios
El hambre azota a 7,7 millones de los 43 millones de pobladores de la zona
José Meléndez San José (Costa Rica) 29 SEP 2013 – 01:20 CET

Si el espejo de la desigualdad brilla en América Latina y el Caribe, en Centroamérica reluce con intensidad. Un pequeño grupo de 1.025 millonarios centroamericanos—que equivale al 0.041% de la población regional acumula fortunas por 137.000 millones de dólares, mientras la producción global en la región fue de 172.800 millones en 2012. Son 1.025 personas que se codean con los más ricos de América Latina y que ya suponen el 14.3% de los multimillonarios latinoamericanos.

Con un promedio de 133,6 millones de dólares por cada fortuna, las cifras impactan en una zona en la que la mitad de sus 43 millones de habitantes sobrevive hundida en la pobreza extrema, con severos cuadros de subnutrición. Los datos de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ofrecen una dura realidad: las cifras de hambre en Centroamérica se estancaron en 8 millones de víctimas en el periodo 1999—2001 y aunque entre 2007 y 2009 bajaron a casi 7,4 millones, después aumentaron de nuevo y en el lapso 2010—2012 se incrementaron a 7,7 millones. La previsión es que continúen creciendo.

“La desigualdad es la expresión de la muerte lenta de nuestros pueblos”, advirtió el salvadoreño Benjamín Cuéllar, director del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad de Centroamérica (UCA), de El Salvador. “Los pueblos, independientemente de que se superen guerras o conflictos violentos, mantienen latente la posibilidad de conflictos violentos nuevos”, afirmó en una entrevista con EL PAÍS.

“Es evidente que desigualdad, hambre e inseguridad, sobre todo en el Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, El Salvador y Honduras), hacen que seamos países expulsores de gente que, buscando lo que no encuentra en sus países, se arriesgue a travesías (migratorias) para encontrar un lugar para suplir carencias”, dijo. “Seguimos sin aprender la lección”, opinó Cuéllar al aludir a las guerras civiles que sacudieron Centroamérica de 1960 a 1996 y que estallaron por las profundas injusticias sociales.

Tras recordar que “la inequidad social es uno de los principales problemas históricos de Centroamérica”, la guatemalteca Carmen Rosa Escribano de León, directora ejecutiva Instituto de Enseñanza para el Desarrollo Sostenible de Guatemala, alertó que “la brecha entre ricos y pobres se hace cada vez más grande: hay más pobres, menos ricos y se está estrangulando a la clase media”.

Al destacar que los países de la región con más millonarios están entre los tienen menos impuestos, Escribano declaró a este diario que “la tasa impositiva está repartida y el grueso recae sobre la clase media. Hay históricas familias millonarias que han mantenido privilegios y negocios. Empezaron por tierras, siguieron por banca y ahora pertenecen a grandes consorcios de extracción de bienes primarios, como azúcar”.

En este escenario, el Informe Mundial de la Ultra Riqueza 2012/2013—elaborado por la compañía Wealth X de Singapur, con patrocinio de la sociedad financiera suiza UBS—reveló que Guatemala, con 245, y Honduras, con 215, son los países que cuentan con más millonarios en la zona, seguidos por Nicaragua – con 200 -, El Salvador – con 150 – y Panamá, con 115. La cantidad que acumulan estas fortunas aumentó 9.000 millones de dólares en el último año.

Los cinco países ocupan importantes puestos del ranking de los ricos de América Latina y el Caribe, aunque todos padecen severos escenarios de miseria y marginación social. Los primero lugares de la lista son para Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile, Perú, Venezuela, Ecuador y República Dominicana. Después viene Guatemala (10), Honduras (11), Nicaragua (13), El Salvador (15) y Panamá (17).

Las cifras del informe revelan que, por ejemplo, Guatemala pasó de tener 235 millonarios en 2012 a 245 en 2013, con un capital que aumentó de 28.000 millones de dólares a 30.000 millones. El número de ricos en Guatemala—con una fortuna media individual de 122 millones—equivale al 0.060% de la población del país, estimada en los 14.8 millones de habitantes, en un país con un Producto Interior Bruto (PIB) que sumó 49.895 millones de dólares el año pasado.

Honduras, que con Haití, Nicaragua y Bolivia está entre las naciones con mayores índices de desigualdad y pobreza en el continente, registró un aumento similar: de 205 millonarios en 2012 subió a 215 en 2013 y su fortuna creció en ese periodo de 28.000 millones de dólares a 30.000 millones. El dato de ricos en Honduras—con una media de 139 millones de dólares por cada fortuna y un PIB de 17.968 millones de dólares el año pasado—corresponde al 0.036% de los 7.8 millones de hondureños.

Nicaragua, cuyos ciudadanos se ven obligados a migrar al exterior por la falta de empleo y la crisis socioeconómica, pasó de 190 a 200 millonarios en el periodo evaluado, cuyas fortunas suman 27.000 millones de dólares en una nación con un PIB de 10.507 millones de dólares. De los 5,9 millones de nicaragüenses, 0.029% son millonarios.

En El Salvador, que desde el siglo XIX estuvo bajo control político y económico de una casta de 14 familias que fue germen de una guerra civil de 12 años (1980—1992), el número de ricos aumentó de 145 a 150—equivale al 0.041% de los 6.2 millones de salvadoreños—, con 20.000 millones de dólares de fortuna acumulada. El PIB salvadoreño fue de 23.844 millones de dólares el año pasado.

Panamá ha sido apodado en los últimos como el Singapur o el Dubái de América gracias a su explosión inmobiliaria, comercial, financiera y económica y a una oleada de megaproyectos. El país tiene 115 grandes fortunas que acumulan 16.000 millones de dólares, mientras que el PIB del país en 2012 fue de 36.000 millones de dólares Esas 115 personas representan el 0,031% de la población, con un patrimonio medio de 130 millones de dólares.,

El número de millonarios en Costa Rica, una de las naciones con mayor estabilidad política en América Latina y el Caribe en los últimos 65 años y reconocida por su consolidada democracia, ha pasado en el último año de 85 a 100, quienes representan el 0,047% de la población del país. Sus fortunas suman 14.000 millones de dólares en un país con un PIB de 45.127 millones en 2012.

Aunque en Centroamérica hay un puñado de ricos, explicó Escribano, “el capitalismo ni siquiera está desarrollado. Existe una visión feudal y monopólica comercial, económica y financiera, centrada en familias con incidencia directa en las decisiones gubernamentales: con su poder económico, influyen en las decisiones políticas”.

Viñetas de la oligarquía salvadoreña

Viñetas de la oligarquía salvadoreña
Por Roberto Pineda San Salvador, 20 de noviembre de 2013

El proceso de desarrollo tanto de las clases dominantes como de las subalternas en El Salvador ha estado vinculada a los cambios en los modos de producción, distribución, crédito y comercio internacional, así como a la dependencia estructural de los centros imperiales.

No contamos con la información para valorar el impacto de las oleadas invasores de pueblos nahuas que establecieron el primer sistema de dominación y de explotación en los siglos XII al XV d.n.e. Solo sabemos que los pipiles lograron imponerse militarmente sobre los pueblos lencas, de origen maya, que fueron arrastrados hacia el margen oriental del río Lempa. Caso excepcional son las poblaciones de Jayaque, Talnique y Tamanique que conservaron el final de sus nombres en poton, y quedaron como islas pérdidas en un océano de vocablos nahuat.

Si contamos con alguna información al respecto de la invasión ibérica de principios del siglo XVI y el establecimiento del sistema de encomiendas y repartimientos; del aparecimiento de los grandes latifundios vinculados al cultivo del añil y la ganadería; del saqueo realizado por las fuerzas liberales cafetaleras de la tierras tanto de las comunidades indígenas como de los sectores de ladinos a finales del siglo XIX; del proceso accidentado de industrialización dependiente de lo años sesenta del siglo XX, de la formación de una poderosa oligarquía financiera a finales del siglo pasado, así como de las modificaciones producidas por la compra a mediados de la primera década del siglo XXI, de las principales empresas del país, incluida la banca privada, por capitales transnacionales. Es de estos tres primeros casos que compartimos estas viñetas.

La clase dominante de la primera viñeta esta integrada en el periodo 1524-1550 por los conquistadores en su triple expresión de soldados, comerciantes y religiosos. La de la segunda viñeta esta integrada por los encomenderos que mediante el tributo explotaban a las comunidades indígenas en el siglo XVII-XVIII; y la tercera viñeta describe la creación del primer banco, en el periodo 1860-1880, periodo dominado por los intereses de grandes hacendados añileros e inmigrantes colombianos, europeos y estadounidenses.

Las primeras instituciones coloniales para la explotación del cacao y el bálsamo: la encomienda y el repartimiento.

La ruptura en el sistema económico-social provocada por la conquista española a partir de 1524, la cual concluyó militarmente en el centro y occidente del país en 1533 y en el oriente en 1547, desplazó completamente del poder a los gobernantes pipiles de origen azteca y dio origen a una nueva clase dominante, integrada exclusivamente por los representantes de la Corona española. Los españoles llegaban al poder por la vía de las armas.

Luego de imponerse militarmente ante dos ejércitos indígenas, (de los Señoríos de Izalco y Cuscatlan) los conquistadores bajo el mando de Pedro de Alvarado y Contreras, al no encontrar oro, decidieron irse a vivir a las comunidades indígenas, con el fin de garantizar el control sobre las cosechas de aquellos productos que les interesaban: el cacao y el bálsamo. Una economía de subsistencia dio paso a una economía orientada al mercado mundial.

Las pocas ciudades españolas (San Salvador, San Miguel, Sonsonate) fueron fundadas por los conquistadores cerca de las principales poblaciones indígenas productoras de cacao. Los invasores españoles eran originarios en su mayoría de las provincias de Extremadura, Castilla y Andalucía. Los hermanos Alvarado (Pedro, Diego, Gonzalo, Jorge, Gómez, Hernando y Juan) eran de Badajoz, Extremadura.

La dominación española de los territorios de Cuscatlán y Chaparrastique se expresó en un conjunto de instrumentos jurídico-políticos que les permitieron oprimir y fundamentalmente explotar a las comunidades indígenas. La institución básica inicial fue la Encomienda, la cual si bien no significaba propiedad ni dominio sobre la tierra si otorgaba el derecho a los Conquistadores de percibir de los indígenas un tributo temporal fuera en trabajo, especies o incluso en dinero.

Estos primeros conquistadores y colonizadores recibieron complacidos de la Corona española las encomiendas, institución colonial que había nacido en el Caribe cuando aún vivía el Almirante Colón, para evangelizar a los conquistados así como para exigirles “tributo.” Y el tributo del “contrato” fue en trabajos forzados y en la entrega de alimentos (fríjol, maíz) así como sus cosechas de cacao y bálsamo. La primera distribución de encomiendas concluyó de acuerdo a Gallardo entre 1525 y 1530.

La práctica del otorgamiento de encomiendas se basaba en las Leyes de Burgos (1512) mediante las cuales la Corona española señalaba algunas reglas para su funcionamiento, incluyendo que se respetara la autoridad de los caciques, estuvieran formadas por un mínimo de 40 y un máximo de 150 indios así como que el encomendero se responsabilizara por otorgar una dieta diaria de pan con ajo “y los domingos carne guisada.” Los encomenderos naturalmente se burlaban de estas exóticas ordenanzas. Un año después, en 1513, se aprobó el famoso Requerimiento, a través del cual se justificaba la guerra emprendida contra “los vasallos rebeldes” y que era cínicamente leído antes de emprender las acciones de matanza y saqueo contra las poblaciones indígenas.

Los conquistadores además fortalecieron su dominación sobre las comunidades indígenas mediante dos instrumentos: la proliferación de enfermedades desconocidas que debilitó fuertemente la salud de la población indígena y la introducción de ganado, que se convirtió en un mecanismo para amedrentar y destruir las cosechas indígenas así como ampliar abusivamente los linderos de las propiedades de los ganaderos españoles, que se convirtieron en grandes terratenientes.

En 1542 la Corona española aprueba las Nuevas Leyes que ordenan la supresión de las encomiendas así como la abolición de la esclavitud, la cual era impuesta sobre aquellos indígenas que eran considerados como “rebeldes.” Este fue un esfuerzo por sofisticar la dominación colonial. Pero los conquistadores españoles reaccionaron airadamente contra esta legislación que limitaba sus abusos.

En realidad modificaba los estilos de la explotación ya que origina los Repartimientos , instrumento colonial mediante el cual se les obligaba a trabajar en las haciendas por una temporada y luego regresar a sus cultivos. Esta modalidad se prolongó por los tres siglos que duro el vasallaje colonial. El Salvador formaba parte en ese momento de la Audiencia de los Confines o Capitanía General de Guatemala, que abarcaba desde el Istmo de Tehuantepec hasta el de Panamá. En 1545, ante el rechazo generalizado de los conquistadores, parte sustancial de las Nuevas Leyes fueron derogadas.

En la década de los setenta del siglo XVI había 42 encomenderos en la ciudad de San Salvador y 33 en San Miguel (Browning1975:72). 25 años después de la invasión existían seis centros principales del establecimiento español, dos eran fundaciones nuevas ( San Salvador , fundada en 1525 y San Miguel, fundada en 1530) y las cuatro restantes estaban situadas dentro de las comunidades indígenas más importantes ( Izalco (Sonsonate), Sihuatehuacan (Santa Ana) Apastepeque-Cojutepeque (San Vicente de Lorenzana1635) Zacatecoluca y Usulutan).

En determinado momento surgió una contradicción entre los conquistadores convertidos en encomenderos y los comerciantes, así como la hubo con los religiosos. Los comerciantes aspiraban a reducir las ganancias de los encomenderos mediante el trato directo con las comunidades indígenas en la venta de la producción de cacao. En el caso de los religiosos estos defendían el derecho a que se les pagara por la labor de “evangelización” que realizaban en provecho de los encomenderos.

En el occidente del país, la mayoría de comerciantes españoles se establecieron en Izalco, incluso después de la fundación de la villa de La Trinidad, o sea Sonsonate, en mayo de 1553. Según la Academia Salvadoreña de la Historia , La Trinidad fue creada “para reconcentrar a los tratantes de cacao que estaban ilegalmente residiendo en los pueblos de los Izalcos.” Es significativo que la población indígena de Izalco adquirió en 1580 la categoría de villa.

Sonsonate se crea a orillas del río Sensunapan, para convertirse en un emporio de comercio con su puerto anexo, Acajutla. San Salvador había sido creada a la orilla del río Acelhuate y San Miguel del Río Grande. Su fundación fue impulsada por el poderoso encomendero residente en Santiago de los Caballeros de Guatemala, Diego de Guzmán, y se encontraba unida con este país por un Camino Real de 45 leguas, que atravesaba por San Juan Bautista Nahuizalco, San Miguel Salcoatitan y Santa Lucía Juayúa; desembocaba en el altiplano de San Andrés Apaneca, y Concepción Ataco, para bajar luego a Asunción Ahuachapan y enfilar con rumbo a las tierras altas guatemaltecas.

La población de Nahuizalco es entregada en “encomienda” por Jorge de Alvarado a Miguel Díaz Peñacorba el 9 de junio de 1528. Sancho de Figueroa recibio en encomienda por Diego de Alvarado, el 27 de julio de 1529 a Cojutepeque, Perulapa, Cinacantan (Tamanique) así como Cozotiqui (Ciudad Barrios).
En el caso de Sihuatehuacán ( Santa Ana) esta población fue encomendada inicialmente a Diego de Usagre, que recibía como tributo “cacao, algodón, maíz, frijoles, chile y ropa hecha de algodón.”A su muerte, pasó a formar parte de la encomienda de Antonio Docampo, que daba como tributo 350 xiquipiles de cacao (o sea 2,800,000 semillas). Docampo vendió la encomienda a María Cerrato (familiar del Capitán General de Guatemala, Alonso López de Cerrato).

En 1548 le fue entregada la tasación del pueblo de Santa María Zacatecoluca a Juan de Medina, la cual consistía en “400 indios tributarios, o sea, alrededor de 2,000 personas.”Doscientos años después, en 1740 vivían 410 indios, y 450 mulatos y mestizos, que eran soldados de dos compañías al mando de 12 españoles, que además de ser Oficiales Militares eran vecinos dueños de las haciendas aledañas al pueblo.

En el siglo XVI había en el Reyno de Guatemala al que pertenecían las provincias de San Salvador y San Miguel, alrededor de 200 encomiendas. La contradicción fundamental de la sociedad colonial era entre los encomenderos y las comunidades indígenas. A nivel del grupo dominante surgió posteriormente la contradicción secundaria entre los encomenderos y los comerciantes. Y a nivel de grupo subordinado, posteriormente la contradicción entre indígena y ladino.

El añil que definió el color de la Patria de los criollos. Siglo XVII.

El desplazamiento del cultivo del cacao por el cultivo del añil en el siglo XVII significó una profunda modificación de la estructura agraria y de la estructura de clases. El cultivo del cacao se realizaba por lo general, en tierras propiedad de las comunidades indígenas y era comercializado por los españoles. El cultivo del añil modifica esta situación y origina las grandes haciendas de los criollos que es donde se cultiva el añil o jiquilite, y a la vez donde se construyen los obrajes (molinos) para producir el colorante. Se forma la hacienda donde aparece el colono al que se le otorga una porción de terreno que debe pagar en trabajo, especie o dinero. La hacienda donde se fomenta la ganadería junto con el cultivo del añil.

El añilero necesitaba contar con un grupo de trabajadores que residiera permanentemente en su hacienda así como con personal auxiliar durante el periodo de recolección de septiembre a noviembre ( Browning 1975). Y es aquí donde la institución del repartimiento viene a resolverles este problema a los terratenientes. Ya en 1609 llega a Ámsterdam el primer embarque de añil guatemalteco seguramente producido en El Salvador.

Con el establecimiento de las grandes haciendas en donde se cultivaba añil y otros productos, se inicia la destrucción de las comunidades indígenas ya que los obrajes se convierten en obligadas fuentes de trabajo, lo que provoca la despoblación de las comunidades indígenas o su absorción por parte de una hacienda. Este proceso sería agudizado mediante las reformas liberales de finales del siglo XIX.

El comercio del añil, es acaparado por compañías comerciales de la Ciudad de Guatemala y del puerto español de Cádiz. Los terratenientes salvadoreños se ven obligados a organizar el Montepío de Cosecheros de Añil para enfrentar la competencia de los comerciantes guatemaltecos, que proporcionaban créditos a los productores locales con altas tasas de interés.

El cultivo del añil se concentra en San Salvador, San Vicente (Apastepeque) San Miguel y Santa Ana. Durante el periodo colonial se establecieron por los conquistadores transformados en encomenderos del cacao y convertidos luego en hacendados añileros, alrededor de 400 grandes haciendas.

La primera institución bancaria, el Banco Internacional (1880)

El 20 de agosto de 1880 abre sus puertas el Banco Internacional a partir de una concesión realizada por el gobierno del presidente Rafael Zaldivar. Se nombra como Gerente interino a A. Sutter y como Directores al General Encarnación Mejía (empresario que luego fue directivo de la Compañía del Ferrocarril de Acajutla y Cónsul General en San Francisco California), al General Nicolás Angulo, lugarteniente del General Ramón Belloso y de Gerardo Barrios, y al Expresidente Eujenio (sic) Aguilar, que fue Rector de la UES 1843-1845 y Presidente de la República 1846-1848 y se le atribuye haber introducido el cultivo del café en el país. (Diario Oficial de El Salvador, 21 de agosto de 1880).

El Banco Internacional se instala con un capital inicial de 500,000 pesos, con 100 acciones de 5,000 pesos cada una, que luego se amplía a 700,000 pesos. En el Diario Oficial del 27 de agosto de 1880 el Gobierno “liberal y progresista” del presidente Rafael Zaldivar agradece al “digno caballero” José Francisco Medina “por su activa cooperación en todos los pasos previos que ha sido preciso dar para la realización del proyecto.”Asimismo informa que “muy pronto se establecerá una sucursal en Santa Ana y se designaran Agencias en las principales plazas de la República.” Francisco Medina había desembarcado en el puerto de La Libertad el 26 de marzo de ese año procedente de San José Guatemala.

En el Diario Oficial del 29 de agosto de 1880 se vuelve a celebrar la instalación del Banco Internacional, ya que permitirá librarse de los usureros y “a que casi en su totalidad las acciones suscritas son de capitales del país.” Asimismo en el artículo se informa que en el Directorio del Banco fungen como directores suplentes los señores José Rosales y Gustavo Lozano. En la edición del 5 de septiembre de 1880 del Diario Oficial aparece íntegramente el contrato firmado “por el Supremo Gobierno con el señor J. Francisco Medina.” Está firmado por Pedro Meléndez, Ministro de Hacienda y Guerra y tiene fecha de 5 de abril de 1880.

¡NO AL CIERRE DE LA UES, EXIGIMOS CUENTAS CLARAS DE RECTORIA SOBRE PRESUPUESTO!

¡NO AL CIERRE DE LA UES, EXIGIMOS CUENTAS CLARAS DE RECTORIA SOBRE PRESUPUESTO!
Pronunciamiento del Movimiento por la Reforma y en Contra de la Privatización de la Universidad de El Salvador

A la Comunidad Universitaria y Pueblo Salvadoreño:
En un esfuerzo por ocultar su evidente incapacidad administrativa y académica, las actuales autoridades de la Universidad de El Salvador pretenden a partir de la próxima semana manipular a los estudiantes, presionar a los trabajadores y docentes y confundir a la opinión pública, para SALIR A LAS CALLES a exigir un refuerzo presupuestario, no obstante que se han pactado ya con el Ministerio de Hacienda y el Ministerio de Educación, 4 millones de dólares para el pago de salarios de este año.
Frente a esta mentira que está sembrando el Rector y los Decanos (CSU) de la UES hacemos las siguientes valoraciones:
1.Las actuaciones y planteamientos derechistas de las autoridades universitarias, en las que se acusa al Gobierno y al FMLN de boicotear a la Universidad, cuando es éste último el que desde hace ocho años viene propugnando por aumentos presupuestarios para el desarrollo de la universidad, habiendo logrado, después de sortear la oposición de las derechas parlamentarias, aumentos que engloban el escalafón, mejoras salariales para los trabajadores que ganaban menos de setecientos dólares; en la ley de presupuesto de 2014, recientemente aprobada en la Asamblea Legislativa, se otorga a la universidad setenta y cuatro punto ocho millones, ($74.8 ) producto de la lucha del FMLN.
2.Que este desorden administrativo y financiero, que las autoridades pretenden achacarle al Gobierno y al FMLN, es de responsabilidad del Rector y su camarilla, pues ellos violando todas las normas legales, se auto-recetaron un aumento global de más de trescientos mil dólares, descapitalizando así lo que se había destinado para el escalafón.
3.Que fabricando un discurso amañado y mentiroso, estas autoridades universitarias, se han sumado a la campaña de la derecha, con el propósito de desgastar al actual Gobierno y al FMLN, en la presenta campaña electoral.
4.Que no es casual que las planeadas protestas se realizaran hacia el Ministerio de Hacienda y Casa Presidencial, pero no hacia la ANEP, ni contra ARENA que están en la línea de privatizar la UES, con la complicidad de este Rector.
5.Estas autoridades con actitudes derechistas, pretenden construir una base social que les permita seguir impulsando sus proyectos de privatización y la llegada de empresas como Holcim a “ayudar” a la UES.
6.Además pretenden implementar un régimen represivo de “sanciones” contra aquellos, estudiantes, docentes y trabajadores que no se presten a esta vil maniobra.
Ante esta situación, como sectores organizados de la Comunidad Universitaria hacemos un llamado a acompañarnos a luchar por:
1. Evitar el cierre de la UES y exigir que se mantengan las actividades académicas y administrativas con normalidad. ¡No al cierre de la UES!
2. Exigir que se informe al detalle y de manera transparente, de la Situación Financiera de la UES. Y como parte importante de la comunidad universitaria, exigimos al Rector, única autoridad responsable, EL PAGO EN TIEMPO DE LOS SALARIOS DE LOS DOCENTES Y TRABAJADORES.
3. Rechazar el discurso pro-derechista y electorero de las actuales autoridades.
4. Rechazar las amenazas y cualquier tipo de represalia contra nuestras organizaciones.
5. Luchar por un Presupuesto Justo para la UES
6. Exigir la renuncia del actual Rector, Ing. Mario Roberto Nieto Lovo, por incapaz y oscuro en su gestión administrativa y educativa de la UES.
¡NO A LAS AUTORIDADES PRODERECHISTAS EN LA UNIVERSIDAD!
¡EXIGIMOS TRANSPARENCIA DE LA INVERSIÓN PRESUPUESTARIA EN LA UES, YA!
¡NO A LA PRIVATIZACIÓN DE LA UES!
¡REFORMA PROFUNDA DE LA UES, YA!
¡VIVA LA LUCHA DE LA COMUNIDAD UNIVERSITARIA!
CES SETUES MRDUES APTUES
Ciudad universitaria, 8 de noviembre de 2013

Las razones del “saquismo”

Las razones del “saquismo”

Por Marvin Galeas * Miércoles, 6 de Noviembre de 2013

Desde hace unos meses las encuestas serias, puntos más o menos, muestran una clara tendencia en el proceso electoral que vivimos: esta es una lucha entre dos. Tony Saca, establecen esos sondeos, no tiene ninguna posibilidad de ganar la elección. Ni siquiera de pasar a una segunda vuelta.

Los estudios también dicen de manera consistente que en efecto habrá una segunda vuelta y que el ganador sería Norman Quijano. Eso es lo que dicen las cifras. Salvo la encuesta pagada por el interesado, los periodistas y analistas influenciados, de una u otra manera, por el mismo interesado, siguen repitiendo la cada vez más patética tesis del doble o triple empate.

Imagino que el comando de campaña de Unidad analiza esas encuestas serias y tiene clara conciencia de que están, no al borde del hoyo, sino en el hoyo mismo. Entonces por qué insisten en mantenerse en un proceso que saben que está perdido. Aventuro dos hipótesis. Pero antes es necesario revisar ciertos antecedentes.

Viendo a distancia lo que pasó tras la derrota electoral de ARENA en 2009, uno llega a la conclusión que Saca y su grupo esperaban el desplome y la desaparición de ese partido. El espacio sería llenado, esa era la esperanza, por el mismo Saca como el líder absoluto y único de “la derecha”.

En esas cuentas sería fácil derrotar a un FMLN desgastado por un mal gobierno. Así el ex presidente sería otra vez presidente. Y el hombre al que le entregó la banda presidencial se la devolvería. Y quién sabe si la escena se repetiría a la inversa cinco años después. Fantasías.

Al no desplomarse ARENA el esfuerzo de Saca y su grupo con todo el apoyo del partido oficial al más alto nivel, se orientó en debilitar a ese partido mediante una de las operaciones más vergonzosas del quehacer legislativo en el país. La historia seguramente será despiadada cuando se recuerde ese triste episodio.

Cuando sólo faltan algunas semanas para el día de las votaciones, y después de millonarios esfuerzos y el total apoyo de Casa Presidencial, Unidad y su hiperactivo candidato, muestran números que seguramente no esperaban. Abajo. Muy abajo. Entonces ¿por qué persistir? Podría ser, en mi opinión, por una de dos razones.

La primera es que Saca tendría la esperanza de llegar a una negociación con ARENA para juntos, la “derecha” unificada, derrotar fácilmente a Sánchez Cerén en primera vuelta. Eso uno lo deduce al ver el esfuerzo de los periodistas “influenciados” por el “saquismo”, en destacar la similitud de posiciones de Saca y Quijano frente a determinadas situaciones políticas.

A eso hay que agregar los números de ciertas encuestas, y los comentarios con que se presentan, orientados claramente a meter miedo a los areneros, sobre un eventual triunfo del FMLN. Una cosa, sin embargo, es clara: hasta las encuestas más sesgadas establecen que habrá una segunda vuelta y que el derrotado en esa instancia sería el profesor.

La segunda hipótesis que explicaría la insistencia de Saca de mantenerse en el proceso es que su participación sólo sería un intento de lograr arrebatarle a ARENA los suficientes votos para permitir la victoria del FMLN en primera vuelta. Es decir jugar exactamente el triste papel que jugó Arnoldo Alemán en Nicaragua: dividir al Partido Liberal y permitir así la victoria de Daniel Ortega, quien llegó para quedarse.

Hay muchas similitudes que me inclinan a creer en la segunda tesis. Pero la situación entre Nicaragua y El Salvador no es exactamente igual. Por lo que los acontecimientos no se desarrollarán exactamente igual. La velocidad con la que Saca y Unidad se desploman, es algo con lo que no contaba el FMLN, Casa Presidencial y el mismo comando de campaña del “saquismo”.

PD: uso la palabra “saquismo” no porque crea que el ex presidente sea un caudillo, sino porque todo su movimiento y su intento depende absolutamente de él mismo.

El desafío de la Educación en Derechos Humanos en las universidades salvadoreñas

El desafío de la Educación en Derechos Humanos en las universidades salvadoreñas
Por Roberto Pineda San Miguel 30 de octubre de 2013

Introducción

Muy buenos días, es un honor y una alegría compartir algunas ideas sobre la Educación en Derecho Humanos y el papel de las universidades salvadoreñas, y hacerlo en San Miguel, en el oriente de nuestro territorio, sintiendo el calor humano que caracteriza a esa región.

Una realidad nacional lacerante

Cada día nos desayunamos con noticias alarmantes que influyen poderosamente en nuestras actividades cotidianas. El pasado lunes y ayer las maderas de los periódicos nos informaban que se esta extorsionando desde nuestro país a salvadoreños que viven en Estados Unidos. Estas noticias y lo que vemos en nuestro entorno diariamente nos genera stress y ansiedad, afecta nuestra salud mental.

Fíjense que hoy que veníamos hacia acá nos disponíamos a incorporarnos a una avenida transitada y un vehículo en vez de cedernos el paso se nos abalanzo, era una joven la que manejaba, se veía contrariada, tensa, quizás iba tarde hacia su trabajo Vivimos bajo una gran tensión, irritables al menor problema o dificultad, reaccionamos con violencia física o verbal. Nos encontramos bajo tensión.

En este marco, la Educación en Derechos Humanos ofrece un camino, una alternativa, una herramienta que nos permite actuar y abandonar el papel de espectadores, frente a una situación de violencia generalizada –familiar, delincuencia, política-que se va apoderando de todos los espacios, comenzando por nuestros estados de ánimo. No es ni pretende ser la solución, pero puede contribuir a ser parte de la solución. Es un aporte.

En nuestro país y ya por algún tiempo el temor a la violencia ha desplazado a la seguridad, a la confianza, a la tranquilidad en nuestra cotidianidad universitaria. Nos afecta fuertemente. No hay universidad que este al margen de esta situación. Y la violencia tiene una tendencia expansiva: muertes, atentados, extorsiones, abusos familiares, atropellos sociales, disputas judiciales, polarización política, ni las tortugas se escapan a la elevada concentración de microalgas tóxicas en las playas salvadoreñas…y la violencia construye círculos perversos de acción y reacción.

Y esta violencia generalizada predominante entra en conflicto con los avances democráticos. La gente se pregunta si no es mejor vivir bajo la seguridad que ofrece una dictadura, una mano fuerte que imponga respeto frente a la debilidad del actual proceso democrático, con sus conflictos, con sus retrocesos, con sus vacíos. Esta tomando fuerza una peligrosa visión autoritaria, de regreso a la dictadura, de retroceso, lo que obliga a fortalecer una visión democrática, de pensar un nuevo país.

Es evidente que el avance en lo político institucional a partir de 1992, y en particular con la alternancia presidencial de 2009 no corresponde al avance en lo cultural, en la cultura política. Hay un desfase, un rezago en el que continúan predominando los antiguos patrones culturales autoritarios, heredados de la dictadura militar y quizás de la colonia, ya que el poder autoritario se ejerce desde el miedo, desde el temor a ser diferente, desde el temor a la disidencia, desde el temor a la protesta ciudadana.

En esta situación, la Educación en Derechos Humanos se convierte en una importante herramienta vital, necesaria y urgente para enfrentar la crisis que vivimos y ofrecer una salida que priorice la justicia sobre la violencia, la democracia sobre el autoritarismo, la verdad sobre la mentira, la vida sobre la muerte.

La Educación en Derechos Humanos nos permite comprender que la paz social es el resultado de la paz individual. La tolerancia social es el producto de la tolerancia individual y que para trasformar la sociedad necesitamos transformarnos simultáneamente a nosotros mismos. El educador necesita ser educado.

Una realidad universitaria rodeada de violencia

Las universidades son afectadas fuertemente por esta crisis nacional y se ven obligadas a duplicar sus niveles de seguridad y sus estudiantes, docentes y autoridades viven bajo el temor del asalto, de la extorsión, de la amenaza. Y las universidades se ven obligadas a construir muros, a incrementar sus presupuestos para seguridad. Hace algunos meses en el campus central de la UES se instalaron nuevos mecanismos de ingreso, nuevos controles, que no existieron ni durante la etapa del conflicto armado. Es el miedo apoderándose de nuestras vidas y de nuestras instituciones.

Y las universidades tienen el desafío de contribuir desde la ciencia, la técnica, el arte y la cultura a reflexionar sobre esta realidad, y coadyuvar a su superación. Y una de las formas de hacerlo es mediante la Educación en Derechos Humanos.

Las universidades necesitan para enfrentar esta realidad, y para garantizar la pertinencia de la educación superior, en primer lugar, formar y capacitar a docentes en Educación en Derechos Humanos y a la vez revisar la currícula desde una perspectiva de derechos humanos, los cuales han pasado a formar parte de nuestro imaginario social desde hace ya algún tiempo.

Antecedentes históricos

Los derechos humanos y su enseñanza acompañan el imaginario social de nuestro país desde hace más de medio siglo. Voy a referirme a tres momentos claves en la historia de los derechos humanos en El Salvador.

En diciembre de 1948 se firma en el Palacio Chaillot de un París liberado, la Declaración Universal de Derechos Humanos, luego de largos debates en el marco del enfrentamiento ideológico entre la Unión Soviética y Estados Unidos y esta declaración es quizás el principal documento del siglo XX y plantea en su artículo primero que “todos los seres humanos nacen libes e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.”

Estamos en 1948 luego de una guerra que destruyó a Europa, a Japón, que estableció en algunos países como políticas de estado visiones racistas, de aniquilamiento de grupos étnicos como en la Alemania nazi, estamos hablando de un momento en que África es una colección de colonias de los imperios inglés, francés, holandés, belga, portugués.

Y en ese mismo diciembre de 1948, cuatro días después, el 14 de diciembre, surge en nuestro país vía golpe de estado, el llamado Gobierno de los Mayores, conducido por el teniente coronel Oscar Osorio, que inicia un proceso de reforma política, que tiene entre sus méritos la aprobación en 1950 de una Constitución que reconoce los derechos económicos, sociales y culturales, entre estos la autonomía universitaria. Hay ahí lazos, puentes entre esto dos acontecimientos. Lo nacional y lo internacional se vinculan.

Otro momento se abre en los años setenta. En 1975 el padre jesuita Segundo Montes crea el Socorro Jurídico Cristiano, que tenía su sede en el Externado San José, y proporcionaba asistencia legal a víctimas de la represión política y sus familiares. Cuando le desaparecían a un familiar iba uno a buscar a los abogados del Socorro Jurídico Cristiano, por cierto entre estos el actual presidente interino de la Corte Suprema de Justicia Florentín Meléndez. Esta fue la semilla que después se expresaría en diversos organismos como la Comisión de Derechos Humanos, y finalmente en la predica evangélica del Obispo Mártir, Monseñor Oscar Arnulfo Romero y su histórica prédica en Catedral, que se volvió en un símbolo de la verdad. La verdad se escuchaba cada domingo en las homilías de Monseñor Romero en Catedral.

A nivel internacional, en aquellos momentos, en 1976 gana en Estados Unidos la presidencia el bautista sureño del Partido Demócrata, James Earl Carter quien coloca en el centro de su programa político la defensa de los derechos humanos. Y esto lo hace entrar en conflicto con los gobiernos militares latinoamericanos. Y para los sectores populares se abre una ventana, una puerta y la denuncia de violaciones a los derechos humanos es escuchada incluso en los salones del Senado y la Cámara de Representantes en Washington.

Y el tercer momento, que deseo compartirles es el del fin de la guerra. En 1992 se firman los Acuerdos de Paz, que incluían la institucionalización de la defensa de los derechos humanos por medio de la creación ese mismo año de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, un gran avance histórico. El estado asumía la creación de un ente que lo supervisara. Un año después en 1993 se realiza en Viena, Austria, la Conferencia Mundial de Derechos Humanos de donde surge la Declaración y el Programa de Acción de Viena, que da un nuevo impulso a la internacionalización de los derechos humanos. Estos antecedentes históricos fortalecen nuestra visión y nuestro entendimiento actual de la Educación en Derechos Humanos. Pero ¿qué es la Educación en Derechos Humanos?

Concepto, bases y procesos de EDH

Entendemos como Educación en Derechos Humanos el proceso mediante el cual se facilita a personas y comunidades, habilidades y herramientas para que comprendan y trabajen, comprendan y trabajen a favor de los derechos humanos contribuyendo a crear una cultura universal de respeto a los derechos humanos y libertades democráticas. Y existe una base normativa para este proceso. Existe una acumulación histórica.

La base normativa

Existen documentos fundamentales que sustentan el derecho internacional de los derechos humanos y la EDH entre los que se encuentran la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, los Pactos Internacionales de 1966, uno de Derechos Civiles y Políticos y otro de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; la Convención Americana sobre Derechos Humanos de 1978.

Recientemente, en el 20ll la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración sobre Educación y Formación en Materia de Derechos Humanos, en las que en su artículo 1, numeral 2, expresa que “la educación y formación en derechos humanos son esenciales para la promoción del respeto universal y efectivo de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales de todas las personas…”

¿Cómo luego de este marco general definimos cuales son los contenidos actuales y para nuestro país, el hic et nunc*, de la Educación en Derechos Humanos?

Los desafíos actuales

La Educación en Derechos Humanos en nuestro contexto nacional tiene dos grandes componentes que responden a dos grandes necesidades y retos: el curativo y el preventivo, el restaurativo y el prospectivo. Nuestra sociedad necesita sanarse, curarse y necesita precaverse, protegerse hacia futuro.

Educar para la Reparación Social y la Prevención

El componente curativo pretende sanar heridas viejas y heridas nuevas que no han cicatrizado. Hay una deuda de la memoria no saldada, incluso de antes de la guerra, durante la guerra y después de la guerra. De ayer y de hoy. Y las consecuencias de no curar estas heridas son gravísimas, hay mucho dolor, sufrimiento internalizado, individual, familiar, comunitario, como grupos sociales, como país. Y esto es agravado por la pobreza y la exclusión social.

Educar para la Reparación Social tiene cuatro componentes:

Conocer la verdad. Hay que poner fin a la negación, al silencio obligado, enfrentar el dolor, el sufrimiento y las perdidas, los vacíos, los conflictos…Saber que fue lo que pasó, quienes se lo llevaron, porque, quien dio la orden, quien ejecutó la orden, donde estuvo prisionero, donde fue enterrado… reivindicar el derecho a la verdad.

Hacer justicia. La necesidad de esclarecer los hechos y determinar responsabilidades de acuerdo al sistema legal. O sea derrotar a la impunidad. Y para esto es crucial la derogatoria de la Ley de Amnistía.

Permitir el perdón. Este es un proceso que involucra a dos actores: la víctima y el victimario. A la víctima que ha sufrido el daño, la ofensa a su dignidad y a su vida, se le educa para poder perdonar y de esta forma liberarse, curarse del odio que enferma, que hiere, que desangra. Al victimario, al ofensor, al responsable por acción u omisión, se le educa para el arrepentimiento y el reconocimiento del daño causado y la búsqueda de medios para repararlo y de esta forma curarse, liberarse de la culpa que también enferma, daña, golpea.

La reconciliación. Es un proceso mediante el cual se recuperar la dignidad de ciudadanos y nos reconocemos con intereses comunes y con la disposición a transformar los conflictos en oportunidades.

A su vez Educar para Prevenir tiene cuatro componentes:

Detectar la violencia. Es un proceso que permite identificar amenazas y construir mapas y hojas de ruta para superarla.

Participación conjunta. Es crucial la participación activa de todos los actores en cada campo de acción.

Resolución de Conflictos. Deben conocerse técnicas de resolución y transformación de conflictos.

Convivencia Pacífica Deben elaborarse modelos de convivencia pacífica en cada aula, en cada facultad, en cada universidad y centro de trabajo y estudio.

Llamado final

Estos son los desafíos que nos coloca la historia en este momento de nuestra nación. Concluyo citando a un especialista chileno en derechos humanos, el Dr. Abraham Magendza, que se pregunta frente a la crisis actual y como encararla: ¿si no los educadores quien y si no es ahora cuando? Gracias.-

  • Aquí y ahora

Ni judicializar la política ni partidizar la justicia

Ni judicializar la política ni partidizar la justicia

Última actualización: 04 DE NOVIEMBRE DE 2013 16:54 | por Félix Ulloa

En una sociedad democrática que se precie de vivir en un estado de derecho, tanto la justicia como la política transitan en sus propias vías. Por lo tanto, no existe la preocupación de que la administración de la justicia sea influenciada por intereses partidarios, ni tampoco que los grandes temas que ocupan a la política, sobre todo en el campo electoral, se tenga que dirimir en los tribunales.

No obstante que ambas aspiraciones, se materializan como regla general en sociedades con democracias consolidadas, existen excepciones que confirman la regla.

a) La partidización de la justicia.

En México se habla con mucha frecuencia del uso faccioso de la ley. Múltiples denuncias contra su aplicación sesgada por parte de los tribunales y agentes auxiliares como el Ministerio Publico y cuerpos policiales, demuestran que cuando se utiliza la ley como mecanismo de premio o castigo político, se genera inmediatamente una perversión en la administración de justicia.

La famosa frase: ”Para mis amigos justicia y gracia y para mis enemigos la ley” se le adjudica tanto a Benito Juárez como a Plutarco Elías Calles, y Miguel Ángel Asturias, también se la endilga al tirano Estrada Cabrera. En todo caso, la moraleja es que no se puede ni se debe usar a los tribunales como instrumentos del poder político, para favorecer a unos o perjudicar a otros. Y los partidos políticos principalmente, deberán de alejarse de la tentación de manipularla, con fines que legítimamente pueden alcanzar en las arenas políticas y electorales.

Distinta es la noción del papel político que juegan y deben desempeñar, sobre todo los altos tribunales de justicia, en la formulación de políticas públicas. En algunos casos, las decisiones de esos magnos órganos confrontan a otros poderes del estado, como es natural en el sistema republicano basado en la independencia entre órganos fundamentales, que garantiza el balance de poder, mediante el sistema de los pesos y contrapesos (check and balance)., De esa manera, la Suprema Corte de los Estados Unidos, modificó mediante sendas sentencias varias de las políticas que el presidente Roosvelt había aprobado para implementar su gran programa socio económico conocido como el New Deal.

En nuestro país, la Asamblea Constituyente que en 1983 creo la Sala de lo Constitucional lo hizo con la clara responsabilidad de que estaba dando a luz una instancia a la cual se le concedían poderes amplios y suficientes, capaces de modificar situaciones de gran interés nacional y que por lo tanto no debería estar atada a ningún tipo de interés particular, especialmente de los partidos políticos, quienes por medio de sus diputados en el Órgano Legislativo, tendrían la posibilidad de incidir en su integración. Así en la Exposición de Motivos de la Constitución dejaron consignado:

“Estimó además la Comisión que debiese ser la propia Asamblea Legislativa la que designara a los miembros de la Sala de lo Constitucional, en atención a que ellos ejercitan una función y administran una justicia que reúne caracteres de orden políticos, no de política partidista, sino de aquella que se refiere a la interpretación de las normas constitucionales que son normas políticas”.

De tal suerte que, a casi treinta años de su vigencia, hemos podido observar a una Sala de lo Constitucional que ha dada pleno cumplimiento a ese espíritu del legislador constituyente; y, a partir del 28 de julio de 2010 inaugurar una serie de sentencias que con toda propiedad podemos calificar de altamente políticas, las cuales han cambiado el rostro de nuestra institucionalidad política-electoral, para beneficio de nuestra salud democrática, sin caer hasta hoy, en ese tentador riesgo del uso faccioso del poder de aplicar la ley..

b) La judicialización de la política.

En el caso de que por la vía judicial se hayan definido resultados electorales, lo vimos de la manera más dramática cuando en los Estados Unidos de América, las cuestionadas elecciones presidenciales del año 2000 y los fraudulentos resultados en el estado de Florida, terminaron colocando a esa gran nación, al nivel de cualquier república bananera.

Después de arduas batallas legales en las instancias judiciales estatales y regionales, se presentó a la Suprema Corte un writ of certiorari, y el máximo tribunal emitió el fallo Per Curiam, es decir la opinión de la corte no de sus jueces, tratando de ocultar su división pues de los nueve Magistrados que la integran 5 votaron a favor de George W. Bush y 4 en contra. Así, el día 12 de diciembre de 2000 por la diferencia de un voto se decidió quien sería el Presidente de la nación más poderosa del planeta.

Más grave aún ha sido la tendencia a criminalizar la política. Las conductas irregulares de los líderes y dirigentes políticos, que en no pocas ocasiones han lindado con hechos delictivos, ha llevado a una pérdida de la confianza social en los políticos y en los partidos políticos. Se generalizó la idea que la política es una cosa sucia, que entrar en ella es sinónimo de corrupción e impunidad, etc. Con esta visión generalizada perdemos todos. Los ciudadanos que nos quedamos sin un referente fundamental en la democracia participativa, como son los partidos con sus funciones de representación e intermediación; el sistema democrático que se debilita al perderse la confianza en estas instituciones que le son consustanciales; y, finalmente los mismos partidos y sus liderazgos que se vuelven constantemente bajo sospecha y objetos de regulaciones cada vez más restrictivas, como las leyes contra el lavado de dinero, el tráfico de influencia y en nuestro país, con sentencias constitucionales limitando sus tradicionales prácticas clientelares dentro del estado.

Por lo anterior, debemos ser muy prudentes en este periodo eleccionario bastante sui generis que se está llevando a cabo. Existen preferencias por partidos y candidatos que son naturales y además necesarias. De que otra manera se podría realizar un torneo electoral si no hubiera legítimos contendientes y sus seguidores o adherentes?. Pero en una competencia democrática como la que pretendemos se realice en nuestro país, existen reglas y una normativa que se debe respetar, una autoridad electoral que pese a sus deficiencias sobre todo en materia de aplicación de la justicia electoral, dada su composición partidista y falta de independencia, goza aun de la confianza social legada por las anteriores administraciones electorales, de la post guerra.

Por tanto, dejemos a las instancias del sistema electoral, que van más allá del TSE, pues están los organismos electorales no permanentes (JED; JEM y JRVs), la Junta de Vigilancia, la Fiscalía Electoral y la Observación Electoral, que jueguen su papel. Recurrir al Órgano Judicial, particularmente a la Sala de lo Constitucional es válido si se tiene la convicción de que se están violentando derechos o principios constitucionales, con la claridad que será la Sala quien determinara tal situación.

Apostar a la descalificación de un adversario político por la vía de la jurisdicción constitucional, no solo es ir por el rumbo equivocado y aumentar innecesariamente el volumen de trabajo de la Sala, que de por si es muy alto, sino que se corre el riesgo de crispar innecesariamente el ambiente político, involucrando instancias cuya activación debe ser objeto de fines superiores.

En periodos eleccionarios hay que dejar que sea el soberano quien se exprese, y para ello hay que brindarle las facilidades para que lo haga de manera clara, segura, transparente y sin que se le manipule su voluntad o peor aún los resultados.

Las falencias del sistema electoral se han señalado amplia y oportunamente, algunas se pudieron corregir satisfactoria o deficientemente, las que quedaron pendientes habrá otro momento para abordarlas.

Hay mucho trabajo por delante en la modernización y democratización de nuestro sistema político y electoral. Desde los vacíos, inconsistencias y contradicciones en la Constitución, hasta una adecuada regulación del financiamiento de los partidos políticos, de las campañas electorales, de la representación proporcional en los Concejos Municipales, el voto en el exterior y dentro de todas ellas, las listas abiertas y desbloqueadas en las elecciones legislativas, quizás la más importante de las reforma pendientes.

Es decir que la lucha democrática continúa. Y estamos listos a seguir en la batalla.

Pero en este momento preciso, nuestro llamado es a no partidizar la administración de la justicia ni tampoco judicializar la trabajo político de los partidos.

Publican biografía de líder sindical salvadoreño Guillermo Rojas

SERVICIO INFORMATIVO ECUMENICO Y POPULAR
www.ecumenic.org rpineda59@yahoo.com
PUIBLICAN BIOGRAFIA DE LIDER SINDICAL SALVADOREÑO GUILLERMO ROJAS

SAN SALVADOR, 29 de octubre de 2013 (SIEP) “Durante la Ofensiva del FMLN de NOviembre de 1989 publicaron en los periódicos que Guillermo Rojas de la UNTS había caído en combate en Soyapango y nos pusimos muy tristes…”expresó Roberto Pineda, Coordinador del Servicio Informativo Ecuménico y Popular.

“Pero la noticia era falsa, Guillermo sobrevivió la guerra y sigue con nosotros soñando y luchando por un nuevo El Salvador. De hablar pausado, únicamente el calor de la lucha popular se convierte en un combativo luchador como lo demostró en diversas huelgas del Sindicato del ISSS, el STISSS, del cual fue secretario general…” añadió.

“Guillermo formó parte en los años ochenta del siglo pasado del comité ejecutivo de la UNTS, junto con la desaparecida Febe Elizabeth Velásquez en representación de FENASTRAS. Fue un destacado líder sindical y popular de aquella época de lucha contra la dictadura militar.”

“Y es precisamente de estos tiempos heroicos, en los que las ideas se defendían con la vida y la lucha por la justicia social encabezaba nuestras acciones, es que nos habla este libro, que pueden adquirirlo a un precio de $5.00 comunicándose con su autor en las páginas de la red social Facebook…” concluyó Pineda.

Alfredo Aquino, obrero y guerrillero

Alfredo Aquino, obrero y guerrillero
octubre 25, 2013 Voces Comentar
Publicado en: Actualidad, Contracorriente – Dagoberto Gutiérrez, Nacionales, Voces Ciudadanas

Era un negrito fino, bastante fino y bastante negrito, medio mecánico y lo suficiente para trabajar en una empresa que se dedicaba a ensamblar autobuses. Cerca de la terminal de occidente estaba la fabrica Superior de donde salían buses relucientes como si hubieran sido fabricados ahí, precisamente ahí trabajaba El Mapache que es de quien estoy hablando.

Dagoberto Gutiérrez

Alfredo Aquino se llamaba, y era de estatura mediana, fuerte, todo él fino, de sonrisa fácil y de pelo lacio, de manos ágiles y de brazos fuertes; pero eso si con cabeza subversiva, lo suficiente para ser miembro, allá por lo años 70 del siglos pasado, de una célula de la juventud comunista. Es posible que para él fuera muy importante que una novia que le apareció una tarde, fuera de color blanco como la nieve de tal modo que la pareja resultaba interesantísima y ella, de nombre Ofelia se veía satisfecha con su mapache y éste se veía mas que alegre con su blancura.

Como todo obrero, hablaba de todo y vivía cerca de la empresa, en la colonia Dina y por supuesto que participaba en las luchas del sindicato de La Superior y a las negociaciones pero también en las actividades clandestinas que abarcaban otras zonas de la capital y otros lugares de el país.

En 1973 viajamos juntos al X festival mundial de la juventud y los estudiantes que se realizó en Berlin República Democrática Alemana, Alfredo tuvo mucho éxito con las muchachas alemanas y su felicidad era enorme a tal grado que cuando, al finalizar el festival, nos preparamos para salir a Rumania, en un bus del gobierno romano, el mapache fue el último en llegar, ante el susto y el malestar de los organizadores que ya lo daban por perdido, sin embargo se trataba de algo que era casi equivalente.

El mapache se embarbascó con una muchacha berlinesa que encantada con él lo cubrió de cariño presentes, buenos deseos y Alfredo, que no tenia mucho que darle, le dio la dirección de su casa en la Colonia Dina para escribirse, aunque ella no hablaba ni entendía el español y Alfredo mucho menos el alemán.

Así pasó todo, fuimos a otros lugares y regresamos a nuestro país, a la clandestinidad, a la ilegalidad y a la conspiración contra el poder capitalista. La lucha siguió, hasta que un día me busca Alfredo y me explica con la alarma expresada en sus ojos: la chica alemana, le había escrito una carta en alemán, le había agregado una foto de ella y, la mujer de Alfredo había recibido la carta y la había abierto y aunque no entendió nada de lo que decía esa carta estaba dando por anulado el matrimonio. Como se puede ver, se trataba de una situación crítica, insospechada pero verdadera.

Ofelia no parecía dispuesta a moverse ni un milímetro porque, según ella, Alfredo tenia otra mujer en Alemania y se trataba de alguien tan a atrevida que era capaz de escribirle a su propia casa y esto era verdaderamente inaguantable.

El ambiente era tenso, las posiciones totalmente alejadas y sobre una mesa una foto de una muchacha sonriente, de ojos azules, de pelo rubio parecía reírse de todo y desafiar la discusión intensa que transcurría, pero esa era la pruebe contundente de una traición imperdonable.

Nada pudo hacerse, ningún argumento fue escuchado incluida el perdón solicitado, la explicación de todo lo que ocurre en todos los festivales. La atmósfera resultó letal para el matrimonio, dos niños jugaban ignorando los acontecimientos, un niño y una niña. Todo terminó esa misma mañana.

La guerra se vino encima con sus caminos de acero y sus luces de sangre y, el moreno fue asignado a la unidad guerrillera que combatía en el área de Jucuarán al sur de Usulután, precisamente en los manglares y ahí en pleno contacto con el mar, en el día y en la noche. El moreno aprendió a comer pescado, camarones y toda clases de peces, a superar el ataque de los jejenes, que llegaba hasta las seis de la tarde y esperar a los zancudos que aparecía de las seis en adelante.

El agua se obtenía en ciertos islotes, unos eran pequeños y otros eran grandes y a uno de ellos se dirigió una pequeña patrulla de tres combatientes entre ellos el moreno. La zona era vigilada por lanchas de la marina que no siempre se introducía, en los canales por temor a emboscadas pero ese día, en horas tempranas de la mañana miraron desde alta mar al pequeño grupo que desembarcaba y decidieron atacar. El ataque fue fugaz, rápido y letal, no hubo tiempo y el moreno fue alcanzado por el fuego de la fusilería enemiga, eran las 9 y media de la mañana, el sol inundaba la playa y vestía de plata todo el manglar, los pelícanos hilvanaban una cuerda de alas que corría sobre la mar.
El moreno no tuvo oportunidad ni tiempo y todo fue rápido, y la luz se fugó, los otros dos respondieron el fuego y los de la lancha no se atrevieron a desembarcar y, así como habían aparecido también desaparecieron.

Recogieron el agua, acomodaron al moreno en la canoa y empezaron a remar hacia el campamento, las raíces del mangle acompañó el viaje fúnebre, la marea empezaba a subir y la guerra cobró su precio y el mapache entregó su vida para que el camino no se deje nunca de caminar, así lo hacemos y así lo haremos.