Modernidad, eurocentrismo, colonialismo: la crisis de la izquierda. Francine Mestrum. Abril 2021

La crisis provocada por el coronavirus es una oportunidad para pensar en el futuro. Este artículo trata de la «izquierda» o de las «fuerzas progresistas» en un sentido muy amplio, con implicaciones para los partidos políticos y los movimientos sociales.  ¿Serán capaces de aprovechar esta oportunidad para proponer sus alternativas? ¿Se perderá una vez más, como ocurrió en 1989 y 2008?

Y sobre todo, ¿qué queda de la izquierda? Piénsese en los dificilísimos debates suscitados por el golpe de Estado en Bolivia, ignorado por una parte de la izquierda radical, o en el éxito electoral de un candidato indígena en Ecuador. ¿Hay buenas razones, entonces, para pensar que ya no hay izquierda ni derecha? ¿Y el eurocentrismo? ¿El poscolonialismo? ¿Posdesarrollo? ¿Descrecimiento? ¿Qué se debe y se puede hacer?

Lo que quiero mostrar en este artículo es cómo la crítica justificada a las políticas neoliberales y a la práctica del desarrollo ha dado lugar a numerosas «alternativas» que, de hecho, refuerzan estas políticas o, al menos, las dejan intactas. En otras palabras, quiero denunciar el actual pensamiento dominante de muchos movimientos progresistas.

Porque por muy comprensibles que sean muchas reacciones, lo que se necesita no es tirar al niño del desarrollo con el agua del baño de la modernidad. Además, estos desarrollos también muestran la vacuidad de gran parte del pensamiento de izquierdas actual. Por lo tanto, terminaré con algunas reflexiones sobre el nuevo élan progresista con el que todos soñamos.

Pensamiento crítico de desarrollo

El pensamiento sobre el desarrollo, tal y como surgió tras la Segunda Guerra Mundial, especialmente con la nueva Organización de las Naciones Unidas (ONU), alcanzó cierta hegemonía, pero nunca pudo seguir su camino sin obstáculos. No sólo el lado liberal, y especialmente el Banco Mundial (BM), ofrecieron resistencia – el BM se negó inicialmente a considerar los aspectos sociales- sino que surgieron diversas visiones alternativas del desarrollo, especialmente en la izquierda.

Así como medio siglo antes en la Unión Soviética y en China se dudaba de si el capitalismo era indispensable, en África se abogaba por un socialismo africano. En América Latina, siguiendo el estructuralismo de Prebisch, surgió un pensamiento «dependentista» que explicaba cómo el «subdesarrollo» no se producía antes sino después del «desarrollo», como resultado de la inclusión en el sistema de comercio mundial.

Todas estas alternativas al pensamiento oficial sobre el desarrollo, incluidos los movimientos de independencia nacional, remitían a los valores de la Ilustración, como la libertad, la igualdad, la emancipación… aunque, a nivel académico, esta Ilustración se pusiera lentamente en cuestión.

En la India surgió el pensamiento «subalterno», que acusaba al colonialismo de opresión cultural y no daba voz a los colonizados (Chakravorti Spivak). El «orientalismo» surgió en un discurso de «otredad» que se refuerza a sí mismo, la creación de un grupo de personas separado con conotaciones negativas (Edward Saïd).

Después de Mayo del 68 y del floreciente movimiento ecologista, se habló de «posdesarrollo». Para pensadores como Arturo Escobar, Gustavo Esteva, Serge Latouche o Wolfgang Sachs, no tenía sentido luchar por un desarrollo «mejor». La idea en sí misma y su intención eran erróneas. Lo que se necesitaba no era un desarrollo alternativo, sino una alternativa al desarrollo. Nunca se aclaró en qué consistiría.

Después del informe del Club de Roma sobre los ‘Limites al Crecimiento’ surgió la idea del «decrecimiento», que rápidamente ya no debía entenderse como «menos crecimiento», sino como el abandono del objetivo de crecimiento para toda la economía. Hoy en día, este concepto bastante vago se utiliza para una economía alternativa, aunque nunca se concretiza.

A finales del siglo XX y con motivo de los quinientos años del «descubrimiento» de América, surgió una visión muy diferente que se venía cocinando desde hacía tiempo, con pensadores como Walter Mignolo y Enrique Dussel. Aníbal Quijano, Eduardo Gudynas y otros declararon que el colonialismo era, en realidad, el inicio del capitalismo y de la modernidad al mismo tiempo, y que, por tanto, los tres debían ser arrojados al cubo de la basura a la vez.

Analizaron el eurocentrismo y establecieron una clara conexión con la esclavitud y la opresión de los pueblos negros e indígenas. Las conferencias de la ONU sobre medio ambiente y desarrollo de Río, junto con Río+20 en 2012, pusieron estas tesis en el punto de mira. A partir de ahora, había que trabajar en la «descolonización» de nuestro pensamiento, porque estábamos en medio de una «crisis de civilización». Para estos movimientos, la dominación del pensamiento y la acción del hombre blanco en el mundo estaba fuera de toda duda y tenía que terminar.

Mientras tanto, el neoliberalismo había provocado dos grandes crisis financieras – 1998 en Asia y 2008 en el mundo entero -, el populismo de derechas y autoritario estaba en auge, las ONG en compañía de Bono y otros sólo hablaban de «hacer que la pobreza pase a la historia». Se suponía que la carga de la deuda del Sur iba a desaparecer, pero lo que ocurrió en realidad fue que África se desindustrializó, que China se industrializó y enriqueció a la velocidad del rayo y que los flujos de dinero del Sur al Norte aumentaron a toda velocidad. Las fuerzas de la derecha estaban contentas. La reducción de la pobreza se convirtió en un entretenimiento. El desarrollo se olvidó.

En 1989 cayó el Muro. Ello supuso un duro golpe para el pensamiento de izquierdas, aunque apenas se analizó lo que podría haber salido mal. En toda Europa, la izquierda radical se deslizó hacia el abismo, los verdes triunfaron, la socialdemocracia boqueó. En América Latina, surgió brevemente una «marea rosa», con regímenes de izquierda y progresistas que propugnaban un «socialismo del siglo XXI», o una filosofía del «buen vivir».

Las fuerzas de la derecha recuperaron el poder con la ayuda del imperialismo de siempre, y el régimen socialista de Venezuela se empantanó en la corrupción, la mala gestion y las sanciones. El buen vivir palideció ante los abusos del extractivismo.

Movimientos sociales

El pensamiento verde, anticolonial y antimoderno tardó una década en llegar a Europa. Los movimientos sociales ya habían empezado a organizarse y a preparar acciones globales a principios de siglo. En el Foro Social Mundial, intelectuales y movimientos de base, con las ONG de por medio, se reunieron para debatir sobre «otro mundo». Fue la época en la que también en la ONU, con el informe Carlsson sobre la «gobernanza global», se difundieron ideas sobre cómo la «sociedad civil» cambiaría el mundo.

Todas las instituciones democráticas estaban atascadas, a nivel nacional e internacional. Las estructuras de los partidos resultaron ser demasiado rígidas y con demasiado poder para escuchar realmente lo que la gente pedía. Los Estados miembros de las instituciones internacionales, desde la U.E. hasta la ONU pasando por la Organización Mundial del Comercio (O.M.C.), sólo tenían que defender su propio interés nacional y olvidaron que el medio ambiente, el desarrollo y todas las dimensiones sociales representaban también un interés general global.

Mientras tanto, los mercados financieros fueron desregulados y las instituciones financieras, junto con algunas viejas y nuevas multinacionales, se hicieron gradualmente con el poder. ¿Sociedad civil? pregunta usted, y nosotros nos volvemos. ¿El Estado? Anticuado, ¿no has visto cómo ha fracasado todo en los países socialistas? Libertad, felicidad, el mercado sabe mejor que nadie lo que quieres y lo que necesitas.

En el Foro Social Mundial, los intelectuales abandonaron decepcionados, dejando sólo a unos pocos creyentes del «espacio abierto» para atacar al neoliberalismo con globos y hip-hop. Nosotros no hacemos política, pareció convertirse en el lema, somos política. Y punto. En Europa, la izquierda radical contaba a menudo con excelentes diputados, pero se escondía en un robusto arsenal socialdemócrata, y las más de las veces faltaba la dimensión internacional. No se reconoce la importancia de la integración europea, el viejo antiimperialismo permanece intacto. La necesidad de organizarse internacionalmente rara vez se entiende.

La trampa

Esta es una presentación demasiado breve y algo caricaturesca de la situación. Por supuesto, en todo el mundo hay grupos socialistas consecuentes, que intentan renovar su pensamiento, pero cada vez más, una mayoría se desplaza hacia una especie de ideología «verde-izquierda». A menudo sigue siendo a-política y tiene sus trampas.  Lo que defienden los neoliberales no es muy diferente e incluso podría mejorarse con algo de ayuda verde.

Por ejemplo, la renta básica. Nadie estaba más a favor de ella que algunos neoliberales que querían deshacerse por fin de la seguridad social y los estados de bienestar. Una suma de dinero individual para todos, el fin de la solidaridad colectiva.

Los cuidados no deben comercializarse. Deberíamos cuidarnos unos a otros y no dejar eso en manos del Estado o de los actores privados. Sí, pero ¿no son las mujeres las que hacen la mayor parte del trabajo de cuidados? ¿Deben trabajar gratis? Y de nuevo, ¿no les encanta a los neoliberales que vengan todos esos voluntarios gratis? Mano de obra gratuita! Mira cómo han aumentado las prácticas y los flexijobs en el mercado laboral!

Vergüenza de vuelo! Los europeos también podrían tomar el tren a Viena o Barcelona, por ejemplo. ¿O tomar el barco a América, como hizo Greta Thunberg. De nuevo, una broma totalmente fuera de lugar, nuestro uso de Internet es más contaminante que los aviones y las reuniones electrónicas están lejos de ser fáciles y eficientes, como ha confirmado el cierre. O bien, ¡el extremadamente contaminante bitcoin! Parece que estamos renunciando a cualquier globalización social, justo cuando las empresas están creando cada vez más su mercado global.  Sí, se vuelve a hablar de proteccionismo, pero ¿alguien cree que Bayer, Google o Río Tinto se esconderán detrás de las fronteras nacionales?

Hay que acabar con el extractivismo. No más minería que destruye la naturaleza y los medios de vida. Es fácil estar de acuerdo, pero si queremos más energía solar o eólica, si queremos teléfonos móviles y computadoras, ¿no necesitamos entonces minerales? En lugar de quitarle credibilidad al movimiento ecologista, ¿no es mejor defender un extractivismo justo y vigilado, con normas estrictas?

En definitiva, muchos movimientos sociales están poniendo un énfasis algo distorsionado y olvidando el meollo de la cuestión. Además, muchas veces se repliegan al nivel local y piensan que se puede hacer otro mundo con el municipalismo. Ahora bien, se puede hacer mucho en las ciudades, efectivamente se puede construir una mayoría progresista allí más fácilmente que a nivel nacional o continental, pero eso no salva el mundo ni mucho menos.

Mira dos ejemplos recientes: la crisis del COVID y los refugiados. Sin un Estado nacional que expida visados, sin instituciones mundiales que lleven a cabo una vigilancia epidemiológica, no se llega a ninguna parte. Una y otra vez, muchos movimientos caen en la trampa de lo que también quieren los neoliberales. Basta con leer los informes de hace diez años del Foro Económico Mundial de Davos para ver cómo quieren, de hecho deshacerse de los Estados y de los sindicatos – ‘vieja izquierda’! -, el único contrapoder a su dominio.

Illich y el Pluriverso

Cuando el año pasado dije en una conferencia internacional en Hong Kong que era escéptico con respecto a muchas ideas ecológicas -¡después de visitar una granja alternativa en Hong Kong! – y que seguía considerando que el desarrollo y el crecimiento eran muy necesarios, me dijeron inmediatamente que era por tanto «eurocéntrico y ecomodernista». Y punto.

Puede que sí. Pero enseguida empecé a leer el entonces muy alabado libro «Pluriverse». Se acababa de publicar y se presentaba como algo así como una nueva biblia del posdesarrollo. Era muy informativo. Pero, sin embargo, creo que completamente equivocado. A menos que realmente quieras vivir en un mundo sin lavadoras, coches, teléfonos móviles, drones y aviones. Y a menos que creas que el budismo o el hinduismo, el Ubuntu, el Ibadismo, el Tikkum Olam o la ética islámica pueden dar las verdaderas respuestas a las preguntas existenciales. Lo que se propugna es un mundo lleno de espiritualidad, sin modernidad y sin universalismo. Como si no fuéramos todos seres humanos con exactamente las mismas necesidades.

El libro se llama «Pluriverso» porque se centra en la diversidad de la especie humana y esta diversidad es sumamente interesante. El problema es que como difiere del «universo», entonces se equipara a la uniformidad. Pero, ¿no es precisamente porque todos somos diferentes que también necesitamos la igualdad de derechos? La igualdad no se opone a la diferencia, sino todo lo contrario. Frente a la igualdad está la desigualdad, y frente a la diferencia está lo ‘mismo’. Lo mismo frente a la diferencia, igualdad frente a desigualdad, no es un problema de lenguaje sino un problema de comprensión o, mejor aún, de confusión semántica. Una cosa es enfatizar la diversidad, las distintas maneras de interrogar el mundo y otra muy distinta es olvidar la igualdad. El universalismo, dice Francis Wolff, es emancipador y nunca, jamás, equivale a la uniformidad.

Y hay más. Muchos de estos pensadores pluriversos son personas muy religiosas y muchos de ellos recuerdan con nostalgia a Ivan Illich, que les influyó con su «convivialidad», la conectividad de estar juntos y el rechazo a cualquier institucionalización, desde la escuela hasta la sanidad.

Creo que Illich engañó a su mundo. Como admitió al final de su vida, sólo tenía un objetivo: llegar a la verdadera iglesia de Cristo y no a una iglesia institucionalizada. Soñaba con la iglesia pura de la encarnación. Las escuelas o los hospitales, sólo eran ejemplos para dejar clara su idea, bien podría haber sido el servicio postal, aclaraba. Por eso Illich tampoco planteó alternativas, las escuelas o los hospitales no importaban, sólo importaba la iglesia pura. Todavía vivimos con esa influencia.

Pluriverso pinta un mundo sin desarrollo, en el que la gente puede cuidar de sí misma y en el que el capitalismo y la lucha de clases han desaparecido como por arte de magia. Ya no hay totalidad, sólo fragmentos de ella.

Capitalismo, colonialismo y modernidad

En última instancia, Illich es irrelevante cuando se le compara con la escuela de pensamiento serio sobre la modernidad. Como he dicho, con el «descubrimiento» de América y el colonialismo, surgió el capitalismo y se desarrolló la modernidad. Este pensamiento es erróneo, y aquí también hay una confusión semántica.

La modernidad es un movimiento filosófico que surgió a raíz del humanismo y es cualquier cosa menos puramente «occidental», a menos que también se llame «occidental» al pensamiento árabe de principios del segundo milenio en España. ¿Por qué no? Según el historiador Jack Goody, la modernidad comenzó… en la Edad de Bronce. No hay nada típicamente occidental en ella. El individualismo, la democracia y la ciencia, son más antiguos que nuestros antepasados griegos.

Pero al mismo tiempo, el reconocimiento del individuo, la creencia en una sola humanidad y en el cambio, el «sapere aude» (atrévete a saber) y la autocrítica, siguen siendo desesperadamente necesarios en el mundo actual, que ya ha cedido demasiada autodeterminación a los gobiernos y las empresas. Y es verdad que muchas ideas de la Modernidad europea han sido apropiadas por la razón instrumental del colonialismo y del capitalismo.

Curiosamente, en muchos casos la confusión se produce con el «pensamiento de modernización» inherente a lo que debía ser el desarrollo en los años sesenta del siglo pasado. A través de la industrialización y la diversificación económica, también se ampliarían la educación y la sanidad, y acabaríamos llegando a instituciones políticas democráticas idénticas a las de Europa Occidental o Norteamérica.

Esta era, en efecto, la firme creencia y no es de extrañar que se plantearan objeciones contra ella, no sólo porque no se produjo en ninguna parte, sino también porque se desterró de antemano cualquier alternativa. Pero el pensamiento de la modernización no es la modernidad.

Más seria fue la crítica de la nueva conciencia de los pueblos originarios en América. Que ellos, desde una cosmovisión diferente, tengan dificultades con el racionalismo «occidental» y la creencia en el progreso lineal es perfectamente comprensible. Y que el colonialismo considerara inexistentes esas otras cosmovisiones y las suprimiera también es un hecho.

Este colonialismo epistemológico ha sido denunciado con razón, entre otros por Boaventura de Sousa Santos. No para sostener que ahora debemos vivir  «en armonía» con la naturaleza -¿quién lo hizo? No para renunciar a elementos  del racionalismo, sino para lograr un verdadero «pluriverso», para tener en cuenta la diversidad, para darse cuenta de que algunos pueblos necesitan comida y bebida, pero quizás no aviones ni abrelatas eléctricos. Teléfonos móviles, sí. Y drones para detectar la tala ilegal.

En definitiva, se trata, una vez más, de que los pueblos puedan determinar su propia modernidad. Por lo general, hay una demanda para ello, y tendrán que determinar ellos mismos en qué sentido quieren ir. La modernidad, un movimiento filosófico y político, comenzó mucho antes del «descubrimiento» de América y del colonialismo. También lo hizo el capitalismo, que tampoco es típicamente occidental.

El hecho es que España estaba lejos de ser un país capitalista cuando le dio a Colón algunos barcos y una tripulación. Y España no introdujo en absoluto el capitalismo en América, sino una forma persistente de feudalismo por la que se entregaban tierras y pueblos a los conquistadores, las «encomiendas». Desde el punto de vista jurídico, ni siquiera fue colonialismo. La población indígena fue asesinada, explotada y en gran parte exterminada, ciertamente. Se saqueó el oro y la plata, sí.

Pero todo este sistema tardó en convertirse en capitalism de verdad. Sólo cuando el sistema de plantaciones con la trata de esclavos se puso en marcha casi un siglo después, con los británicos, franceses y holandeses a la cabeza, se puede hablar de un capitalismo emergente.

El hecho de que estos tres fenómenos – colonialismo, capitalismo y modernidad – estén inextricablemente unidos y no puedan dejar de desarrollarse juntos es sólo el resultado de un ejercicio de pensamiento intelectual que tiene poco que ver con la dura realidad.

Sin embargo, y no debería sorprendernos, este pensamiento comenzó en la propia Europa, primero con el análisis de posguerra por la Frankfurter Schule, culpando al «racionalismo» del holocausto, más tarde con un aplaudido Michel Foucault y su reflexión sobre la «normatividad«. La llamada «teoría francesa» -Derrida, Deleuze, Guattari- hizo el resto, aunque con consecuencias más devastadoras en Estados Unidos que en Europa. Sin embargo, no se trata de condenar a estos importantes intelectuales, sino de indicar su influencia en la problematización de la «modernidad».

El pensamiento «identitario» emergente, el enfoque de interseccionalidad del feminismo radical, el 11 de septiembre y la creciente influencia de la migración musulmana (y su reacción) en Europa, contribuyeron al desarrollo de una fuerte perspectiva posmoderna.

Lo que está ocurriendo hoy en día tanto en Europa como en América Latina, culpando a la «modernidad» del racismo y del pensamiento colonial, es el resultado (¿provisional?) de todo esto. Para varios grupos radicales, los conflictos de clase parecen haberse olvidado, todos los problemas se explican por la etnicidad el privilegio blanco- y el eurocentrismo.

Los negros, las mujeres, los inmigrantes y los indígenas son esencializados, la representación está prohibida, la izquierda y la derecha se convierten en categorías borrosas. Los ejemplos más claros son el golpe «ignorado» en Bolivia por una parte de la izquierda y/o los indígenas radicales, la elección de un banquero neoliberal en lugar de un presidente socialdemócrata en Ecuador por estos mismos grupos, el rechazo anunciado de un «front républicain» contra la extrema derecha en Francia. Como describe acertadamente Stéphanie Roza, estos movimientos antimodernistas se pareces mucho al antiguo, tradicional, conservador y nunca desaparecido antimodernismo.

Por lo tanto, rechazar la modernidad, a principios del siglo XXI, es un paso muy peligroso. Sigo recordando la postura de Goebbels, para quien el verdadero objetivo del nazismo era «olvidar 1789». El populismo autoritario de derechas actual no piensa de forma diferente.

Además, cabe preguntarse sobre este pensamiento predominantemente latinoamericano. No cabe duda de que hay que condenar la colonización, la explotación capitalista y la opresión de los pueblos indígenas. De ahí que la «descolonización» tenga partidarios en América Latina, Asia, África y en el mismo Europa. Sin embargo, la mayoría de los pensadores proceden de América Latina y resulta sorprendente que a menudo sean mucho más matizados que sus seguidores, desde Enrique Dussel hasta Edgardo Lander y Boaventura de Sousa Santos. Me gustaría hacer dos observaciones a este respecto.

América Latina es un continente con graves problemas de identidad. La mayoría de su población es blanca o mestiza, hijos de la denostada colonización. También es el continente que siempre ha destacado por su pensamiento original, desde José Martí hasta Mariátegui, desde el colonialismo interno hasta el estructuralismo y el pensamiento dependentista.

Cuando estudio a algunos de los autores, no puedo evitar sentir que buscan una nueva teoría que les dé por fin un lugar fijo y una identidad, y que elimine la oposición entre las raíces indígenas y la invasión blanca. Quieren liberarse del ‘espejo deformante’ del eurocentrismo para buscar un camino propio, otra Modernidad que a veces se parece más a una autocrítica que a una crítica de ‘Occidente’.

Es más, cuando uno lee a Dussel o a de Sousa Santos y no piensa en ese pasado y presente indígena, sino en, por ejemplo, la Arabia Saudí o el Irán islámicos, pronto empieza a dudar de la pertinencia de algunas de los planteamientos. Lo mismo ocurre con la crítica a la ciencia moderna, porque ¿quién podría pensar que un té de hierbas podría ser tan eficaz como una vacuna contra el coronavirus, por muy importantes que sean algunas medicinas tradicionales.

Y hay más. Varios autores ya han señalado que gran parte del pensamiento de y sobre los pueblos indígenas de América Latina ha tomado un rumbo muy extraño. Los europeos que llegaron a América pensaron que habían encontrado una especie de «paraíso terrenal». Con sus relatos, los europeos fantaseaban aún más sobre este «nuevo mundo», y todo se explicaba utilizando las categorías disponibles en Europa, especialmente la Biblia.

Estos mecanismos han sido brillantemente explicados por Jorge Magasich en «América Mágica» o por Serge Gruzinski en «La machine à remonter le temps». Y es precisamente este pensamiento el que se introdujo en América. O lo que es lo mismo, lo que se considera realmente «indígena» suele ser de origen europeo. En cierta medida, esto ocurre hasta el día de hoy. Toda la historia de la «pachamama» sobre la tierra nutricia (femenina) tiene muy poco que ver con lo que piensan o pensaban los indígenas.

Hoy en día, toda una industria blanca intelectual y material ha comenzado a enseñar a los indígenas quiénes o qué son sus dioses, lo sagrada que es la tierra y cómo ellos, los pueblos originarios, pueden vivir en armonía con la naturaleza. Afortunadamente, algunos grupos se están sacudiendo esta influencia prejudicial y están en un proceso de visibilización de su propia cosmovisión.

En definitiva, gran parte del pensamiento puede reducirse a una necesidad psicológica inconsciente y a un engaño bienintencionado a la población. La realidad de países como Bolivia y Ecuador, cuyos presidentes de izquierdas no han dudado en seguir extrayendo petróleo, gas o litio porque necesitan dinero para sus políticas sociales y para pagar sus deudas, lo dice todo. Rafael Correa señaló repetidamente que la ganadería extensiva que practican algunos indígenas de su país no es menos contaminante y perjudicial para el medio ambiente que la mina que él ha autorizado. Difícilmente se puede ir a mendigar, dijo, cuando se está sentado en una bolsa de oro.

Una crisis política

Que hay que descolonizar nuestro pensamiento, que hay que tirar por la borda toda la «superioridad» occidental y, desde luego, blanca, que hay que aprender a mirar el mundo desde perspectivas distintas a la nuestra, ciertamente. Nadie lo ha explicado mejor que el antropólogo francés Philippe Descola, que estudia la relación entre el hombre y la naturaleza. Nos enseña lo diferentes y lo iguales que somos, cómo vivimos con ontologías diferentes que son cada una híbrida y fluida, y cada una hace «un mundo» para sí misma.

La totalidad no es un dato preexistente, sino que se configura diariamente. También nos enseña lo mucho que podemos aprender de los demás, dándonos cuenta de que nadie, ni negro ni rojo ni amarillo, tiene la respuesta a todas nuestras preguntas. Reconectar a la humanidad y a la naturaleza, eso es lo que tenemos que aprender y eso es urgente, pero no en una armonía inexistente e inalcanzable con la naturaleza, ni mirando cómo los aztecas le sacaban el corazón a sus enemigos. No hay nada que aprender de eso.

Siempre es peligroso atribuir una dolencia a una sola causa y predecir una sola consecuencia. Todos los acontecimientos son imprevisibles; en cualquier momento, un giro sorprendente puede enviar la historia en una dirección diferente. Fíjense en lo que está haciendo ahora el coronavirus. La historiografía teleológica es arriesgada. La gente tiene su futuro en sus manos, eso es seguro, pero tienen que decidir hacer algo juntos.

Es posible que el individualismo haya ido demasiado lejos, es cierto que el neoliberalismo que nos azota desde hace décadas nos hace creer que sólo podemos progresar individualmente, en competencia con el otro. También es cierto que sólo podemos conseguir algo realmente trabajando juntos. El mundo, la sociedad, puede ser moldeada por nosotros mismos, en efecto, pero no es por su cuenta que va a cambiar nada. Las élites, que hacen gala de la mejor solidaridad de clase de todos los tiempos, harán lo que sea para que los de abajo no aprendan nunca a trabajar juntos, como nos dice Yuval Noah Harari.

Mayo del 68 hizo caer muchas vacas sagradas. Los jóvenes estaban cansados de vivir en un entorno rígido y jerárquico. Las viejas estructuras tenían que desaparecer, en el futuro harían las cosas de otra manera.

Esto ha tenido éxito en parte. Muchos movimientos sociales siguen apostando por el «horizontalismo», la renuncia a los jefes y al voto mayoritario. Esto funciona siempre que se trabaje en pequeños grupos y se disponga de mucho tiempo para el debate. No funciona si se trabaja en contextos más amplios y algunas personas tienen menos buenas intenciones de lo que podría parecer por esos bonitos principios.

El Foro Social Mundial fue destruido por este horizontalismo. Las relaciones de poder existen en todas partes; es bueno reconocerlas y neutralizarlas democráticamente. Sin embargo, si el horizontalismo prevalece sobre cualquier reflejo democrático sano, sólo sirve para ocultar y perpetuar las relaciones de poder existentes.

Desde la Primavera Árabe, los Indignados, Occupy Wall Street y Nuits Debout, seguidos por los Gilets Jaunes y otros movimientos de masas, también debemos preguntarnos a dónde puede llevar esto. 2019 fue un año de protestas, desde Hong Kong hasta Santiago de Chile, desde Beirut hasta Argel y muchas otras ciudades. No fueron protestas de un día, sino meses de ocupaciones y denuncias sostenidas. Aquí y allá una pequeña concesión de un gobierno, pero en general, otro fracaso.

Cada vez son más los jóvenes que empiezan a preguntarse si, después de todo, la violencia podría ser la única forma de imponer algo. Las acciones masivas y mundiales de las feministas el 8 y 9 de marzo de 2020 fueron un éxito inesperado. ¿Conseguirá esto una nueva legislación, derechos y menos violencia? ¿Puede la crisis del COVID cambiar algo a mejor? ¿O sólo conducirá a más violencia y represión? Brasil, Filipinas, India, Tailandia y ahora Myanmar no son los ejemplos a seguir.

Una cosa se olvida con demasiada frecuencia: los que quieren tener éxito, los que quieren conseguir algo, deben organizarse, deben tener estructuras, deben tener portavoces. Salir a la calle por miles es importante, politiza, se memoriza, pero conseguir algo políticamente, ya sea de un gobierno existente o de uno nuevo por formar, es difícil. Las lecciones que hay que aprender aquí se encuentran mejor con los sindicatos que empezaron a organizarse hace más de cien años, a nivel local, nacional y mundial. No siempre con el mismo éxito, pero siguen siendo hasta hoy las únicas organizaciones creíbles con las que se puede negociar, que pueden hacer valer algo, son el contrapoder.

A la hora de afrontar las dos grandes crisis actuales, la social y la ecológica, este es el ejemplo a seguir. No necesitamos lecciones de moral y multidimensionalidad, los pobres necesitan seguridad de ingresos y servicios públicos, la crisis medioambiental requiere otra economía.

Esto es fácil de decir pero difícil de hacer. Dos cosas son seguras: los habitantes de los países ricos no bajarán automáticamente su nivel de vida. Todas las promesas verdes de «más felicidad» y «más bienestar» suenan bien, pero no convencerán a los habitantes de las ciudades, como ha demostrado una vez más el ‘lockdown’. Y los países pobres necesitan crecimiento, simple y llanamente. Por supuesto, se puede hablar de qué tipo de crecimiento será, pero con un Producto Interior Bruto de 500 dólares per cápita no se puede saltar muy lejos. Además, una población creciente necesita obviamente más alimentos y más energía.

Significa que tenemos que buscar estrategias que puedan convencer a la gente y que tenemos que buscar un crecimiento que no ponga en peligro la sostenibilidad. Y eso, a su vez, significa política. Un gobierno que pueda tomar decisiones democráticas, a nivel local, nacional, continental y mundial. Y una ecología política que integre la naturaleza en la gobernanza de la sociedad. Porque la crisis climática es una crisis de derechos humanos, de justicia social y de instituciones políticas. Significa que hay que ajustar una serie de ideas.

El robo de la historia

Comienza con nuestra historia. El ya mencionado Jack Goody describió de forma muy interesante cómo «Occidente» escribió su propia historia, sobrestimando considerablemente su papel. Muchos de los conceptos con los que convivimos y que consideramos «típicamente occidentales» no lo son en absoluto, desde la democracia hasta el colonialismo y el capitalismo.

Considerar a Grecia como la cuna de nuestra civilización es también ignorar el contexto en el que pudo florecer una Grecia muy diversa, desde Oriente Medio hasta el norte de África. Ver el pasado desde la perspectiva del presente ha creado muchos mitos injustificados y lo presenta como si el Renacimiento y la Ilustración fueran realmente avances fundamentales que dieron a Occidente una ventaja y una superioridad innegables. Nada más lejos de la realidad, según el autor.

Ahora es precisamente esa falsa narrativa de la historia la que utilizan los movimientos de izquierda y progresistas para dar su crítica a «Occidente» y tirar por la borda todos los rasgos positivos del humanismo, la modernidad y la Ilustración, ¡como si sólo quisieran contentar a la derecha! Al tirar a la basura su creencia en el cambio, la adquisición de conocimientos y la acción colectiva, los progresistas están cavando su propia tumba. La derecha puede entonces tomar tranquilamente el relevo.

Una vez más, no estoy diciendo que debamos tratar de forma acrítica el legado del pasado. Ciertamente, la crisis ecológica hace que la crítica y el replanteamiento sean muy necesarios y urgentes. La conciencia y el activismo actuales de los pueblos indígenas, en el mundo entero, pueden ser un estímulo para repensar nuestros sistemas. Pero creo que debemos alejarnos del fácil pensamiento en blanco y negro que carga a Occidente con toda la culpa.

Es muy poco lo que podemos decir que es un logro «propio», y mucho menos que seamos superiores, pero nuestra forma de sociedad y el discurso que la sustenta bien pueden ser escuchados. O lo que es lo mismo, la crítica al pensamiento no debe convertirse en una crítica sólo a Europa Occidental.

Por ello, me sumo a los autores que dejan una puerta o ventana abierta, como Boaventura de Sousa Santos, que aboga por la apertura de más espacio analítico, por un Occidente no occidental, por una nueva interpretación de la emancipación. La justicia social, sostiene, no es posible sin la justicia cognitiva.

Por tanto, debemos aprender a escuchar lo que otros tienen que decirnos y darnos cuenta de que ninguna «cultura» puede absorber nuevos conocimientos si no son compatibles con los antiguos. Debemos deshacernos de nuestro «pensamiento ortopédico», afirma. Debemos aprender a mirar críticamente nuestra historia y la de los demás y permitir que se desarrollen diferentes formas de modernidad. En otras palabras, no debemos inventar una «alternativa» al sistema actual, sino desarrollar un «pensamiento alternativo». De este modo, se puede dar cabida a la diversidad y al universalismo.

Me parece una buena pauta para reflexionar sobre nuestros «valores modernos», sobre el desarrollo, sobre la economía, el Estado y, por supuesto, sobre nuestra relación con la naturaleza. Los antropólogos, con sus conocimientos y su visión de la diversidad de nuestro mundo, tienen un importante papel que desempeñar aquí.

¿Ahora, llegado a la página 10, he dicho algo nuevo? No, en absoluto. Me he limitado a advertir sobre los callejones sin salida y las derrotas desalentadoras. La crítica al desarrollo, al eurocentrismo y a la modernidad de las últimas décadas ha sido muy relevante y útil. Pero hasta ahora no ha conducido a ninguna alternativa esperanzadora. El pensamiento progresista está totalmente fragmentado y, en parte, en el camino equivocado. El abandono del universalismo y de la creencia en el cambio, el abandono de los enfoques estructurales y de las organizaciones, abrió la puerta a los gobiernos y a las empresas que establecen la ley neoliberal.

Lo que todos los movimientos progresistas de nuevo cuño a favor del posdesarrollo, la descolonización y el decrecimiento olvidan con demasiada frecuencia es que seguimos viviendo en un sistema capitalista en el que la lucha de clases, el racismo, el patriarcado y la lucha verde deben abordarse simultáneamente. Lo que distingue permanentemente a la izquierda de la derecha es la búsqueda de la igualdad, la solidaridad y la emancipación.

Es un problema muy grave cuando algunos ya no quieren ver esa diferencia y piensan, como en Ecuador, que también pueden llamar a votar por un banquero neoliberal, o aplaudir un golpe de derecha contra Evo Morales en Bolivia. Es una evolución peligrosa. De Sousa Santos advierte, con razón, del «fascismo social» que se nos viene encima.

Tal vez, lo que hay que cuestionar no es tanto la división izquierda-derecha como las categorías de capitalismo y socialismo. Son las dos caras de la misma moneda de la modernidad, y rechazar la modernidad implica rechazar ambas ideologías. No es necesario, pero sí debemos examinar cuidadosamente cómo rediseñar la modernidad teniendo en cuenta los cambios en el mundo actual.

El capitalismo ciertamente sigue existiendo, pero está pasando de estar centrado en las relaciones de producción a la financiarización, las clases medias vuelven a estar amenazadas, lo que conduce a un mundo dualizado con unos pocos ricos y muchos pobres, el poder económico y el político se están volviendo a unir. Hay argumentos para pensar que estamos volviendo lentamente a una especie de feudalismo.

En cuanto al socialismo, con todo el respeto y la amistad por la digna lucha en Cuba, hasta ahora no ha conducido a ninguna alternativa atractiva, y mucho menos a un éxito sostenible. Ciertamente no es lo que sueñan los jóvenes. Esta tarea implica más que buscar nuevos nombres, significa buscar una nueva narrativa y práctica social y ecológica emancipadora.  

Por ello, me gustaría hacer un llamamiento a cambiar de rumbo. Aprender a pensar de forma diferente sobre lo que nos une y lo que nos hace diferentes. Lo que nos une es nuestra humanidad, nuestra dependencia de la naturaleza, no nuestra identidad. Pero lo que también nos une es una necesaria lucha social contra todos los mecanismos de opresión. Por lo tanto, tampoco debemos olvidar las viejas luchas. Tirar el bebé con el agua de la bañera no es lo que necesitamos. Tenemos que darnos cuenta de que nadie tiene todas las respuestas correctas.

Y sobre todo: los movimientos sociales que hoy toman tantas iniciativas, que salen a la calle con perseverancia para reforzar su demanda de justicia social, económica y medioambiental, también deben aprender a organizarse de nuevo, a nivel local, nacional, continental y mundial. Sin organización, sin estructura, nada puede cambiar de forma sostenible. La transición puede empezar en tu calle, pero no servirá de nada sin un enfoque global simultáneo.

Puede ser útil volver a leer a algunos autores antiguos, como Mariátegui o Amílcar Cabral. O mirar lo que se dijo en Bandung, el nuevo orden económico internacional, el «concepto unificado» de la ONU.

Hoy la izquierda está colgada de las cuerdas y poco a poco, sin que se note, se va cerrando la puerta del reformismo. Los movimientos sociales son muy débiles por su falta de coordinación. Se aferran a estrategias desesperadas que solo hacen que la cuña sea más profunda. A Trump, Bolsonaro y Duterte les encanta lo que ven. Con los cierres de la crisis del COVID, los movimientos ya no pueden ni siquiera salir a la calle.

Hay un concepto que puede unirnos, creo, porque implica progreso y cambio y nos impone solidaridad: la emancipación. Es liberarnos individual y colectivamente de lo que nos limita y oprime, material y filosóficamente. Es siempre una historia de y y, nunca de o o. Tenemos que sacar esta emancipación de debajo del polvo.

La necesidad del Partido de la Clase Trabajadora. PCT. Anastasio Guevara. Diciembre de 2020

Sin lugar a dudas El Salvador vive uno de los momentos de mayor confusión en la actualidad, por un lado la decepción y traición del partido FMLN, partido que la gente percibía como el abanderado de las luchas de la Clase Trabajadora, llegó al gobierno y encabezó un proceso de ataques a las condiciones de vida de las personas trabajadores y el pueblo,  ésta situación permitió que la gente buscara una nueva alternativa y entregara su confianza a un caudillo, es así como nace y se desarrolla el liderazgo de Nayib Bukele, dentro del mismo FMLN, y luego formara su aparato electoral Nuevas Ideas-GANA-CD.

Por: Anastasio Guevara.

Si esto fuese poco, a esta situación hay que sumarle que el país vive un vacío de dirección revolucionaria y clasista, ya que las organizaciones sindicales y populares, que en el pasado fueron importantes referentes han sido anuladas, ya sea porque fueron destruidas en la década de los 90s por el ajuste neoliberal aplicada por el partido ARENA, o por que fueron cooptadas y compradas por el Gobierno de Colaboración de Clases del FMLN. Por otro lado todas las nuevas opciones partidarias que aparecen en el horizonte solo representan los intereses de la Burguesía, y se ha perdido la perspectiva de clase, el rumbo revolucionario del proceso salvadoreño, la lucha por la transformación radical de la sociedad y el horizonte de la toma del poder por la clase obrera y el Socialismo. Ésta realidad solo profundiza la crisis de dirección revolucionaria ya que podemos constatar en la realidad, que nadie representa los intereses de la Clase Trabajadora y los sectores populares.

La organización que necesitamos

Es evidente para la vanguardia revolucionaria de la Clase Trabajadora que nos encontramos en la orfandad, y que llegó el momento de reorganizar las fuerzas clasistas, revolucionarias y socialistas, necesitamos urgentemente la construcción del Partido de la Clase Trabajadora, con una fuerte implantación en las luchas, con independencia de clase, no centrado en las elecciones, sino en la transformación revolucionaria de la realidad, con miras al Socialismo y no a la reforma del capitalismo.

Para derrotar a la burguesía precisamos de organización y democracia obrera expresada en varios tipos de organizaciones: asambleas barriales, consejos populares, colectivos juveniles, comités de base y sindicatos. Con todo, incluso siendo todas esas organizaciones necesarias, ella son insuficientes para sacar a la burguesía y garantizar el poder para los trabajadores, es necesario un Partido que aglutine a los cuadros y dirija el descontento y la rabia del pueblo pobre y trabajado.

Solo un Partido Obrero, Revolucionario y Socialista, que defienda un programa para la toma del poder, y no el triunfo electoral, puede garantizar que, en la hora precisa, la burguesía no nos derrote.

Un partido revolucionario que no sea su principal meta la disputa electoral, sino la organización de la lucha de los de abajo y la revolución social. Por lo que si tácticamente se decide participar en elecciones, su participación electoral debe estar subordinada a esa actividad principal: fortalecer las luchas y divulgar el programa socialista.

Un partido revolucionario tiene gran democracia y libertad de discusión interna y una actuación organizada contra la burguesía, es decir se rige por el Centralismo Democrático.

Es un partido de ese tipo el que La Plataforma de la Clase Trabajadora, pretende construir un partido basado en la experiencia del Partido Bolchevique de Lenin, el único que se ha demostrado capaz de hacer la revolución socialista hace 100 años.

CARACTERÍSTICAS DEL PARTIDO DE LA CLASE TRABAJADORA

  • UN PARTIDO CLASISTA, Desde niños se nos enseñan que todos somos iguales, que todos somos ciudadanos y que tenemos los mismos derechos. Creemos que esto es una gran mentira, no todos somos iguales, para nosotros existen centralmente dos clases sociales. La primera, la más numerosa, es la clase trabajadora. Somos todos los que vivimos de nuestro propio trabajo, que vamos 5, 6 o hasta 7 días a la semana a trabajar durante 8,9, 12 o hasta más horas, a cambio de un salario. Por otro lado está un grupo de personas privilegiadas, un grupo muy reducido, la clase burguesa. Son las personas que viven del trabajo de los demás, de nuestro trabajo. Son los dueños de las fábricas, y empresas, que a se hacen millonarios a costa de la riqueza que produce nuestro trabajo. Todos los problemas que vemos en el país no se pueden resolver a favor de las dos clases sociales, y lo que siempre han hecho es resolverlos a favor de los patronos perjudicando a los trabajadores. Por lo tanto queremos organizar en nuestro partido únicamente a las personas de la clase trabajadora y los sectores explotados y expoliados, por lo que vamos a defender únicamente los intereses de la clase trabajadora, privilegiando los intereses y luchas de la Clase Obrera, reafirmamos el rol de la clase obrera como sujeto social de la revolución.
  • UN PARTIDO SOCIALISTA, la producción de las mercancías y la riqueza, en el país y en el mundo, es social, es decir la producimos entre todos. Sin embargo la apropiación de esa riqueza no es social, es privada. Por ejemplo la riqueza que se produce entre todos los trabajadores en una fábrica no se la dejan los trabajadores, sino que se la deja el dueño de la fábrica que no hizo nada. Por otro lado el dueño de esta fábrica produce lo que él quiera, en la cantidad que le parezca más conveniente, no produce realmente lo que se necesita. Nuestro horizonte es EL SOCIALISMO, pero no nos referimos a las caricaturas de Socialismo en el mundo, como en China, Cuba o Venezuela, o la traición del Estalinismo tras la muerte de Lenin, sino a la experiencia de los primeros años de la  Revolución Rusa, antes de Stalin, nos referimos a la construcción de una economía socialmente planificada, adonde sea el conjunto del pueblo trabajador, y no un puñado de burgueses y accionistas, quienes decidan cómo, cuánto, qué y para qué producir. Es decir una sociedad donde la producción se ponga al servicio de satisfacer las necesidades de la humanidad y no los caprichos y privilegios de unos cuantos. La única forma de lograr esto es acabando con la propiedad privada de los medios de producción. Esto no significa que no tengamos derecho a tener una casa, como algunos intentan ridiculizar; significa que las grandes empresas e industrias, donde se produce la riqueza no pueden ser de propiedad privada.

Después de la restauración del capitalismo en la Unión Soviética y el Este europeo, el imperialismo y las burguesías nacionales de los diferentes países lanzaron una fuerte ofensiva para tratar de convencer a la clase trabajadora que el socialismo había fracasado, y que era la demostración clara que el capitalismo era superior que el socialismo. Esta campaña presionó mucho a los activistas y organizaciones de la izquierda y terminaron derrotados y dejaron de reivindicar la lucha por el socialismo y se dieron a la tarea de “humanizar el capitalismo” y tratar de distribuir la riqueza. Este es el caso de lo que reivindica el FMLN y los gobiernos “progresistas” de América Latina.

Desde la PCT creemos que querer “humanizar el capitalismo”, redistribuir la riqueza, y conquistar definitivamente mejores condiciones para la clase trabajadora, todo esto sin acabar con el capitalismo es una utopía reaccionaria. Una utopía porque lo que plantean es imposible de realizar. Nos parece que el capitalismo no se
puede humanizar, la riqueza no se puede redistribuir en el capitalismo. Decimos que es reaccionaria porque estás ideas solo sirven para sostener el capitalismo y evitar que los trabajadores decidan luchar por el socialismo.

  • UN PARTIDO CON INDEPENDENCIA DE CLASE, definimos nuestro programa, política y acciones sin injerencia de agentes ajenos a la Clase Trabajadora y nos posicionamos en contra de todos los gobiernos burgueses, incluidos los de frente popular o de Colaboración de Clases y los Populistas, no los apoyamos, ni tampoco a sus medidas y somos oposición de todos ellos desde una postura clasista.
  • UN PARTIDO QUE TENGA EN EL CENTRO LAS LUCHAS DE LA CLASE TRABAJADORA, Apoyamos las luchas de la clase obrera y de sus aliados, contra los gobiernos, las patronales y las direcciones burocráticas del movimiento obrero, campesino y popular, en ese sentido enfrentamos a todas las burocracias y defendemos la democracia obrera en todas las organizaciones de la clase.
  • UN PARTIDO EN CONTRA DE TODAS LAS FORMAS DE OPRESIÓN, creemos que debemos de acompañar las luchas de los sectores oprimidos como las mujeres, sectores de la diversidad sexual, pueblos originarios, entre otros sectores, por lo tanto el Partido de la Clase Trabajadora, deberá abanderar la lucha contra toda Discriminación, El Machismo y la Homofobia, desde una perspectiva de clase y socialista.
  • UN PARTIDO CENTRALISTA DEMOCRÁTICO, Defendemos la democracia obrera, creemos que nuestro programa, política y acciones deben de ser discutidas ampliamente en los organismos del partido, sin embargo una vez sea definida la política actuaremos como un solo puño aplicando la política votada, estamos convencidos de la necesidad de construir partidos revolucionarios democráticamente centralizamos con un fuerte carácter obrero.
  • UN PARTIDO ANTIIMPERIALISTA, tenemos como centro ordenador la lucha contra el imperialismo en todas sus variantes(estadounidense, europeo, etc), y nos posicionamos en contra de los planes impulsados por sus instrumentos internacionales como el FMI, BM, OMC, ONU, BID, BCIE, etc.
  • UN PARTIDO CON UNA MORAL REVOLUCIONARIA Y PROLETARIA, Defendemos la moral de la clase trabajadora y la moral revolucionaria y rechazamos los métodos del “vale todo”, agresiones físicas, calumnias, trabajo desleal, incumplimientos de acuerdos y los arreglos con las patronales, gobiernos.
  • UN PARTIDO INTERNACIONALISTA, defendemos la necesidad imperiosa de construir una Internacional revolucionaria democráticamente centralizada. El internacionalismo parte de entender que los intereses de la clase trabajadora son esencialmente los mismos en todo el mundo, y que la lucha por el socialismo no se puede dar en un solo país. Pero más allá de la solidaridad con las luchas de los trabajadores en cualquier parte del mundo, que es fundamental, creemos que el internacionalismo se concreta en la construcción del partido mundial de la revolución socialista.

El internacionalismo no es una idea romántica, es a la única conclusión a la que se puede llegar al analizar el carácter mundial de la economía capitalista. La economía capitalista desde sus inicios funcionó sobre bases mundiales. El mercado mundial se fue creando en el proceso de consolidación de los estados nacionales, al mismo tiempo que se creaba una división internacional del trabajo, y el intercambio de mercancías. Hoy en día ningún país puede ser autosuficiente o funcionar de forma aislada económicamente. Basta ver a nuestro alrededor, y nos damos cuenta que estamos llenos de cosas que fueron producidas en otros países o con materiales importados de otros países.

El Partido de la Clase Trabajadora será  un partido decididamente internacionalista, por eso cada paso que damos lo hacemos pensando no solo en los intereses de los trabajadores de El Salvador, sino en los intereses de los trabajadores de todo el mundo. Por eso la Plataforma de la Clase Trabajadora se constituye en sección salvadoreña de la Liga Internacional de los Trabajadores, que reivindica la construcción del partido mundial de la revolución socialista, la Cuarta Internacional.

Se avecinan  en El Salvador nuevas elecciones que nos son presentadas como la disyuntiva entre elegir entre los mismos de siempre y las nuevas ideas, como Plataforma de la Clase Trabajadora estamos plenamente convencidos que gane, quien gane, los planes de ajuste del FMI se aplicarán, la verdadera elección se dará en las luchas, en las huelgas, en las batallas en las calles y en los barrios, con la dirección de un partido revolucionario, por lo que no descansaremos en la tarea de dotar a la Clase Trabajadora de un Partido Revolucionario, Socialista, Obrero e Internacionalista.

San Salvador 21 de Diciembre de 2020

Un breve esbozo de la historia de la LIT-CI. Alicia Sagra. 2008

INTRODUCCIÓN

Desde la década del 40 venimos desarrollando una larga y difícil batalla para construir partidos revolucionarios con influencia de masas en todos los países y por construir una Internacional. Ubicamos esta lucha como continuidad de la dada por Marx, Engels, Rosa Luxemburgo, Karl Liebnecht, Lenin y Trotsky por construir la I, la II, la III y la IV internacional.

Por Alicia Sagra

Reivindicamos la I y la II Internacionales como parte de nuestro pasado, pero nuestro modelo de partido mundial es la Tercera, conocida como Internacional Comunista. Ella responde a las necesidades de la época imperialista que estamos viviendo, tanto en las propuestas programáticas de sus cuatro primeros congresos, como en su régimen interno, el centralismo democrático. 

La III Internacional fue degenerada y luego disuelta por el estalinismo. La oposición de Izquierda y después la IV Internacional, nuclearon a los revolucionarios que más consecuentemente enfrentaron esa degeneración. Hoy, la mayoría de las corrientes que se reivindicaban cuartistas, han ido abandonando su programa. Pero existen otras corrientes que si se reivindican de la IV, que reivindican su programa, el Programa de Transición, que hacen foros en su nombre, en oportunidades se realizan acciones conjuntas de homenaje a Trotsky. Incluso existen algunas d esas corrientes que se autoproclaman como IV Internacional. Pero, la trágica realidad es que, a 70 años de su fundación, la IV como organización centralizada, como Partido de la Revolución Socialista Mundial, no existe. Los reveses de la lucha de clases y las desviaciones de sus dirigentes, después del asesinato de Trotsky, provocaron su dispersión. Su reconstrucción es el objetivo estratégico que se dio la LIT-CI desde su fundación. 

Muchos preguntan: “¿por qué reconstruir la IV, si apenas es sinónimo de trotskismo?”. Hoy con toda justicia el trotskismo existe como corriente diferenciada, ya que es sinónimo de la lucha consecuente contra la burocracia y por la democracia obrera. Eso es así, a pesar de que muchos de los que siguen identificándose como trotskistas, traicionan esas banderas. Pero en su momento, Trotsky siempre estuvo en contra de definir a su corriente como trotskista, porque no consideraba ser un sector diferenciado del leninismo. Por eso, cuando utilizaba el término trotskismo, lo ponía entre comillas. En realidad ese término fue impuesto por el stalinismo, como insulto, para indicar que los que apoyaban a Trotsky durante la batalla contra la degeneración, no eran leninista. En ese momento, la corriente liderada por Trotsky se autodenominaba “bolchevique leninista” Esa es la corriente que dio origen a la Oposición de Izquierda y después a la IV Internacional. 

La Cuarta nació para defender los principios del marxismo y del leninismo – el internacionalismo, la democracia obrera y el poder obrero – y para dar una política ofensiva para enfrentar al nazismo y a la Segunda Guerra Mundial, después de la capitulación de Stalin. 

La IV Internacional es la continuidad de la III dirigida por Lenin y es sinónimo de la lucha consciente contra la contrarrevolución estalinista. Es necesario reconstruirla y no construir una internacional distinta, porque sus principios y bases teórico programáticas expresados en el “Programa de Transición” y la “Teoría de la Revolución Permanente”, continúan vigentes, independientemente de las obvias actualizaciones que deben hacerse.

El Programa de Transición sistematiza las resoluciones de los cuatro primeros congresos de la III Internacional: la lucha contra sectarismo y el oportunismo, la posición frente al parlamento, frente a las nacionalidades oprimidas, el control obrero, el frente único obrero, las milicias, soviets, gobierno obrero y campesino, dictadura del proletariado. Como elemento nuevo, incorpora la necesidad de hacer una nueva revolución en la URSS, la revolución política contra la burocracia. El Programa de Transición, siguiendo la orientación del IV Congreso de la III Internacional, supera la división entre el programa mínimo y el máximo. Da el método para elevar a las masas al programa de la revolución socialista, a través de la elaboración de un sistema de reivindicaciones transitorias que parten de las necesidades y del nivel de consciencia actual y las lleve a la lucha por la conquista del poder por el proletariado.

La Teoría de la Revolución Permanente, afirma que en el proceso de la revolución se combinan las tareas democráticas y socialistas; resalta la necesidad de que la clase obrera dirija el proceso y que éste se desarrolle a nivel mundial. Esta teoría elaborada por Trotsky, se concretó magistralmente como política con las Tesis de Abril que Lenin elaboradas por Lenin, cuando llegó a Rusia en 1917.

La actualidad de estas premisas hace que hoy sea imposible elaborar un programa revolucionario que no parta del Programa de Transición y de la Teoría de la Revolución Permanente. Por eso, todo revolucionario que quiera luchar por la derrota del imperialismo, de la burocracia y por el triunfo del socialismo a nivel mundial, independientemente de cuál sea su origen, se aproxima, aunque de manera inconsciente, a las posiciones centrales de la IV Internacional.

Frente a los procesos revolucionarios en Latinoamérica, (Ecuador en el 2000, Argentina 2001, Venezuela 2002, Bolivia 2003 y 2005), las multitudinarias movilizaciones de las masas europeas contra la guerra en 2003, la heroica resistencia del pueblo iraquí, sentimos la impotencia de no contar con un partido revolucionario mundial que hubiera podido encaminar esas luchas hacia un enfrentamiento unificado contra el imperialismo y hacia la pelea por el poder en diferentes países. Algo similar podríamos concluir en relación a los procesos revolucionarios del 89,90, 91, que destruyeron los regímenes del partido único de la ex URSS y del Este europeo, pero que por la falta de una dirección revolucionaria no consiguieron revertir el proceso de restauración capitalista. 

Todo esto es una confirmación palpable de la necesidad de reconstruir la IV Internacional para poder avanzar hacia triunfos duraderos en la lucha contra el imperialismo. 
Esa reconstrucción no es tarea sólo de los llamados “trotskistas”, ni de todos los que se reivindican “trotskistas”, sino de todos aquellos que acuerden con sus bases programáticas. Trotsky encaró la construcción de la IV como una tarea no sólo de la Oposición de Izquierda (los “trotskistas” de la época) sino de todos los que acordaban con los principios, el programa y la política leninistas. El avance del nazismo y del estalinismo, en la década del 30, provocó la capitulación de las organizaciones y dirigentes con los cuales Trotsky estaba trabajando para construir la nueva Internacional. Por eso y por la necesidad urgente de materializar una organización centralizada que conservase los principios marxistas revolucionarios, la IV Internacional fue fundada apenas por quines hacían parte de la Oposición de Izquierda Internacional, y no por todos ellos. A pesar de eso, Trotsky no abandonó su objetivo de luchar por una internacional de masas, donde los “trotskistas” fueran minoría. 

Nosotros no nos consideramos los únicos revolucionarios del mundo. Tampoco creemos que la solución de la crisis de dirección revolucionaria pase por el crecimiento vegetativo de nuestra corriente. Por el contrario, tuvimos siempre una obsesión por llegar a acuerdos revolucionarios, tanto a nivel nacional como internacional. Por eso, la nuestra es una historia de fusiones, tentativas de fusión y también de rupturas, que los principales hechos de la lucha de clases provocaron.

En esta larga y difícil batalla por construir la Internacional tuvimos algunos aciertos y muchos errores. En enero de 1982, cuando se fundaba la LIT-CI, Nahuel Moreno decía: “….Los dirigentes del movimiento trotskista se consideraban colosos que no se equivocaban nunca. Mientras tanto, el trotskismo dirigido por ellos era lamentable…” “…Esa experiencia de andar siempre entre “genios” nos llevó a hacer indirectamente propaganda sobre nuestra base para convencerla de que nos equivocamos mucho, que deben pensar por su cuenta, ya que nuestra dirección no es garantía de genialidades. Queremos por todos los medios inculcar un espíritu autocrítico, marxista, y no una fe religiosa en una modesta dirección, provinciana por su formación y bárbara por su cultura. Por eso, creemos en la democracia interna y la vemos como una necesidad imprescindible. … Avanzamos a través de errores y golpes y no tenemos vergüenza de decirlo….”

“… El problema es cómo cometer menos errores, cualitativa y cuantitativamente. A mi modo de ver, la tendencia es a cometer cada vez menos errores si estamos en una organización internacional y sobre la base del centralismo democrático. Eso, para mi, es un hecho. Afirmo categóricamente que todo partido nacional que no esté en una organización internacional bolchevique, con una dirección internacional, comete cada vez más errores y uno cualitativo: por ser trotskista nacional termina, inevitablemente, renegando de la IV Internacional y adoptando posiciones oportunistas o sectarias para, en seguida, desaparecer…”

NUESTRAS ORÍGENES

La corriente que hoy se denomina LIT-CI existe, como corriente internacional, con diferentes nombres, desde 1953. A nivel nacional, surgió en Argentina, en 1943 como un pequeño grupo dirigido por Nahuel Moreno, el GOM (Grupo Obrero Marxista). Los hermanos Boris y Rita Galub, Mauricio Czizik y Daniel Pereyra (jóvenes provenientes de familias obreras) y Moreno y “Abrahancito” que provenían de la clase media, fueron los primeros integrantes del grupo. Estos jóvenes venían realizando reuniones de estudio desde un tiempo atrás, cuando Moreno con la ayuda, según él decisiva, de Fidel Ortiz Saavedra (obrero boliviano, semianalfabeto), los captó para el trotskismo. En 1943 se conforman como grupo, con el objetivo central de ir hacia la clase obrera, tratando de superar el carácter marginal, bohemio e intelectual del movimiento trotskista argentino.

Nuestra corriente en Argentina tuvo diferentes nombres. Grupo Obrero Marxista entre 1943 y 1948. Partido Obrero Revolucionario entre 1948 y 1956 (públicamente: Federación Bonaerense del Partido Socialista – Revolución Nacional, entre 1954 y 1955). Movimiento de Organizaciones Obreras en 1956 y 1957. Entre 1957 y 1965, fuimos conocidos por el nombre de nuestro periódico, Palabra Obrera. Partido Revolucionario de los Trabajadores a partir de 1965 y PRT (La verdad) después de la ruptura con Santucho en 1968. Partido Socialista de los Trabajadores entre 1971 y 1982. Movimiento al Socialismo desde 1982 hasta 1997, cuando lo que quedaba de ese partido rompió con la LIT-CI.

Durante los primeros años tuvimos una desviación obrerista, sectaria y propagandista. No se hacía trabajo entre los estudiantes y el eje de las actividades era dar cursos sobre el Manifiesto Comunista y otros textos clásicos. Entre 1944 y 1948 tuvimos, además, otra desviación, la nacional trotskista. Es decir, creer que había solución para los problemas del movimiento trotskista y de los trabajadores, dentro del propio país. Sólo en 1948 nuestra corriente comenzó a intervenir en la vida de la Internacional, participando de su Segundo Congreso.

La intervención en las luchas obreras y en la Internacional hizo posible la superación de las desviaciones y el fortalecimiento del grupo. La participación en 1945 en la huelga del frigorífico Anglo- Ciabasa (los frigoríficos de la carne eran el principal sector obrero en ese momento en Argentina) fue muy importante y permitió ganar a la casi totalidad de compañeros del Comité de fábrica. Después de la experiencia en la Huelga de la carne, un grupo de compañeros del GOM, incluido Moreno, se fueron a vivir a Villa Pobladora, un barrio obrero de Avellaneda, en ese momento una de las mayores concentraciones obreras de América Latina. Allí comenzaron a trabajar en el Club Social Corazones Unidos. Al poco tiempo Moreno fue su secretario general. Desde ese Club daban cursos y charlas al tiempo que se ligaban estrechamente a la vida de los obreros de la zona. A partir de ese trabajo el pequeño grupo se convirtió en un centenar.

Poco a poco el grupo se fue fortaleciendo en otras fábricas. Llegaron a dirigir fábricas de tubos de cemento, del cuero. A pesar de ser sólo 100 militantes muy jóvenes, el grupo se afirmó en la clase y así se fueron construyendo los grandes cuadros cuadros obreros, el máximo ejemplo fue Elías Rodríguez, que hoy consideramos con orgullo como aspecto central de la tradición de nuestra corriente.

El partido argentino llegó a ser, junto con el SWP construido con la orientación personal de Trotsky, el partido más obrero del movimiento trotskista.

En ese proceso fuimos superando nuestro sectarismo y propagandismo, pero caímos en una desviación sindicalista, que después comenzó a ser superada gracias a nuestra participación en la Internacional.

LA PARTICIPACIÓN EN LA IV INTERNACIONAL

La dirección de la IV Internacional después de la II guerra, integrada por el SWP (EEUU), Pablo (Grecia), Mandel (Bélgica) y Frank (Francia), era muy joven e inexperta y no consiguió superar el debilitamiento cualitativo provocado por el asesinato de Trotsky en 1940. La característica central de la IV Internacional en aquella época era su sectarismo. Un ejemplo de eso fue su II Congreso. Se realizó en 1948 en medio de grandes cambios: en China se desarrollaba la revolución que triunfaría en menos de un año, en Checoslovaquia los ministros burgueses eran apartados del gobierno y se iniciaba la expropiación a la burguesía, proceso que se venía dando en Yugoslavia desde 1947. El Congreso ignoró esos hechos y el centro de la discusión fue el carácter de clase de la URSS y si se la debía o no defenderla de los ataques imperialistas. Polémica que ya había sido resuelta en el partido yanqui en vida de Trotsky, en 1939 -40.

A pesar del carácter sectario y propagandístico de ese congreso, la participación en él fue cualitativa para el GOM. A partir de ese momento se comenzó a trabajar con un marco internacional. Se comenzó a dar mucho peso, en los análisis y caracterizaciones, al imperialismo y a sus relaciones con las burguesías nacionales. También, se dio mucha importancia a las definiciones internacionales, como fue el caso de la posición asumida por el GOM, como parte de la IV Internacional, a favor de Corea del Norte en su enfrentamiento con Corea del Sur. Moreno siempre reivindicó como un hecho cualitativo la entrada del GOM a la IV Internacional., a pesar que nuestro grupo nunca fue reconocido como sección oficial. En ese momento la sección oficial era el grupo dirigido por Posadas.

LA DISCUSIÓN SOBRE LOS NUEVOS ESTADOS DEL ESTE EUROPEO

En 1949 comienza en la IV la discusión sobre el carácter de clase de esos estados. Moreno reivindica la forma como se dio esa discusión, como un gran ejemplo del centralismo democrático. Existían dos posiciones: Para Mandel (Bélgica) y Cannon (EEUU), esos estados eran capitalistas. La posición de Pablo (Grecia), apoyada con algunas objeciones por Hansen (EEUU) y Moreno (Argentina), sostenía que habían surgido nuevos estados obreros. La polémica se resolvió relativamente rápido. Mandel y Cannon reconocieron la existencia de un verdadero proceso revolucionario en el este europeo y que nuevos estados obreros deformados habían surgido. Este éxito político aumentó el prestigio de Pablo en las filas de la Internacional. Así se llegó al III Congreso en 1951.

LA LUCHA CONTRA EL PABLISMO

En 1951, en plena guerra fría, todos los comentaristas internacionales afirmaban que era inevitable el choque armado entre EEUU y la URSS. Pablo y Mandel, impresionados por los análisis de la prensa burguesa, llegaron a una conclusión funesta para la internacional: para ellos, la tercera guerra mundial era inevitable. Y sostenían que, ante el ataque imperialista, los partidos comunistas, en su afán de defender la URSS, adoptarían métodos violentos para enfrentar a EE.UU. y que eso los llevaría a luchar por el poder en diferentes partes del mundo Lo mismo ocurriría con los movimientos nacionalistas burgueses en los países dependientes.

Basados en este análisis, Pablo y Mandel propusieron el “entrismo sui generis” en los partidos comunistas y nacionalistas burgueses, a los cuales había que acompañar sin críticas, hasta después de la toma del poder. La mayoría del trotskismo internacional, encabezados por la sección francesa, se negó a implementar esa política. Nuestro grupo, el POR argentino (nuevo nombre adquirido por el GOM) denunció que esa posición, que abandonaba la definición de la burocracia estalinista como contrarrevolucionaria y abandonaba la lucha contra ella, era una revisión completa de puntos esenciales del programa trotskista. Afirmábamos que esas posiciones surgían por el carácter pequeño burgués, impresionista e intelectual de los dirigentes europeos.

LA REVOLUCIÓN BOLIVIANA. LA DIVISIÓN DE LA IV INTERNACIONAL

Esas definiciones de la dirección de la IV tuvieron importantes manifestaciones políticas. Con esa caracterización, Pablo se opuso a exigir el retiro de los tanques rusos que enfrentaron el levantamiento de los trabajadores de Berlín en 1953, apoyando de hecho a la burocracia soviética. Pero, la consecuencia más trágica de esa política fue la traición a la revolución boliviana.

En 1952, en Bolivia se da una típica revolución obrera; los trabajadores organizan milicias, derrotan militarmente a la policía y al ejército y surge la COB (Central Obrera Boliviana) como organismo de poder dual. Se nacionalizan las minas y estalla la revolución campesina, que invade los latifundios y ocupa las tierras. Hasta 1954, la principal fuerza armada de Bolivia eran las milicias obreras dirigidas por la COB.

Desde la década del 40 la organización trotskista boliviana (POR) venía ganado enorme influencia en el movimiento obrero. Tenía en sus filas importantes dirigentes mineros, fabriles y campesinos. Su principal dirigente, Guillermo Lora, fue el redactor de las tesis de Pulacayo, una adaptación del programa de transición a la realidad boliviana, adoptadas por la Federación de Mineros. Lora fue electo senador por un frente dirigido por la Federación de Mineros en las elecciones de 1946. En la revolución del 52, el POR co-dirigió las milicias y fue co-fundador de la COB. Tenía peso de masas en Bolivia.

Infelizmente, el POR, siguiendo la orientación del Secretariado Internacional de la IV, encabezado por Pablo, no levantó la política de que la COB tomase el poder. Por el contrario, dio su apoyo crítico al gobierno burgués del MNR (movimiento nacionalista burgués). Sin una orientación revolucionaria, el movimiento de masas fue siendo desarmado y desmovilizado y la revolución en pocos años fue desmontada. Como consecuencia de esta traición a la revolución se dio un gran deterioro del trotskismo boliviano, que entró en un proceso de sucesivas divisiones.

Junto a esa política, la dirección internacional dirigida por Pablo, aplicó un método nefasto. Intervino al partido francés, destituyó a su dirección que no coincidía con su política y e intentó formar una fracción secreta en el SWP norteamericano.

Repudiando la línea de “entrismo sui generis” y los métodos burocráticos y desleales de Pablo, la mayoría de los trotskistas franceses (dirigidos por Lambert) e ingleses (dirigidos por Healy), el SWP (EEUU) y los trotskistas sudamericanos (con excepción del POR boliviano y del grupo de Posadas en Argentina), rompieron con el Secretariado Internacional (SI) dirigido por Pablo y crearon, en 1953, el Comité Internacional (CI).

EL SLATO: LA REVOLUCIÓN PERUANA

En América del Sur, a partir del POR argentino, junto con trotskistas de Chile y Perú, se venía dando la polémica contra la política para Bolivia. En abril de 1953, Nahuel Moreno escribió el texto “Dos líneas” afirmando que el apoyo crítico al MNR era una traición y que se debía exigir a la COB que tomase el poder. Al mismo tiempo, exigíamos que el Comité Internacional actuase como una organización centralizada, única forma de derrotar al revisionismo pablista. La negativa de las fuerzas mayoritarias del Comité Internacional a actuar de forma centralizada y con una política ofensiva provocó el avance de las posiciones pablistas, a pesar de que la mayoría de los trotskistas estuviesen contra ellas. Al fracasar los intentos de que el Comité Internacional actuase centralizadamente y a la ofensiva, empezamos a actuar como tendencia a nivel latinoamericano y en 1957 formamos, junto a dirigentes peruanos y chilenos el SLATO (Secretariado Latino Americano del Trotskismo Ortodoxo).

La existencia del SLATO permitió que participásemos de manera centralizada en el proceso de revolución agraria en Perú en 1962. Se envió a Hugo Blanco, estudiante peruano y militante del POR argentino, para participar del proceso de Cuzco. Hugo Blanco, orientado por el SLATO, encabezó el proceso de ocupación de tierras y de organización sindical del campo. El SLATO envió varios cuadros para apoyar ese trabajo. En ese proceso se construyó el FIR (Frente de Izquierda Revolucionaria), orientado por los trotskistas y que dio origen a nuestra actual sección peruana. En 1963, Hugo Blanco fue capturado por el ejército. De 1963 a 1967 quedó incomunicado. En 1967 fue procesado por la justicia militar. Frente al peligro de que fuese condenado a muerte, se realizó una campaña internacional con adhesiones como la de Sartre, Simone de Beaurvoir, Isaac Deustcher, sindicatos de Francia, Inglaterra, India, parlamentarios franceses, ingleses y otros. Esa campaña impidió que fuese condenado a muerte. Lo condenaron a 25 años de prisión. Otra campaña internacional consiguió su libertad en 1970. Durante todo ese período, los campesinos peruanos continuaron eligiendo a Hugo Blanco como su principal dirigente en todos sus congresos.

LA REVOLUCIÓN CUBANA Y LA REUNIFICACIÓN DE 1963

El reconocimiento y apoyo a la revolución cubana fue la base de la reunificación de la IV Internacional en 1963. Así nace el SU (Secretariado Unificado de la Cuarta Internacional), encabezado por Mandel y por el SWP (Pablo terminó fuera de la IV como asesor del gobierno burgués de Ben Bela en Argelia). En el SU ingresaron todas las fuerzas trotskistas que caracterizaban a Cuba como un nuevo estado obrero. Quedaron afuera, los ingleses y franceses que no reconocieron ese significado de la revolución cubana.

Nosotros tardamos un año en entrar porque pedíamos un balance del proceso anterior, en donde se marcase a fuego el método impresionista que llevó a la traición de la revolución boliviana, para evitar que se volvieran a dar desviaciones parecidas en el futuro. Aunque no se realizó ese balance autocrítico, en 1964, decidimos ingresar, para no quedar aislados y convencidos que, a pesar de las divergencias, una reunificación en torno al apoyo a una revolución era positiva y que eso permitiría participar con más fuerza en el futuro ascenso que preveíamos.

LA LUCHA CONTRA LAS DESVIACIONES GUERRILLERISTAS. EL DESARROLLO DEL PARTIDO ARGENTINO. LA REVOLUCIÓN PORTUGUESA

La revolución cubana tuvo un fuerte impacto en la vanguardia mundial, en especial la latinoamericana. En Argentina, en la década del 60, eso se combinó con un pronunciado retroceso del movimiento obrero. La influencia castrista tuvo consecuencias muy negativas sobre nuestro grupo.

Desde 1957 a 1964, nuestra organización (conocida como Palabra Obrera, nombre del periódico) aplicó la táctica del entrismo en las 62 Organizaciones Peronistas, como medio de construirnos en contacto con lo mejor de la vanguardia obrera que estaba enfrentado a la dictadura militar. En ese período nuestro grupo construye lazos muy estrechos con el movimiento obrero, como nunca consiguió ninguna otra agrupación de izquierda en Argentina, y que marcaron una característica distintiva de nuestra corriente. Pero se abre una fuerte crisis, en el partido argentino, cuando en 1964, ganado por la dirección cubana rompe Ángel Bengochea (el Vasco),.quien fuera junto con Moreno, principal dirigente de nuestra organización. Unos años después (en 1968), se provoca una ruptura que se llevó a los principales cuadros del partido hacia las posiciones foquistas. El principal dirigente de la ruptura fue Roberto Santucho, con el cual nos habíamos unificado en 1965, y quien después fuera el principal dirigente del ERP.

Pero la presión del foquismo no se dio sólo a nivel del grupo argentino, sino que fue absorbida por la dirección de la IV. El método impresionista de Mandel no estaba superado y vino una nueva capitulación hacia el final de la década del 60. Esta vez hacia el castrismo, al aceptar la concepción guerrillerista del foquismo. En el IX Congreso de la IV, (1969) se votó la adopción de la guerra de guerrilla en Latinoamérica Y consecuente con eso, es la organización de Santucho (PRT-El Combatiente) quien es reconocida como sección oficial de la IV. Nuestra organización, (PRT-La Verdad) queda como sección simpatizante.

El SWP de Estados Unidos, el PST argentino (nombre adquirido por nuestro grupo después de la fusión con el sector de Juan Carlos Coral, ruptura del Partido Socialista) y todos los grupos sudamericanos, lideramos una corriente que trabó una gran batalla contra esas posiciones. Decíamos que la teoría del “foco” era una política elitista, aislada del movimiento de masas y que provocaría grandes desastres. Desgraciadamente, los hechos nos dieron la razón. El trotskismo perdió innumerables valiosos militantes que siguieron esa línea equivocada, principalmente en Argentina, pero también en otros países. A partir de ese momento el SU comenzó a convertirse en una federación de tendencias. Cada una aplicaba su propia política.

El ascenso que se inició en 1968 había abierto nuevas oportunidades, la existencia de una organización mundial unificada (el SU) permite aprovecharlas. En Francia, por ejemplo, donde el trotskismo había prácticamente desaparecido a raíz del “entrismo sui generis”, surge la LSR, que llega a organizar a 5.000 militantes y llega a tener una publicación diaria. En América Latina se da el gran crecimiento del PST argentino y en EE.UU el fortalecimiento del SWP por su participación contra la guerra de Vietnam.
Pero, sin haber terminado de superar la desviación guerrillerista, se tuvo que enfrentar una nueva capitulación de Mandel en la década del 70. Ahora a la numerosa vanguardia surgida en el Mayo francés, influenciada por el maoísmo. Nuestra polémica con Mandel está desarrollada en “El partido y la revolución” de Nahuel Moreno.

En el transcurso de esa pelea contra el guerrillerismo y el vanguardismo, nuestro partido argentino, el PST (surgido de una fusión con un sector que rompió con la social democracia) se desarrolló como un fuerte partido de vanguardia. Ese fortalecimiento se da con una política opuesta a la de Mandel: interviniendo en el ascenso que tuvo su punto más alto en la semiinsurrección conocida como el “cordobazo” y participando del proceso electoral. En este período organizamos el partido en Uruguay y en Venezuela.
Cuando estalla la revolución portuguesa en 1974 el PST envía cuadros para participar del proceso. Levantamos una política que impulsaba la pelea por el poder centrada en el llamado al desarrollo y centralización de los organismos de doble poder que estaban surgiendo. Ganamos un sector de estudiantes secundarios y organizamos el partido portugués, que forjó importantes cuadros para la Internacional.

Esa revolución mostró una capitulación más de Mandel que, siguiendo al maoísmo, dio apoyo al MFA (Movimiento de las Fuerzas Armadas) que co- gobernaba el imperio portugués. Ese proceso provocó también la ruptura en 1975 de la FLT (fracción que conformamos con el SWP de EE.UUpara enfrentar al mandelismo), frente a la imposibilidad de compartir una misma política para la revolución. Para el SWP , la tarea central era levantar consignas democráticas y editar obras de Trotsky.

La mayoría de las organizaciones y militantes de Colombia, Brasil, México, Uruguay, Portugal, España, Italia y Perú se retiran de la FLT y junto con el PST argentino construyen una tendencia que enseguida se declara fracción del SU, la FB (Fracción Bolchevique), que más tarde daría origen a la LIT-CI.

La participación en la revolución portuguesa y la polémica con el mandelismo y el SWP nos permitió avanzar en la elaboración teórica sobre la construcción de partidos en procesos revolucionarios, expresada en “Revolución y contrarrevolución en Portugal”.

EL PARTIDO EN BRASIL

Un grupo de jóvenes brasileños exiliados en Chile entra en contacto con nuestra corriente. Después del golpe de Pinochet se dirigen a Argentina y comienzan a militar en el PST. En 1974, vuelven a Brasil para construir el partido. Surge la Liga Obrera y después Convergencia Socialista. El grupo comienza a desarrollarse y, en contacto con la dirección de la FB, elabora la política del llamado a un PT.

La joven organización brasileña se desarrolló durante 12 años sin disolverse ni capitular a la dirección burocrática. Eso fue posible porque pertenecía a una corriente internacional que orientó a hacer entrismo en el PT, a centrar el trabajo en las oposiciones sindicales en la CUT y que dio claridad sobre el carácter burocrático de la dirección lulista.

Con eso, la CS pudo salir del PT, 12 años después, cualitativamente más fuerte a como entró y con una política de Frente Único Revolucionario dirigida a los sectores de vanguardia que rompían con el partido de Lula.

EL PARTIDO COLOMBIANO

En 1976 se da el golpe militar en Argentina, que da origen a la dictadura semi fascista de Videla. El PST tuvo que sacar del país a importantes dirigentes, cuestión que se aprovechó para reforzar el trabajo internacional. En este período construimos nuestras organizaciones en Bolivia, Chile, Ecuador, Costa Rica, Panamá, y reforzamos el trabajo en Portugal y en España. Pero el proceso más importante fue el de Colombia, donde entramos en contacto con un Bloque Socialista, una organización que se venía aproximando a posiciones revolucionarias, con cuadros provenientes del castrismo y la Iglesia. De Allí surge el PST colombiano, que rápidamente se consolida como una organización de vanguardia y pasa a ser uno de los dos pilares de nuestro trabajo internacional.

LA LUCHA CONTRA LA DICTADURA ARGENTINA

Mientras tanto, en Argentina el PST juega un papel heroico en la resistencia a la dictadura genocida. Tuvo aproximadamente 250 militantes presos y más de 100 muertos y desaparecidos. Actuando en la más absoluta clandestinidad, mantuvo su publicación y desarrolló trabajos en el movimiento obrero, en la juventud y en la intelectualidad.
En el comienzo de la guerra en Malvinas, el odio a la dictadura no impidió que se tuviera una política principista de identificar y atacar al imperialismo invasor como el principal enemigo. Desde el primer momento y sin dejar de denunciar a la dictadura, el PST se colocó en el campo militar argentino y militó por la derrota del imperialismo. El PST salió de la dictadura con un gran prestigio en la vanguardia y con 800 cuadros sólidos, que se volcaron a la construcción del MAS, incorporando a la tarea a un grupo de cuadros que venían de otra corriente socialista.

LA REVOLUCIÓN NICARAGÜENSE. LA BRIGADA SIMÓN BOLIVAR

En 1979, cuando estalla la revolución nicaragüense, nuestra corriente, a pesar de las diferencias con el sandinismo, resuelve participar físicamente de la lucha contra Somoza. A través del PST colombiano realiza una gran campaña para construir la Brigada Simón Bolívar. Se forma con militantes de nuestra corriente y revolucionarios independientes, de Colombia, Panamá, Costa rica, EEUU y Argentina. Manteniendo su total independencia política, la Brigada ingresa al ejército sandinista y cumple un heroico papel en la liberación de la región Sur de Nicaragua, que le cuesta muertos y heridos. Con el triunfo de la revolución los brigadistas son recibidos como héroes en Managua. Nosotros veníamos exigiendo que el sandinismo rompiese con la burguesía y tomase el poder conjuntamente con los sindicatos obreros. El sandinismo, siguiendo la política de Castro, estaba en un gobierno de coalición con Violeta Chamorro. La Brigada impulsa la creación de sindicatos y en una semana organiza más de 70. Eso provoca la reacción de la dirección sandinista, que la expulsa de Nicaragua. Varios brigadistas son encarcelados y torturados por la policía panameña, aliada del gobierno sandinista.

El SU envía una delegación a Managua para decir que éramos un grupo ultra izquierdista, con el que no tenían nada que ver y vota una resolución prohibiendo la construcción de partidos por fuera del sandinismo. La negativa a defender a los militantes revolucionarios torturados por la burguesía es la consecuencia de haber votado esa resolución interna que, en la práctica, era un decreto de expulsión de nuestra corriente, obligándonos a romper definitivamente con el SU.

Esos hechos revelan la verdadera polémica dentro del SU. Nosotros defendíamos la necesidad de construir un partido revolucionario en Nicaragua y ellos no. La misma discusión que se dio en relación a Cuba, tanto sobre la construcción del partido como en cuanto a la necesidad de la revolución política. Todo demostraba la creciente capitulación del SU al castrismo y al sandinismo. Y mostraba también el abandono de la moral revolucionaria al haberse negado a defender a militantes trotskistas encarcelados y torturados por la burguesía.

NUESTRA RELACIÓN CON EL LAMBERTISMO

Quien dio su solidaridad a la Brigada fue la corriente dirigida por Pierre Lambert. Así comenzó nuestra relación política con el lambertismo, con quienes no teníamos contacto desde 1963. Se inicia un proceso de discusión, con acuerdos principistas y programáticos expresados en “Tesis para la actualización del programa de transición”, de Nahuel Moreno. En ese trabajo se define al estalinismo y al castrismo como agentes contrarrevolucionarios; se reconocen como revoluciones los procesos de pos guerra (este europeo, China, Cuba) a pesar de no haber sido encabezados por la clase obrera y su partido revolucionario.

Al mismo tiempo, se coloca la necesidad de impulsar la revolución política en los estados obreros degenerados, surgidos en esos procesos; se analiza la guerra de guerrillas y la política oportunista de sus direcciones; se da especial importancia a la defensa del derecho a la autodeterminación de las nacionalidades oprimidas y a las tareas democráticas; se identifica el inicio del proceso de crisis de los aparatos contrarrevolucionarios, en especial el estalinismo, que abre posibilidades de luchar por partidos trotskistas y una IV Internacional con influencia masas.

Se constituye un Comité Paritario que culmina en 1980 con la formación de una organización conjunta, la Cuarta Internacional- Comité Internacional (CI- CI). Como CI-CI realizamos una campaña de apoyo a “Solidaridad” de Polonia. Todo indicaba que se podía dar un gran paso en el camino de la reconstrucción de la IV.

Pero esa tentativa se frustró. Nuestra poca inserción en Europa nos hizo cometer un grave error. No vimos que el lambertismo tenía fuertes lazos con la burocracia sindical, lo que lo llevó a capitular al gobierno de Frente Popular, cuando se produce la victoria de Miterrand en Francia. Lambert se niega a discutir la política para Francia y comienzan las expulsiones de los militantes que se oponen a esa política, lo que provoca la ruptura de la CI- CI.

La polémica con el lambertismo nos obligó a avanzar en la elaboración sobre el Frente Popular, lo que se vio reflejado en el folleto “La traición de la OCI”, de Nahuel Moreno.

LA FUNDACIÓN DE LA LIT- CI

En enero de 1982 se realizó una reunión internacional con los partidos de la FB y dos importantes dirigentes del lambertismo: Ricardo Napurí de Perú y Alberto Franceschi de Venezuela. Uno de los puntos centrales de la reunión era organizar una campaña en defensa de la moral revolucionaria de Napurí, atacado por Lambert por expresar diferencias políticas con este. Otro punto importante era la discusión sobre cómo avanzar en la construcción de la Internacional.

La reunión, después de aprobar la campaña , resolvió por unanimidad convertirse en Conferencia de Fundación de una nueva organización internacional. Se aprobaron los estatutos de la LIT-CI y las tesis fundacionales, donde se plantea la estrategia de la construcción de la IV Internacional con influencia de masas. Ésta no era solamente la FB con otro nombre, ya que a ella se integró Franceschi con su partido, el MIR obrero, que rompió con el lambertismo. Al tiempo se incorpora Napurí, junto a la mitad del partido peruano, que rompió con Lambert.

En 1985, el partido dominicano se integra a la LIT- CI. Ese grupo no venía del trotskismo, sino de una ruptura con la Iglesia.

En 1985 el Primer Congreso de la LIT-CI vota un manifiesto, donde define a la situación mundial como revolucionaria y hace un llamado a construir un FUR a partir de un programa mínimo revolucionario para enfrentar al frente de la contrarrevolución imperialista mundial, las burguesías nacionales, la iglesia, el estalinismo, el castrismo, el sandinismo y las burocracias sindicales y avanzar en la construcción de partidos revolucionarios nacionales y de una Internacional con influencia de masas .En 1987 se integran el grupo del Bill Hunter de Inglaterra, que no proviene del morenismo y un grupo de jóvenes trotskistas independientes de Paraguay, que dan origen al PT paraguayo, la mayor organización de izquierda en ese país.

LAS PRINCIPALES CAMPAÑAS POLÍTICAS DE LA LIT – CI

La primera es por la victoria de Argentina en la guerra por Malvinas, con la que intervinimos en el proceso antiimperialista que se abrió en América Latina. La campaña por el “no pago de la deuda externa” nos permitió empalmar con las grandes movilizaciones bolivianas que obligaron al gobierno de Frente Popular, encabezado por Siles Suazo, a suspender el pago de la deuda. Tuvo gran importancia la campaña contra los acuerdos de Esquípulas y Contadora, impulsados por el imperialismo y apoyados por el castrismo y el sandinismo para frenar el proceso revolucionario de Centroamérica. En 1991 realizamos una campaña por la derrota del imperialismo en la guerra del Golfo.

LA CONSTRUCCIÓN DEL MAS ARGENTINO

Después de la caída de la dictadura argentina (1982), la dirección de la LIT resuelve priorizar el trabajo en ese país, donde se abrió la posibilidad objetiva y subjetiva de que el MAS se convirtiese en un partido con influencia de masas. En las luchas del movimiento de masas y en la participación electoral, el MAS se transformó en el partido más fuerte de la izquierda argentina. Gana gran inserción en las principales fábricas y barrios obreros, encabeza listas de oposición a la burocracia en los principales sindicatos, realiza actos con 20 a 30 mil personal, obtiene el primer diputado trotskista en la historia argentina, llegando a impulsar y dirigir un acto de oposición al gobierno de 100 mil personas.

En medio de ese proceso, la LIT- CI recibe, en 1987, un terrible golpe con la muerte de su fundador y principal dirigente, Nahuel Moreno. Su ausencia provocó un debilitamiento cualitativo en nuestra dirección internacional y tuvo una incidencia muy grande en el desarrollo y desenlace de la crisis que llevó a la destrucción de nuestra Internacional.

LA CRISIS DEL 90

En los primeros años de la década del 90 de desató una gran crisis en nuestra corriente internacional. Grandes cambios se daban en el mundo a partir de la caída del muro de Berlín, que tuvieron repercusiones mundiales. Grandes procesos revolucionarios destruyeron al aparato central del stalinismo, liberando así al movimiento obrero mundial del chaleco de fuerzas que lo tuvo maniatado durante décadas. Pero la falta de una dirección revolucionaria mundial impidió que ese proceso pudiese revertir la restauración capitalista orquestado por la burocracia. Eso posibilitó la ofensiva política, militar e ideológica del imperialismo. Es en ese período que se da la crisis de la LIT-CI que la llevó prácticamente a su destrucción.

En abril de 1992 se produce la ruptura del MAS argentino con métodos reñidos con la moral revolucionaria: ocupación de locales, ataques físicos por parte de la minoría y campañas de calumnias por parte de la dirección mayoritaria. Poco después, la TMI organiza la ruptura del partido brasilero por medio de una fracción secreta. Así se abre la peor crisis de nuestra historia. En este proceso salieron de la LIT el 40% del partido argentino, el PST de Panamá, la mitad del PST peruano, un sector del POS mexicano, la mitad de la sección ecuatoriana, un sector del partido brasilero y sectores de Colombia, Chile, Alemania, Portugal.

El V Congreso, realizado en 1994, vota la reconstrucción de la LIT-CI. Formalmente la LIT-CI existía, se realizaban las reuniones internacionales, había una dirección, se editaba la revista internacional. Pero eso era cada vez más una apariencia, una formalidad. La mejor prueba era la dirección con la que se llegó al V Congreso: Un secretariado internacional integrado por cuatro personas respondiendo a cuatro tendencias (FI, TBI, Nuevo Curso, TR), la mayoría de las cuales no defendía la continuidad de la LIT-CI. De hecho, la LIT había dejado de tener un programa único y había perdido el régimen centralista democrático. De contenido la LIT-CI había sido destruida. Por eso era totalmente necesaria la resolución del V Congreso. A partir de ese momento se comienza a construir un nuevo equipo de dirección encabezado por los dirigentes de la ex TR, al cual se integra la dirección del partido peruano y del grupo inglés, que toma en sus manos las tareas de la reconstrucción. Esa tarea llevó mucho esfuerzo y muchos años ya que la destrucción había sido muy grande. Un hecho a destacar es que desde que se resuelve que la gran tarea a encarar es la reconstrucción de la LIT-CI, se lo hace no como un objetivo en si mismo, sino para que sea motor de la reconstrucción de la IV Internacional. En consecuencia, al tiempo que se encaraban las tareas de reconstrucción, se iniciaba un trabajo de relaciones con diferentes organizaciones en diferentes países (Inglaterra, Francia, Irán, Japón, Alemania, Turquía, la ex URSS…) con el objetivo de avanzar en ese objetivo estratégico.

Días antes del Congreso, se había retirado la FI, lo que significó la salida de la mayoría del partido español. Ni bien terminado el V Congreso, rompe la TBI lo que implica la pérdida del PST colombiano, del PRT de Costa Rica, de las secciones de Hondura y Nicaragua, de más de 100 militantes argentinos. Nuevo Curso, dirigido por lo que quedaba del MAS argentino, se quedan en la Internacional (y participa de la dirección) pero sin reivindicar sus bases fundacionales. Al poco tiempo comienzan a defender que la LIT-CI debe abandonar el centralismo democrático y dejar de lado la estrategia de reconstruir la IV Internacional. Sus posiciones son derrotadas (por un voto) en el VI Congreso (1997). Se niegan a acatar sus resoluciones y salen de la Internacional, lo que quedaba del MAS argentino, Convergencia Socialista de Uruguay, la LST de Francia, el PST de Venezuela y un sector del partido brasileño.

Tal como dice el Balance de Actividades aprobado por el VIII Congreso “A la hora de contar las bajas y pérdidas podemos constatar que en todo ese proceso la LIT no sólo perdió su programa, su régimen, sus finanzas, sus publicaciones, sino que también perdió el grueso de su patrimonio humano. En total la LIT perdió entre 4 y 5 mil militantes, entre ellos posiblemente el 80% de los cuadros de más experiencia”.

LAS CAUSAS DE LA CRISIS

Una combinación de factores objetivos y subjetivos explica nuestra crisis. En esa combinación los elementos objetivos han sido los determinantes. Esto se hace evidente cuando se ve, que no fue sólo nuestra Internacional la afectada, sino que fue un proceso que se dio sobre la totalidad de las organizaciones izquierda, sin excluir a las revolucionarias.

Después de la derrota militar en Vietnam, a mediados de los 70, el imperialismo yanqui comenzó a enfrentar los procesos revolucionarios apelando preferentemente a las instituciones y mecanismos de la democracia burguesa y a la captación de dirigentes. Moreno denominó a esa política como “reacción democrática”. Esa política, que tuvo grandes éxitos para canalizar importantes procesos revolucionarios, también hizo estragos en la mayoría de la izquierda a nivel mundial: El abandono por parte de la OLP de la lucha por al destrucción del Estado de Israel, la integración al régimen de los Sandinistas en Nicaragua y del Farabundo Martí en El Salvador; la socialdemocratización de los partidos comunistas; la integración al régimen, a través del PT, de la mayoría de la izquierda brasilera… Pero este proceso de capitulación de la vieja izquierda antiimperialista pega un salto después de la restauración en los estados obreros. Esta vez, también son afectadas las organizaciones trotskistas.

El problema central fue que la restauración no se dio como la había pronosticado Trotsky, de la mano de un golpe contrarrevolucionario, sino en nombre de las libertades democráticas y la utilización de las instituciones burguesas. La falta de una dirección revolucionaria hizo que una parte de la población tuviera expectativas en esas instituciones restauradoras. A partir de eso y de la campaña del imperialismo sobre “la superioridad del capitalismo”, la amplia mayoría de la izquierda abandonó la perspectiva del socialismo y de la lucha por el poder. Gran cantidad de partidos se disolvieron, miles y miles abandonaron la militancia y los que se mantuvieron activos, comenzaron a buscar nuevos rumbos… Como no “se podía” o no se quería tomar el poder, comenzaron a buscar como ganar “espacios de poder”. Se fueron imponiendo “nuevas” ideas: la clase obrera está desapareciendo, hay que buscar otros sujetos sociales; stalinismo es continuidad del leninismo, el centralismo democrático lleva a la burocratización, todo pasa por la horizontalidad; todo poder corrompe, los trabajadores pueden resolver sus problemas sin tomar el poder…. Así se fue construyendo un nuevo reformismo, un reformismo sin reformas.

Este “vendaval oportunista” que golpeó sobre el conjunto de la izquierda incluidas las organizaciones trotskistas, también lo hizo sobre la LIT-CI. Esto se reflejó, centralmente, en las políticas equivocadas con que la dirección argentina respondió a los grandes desafíos que planteaba la realidad.

Siguiendo Trotsky, Moreno siempre decía que para enfrentar los grandes cambios y las crisis que estos generaban, había que recurrir más que nunca a la clase obrera, más que nunca a la teoría marxista y más que nunca a la Internacional.

La dirección argentina hizo lo contrario, cayó un una desviación electoralista y fue secundarizando la construcción en la clase obrera; en vez de basar su política en la teoría marxista, elaboró nuevas teorías para justificar su política; a partir de éxitos circunstanciales y de un gran crecimiento, se consideró autosuficiente y cayó en una desviación nacionaltrotskista.

La diferencia con otras organizaciones trotskistas fue que en la LIT-CI había reservas y un sector resistió como pudo las embestidas de ese vendaval. Por eso la LIT, a diferencia del SU, no corrió en el sentido que soplaba el viento y no se pudo adaptar a la “modernidad”. Por el contrario en la LIT-CI el “vendaval oportunistas” provocó crisis, rupturas, desgarramientos, hasta que finalmente se pudo volver a retomar el camino correcto.

LA MUERTE DE NAHUEL MORENO Y LA DESTRUCCIÓN DE LA LIT-CI

Si Moreno hubiese estado vivo, probablemente igual hubiéramos entrado en crisis, ya que las causas objetivas eran muy fuertes. Lenin. Trotsky, Rosa Luxemburgo, enfrentaron las presiones chauvinistas durante la primera Guerra Mundial, pero no consiguieron evitar la bancarrota de la Segunda Internacional. Moreno no consiguió derrotar las presiones guerrilleristas que originaron la ruptura en Argentina con Bengochea y después con Santucho…

Pero sin dudas, si Moreno hubiese estado vivo, el desarrollo de la crisis hubiese sido diferente y las bajas mucho menores. Teniendo en cuenta la trayectoria de Moreno y su prestigio, muy difícilmente, la mayoría de la LIT hubiese caído en semejante desviación, si hubiese contado con su dirección. Con la dirección de Moreno, se hubiera dado la crisis, habría habido rupturas, pérdidas, pero casi con seguridad no habríamos llegado a la destrucción.

Hay corrientes como el Partido Obrero de Argentina que opinan que la crisis y destrucción del MAS y de la LIT es producto de la política de Moreno y que la actual evolución oportunistas del MST argentino, sería la continuidad del morenismo. Esa posición tiene poca consistencia. El MST se construye rompiendo con el morenismo. Nahuel Moreno construyó nuestra corriente enfrentando al oportunismo, a los frentes populares, a la reacción democrática, luchando incansablemente por la construcción de partidos revolucionarios en la clase obrera, por la construcción de la Internacional. Esa lucha de décadas creó raíces, dejó reservas y por eso es que desde el interior de la LIT-CI y del propio viejo MAS, surgió la resistencia que encaró la reconstrucción y consiguió volver a poner en pie a nuestra Internacional.

LA NUEVA REALIDAD DE LA LIT-CI

A partir del V Congreso se comenzó un lento y traumático proceso de reconstrucción. Este proceso fue muy dificultoso por la forma en que se tuvo que dar. No es la primera vez, en la historia de las Internacionales que es necesario enfrentar una ofensiva del revisionismo. Se dio en la Segunda, pero ahí la pelea fue encabezada por una parte de los principales dirigentes: Kautsky, Rosa Luxenburgo, Liebknetch…, en un primer momento; Rosa, Lenin, Trotsky, Liebknetch .., después de 1914. En la Tercera, la batalla fue encabezada por Trotsky. En el SWP yanqui, Trotsky y Cannon, estuvieron a la cabeza del combate contra los antidefensistas.

En la LIT fue muy diferente, los principales dirigentes, los que habían trabajado más estrechamente con Moreno, los que tenían más experiencia y más prestigio, fueron cayendo uno a uno frente al “vendaval oportunista”, fueron adoptando una u otra posición revisionista o se fueron y no dieron la pelea. Ese combate tuvo que ser encarado por dirigentes de segunda o tercera línea, que no tenían ninguna experiencia en la dirección internacional ni en el combate teórico programático. Por eso es que con muchas dificultades, y cometiendo muchos errores en el camino, se fueron reconstruyendo los organismos y a partir de ellos se fue avanzando en la comprensión común del mundo.

Así, poco a poco, se fue recuperando la tradición teórica, política metodológica. Se fue dando respuesta política a nuevos hechos: la guerra de Bosnia, la “globalización” capitalista, la reestructuración productiva. Hemos conseguido dar una interpretación teórica a la restauración capitalista en los ex estados obreros degenerados. Los partidos de la LIT-CI intervinieron en los procesos revolucionarios latinoamericanos y hemos dado una política principista, de enfrentamiento a los nuevos gobiernos (de Frente Popular o populistas) originados por esos procesos.

En torno a la participación en estos procesos, la LIT-CI se fue reconstruyendo, no sólo en términos teóricos, programáticos, metodológicos, morales, sino también en términos organizativos. El mayor avance organizativo se dio en Brasil con la construcción del PSTU que se ha convertido en una referencia indiscutida para las luchas y el activismo brasilero. Pero no fue el único, las secciones profundizaron su inserción en el movimiento de masas, se comenzó la reconstrucción del partido argentino, se constituyeron nuevas secciones en Ecuador, en Costa Rica., el POI de Rusia ingresó a la LIT-CI. El Correo Internacional y la revista Marxismo Vivo han ido mostrando, regularmente, las definiciones políticas ante los principales hecho de la lucha de clase y el avance de las elaboraciones teórico- programáticas.

Estos hechos, sumados a la relaciones establecidas con el CITO con el objetivo de ir a una única organización, hicieron que el VIII Congreso (junio de 2005) constatase que la LIT-CI estaba viviendo una nueva realidad.

Posteriormente nuevos hechos han confirmado esa definición: la unificación con el CITO, que significó la recuperación del PST colombiano y de organizaciones y cuadros en Perú, Costa Rica y Argentina. El continuado desarrollo del PSTU, su correcta ubicación de enfrentamiento al gobierno de Frente Popular de Lula, el éxito de su política de construir la CONLUTAS como central obrera y popular de alternativa; la entrada a la LIT- CI del partido italiano, la fundación de la sección venezolana, el desarrollo del trabajo en Centroamérica, la fundación de la sección belga. También hubo algunos hechos de signo opuesto: la salida del POS mexicano, del MST de Bolivia y de la LST de Dominicana. Pero esos negativos no cambian el nuevo signo de la situación de la LIT, sino que son remesones de la vieja crisis y reacciones al proceso de recuperación y bolchevización que viene avanzando.

NUESTRO PROYECTO ESTRATÉGICO: LA RECONSTRUCCIÓN DE LA IV INTERNACIONAL

La nueva realidad de la LIT-CI se combina con una nueva realidad de la lucha de clases a nivel latinoamericano y mundial. La situación revolucionaria mundial y latinoamericana que se comenzó a manifestar con fuerza a partir del inicio del siglo XXI, está pasando por un nuevo momento. La resistencia iraquí está colocando la posibilidad de una nueva derrota militar del imperialismo yanqui. Los planes de EE.UU de estabilizar el Medio Oriente se vienen abajo como lo muestra la derrota del ejército israelí en el Líbano. El prestigio de Bush cayó abruptamente. En los países imperialistas los ajustes por la crisis económica provoca la reacción de los trabajadores, a los que se suman las fuertes luchas de los obreros inmigrantes. En el caso de EE.UU, esto significa que se está construyendo un puente con las luchas latinoamericanas. Pero el ataque imperialista continúa. En América Latina, se incrementa la ofensiva colonizadora del imperialismo, el saqueo de los recursos naturales, las exigencias de ajustes para pagar la deuda externa, ahora todo agudizado por la crisis económica mundial. También continúa la respuesta de las masas ante ese permanente saqueo. La diferencia es que ahora este ascenso obrero y popular se comienza a dirigir contra los que aplican los planes, es decir los nuevos gobiernos que surgieron para canalizar o prevenir el ascenso: Lula, Chávez, Evo, Kirchner, Tabaré….

Esta realidad, sin ninguna duda, pone en evidencia la urgente necesidad de avanzar en la solución de la crisis de dirección revolucionaria, construyendo una dirección revolucionaria mundial. Al mismo tiempo este nuevo momento de la situación mundial provoca importantes cambios en la conciencia del movimiento de masas que facilitan esa tarea. Con el surgimiento de estos gobiernos se vio en su máxima expresión los efectos del “vendaval oportunista. La mayoría de las corrientes de izquierda, incluidas, la mayoría de las que se reivindican trotskistas, capitularon a ellos. Pero esta nueva realidad, que tuvo su máxima expresión en la derrota electoral de Chávez en el referéndum, está provocando rupturas por la izquierda de esas organizaciones, que buscan nuevas referencias nacionales e internacionales.

Volviendo a lo planteado en la Introducción, ante esta situación la LIT-CI reafirma su proyecto estratégico: la reconstrucción de la IV Internacional y hace un llamado a la unidad en torno a un programa revolucionario, que contemple no sólo las respuestas políticas a los principales hechos de la lucha de clase, que acerquen a los trabajadores a la lucha por el poder, sino también los aspectos de concepción de partido, de método y de moral revolucionaria.

Proponemos aplicar para la reconstrucción de la IV el mismo método que aplicó Trotsky en su construcción. En primer lugar haciendo el llamado no sólo a los que provienen del trotskismo, sino a todos los revolucionarios con los que coincidamos programáticamente, independientemente de su origen.

En segundo lugar, no dirigiendo el llamado a todos los que se reivindican trotskistas. Por un lado porque hay organizaciones que así se reivindican y que sin embargo han abandonado el programa revolucionario al apoyar o participar en gobierno burgueses. Y por otro lado, porque existen las sectas autoproclamatorias que recitan el programa pero, por sus métodos fraccionalistas y desleales, cumplen un papel absolutamente destructivo.

En tercer lugar, planteando las unificaciones no través de conferencias abiertas y grandes actos, sino a partir de una paciente discusión programática y de una actividad común en la lucha de clases., que permitan avanzar sobre acuerdos sólidos y relaciones de lealtad revolucionaria.

Dado el deterioro producido por el “vendaval oportunista”, es necesario precisar algunos aspectos que actúan como divisoria de aguas:

  1. La defensa de la independencia de clases frente a todos los gobiernos burgueses, incluidos los de Frente Popular o populistas. No los apoyamos ni tampoco a sus medidas y somos oposición de todos ellos.
  2. Apoyamos las luchas de la clase obrera y de sus aliados.
  3. Enfrentamos a toda burocracia y defendemos la democracia obrera en todas las organizaciones de la clase.
  4. Tenemos como centro ordenador la lucha contra el imperialismo en todas sus variantes.
  5. Nuestro objetivo es la destrucción del Estado burgués y sus FFAA, y la construcción de un estado obrero, basado en organismos democráticos de la clase, que impulse la revolución socialista internacional.
  6. Defendemos la moral revolucionaria y rechazamos los métodos del “vale todo”, agresiones físicas, calumnias, trabajo desleal, incumplimientos de acuerdos.
  7. Reafirmamos el rol de la clase obrera como sujeto social de la revolución.
  8. Defendemos la necesidad de construir partidos revolucionarios democráticamente centralizamos y el carácter obrero que deben tener esos partidos.
  9. Defendemos la necesidad imperiosa de construir una Internacional revolucionaria democráticamente centralizada

Este breve esbozo de nuestra historia, tuvo el objetivo de mostrar los aspectos centrales de esta larga marcha de nuestra construcción. Mostrando nuestros aciertos, nuestros puntos fuertes y también nuestras fallas, nuestras desviaciones, nuestras crisis porque, como decía Moreno “avanzamos a través de errores y golpes y no tenemos vergüenza de decirlo”

Hoy, después de muchos años de crisis y desgarramientos, estamos viviendo una nueva realidad. Estamos viviendo un proceso de fortalecimiento que nos pone en mejores condiciones para avanzar en el proyecto estratégico. Tenemos una historia, una experiencia acumulada, un programa que seguimos construyendo, una estructura de secciones, publicaciones, una fuerza militante, que ponemos a disposición para avanzar en la reconstrucción de la IV Internacional.

Buenos Aires, junio 2008

EL SALVADOR.- 1 mayo 2020: sindicatos en pie de lucha por sus derechos. PSOCA. German Aquino

Este 1 de mayo del 2020, a pesar de la pandemia por el COVID-19, los  sindicatos salvadoreños se movilizaron para conmemorar el día internacional de la clase trabajadora.

Para unos dicha acción fue considerada como una violación a las medidas de cuarentena, pero la gran mayoría dieron su visto bueno, debido a que se recordó a los Mártires de Chicago y sirvió para denunciar a los empresarios  que incumplen sus compromisos con los trabajadores y la negligencia del gobierno de Bukele al permitir  violaciones a los derechos de los trabajadores.

Dos marchas, intereses diferentes

En el 2019 en el marco de la conmemoración del día internacional de la clase trabadora desde varios puntos de concentración partieron diferentes movilizaciones, las cuales convergieron en cuatros puntos.

Esto fue el reflejo de la dispersión y atomización del movimiento sindical y social producto de las políticas de los gobiernos del FMLN.

En este 2020 fueron dos Movilizaciones una que se manifestó sobre la autopista al aeropuerto internacional de Comalapa y que culminó frente a las instalaciones de la zona franca de San Marcos. La otra que partió del reloj de Flores y culminó en el Ministerio de Trabajo donde fueron recibidos por Rolando Castro actual Ministro de Trabajo.

Marcha clasista exige pago de salarios y un alto a los despidos

La marcha que culminó frente a las instalaciones de la zona franca de San Marcos contó con la participación de la Coordinadora Sindical Salvadoreña (CSS), Sindicato Salvadoreño de Industrias textiles y Similares, (SSINT), Sindicato de la Industria Textil, Similares y Conexos de El Salvador (SITSCES) Liga Internacional de la Lucha de los Pueblos-ILPS. El Salvador, Sindicato de Trabajadores Independientes (STINOVES), Sindicato del Gremio de Trabajadoras y Trabajadores de la seguridad privada de El Salvador (SIGATSPES), entre otros.

Representantes del SSINT denunciaron que a la fecha a muchos trabajadores de empresas como F&D S.A de C.V; Apple Tree y Hermano Textil de la Zona Franca de San Marcos, continúan sin pagarles los salarios correspondientes a los trabajadores argumentando la falta de liquidez, pero que las mismas empresas les ofrecen prestamos los cuales tendrán que pagar después. Así mismo denunciaron suspensiones de contratos y reducción de prestaciones, entre otras violaciones.

De igual manera SIGATSPES denunció que la mayoría de empresas de seguridad privada están violentando los derechos en donde existen trabajadores mayores de 60 años los cuales debido a la pandemia fueron mandados a cuarentena a raíz de las órdenes del gobierno, pero que no les están cancelando los salarios; dichos trabajadores por tener un supuesto trabajo el cual les pagaría sus salarios no fueron beneficiados con la ayuda de los $300 por parte del gobierno de Bukele.

Así mismo, miembros de SIGATSPES denunciaron que muchas empresas de seguridad aprovechando la pandemia están realizando despidos, suspensión de contratos, reducción de   prestaciones y la falta de entrega de equipos de protección personal como mascarillas quirúrgicas y de insumos para la higiene de mano, como alcohol gel.

Las denuncias son las mismas a nivel de la empresa privada: impagos de salarios, despidos, suspensión de contratos, pagos incompletos, falta de Equipo de Protección, etc.  Los sindicatos denunciaron que el actual ministro de trabajo Rolando Castro no ha hecho nada.

El gesto combativo de la marcha-caravana

Esta se movilizo sobre la Alameda Juan Pablo II y culmino en el Ministerio de Trabajo, entre los sindicatos que participaron fueron: Sindicato de Trabajadores del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (STISSS), Sindicato para la Defensa de los Trabajadores del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (SIDETISSS), Sindicato de Trabajadoras Y Trabajadores del Órgano Judicial (SITTOJ), Sindicato Unión de Trabajadores de la Construcción (SUTC), ASTRAM, entre otros.

Entre las denuncias del STISSS estuvieron la falta de Equipos de Protección Personal, manifestando al respecto:  “Tenemos un grave, grave problema ya que las jefaturas nos han estado entorpeciendo los procesos, nos han estado restringiendo los equipos de bioseguridad de todos los compañeros y compañeras que estamos al frente de estas instituciones”  (01/05/ 2020).

Lo anterior es muy importante, pero los sindicatos del ISSS deben recordar que fueron los trabajadores por si mismos quienes hicieron públicas la falta de EPP, lo cual obligo a las autoridades del ISSS a apresurar las compras de  los EPP, que a la  fecha son limitados y ante un incremento de casos por el COVID-19 podría volver a desabastecerse.

De igual manera en esta caravana   denunciaron la suspensión de contratos en la empresa privada, pero lamentablemente el ministro de trabajo del cual avalan la gestión no ha hecho nada para que se les paguen los salarios a los trabajadores de la maquila y parar los despidos.

Lo característico de esta marcha-caravana fue su apoyo al gobierno de Nayib Bukele y al Ministro de Trabajo Rolando Castro como se podía leer en sus mantas en la cuales manifestaban: Un buen gobierno solo puede existir cuando hay buenos ciudadanos Nayib el pueblo te apoya viva el primero de mayo STISSS presente.

Rolando Castro ministro de Trabajo al referirse a la marcha manifestó: “No lo vemos, nosotros como gobierno, queremos ser contundentes, no lo vemos como una ruptura al decreto; lo vemos como un gesto loable de un pequeño grupo significativo, nada más simbólico, porque este día ellos pudieron haber salido con 20 mil o 30 mil personas a las calles y no lo hicieron”.  (EDH. 01/05/2020).

Las marchas virtuales

Muchas organizaciones sindicales y sociales ante las medidas dictadas por la pandemia del COVID-19  y el temor mismo al contagio o a ser confinado en un centro de contención por las fuerzas armadas o la policía nacional civil prefirieron  no marchar físicamente pero realizaron movilizaciones virtuales, lo cual permitió hacer públicas muchas violaciones a los derechos de la clase trabajadora.

Casi siempre la cúpula del FMLN se ha montado en las movilizaciones de los trabajadores, haciendo de la conmemoración del 1 de mayo un acto político electoral, este año aun su presencia en redes sociales fue casi nula.

Por una corriente sindical que represente y defienda a los trabajadores

El Partido Socialista Centroamericano (PSOCA), en la declaración del primero de Mayo del 2020 titulado CENTROAMERICA.- 1 de Mayo: Si, luchemos contra la pandemia, pero sin despidos ni recortes salariales y socorriendo a los más pobres (https://www.elsoca.org/index.php/america-central/declaraciones-del-psoca/5398-centroamerica-1-de-mayo-si-luchemos-contra-la-pandemia-pero-sin-despidos-ni-recortes-salariales-y-socorriendo-a-los-mas-pobres)  además de proponer un plan de lucha sindical a nivel regional y  llamar  a los trabajadores, centrales obreras y campesinas, sindicatos y organismos populares, a luchar unidos en toda la región para solucionar los problemas comunes: manifiesta la necesidad de   luchar contra la atomización y por la independencia de los sindicatos en El Salvador… expresando a la vez “…con el arribo al poder de Nayib Bukele, la historia se repite. El Ministro de Trabajo impuso una nueva Junta Directiva en el STISSS irrespetando las libertades sindicales y a las mismas bases. Actualmente el gobierno de Bukele busca capitalizar el descontento de las organizaciones sindicales que fueron golpeadas por el FMLN  y ARENA, impulsando desde el MTPS una corriente sindical ligada a su gobierno, para utilizarlo como base social del partido Nuevas Ideas…” lo anterior ha quedado confirmado este primer de mayo.

Las bases sindicales deben ser las garantes que las direcciones sindicales no continúen haciendo de los sindicatos organismos de bases de los partidos políticos electorales, se debe luchar por la independencia y la autonomía sindical, en décadas anteriores se ha logrado detener el intervencionismo gubernamental y patronal.

Este 1 de mayo del 2020, a pesar de la pandemia por el COVID-19, los  sindicatos salvadoreños se movilizaron para conmemorar el día internacional de la clase trabajadora.

Para unos dicha acción fue considerada como una violación a las medidas de cuarentena, pero la gran mayoría dieron su visto bueno, debido a que se recordó a los Mártires de Chicago y sirvió para denunciar a los empresarios  que incumplen sus compromisos con los trabajadores y la negligencia del gobierno de Bukele al permitir  violaciones a los derechos de los trabajadores.

Los 10 tipos de falacias lógicas y argumentativas. Adrián Triglia

Argumentos y razonamientos contradictorios con la lógica: ¿cómo identificarlos?

La filosofía y la psicología se relacionan entre sí de muchas maneras, entre otras cosas porque ambas abordan de una u otra forma el mundo del pensamiento y las ideas.

Uno de estos puntos de unión entre ambas disciplinas se encuentra en lo relacionado con las falacias lógicas y argumentativas, conceptos utilizados para referirse a la validez (o a la falta de la misma) de las conclusiones a las que se llega en un diálogo o debate. Veamos con más detalle en qué consisten y cuáles son los principales tipos de falacias.

¿Qué son las falacias?

Una falacia es un razonamiento que a pesar de parecerse a un argumento válido, no lo es.

Se trata, por tanto, de una línea de razonamiento que es errónea, y las inferencias que se presenten como producto de estas no pueden ser aceptadas. Independientemente de si la conclusión a la que se llega a través de una falacia es verdadera o no (podría serla por pura casualidad), el proceso por el cual se ha llegado a este es defectuoso, porque vulnera al menos una regla lógica.

Las falacias y la psicología

En la historia de la psicología casi siempre ha existido una tendencia a sobrevalorar nuestra capacidad para pensar racionalmente, estando sujetos a unas reglas lógicas y mostrándonos coherentes en nuestra manera de actuar y argumentar.

Con la excepción de ciertas corrientes psicológicas como la psicoanalítica fundada por Sigmund Freud, se ha dado por supuesto que el ser humano adulto y sano obra de acuerdo a una serie de motivos y razonamientos que pueden ser expresados textualmente con facilidad y que normalmente entran dentro del marco de la racionalidad. Los casos en los que alguien se comportaba de manera irracional se interpretaban bien como una muestra de debilidad o bien como un ejemplo en el que la persona no sabe identificar las verdaderas razones que motivan sus actos.

Ha sido en las últimas décadas cuando se ha empezado a aceptar la idea de que la conducta irracional está situada en el centro de nuestras vidas, que la racionalidad es la excepción, y no al revés. Sin embargo, hay una realidad que ya nos venía dando una pista de hasta qué punto nos movemos por emociones e impulsos poco o nada racionales. Este hecho es que hemos tenido que desarrollar una especie de catálogo de falacias para intentar que estas tengan poco peso en nuestro día a día.

El mundo de las falacias pertenece más al mundo de la filosofía y la epistemología que al de la psicología, pero mientras que la filosofía estudia las falacias en sí mismas, desde la psicología se puede investigar el modo en el que se utilizan. El hecho de ver hasta qué punto los falsos argumentos están presentes en los discursos de personas y organizaciones nos da una idea del modo en el que el pensamiento que hay detrás de ellos se ciñen más o menos al paradigma de la racionalidad.

Los principales tipos de falacias

El listado de falacias es muy largo y posiblemente haya algunas de ellas que aún no se han descubierto por existir en culturas muy minoritarias o poco estudiadas. Sin embargo, hay algunas más comunes que otras, así que conocer los principales tipos de falacias puede servir como referencia para poder detectar vulneraciones en la línea de razonamiento allí donde se den.

A continuación puedes ver una recopilación de las falacias más conocidas. Como no existe una sola manera de clasificarlas para crear un sistema de tipos de falacias, en este caso se clasifican según su pertenencia a dos categorías relativamente fáciles de entender: las no formales y las formales.

1. Falacias no formales

Las falacias no formales son aquellas en las que el error del razonamiento tiene que ver con en el contenido de las premisas. En este tipo de falacias lo que se expresa en las premisas no permite llegar a la conclusión a la que se ha llegado, independientemente de si las premisas son ciertas o no.

Es decir, que se apela a ideas irracionales sobre el funcionamiento del mundo para dar la sensación de que lo que se dice es cierto.

1.1. Falacia ad ignorantiam

En la falacia ad ignorantiam se intenta dar por hecha la veracidad de una idea por el simple hecho de que no se puede demostrar que es falsa.El famoso meme del Monstruo Espagueti Volador se basa en este tipo de falacia: como no se puede demostrar que no existe un ente invisible formado de espaguetis y albóndigas que además es el creador del mundo y sus habitantes, debe de ser real.

1.2. Falacia ad verecundiam

La falacia ad verecundiam, o falacia de autoridad, vincula la veracidad de una proposición a la autoridad de quien la defiende, como si eso proporcionase una garantía absoluta.

Por ejemplo, es corriente argumentar que las teorías de Sigmund Freud sobre los procesos mentales son válidas porque su autor era neurólogo.

1.3. Argumento ad consequentiam

En este tipo de falacia se intenta hacer ver que la validez o no de una idea depende de si aquello que se puede inferir a partir de ella resulta deseable o indeseable.

Por ejemplo, un argumento ad consequentiam sería dar por hecho que las posibilidades de que el ejército dé un golpe de estado en un país son muy bajas porque el escenario contrario supondría un duro golpe para la ciudadanía.

1.4. Generalización apresurada

Esta falacia es una generalización no fundamentada en datos suficientes.

El ejemplo clásico lo encontramos en los estereotipos acerca de los habitantes de ciertos países, que pueden llevar a pensar falazmente, por ejemplo, que si alguien es escocés debe de caracterizarse por su tacañería.

1.5. Falacia del hombre de paja

En esta falacia no se critica las ideas del oponente, sino una imagen caricaturizada y manipulada de estas.

Un ejemplo lo encontraríamos en una línea argumental en la que se critique a una formación política por ser nacionalista, caracterizándola como algo muy próximo a lo que fue el partido de Hitler.

1.6. Post hoc ergo propter hoc

Se trata de un tipo de falacia en el que se da por sentado que si un fenómeno ocurre después de otro, es que está causado por este, a falta de más pruebas que indiquen que eso es así.

Por ejemplo, se podría intentar argumentar que la subida repentina en el precio de las acciones de una organización se ha producido porque el inicio de la temporada de caza mayor ya ha llegado a Badajoz.

1.7. Falacia ad hominem

Por medio de esta falacia se niega la veracidad de ciertas ideas o conclusiones resaltando las características negativas (más o menos distorsionadas y exageradas) de quien las defiende, en vez de criticar la idea en sí o el razonamiento que ha llevado a ella.

Un ejemplo de esta falacia lo encontraríamos en un caso en el que alguien desprecie las ideas de un pensador argumentando que este no cuida su imagen personal.

Sin embargo, hay que saber distinguir este tipo de falacia de argumentos legítimos referidos a las características de una persona en concreto. Por ejemplo, apelar a la falta de estudios universitarios de una persona que habla sobre conceptos avanzados de física cuántica puede considerarse una argumentación válida, ya que la información que se da guarda relación con la temática del diálogo.

2. Falacias formales

Las falacias formales lo son no porque el contenido de la premisa no permita llegar a la conclusión a la que se ha llegado, sino porque la relación entre las premisas hace que la inferencia no sea válida.

Por eso sus fallos no dependen del contenido, sino del modo en el que están vinculadas las premisas, y no son falsas porque hayamos introducido en nuestro razonamiento ideas irrelevantes e innecesarias, sino porque no hay coherencia en los argumentos que usamos.

La falacia formal puede ser detectada sustituyendo todos los elementos de las premisas por símbolos y viendo si el razonamiento se ajusta a las reglas lógicas.

2.1. Negación del antecedente

Este tipo de falacia parte de un condicional del tipo «si le doy un regalo, será mi amigo», y cuando se niega el primer elemento, se infiere incorrectamente que el segundo también queda negado: «si no le doy un regalo, no será mi amigo».

2.2. Afirmación del consecuente

En este tipo de falacia también se parte de un condicional, pero en este caso se afirma el segundo elemento y se infiere incorrectamente que el antecedente es verdadero:

«Si apruebo, descorcho el champán».

«Descorcho el champán, así que apruebo».

2.3. Término medio no distribuido

En esta falacia el término medio de un silogismo, que es el que conecta dos proposiciones y no aparece en la conclusión, no cubre en las premisas a todos los elementos del conjunto.

Ejemplo:

«Todo francés es europeo».

«Algún ruso es europeo».

«Por lo tanto, algún ruso es francés».

Referencias bibliográficas:

    Clark, J., Clark, T. (2005). Humbug! The skeptic’s field guide to spotting fallacies in thinking (en inglés). Brisbane: Nifty Books.

    Comesaña, J. M. (2001). Lógica informal, falacias y argumentos filosóficos. Buenos Aires: Eudeba.

    Walton, D. (1992). The Place of Emotion in Argument (en inglés). The Pennsylvania State University Press.

Los 9 tipos de pensamiento y sus características. Arturo Torres

El pensamiento humano puede ser clasificado en diferentes categorías según cómo se desarrolla.

Muchas veces resumimos todos los procesos mentales relacionados con el intelecto llamándolos, simplemente, pensamientos. Sin embargo, la realidad es más compleja que este concepto tan abstracto. En realidad la psicología individual de cada persona está compuesta por varios tipos de pensamiento.

Cuando tomamos una decisión, cuando realizamos cálculo mental, o cuando reflexionamos sobre temas que tienen que ver con la política, por ejemplo, estamos utilizando diferentes procesos mentales, los cuales se guían por distintas lógicas e, incluso, involucran distintas partes del cerebro.

Ahora bien, ¿cuántos son los tipos de pensamiento y qué características tienen asociadas? Veámoslo.

¿Qué es un pensamiento?

El concepto de pensamiento hace referencia a procesos mentales relativamente abstractos, voluntarios o involuntarios, mediante los cuales el individuo desarrolla sus ideas acerca del entorno, los demás o él mismo. Es decir, los pensamientos son ideas, recuerdos y creencias en movimiento, relacionándose entre sí.

Ahora bien, los pensamientos no existen como actividades intelectuales “puras”, ya que siempre van de la mano de otros procesos mentales que tienen que ver con las emociones y que están generados y regulados por una parte del cerebro llamada sistema límbico.

Esto último significa que los pensamientos siempre están “teñidos” por la emocionalidad, no son ajenos a los sentimientos y las emociones.

Los principales tipos de pensamientos

Con lo que hemos visto hasta ahora ya queda claro que los pensamientos son altamente complejos y, en muchos casos, tan abstractos que encasillarlos en categorías herméticas supone caer en el reduccionismo. Sin embargo, conocer una clasificación orientativa de los tipos de pensamiento ha resultado muy útil para comprender mejor la mente humana.

Teniendo en cuenta esto, y que muchas de las categorías que veremos a continuación se solapan entre ellas en ciertos aspectos, veamos cuáles son los principales tipos de pensamiento propuestos y qué características presentan.

1. Pensamiento deductivo

El pensamiento deductivo parte de afirmaciones basadas en ideas abstractas y universales para aplicarlas a casos particulares. Por ejemplo, si partimos de la idea de que un francés es alguien que vive en Francia y Francia está en Europa, concluiremos que René Descartes, que vivía en Francia, era europeo.

2. Pensamiento inductivo

Este tipo de pensamiento no parte de afirmaciones generales, sino que se basa en casos particulares y, a partir de ellos, genera ideas generales. Por ejemplo, si observamos que las palomas tienen plumas, los avestruces tienen plumas y las garzas también tienen plumas, podemos concluir que estos tres animales forman parte de una categoría abstracta llamada “saurópsidos”.

3. Pensamiento analítico

El pensamiento analítico crea piezas de información a partir de una unidad informacional amplia y llega a conclusiones viendo el modo en el que interactúan entre sí estos “fragmentos”.

4. Pensamiento lateral o creativo

En el pensamiento creativo se juega a crear soluciones originales y únicas ante problemas, mediante el cuestionamiento de las normas que en un principio parecen ser evidentes. Por ejemplo, una silla de columpio parece “predestinada” a ser utilizada en un tipo de juguete muy particular, pero es posible transgredir esta idea utilizándola como soporte para una maceta que cuelga de un porche. Este es uno de los tipos de pensamiento más utilizados en arte y artesanía.

5. Pensamiento suave

Este tipo de pensamiento se caracteriza por utilizar conceptos con unos límites muy difusos y poco claros, a menudo metafóricos, y la tendencia a no evitar las contradicciones. Actualmente es muy característico de corrientes de pensamiento vinculadas a la filosofía posmoderna o al psicoanálisis. Por ejemplo, puedes ver un ejemplo de este estilo en la descripción de los conceptos utilizados por Sigmund Freud en la teoría del desarrollo psicosexual.

6. Pensamiento duro

El pensamiento duro utiliza conceptos lo más definidos posibles, y trata de evitar las contradicciones. Es típico del tipo de razonamientos vinculados a la ciencia, en los que un ligero matiz en el vocabulario usado puede llevar a conclusiones totalmente erróneas, y por eso puede resultar difícil avanzar a partir de él, dado que requiere una buena cantidad de habilidades cognitivas trabajando a la vez para alcanzar un fin.

7. Pensamiento divergente

En el pensamiento divergente se establece una división entre dos o más aspectos de una idea, y se explora las posibilidades de mantener esta “partición”. Por ejemplo, si alguien utiliza una misma palabra haciendo que cada vez tenga un significado distinto, detectar este error es un caso de pensamiento divergente en el que se detecta los distintos significados. Puedes ver ejemplos de esto fijándote en el uso que se hace habitualmente del concepto de “lo natural” aplicado a productos de alimentación, orientaciones sexuales poco comunes o tendencias de comportamiento generalizadas en general.

8. Pensamiento convergente

En el pensamiento convergente se da un proceso por el cual nos damos cuenta de que hay diferentes hechos o realidades que encajan entre sí a pesar de que en un principio parecía que no tenían nada en común. Por ejemplo, si una familia de monarcas se da cuenta de que en una guerra les interesa ponerse a favor de uno de los bandos, habrán partido del análisis de los diferentes actores en conflicto hasta llegar a una conclusión global acerca de la opción más conveniente.

Este es un tipo de pensamiento utilizado a la hora de detectar patrones comunes y regularidades, y puede llevar a abstraer un concepto general que explique partes específicas de la realidad.

9. Pensamiento mágico

El pensamiento mágico confiere intenciones a elementos que no cuentan con voluntad ni consciencia propias, y menos aún capacidad para actuar siguiendo planes. Por ejemplo, una niña que por su corta edad cree que las olas de la playa tratan de remojarles el pelo está utilizando el pensamiento mágico.

Por otro lado, el pensamiento mágico no es propio solo de la etapa de la infancia: también aparece en adultos pertenecientes a sociedades y culturas poco familiarizadas con la escritura y con la ciencia. El motivo es que no han desarrollado un sistema para someter hipótesis a un examen de validez, y por consiguiente se puede sostener explicaciones míticas sobre la realidad que nos rodea.

Referencias bibliográficas:

    Cacioppo, John; Freberg, Laura (2012). Discovering Psychology: The Science of Mind. Canadá: Cengage Learning.

    Morris, Charles (1997). Introducción a la Psicología (Novena edición edición). Prentice Hall.

    Papalia, D. y Wendkos, S. (1992). Psicología. México: McGraw-Hill,

    Triglia, Adrián; Regader, Bertrand; García-Allen, Jonathan (2016). Psicológicamente hablando. Paidós.

La teoría del pensamiento complejo de Edgar Morin. Nahum Montagud.

Cada persona tiene su propia visión de los hechos, además de estar influida y, por qué no decirlo, adoctrinada por los principios en los que, inconscientemente, su centro educativo, su grupo social o familia le han inmerso.

La moral es algo que varía mucho en función de donde se ha nacido, pero lo cierto es que, con el desarrollo de la sociedad tal y como la conocemos hoy en día, parece ser que la moral local ya no es algo tan sólido y válido como antaño.

Dentro de la filosofía de Edgar Morin se propone la idea de optar por una visión más holística de los hechos, tanto en términos de conocimiento científico como de percepción eticomoral, y comprender que más que culturas diferenciadas, formamos parte de una enorme cultura planetaria.

Dentro de su teoría del pensamiento complejo trata de exponer cómo se debería fomentar esta visión, y este artículo va enfocado a tratar de explicar con mayor detalle su propuesta.

Teoría del pensamiento complejo: ¿qué es?

La noción de pensamiento complejo fue acuñada por el filósofo y sociólogo francés de origen sefardí Edgar Morin, nacido Edgar Nahum.

Esta idea hace referencia a la capacidad de conectar diferentes dimensiones de la realidad, la cual se ha caracterizado por ir adquiriendo cada vez más componentes, a medida que la humanidad ha ido progresando y evolucionando. La realidad se podría comparar con un tejido, compuesto por múltiples tejidos y, por tanto, algo realmente complejo.

A mayor complejidad, más detalles sobre la sociedad en la que se vive se tienen que tener en cuenta. La persona no debería pensar reduciendo lo que está viviendo, ni tampoco decantarse por una postura en función de uno o pocos hechos. Así pues, debido a las características de la sociedad actual, es necesario que la persona, para poder tener una opinión bien fundamentada, reflexione detenidamente la información que recibe. Esta capacidad reflexiva es lo que Morin denominó como pensamiento complejo.

El pensamiento complejo es, en esencia, una estrategia que tiene intención globalizadora, es decir, que trata de abarcar todos los fenómenos de los que se es presente, pero teniéndose en cuenta sus particularidades como eventos diferentes que son. Este concepto es totalmente contrario al del pensamiento simplificante, el cual unifica todo el conocimiento a una sola visión, anulando la posible diversidad que haya y encaminando a la persona, sea estudiante sea el propio profesor, a una ‘inteligencia ciega’.

El término de complejidad, dentro del pensamiento de Edgar Morin, puede ser representado como una especie de gran red, cuyos delgados hilos se entrelazan y relacionan sus componentes. Los hilos son eventos, acciones, interacciones, retroacciones, determinaciones, azares de conforman el mundo.

El pensamiento complejo atiende a cuestiones, tanto profundas como banales, como la preocupación por a dónde está yendo a parar la especie humana, los problemas sociales que van surgiendo cada década y cómo estos se pueden resolver con una adecuada educación.

El pensamiento complejo no es algo innato. Se debe educar en él y potenciar su aplicación. El filósofo especializado en pedagogía Matthew Lipman opinaba que era extremadamente necesario inculcar este tipo de pensamiento a los niños ya a tempranas edades. El pensamiento complejo tiene la destacable característica de no aceptar un hecho como algo tajante e indudablemente creíble, sino el de potenciar la búsqueda de otras opciones, explorar y ver hasta qué punto lo percibido es cierto o no.

Los siete saberes básicos para la educación del futuro

Edgar Morin considera que la educación debe ir encaminada a fomentar la reflexión en sus estudiantes. Los alumnos no deben aceptar los hechos como algo indudablemente verdadero, sino que deben buscar, como si auténticamente hicieran uso del método científico, posibles explicaciones alternativas al conocimiento aprendido.

Así pues, en 1999, Morin propuso los siete saberes o principios básicos para la educación del futuro, los cuales fueron publicados por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. De acuerdo a este filósofo, toda sociedad, independientemente de su cultura, debería tratar de fomentar estos saberes en su población.

1. Curar la ceguera del conocimiento

Todo conocimiento lleva consigo un riesgo de error, que puede ser mayor o menor. Al igual que siempre ha sucedido con la ciencia, hay datos que en un momento histórico son tomados como una verdad y, después de investigarse de nuevo, se refutan.

El conocimiento es algo que evoluciona y, por tanto, puede ser muy relativo y frágil. Es por ello que se debe enseñar a los alumnos que lo que están aprendiendo es algo que puede aceptar cambios con el paso del tiempo, y que no son verdades absolutas. Así pues, se debe ser crítico con el propio conocimiento.

2. Garantizar el conocimiento pertinente

Este principio, especialmente importante en la era de las nuevas tecnologías, hace referencia a la importancia que supone el saber seleccionar concienzudamente el bombardeo de datos e información que recibimos.

Se debe detectar cuál es la información veraz, con opinión experta detrás de ella. También es importante entender qué son problemas reales y qué tipo de información es la adecuada para poder llegarlos a solucionar. La inteligencia general se fundamenta en los conocimientos que son aceptados por la población, y también por la crítica que se les hace.

3. Enseñar la condición humana

La especie humana está dividida en grupos étnicos, religiones, lenguas, países, naciones… Es por ello que es muy importante entender que, aunque haya diferencias, todas las personas forman parte de la misma humanidad.

Se debe saber apreciar la diversidad cultural y no pretender homogeneizar a la humanidad, pero también comprender que todos tienen los mismos derechos y obligaciones. Se debe contextualizar a las personas en función de la situación que les ha tocado vivir, no como algo indudablemente inseparable de ellas.

4. Enseñar la identidad terrenal

Relacionado con el punto anterior, se debe comprender que los miles de años de historia de la humanidad han sido testigos de cómo lo que en un principio debió ser un mismo grupo étnico, una cultura prístina, se fue expandiendo y fragmentándose en otras muchas otras.

No obstante, gracias a la aparición de la tecnología, ya sea mediante los transportes intercontinentales como mediante las redes informáticas, es posible establecer contacto muy fácilmente con personas procedentes de culturas radicalmente diferentes a la de uno.

Es necesario entender que se debe fomentar el desarrollo de la humanidad no únicamente en términos económicos, sino que, además, y gracias a la aparición de las tecnologías mencionadas, fomentar el desarrollo intelectual, afectivo y moral a nivel mundial.

Las identidades nacionales, regionales y locales están bien, pero siempre se ha dejado muy de lado la identidad que une a todas las personas, como ciudadanos de la Tierra y, por tanto, miembros de una megacultura terrenal.

5. Enfrentar las incertidumbres

La incertidumbre, en sí, no tiene por qué ser algo bueno ni tampoco malo. Se debe enseñar a los estudiantes que la historia siempre se enfrentará a una situación de incertidumbre, en la que la siguiente fase puede implicar un gran avance o, por el contrario, una auténtica catástrofe.

La historia, al igual que le ha sucedido a la evolución biológica, no es algo lineal. Avanza mediante desviaciones y atajos, que pueden hacer que un momento haya un gran progreso y, en otro, parezca que se vuelve al punto de partida.

El azar y la falta de control de todo el sistema es algo indudablemente propio de la condición humana. Esto, a su vez, es aplicable al conocimiento, que también puede ser incierto. Puede ser que lo descubierto realmente no sea tan verdadero como se creía cuando aparezca un dato que lo refute.

6. Enseñar la comprensión

Se debe fomentar la comprensión tanto dentro del propio grupo (endogrupo) como en relación a las personas de grupos diferentes, ya sea en términos culturales, lingüísticos, religiosos o de cualquier índole.

Es muy importante entender que comprensión y comunicación no son sinónimos. Pese haber nuevas tecnologías que facilitan el contacto entre personas muy diferentes, esto no significa que se hayan superado los códigos éticos presentes en cada cultura, o que se comprendan los del otro grupo étnico.

Los valores morales de uno pueden ser un obstáculo a la hora de ponerse en la piel de otra persona. Los grandes enemigos de la comprensión, de acuerdo con Edgar Morin, son el egoísmo, el etnocentrismo y el sociocentrismo. Enseñar la comprensión significa enseñar a no reducir el ser humano a una o varias de sus cualidades, dado que, realmente, éstas son múltiples y complejas.

7. La ética del género humano

Se debe fomentar una ética no únicamente en términos individuales, es decir, que cada persona tenga una moral respetuosa para con los demás, sino que también se fomente la idea de que el propio grupo al que se pertenece se comporte de forma moral al establecer contacto con otros.

Además, se debe fomentar la creación y enseñanza de una ética válida para todo el género humano, algo así como la equivalencia de los derechos humanos pero en términos de obligaciones morales.

Se entiende, en base a la visión de Morin, que el máximo exponente de este principio es el de hacer de la democracia algo común en todos los países del mundo. Esta democracia no debe ser sinónimo de dictadura de la mayoría, sino que debe constituir como una forma de gobierno en la que, si bien unos tendrán mayor voz, se respete y escuche las múltiples opiniones de su ciudadanía.

Referencias bibliográficas:

  • Morin, E. (1992). From the concept of system to the paradigm of complexity. Journal of Social and Evolutionary Systems. 15 (4): 371–385
  • Szekely, E.; Mason, M. (2018). Complexity theory, the capability approach, and the sustainability of development initiatives in education. Journal of Education Policy.

Importantes valoraciones y resoluciones del VIII Congreso del Partido Comunista de Cuba. Abril de 2021

Resolución: Valoración acerca de la Política de Cuadros del Partido, la UJC, las organizaciones de masas, el Estado y el Gobierno. Papel del Partido para alcanzar resultados superiores

El 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba, reunido  en el Palacio de Convenciones de La Habana, entre los días 16 al 19 de abril de 2021, ha discutido el informe sobre la Valoración acerca de la Política de Cuadros del Partido, la UJC, las organizaciones de masas, el Estado y el Gobierno. Papel del Partido para alcanzar resultados superiores, con el propósito de seguir avanzando en este estratégico asunto.

En los debates realizados en la Comisión No. 3, encargada  de abordar este tema, se produjeron 61 intervenciones. A las sesiones de trabajo asistieron 94 delegados y 22 invitados. Estuvieron presididas por los compañeros:

-Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República de Cuba y miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

-Los compañeros Bruno Rodríguez Parrilla, Miriam Nicado García y los Generales de Cuerpo de Ejército Álvaro López Miera y Leopoldo Cintras Frías, todos integrantes del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

Abelardo Álvarez Gil, miembro del Secretariado del CCPCC, y Jefe de su Departamento de Organización y Política de Cuadros.

-Presentes también otros representantes de la UJC, las organizaciones de masas, las FAR y el MININT.

En los Informes Centrales presentados al 6to. y 7mo. Congresos del Partido Comunista de Cuba, el Primer Secretario del Comité Central, General de Ejército Raúl Castro Ruz, se refirió a los efectos negativos de la improvisación, la falta de previsión y de sistematicidad en la conducción de la Política de Cuadros, como consecuencia de lo cual ha existido una insuficiente reserva de sustitutos debidamente experimentados y maduros, con preparación adecuada para asumir las complejas funciones de dirección en el Partido, el Estado y el Gobierno.

  En el texto presentado al 8vo. Congreso, planteó que en materia de la Política de Cuadros se ha continuado trabajando en el cumplimiento de los acuerdos de los anteriores eventos. Se avanzó en la concepción organizativa y la materialización de la política de la renovación paulatina de los cargos decisorios.

Igualmente, señaló que se observa un incremento progresivo y sostenido en la promoción de jóvenes, mujeres, negros y mulatos sobre la base del mérito y las cualidades personales, aunque lo alcanzado es absolutamente insuficiente en lo referido a las principales responsabilidades en el Partido, Estado y Gobierno. Prosigue la promoción de cuadros de la Unión de Jóvenes Comunistas a la labor profesional en el Partido.

    Al propio tiempo, refirió que persisten debilidades en la aplicación de la Política de Cuadros, que se reflejan en la tendencia al formalismo y la superficialidad de no pocos cuadros que se consideran imprescindibles y no atienden la formación de las reservas. Se pone de manifiesto un escaso vínculo con el pueblo, falta de sensibilidad e incapacidad para movilizar a los colectivos en la solución de los problemas y un débil trabajo hacia los subordinados.

La Revolución Cubana se desenvuelve en medio de complejas condiciones, por la irrenunciable vocación independentista y su programa de desarrollo socialista, en abierta contradicción con la política del imperio, lo que permite avizorar un escenario aún más difícil y desafiante para los próximos años, que demanda un fortalecimiento de la unidad del pueblo en torno a su Partido, como tarea fundamental de los cuadros y militantes.

En esas circunstancias, los principios contenidos en la Tesis y Resolución del Primer Congreso, así como los Objetivos que sobre este tema se aprobaron en la Primera Conferencia Nacional del Partido, mantienen plena vigencia. En ellos se precisa que la formación, selección, ubicación, promoción y superación de los cuadros debe garantizar que se caractericen por su solidez política, conocimientos profesionales, capacidad de dirección y se promuevan de manera  escalonada.

La aplicación de la Política de Cuadros es una responsabilidad de los jefes y constituye una actividad priorizada e indelegable para los que ejercen la dirección, pues de su labor depende, en gran medida, los resultados que se alcancen. Al Partido le corresponde exigir, controlar y velar por la efectividad en su cumplimiento.

Es imprescindible elevar en los cuadros la formación de convicciones, reforzando su incondicionalidad y compromiso para cumplir tareas que impliquen sacrificios personales y profesionales.

Desde el anterior Congreso, el Partido desarrolló diferentes procesos políticos, con la finalidad de consolidar el control de sus organismos de dirección y organizaciones de base sobre la Política de Cuadros.

Diversas decisiones se adoptaron encaminadas a corregir errores y debilidades, iniciándose el traspaso paulatino y ordenado a las nuevas generaciones de las principales responsabilidades del país.

    Se ratifica que quienes dirigen deben acrecentar su vínculo con las masas, tener capacidad de movilizar, argumentar, dialogar y ser resolutivos, elevar la sensibilidad política y humana, la responsabilidad y el uso de la dirección colectiva en función de la solución de los problemas.

El enfrentamiento a la corrupción y otras conductas nocivas ha sido una prioridad, al constituir un problema de Seguridad Nacional, ante lo cual se requiere actuar con mayor vigilancia, exigencia y control, adoptando las decisiones necesarias en relación con cualquier manifestación de deterioro y debilidad en el comportamiento ético de los cuadros.

Lo alcanzado ha sido posible por la capacidad de nuestro Partido para enfrentar y superar desafíos, así como por la existencia de un potencial de cuadros y otros trabajadores con cualidades individuales, entre ellos jóvenes con perspectivas de desarrollo y compromiso para cumplir diferentes tareas.

Mención especial requiere el haber contado, durante todos estos años, con la presencia activa y el ejemplo de lealtad y consagración de la generación histórica de la Revolución.

El 8vo. Congreso del Partido, considerando el proceso previo de estudio, análisis y consultas que se ha realizado, así como los resultados alcanzados en los debates de la comisión, a partir de los problemas reiteradamente planteados por nuestros líderes históricos en este asunto estratégico y crucial para el destino de la nación, acuerda:

Primero: Aprobar el informe sobre la Valoración acerca de la Política de Cuadros del Partido, la UJC, las organizaciones de masas, el Estado y el Gobierno. Papel del Partido para alcanzar resultados superiores.

Segundo: Encargar al Comité Central del Partido Comunista de Cuba la aprobación de una Estrategia para atender diferenciadamente la Política de Cuadros en las condiciones actuales de la sociedad cubana, la que tendrá como propósitos fundamentales:

    Consolidar el papel que le corresponde desempeñar a los organismos de dirección y organizaciones de base del Partido, en la correcta aplicación de la Política de Cuadros, exigiendo mayor responsabilidad de los jefes en este vital asunto.

    Gestionar con eficacia los procesos de selección y desarrollo de los cuadros, las reservas y canteras, con prioridad en el trabajo con los jóvenes. Aplicar un Modelo que permita atender, de manera diferenciada, la preparación y tránsito, por diferentes responsabilidades, de los compañeros que muestren las mayores perspectivas para ocupar los principales cargos de la nación.

    Incrementar la intransigencia frente a la corrupción, el delito, las violaciones e indisciplinas.

    Implementar un Programa de Investigación sobre la actividad de dirección y el trabajo con los cuadros.

    Articular un sistema único para la preparación y superación de los cuadros y reservas.

    Establecer una política dirigida a reforzar la imagen social de los cuadros, su atención y estimulación.

  De lo que se trata es de emplear al máximo las conquistas y fortalezas de estos 62 años de obra revolucionaria,  conjugando el caudal de experiencias  acumuladas, con la utilización de métodos científicos, en función de un ser humano cada vez más cercano al ideal de sociedad, justa y solidaria, que distingue a Cuba ante el mundo.

Es traer a nuestros días lo que se plantearon los fundadores de la Revolución, desde la selección y organización de los asaltantes al Moncada, lo que fue cristalizando durante la lucha, con el ejemplo personal de Fidel y sus compañeros y compañeras de la Generación del Centenario.

    Dado en La Habana, a los 19 días del mes de abril de 2021, “Año 63 de la Revolución”.

Resolución del 8vo Congreso del Partido sobre la “Evaluación del cumplimiento de la Resolución del 7mo Congreso del Partido acerca de los Objetivos de Trabajo de la Primera Conferencia, relacionados con el funcionamiento, la actividad ideológica y la vinculación con las masas

La comisión No 2 del 8vo Congreso del Partido, presidida por el compañero, José Ramón Machado Ventura, Segundo Secretario del Comité Central, estuvo integrada por 110 compañeros, de ellos 91 delegados y 19 invitados, los miembros del Buró Político Ramón Espinosa Martín, Roberto Morales Ojeda, Teresa Amarelle Boué y Marta Ayala Ávila, los miembros del Secretariado Olga Lidia Tapia Iglesias, Víctor Gaute López y Omar Ruíz Martín, Primeros Secretarios de las provincias Mayabeque, Guantánamo, Matanzas, Sancti Spíritus y Las Tunas y, otros cuadros profesionales, dirigentes de organizaciones de base, y militantes.

En la comisión, que sesionó durante los días 16 y 17 de abril se produjeron un total de 49 intervenciones. A partir de lo discutido y las propuestas realizadas, se acordó presentar al 8vo Congreso para su análisis y aprobación la siguiente:

RESOLUCIÓN:

El 8vo Congreso al evaluar el informe sobre “El cumplimiento de la Resolución del 7mo Congreso del Partido acerca de los Objetivos de Trabajo de la Primera Conferencia, relacionados con el funcionamiento, la actividad ideológica y la vinculación con las masas”, analizó el trabajo del Partido desde el anterior congreso hasta la fecha, tomó en consideración las opiniones emitidas por las organizaciones de base en su proceso de balance en relación con estos temas y el resultado de las consultas que se hicieron con los Burós provinciales, las estructuras similares de las FAR y el MININT, las direcciones nacionales de la UJC y las organizaciones de masas y finalmente con los delegados.

    La discusión se centró fundamentalmente en la necesidad de continuar fortaleciendo al Partido como vanguardia política de la revolución en su vínculo permanente con el pueblo y su funcionamiento desde la base, para involucrar cada vez más a militantes, trabajadores y toda la población en el impulso de la actividad económico social del país, que permita el enfrentamiento a la crisis mundial en desarrollo y a los problemas y dificultades que nos impone el genocida bloqueo del Gobierno de los Estados Unidos, trabajando con mayor sistematicidad, eficiencia y firmeza por resistir y avanzar; así como el enfrentamiento a todo lo que ponga en riesgo la seguridad nacional del país incluyendo la batalla sin tregua frente a la corrupción, el delito, las ilegalidades y conductas inadecuadas.

Énfasis principal se puso, en la batalla ideológica a librar a tono con los escenarios actuales, a partir de una superior utilización de los recursos humanos y tecnológicos de que se disponen, para contrarrestar y enfrentar la subversión político ideológica en todos los espacios y formas, así como la necesidad de un protagonismo acrecentado de nuestras organizaciones de masas y sociales, en su estrecha vinculación con los sectores en ellas representados; en particular la trascendencia de un diálogo permanente con los jóvenes, estudiantes universitarios, intelectuales, académicos y otros sectores, fue de los asuntos más debatidos.

La importancia de seguir perfeccionando los métodos y estilo de trabajo del Partido en las relaciones con el Gobierno y las administraciones, contribuyendo a elevar su autoridad y eficiencia en el cumplimiento de sus funciones, fue objeto igualmente de atención.

El análisis realizado permite considerar que la Resolución aprobada en el anterior Congreso, condujo al Partido a centrar su labor en las ideas y propósitos que esta contenía, alcanzándose avances en el trabajo, manteniendo su prestigio y autoridad como fuerza política superior de la Sociedad y el Estado, no obstante reconocer que existen aspectos en los que no se avanzó lo suficiente o que es necesario continuar atendiendo con prioridad.

Basado en lo anterior, deben guiarse en lo adelante nuestras acciones en las siguientes proyecciones:

    Continuar fortaleciendo la actuación del Partido esencialmente en lo referido al trabajo político ideológico diferenciado, en especial con las nuevas generaciones; el control, exigencia y participación del pueblo para impulsar el desarrollo económico y social del país; el incremento de la combatividad y ejemplaridad de los militantes y cuadros; el funcionamiento de sus estructuras con énfasis en las organizaciones de base y la utilización del método y estilo de trabajo adecuado en su vínculo con las instituciones, organizaciones y pueblo en general.

    Pensar y actuar como país, con mayor compromiso, firmeza, creatividad e inteligencia; enfrentar el reto de fortalecer la unidad y su permanente construcción teniendo en cuenta la diversidad de intereses colectivos e individuales; potenciar las vías y formas para concretar el vínculo permanente con el pueblo y lograr la efectividad requerida.

    Fortalecer el consenso ideológico alcanzado con la apropiación, conocimiento e incorporación de lo más avanzado del pensamiento revolucionario cubano y universal, el ideario martiano, el Marxismo Leninismo, el legado de Fidel; y las enseñanzas de Raúl; el perfeccionamiento de la investigación, impartición y divulgación de la historia patria; la promoción y exigencia del uso respetuoso de los símbolos nacionales y la preservación y desarrollo de las tradiciones, identidad y cultura nacional; sobre la base de una participación y cohesión superior entre las instituciones, investigadores, profesores e intelectuales, en función de sus aportes al desarrollo y la vida espiritual del país.

    Profundizar en la aplicación del principio de la vinculación del Partido con las masas desde los organismos superiores hasta las organizaciones de base, ampliando y sistematizando los mecanismos y espacios de intercambio, búsqueda de opiniones y retroalimentación con los trabajadores, estudiantes y pueblo en general. Garantizar, como establecen los reglamentos del Partido, la participación sistemática de los trabajadores en las reuniones ordinarias de los núcleos y en las comisiones de trabajo.

    Priorizar el crecimiento del Partido, ratificando la calidad como premisa fundamental para el ingreso; con énfasis en la labor de captación en los centros sin estructura partidista, los militantes de la UJC y otros jóvenes, los obreros y los sectores estratégicos de la economía.

    Perfeccionar el sistema de atención a las organizaciones de base, priorizando la selección y preparación de los secretarios generales, para que asuman su responsabilidad con eficiencia, promuevan la correcta actuación de los militantes, aplicando con rigor las medidas correspondientes ante incumplimientos y desviaciones.

    Dinamizar la labor de los comités en los niveles intermedios y superiores del Partido como principal organismo de dirección, propiciando mayor vínculo e intercambio de sus integrantes con los militantes y organizaciones de base, que les permita una mayor preparación y participación en la elaboración y análisis de los temas que se discuten en los plenos, así como en la transformación de los problemas identificados.

    Adecuar la estructura de los organismos superiores e intermedios de dirección del Partido, al papel y responsabilidades que les corresponden en las actuales y futuras circunstancias.

    Enfrentar de manera sistemática y previsora la subversión político ideológica en todos los escenarios y formas; optimizar el empleo de los recursos y las fuerzas; en particular fortalecer el activismo revolucionario en las redes sociales digitales, insistir en el perfeccionamiento de la alerta oportuna y el desarrollo de sistemas de trabajo sustentados en una información y actualización más dinámica por todos los organismos en los diferentes niveles.

    Garantizar que los procesos de informatización de nuestra sociedad, constituyan una herramienta a favor de la identidad nacional, el desarrollo económico, la participación y elevación del nivel de vida del pueblo; enfrentar los contenidos dirigidos contra la Revolución y sus políticas.

    Estructurar sistemas de trabajo que articulen las acciones destinadas a la formación en valores; en especial con los grupos etarios más jóvenes, y atender sus aspiraciones en el orden colectivo, personal y profesional; promover la evaluación de acciones dirigidas a la reducción de la emigración, especialmente de jóvenes y profesionales; así como a un vínculo superior de los residentes en el exterior con las familias y nuestro país.

    Consolidar el enfrentamiento a prejuicios y discriminaciones de todo tipo; apoyar las acciones a acometer sobre la base del papel que desempeñan en su tratamiento los mecanismos de influencia educativa, cultural, jurídica y política; sin dar espacio a fracturas de la unidad nacional.

    Apoyar la implementación de la Política de Comunicación del Estado y el Gobierno. Garantizar el acceso del pueblo a una información veraz, objetiva y oportuna; enfrentando las debilidades que aún lastran este propósito, con una actuación más efectiva de nuestras instituciones, medios de comunicación, organizaciones y profesionales.

    Enfatizar la labor político ideológica con los trabajadores no estatales, estimular su aporte y participación en la vida económica; propiciar el despliegue de sus capacidades y potencialidades acorde con sus intereses y los del país. Priorizar en su atención, la afiliación sindical, el crecimiento al Partido y la UJC, el vínculo e intercambio sistemáticos con ellos y la canalización apropiada de sus preocupaciones.

    Consolidar la atención y vinculación permanente con la UJC y los jóvenes en general, favoreciendo los espacios de intercambio, debate y diálogo, incluidos los del ámbito digital e informal, para lograr una participación cada vez más activa del sector juvenil en los procesos económicos, sociales y políticos, con una formación ética acorde a los valores del Socialismo.

    Contribuir al perfeccionamiento de los órganos del Poder Popular, potenciando el municipio como ente principal de la dirección local. Priorizar la atención a las nuevas estructuras y la existencia de relaciones adecuadas entre ellas, el fortalecimiento de las asambleas municipales, la labor del delegado, el trabajo comunitario integrado, la atención a los planteamientos de los electores, la ampliación de los mecanismos de acceso de la ciudadanía, la información pública y la participación popular.

    Fortalecer el papel del Partido con su participación, apoyo y control en las acciones de prevención y enfrentamiento a todos los fenómenos y manifestaciones que constituyan una amenaza para la seguridad nacional, incluyendo la corrupción, la droga, el delito, las ilegalidades e indisciplinas sociales, a partir de la utilización más efectiva y sistemática de las vías y mecanismos propios, exigiendo la responsabilidad del Gobierno, las administraciones, las organizaciones de base y sus militantes. Potenciar el papel de las organizaciones de masas en esta batalla, reforzando el control popular a través del sistema creado a esos fines, que compulse la actuación oportuna y eficaz de las autoridades competentes.

    Propiciar que las organizaciones de masas continúen la actualización de sus misiones a partir del contexto actual en que desempeñan su labor, con un carácter más diferenciado, personalizado y con mayor integralidad, de acuerdo a las motivaciones e intereses de sus miembros. Desarrollar estrategias más efectivas y concertadas para elevar la actuación de los militantes en las organizaciones que actúan en la comunidad.

El Octavo Congreso ratifica, como nos ha reiterado el Primer Secretario del Comité Central, General de Ejército Raúl Castro Ruz, la responsabilidad que asume el Partido como legítimo heredero del legado del Líder Histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz.

Faculta al Comité Central para la elaboración y aplicación de las normas y mecanismos que resulten necesarios en cumplimiento de los propósitos o proyecciones contenidos en esta resolución; establecer la forma en que se evaluará sistemáticamente su cumplimiento y organizar su estudio por todos los cuadros y organizaciones de base.

De igual forma encomienda al Pleno del Comité Central realizar las modificaciones que se requieran a los Estatutos y Reglamentos del Partido, para atemperarlos a las decisiones adoptadas en este Congreso y las necesidades para el trabajo de la organización en la actualidad.

III. Resolución sobre el Estado de la implementación de los Lineamientos de la política económica y social del Partido y la Revolución desde el 6to. Congreso hasta la fecha y la actualización de estos para el período 2021-2026

La Comisión No. 1 del 8vo. Congreso del Partido, presidida por el compañero Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro, estuvo integrada por 136 compañeros, de ellos 112 delegados, 17 invitados y 7 participantes.

En la sesión de la misma sobre este tema, se produjeron un total de 84 intervenciones. A partir de lo discutido y las propuestas realizadas, se acordó presentar al 8vo. Congreso para su análisis y aprobación la siguiente

RESOLUCIÓN:

El 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba, celebrado entre los días 16 al 19 de abril de 2021 en La Habana ha analizado los proyectos sobre el estado de la Implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución desde el 6to. Congreso hasta la fecha y la actualización de estos para el período 2021-2026.

  Durante el debate se puso de manifiesto la complejidad del contexto nacional e internacional que ha caracterizado los últimos años, en particular el conjunto de problemas estructurales acumulados de la economía, las deficiencias y dificultades afrontadas, el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de los Estados Unidos, los eventos meteorológicos y el impacto de la pandemia de la COVID-19.

Asimismo, en estos análisis se tuvo en cuenta  lo expresado en la reseña de la evolución de la economía del quinquenio 2016-2020 presentada al 8vo Congreso, así como el contenido del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030, como elementos de vital importancia para las proyecciones, principales acciones y transformaciones necesarias para el próximo quinquenio.

   El 8vo. Congreso evaluó la marcha del proceso de Actualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista, teniendo en cuenta las 244 políticas aprobadas desde el 6to Congreso y la implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución actualizados en el 7mo. Congreso, de los cuales el 30% fueron implantados, el 40% se encuentra en implantación y el 30% restante en la etapa de propuesta y aprobación.

Los resultados más importantes se relacionan con la conformación de las bases jurídicas y las programáticas para el mediano y largo plazos, los pasos iniciales para el desarrollo del sistema de dirección de la economía y de los diferentes actores económicos, la adecuación de las políticas sociales a los nuevos escenarios y el perfeccionamiento en los distintos niveles del Estado y Gobierno.

Se concluyó el diseño y se trabajó en la creación de condiciones para implantar el Ordenamiento Monetario, tarea de especial complejidad, que impacta en todos los ciudadanos y ámbitos de la vida económica y social, sin dejar a nadie desamparado. A partir del 1ro de enero de 2021 se ha trabajado en su implantación bajo difíciles condiciones, ajustando insuficiencias de su diseño y las que se han presentado en su aplicación.

Como se expresa en el informe sobre los resultados de la implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, entre las deficiencias se identifican: no haber alcanzado la eficacia necesaria en la planificación, organización, control, celeridad y seguimiento de los procesos; ha persistido, en ocasiones, durante la conformación de algunas políticas o medidas, insuficiente integralidad y visión de los riesgos, la ausencia o baja calidad de las metas e indicadores requeridos y las acciones de capacitación y comunicación social, no siempre, han tenido el alcance, oportunidad y calidad necesarias.

La Actualización de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución para el período 2021-2026 traza las direcciones principales de trabajo para el próximo quinquenio, contribuye a encauzar las prioridades de la economía y la trasformación del Modelo.

El documento lo conforman 201 Lineamientos que priorizan:

    Fortalecer la gestión de los actores económicos, en especial la empresa estatal socialista como sujeto principal de la economía.

    Avanzar en la solución de los problemas estructurales de la economía, en particular desarrollar la producción y comercialización de alimentos con énfasis en el sector agropecuario; lograr una mayor participación de las fuentes renovables en la matriz energética; incrementar las exportaciones y la sustitución efectiva de importaciones, recuperar y desarrollar el turismo e impulsar la inversión extranjera directa.

    Consolidar la implantación de la Tarea Ordenamiento con los ajustes requeridos, en interés de alcanzar su objetivo estratégico, una mayor utilización de los instrumentos financieros en la conducción de la economía y avanzar en el logro de los equilibrios macro-económicos fundamentales.

    Seguir priorizando el desarrollo y la aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación en todas las esferas de la sociedad, en particular en las actividades productivas.

    Continuar el desarrollo de la justicia social en las nuevas condiciones; lograr mejoras en el consumo y el nivel de vida de la población e implementar nuevos programas y servicios sociales dirigidos a las personas y núcleos familiares vulnerables, así como una relación adecuada entre los ingresos personales y los precios de los productos y servicios.

Los Lineamientos actualizados para el período 2021-2026 y lo que corresponde al Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030 en el próximo quinquenio, constituyen la base de la Estrategia Económica y Social para el impulso a la Economía y el enfrentamiento a la crisis mundial provocada por la COVID-19 en los próximos años.

El 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba acuerda:

PRIMERO: Aprobar el Informe sobre el estado de la Implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución y la actualización de estos con las modificaciones incorporadas.

Recomendar la presentación de la Actualización de los Lineamientos para el período 2021-2026 a la Asamblea Nacional del Poder Popular, para obtener su respaldo.

SEGUNDO: Encargar al Comité Central del Partido Comunista de Cuba, que mediante las estructuras partidistas a los diferentes niveles, impulse, controle y exija la Actualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista.

TERCERO: Encargar al Pleno del Comité Central del Partido analizar con la periodicidad requerida la marcha del desempeño de la economía, la implementación de los Lineamientos aprobados para el período 2021-2026 y el cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030. Recomendar a la Asamblea Nacional del Poder Popular ejercer un control similar.

CUARTO: Recomendar a la Asamblea Nacional del Poder Popular, al Gobierno y a los organismos correspondientes que elaboren y aprueben, según el caso, las normas jurídicas necesarias para continuar perfeccionando la base legal e institucional que respalde las modificaciones funcionales, estructurales y económicas que se adopten.

Dada en La Habana a los 18 días del mes de abril de 2021 «Año 63 de la Revolución».

IV. Resolución sobre Actualización de la conceptualización del modelo económico y social cubano de desarrollo socialista

La Comisión No. 1 del 8vo. Congreso del Partido, presidida por el compañero Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro, estuvo integrada por 136 compañeros, de ellos 112 delegados, 17 invitados y 7 participantes.

En la sesión de la misma sobre este tema, se produjeron un total de 32 intervenciones. A partir de lo discutido y las propuestas realizadas, se acordó presentar al 8vo. Congreso para su análisis y aprobación la siguiente

RESOLUCIÓN:

El 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba, celebrado entre los días 16 al 19 de abril de 2021 en La Habana, ha analizado el proyecto de Actualización de la Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista.

En correspondencia con su carácter de guía activa y perfectible, es coherente con los fundamentos y términos incluidos en la nueva Constitución de la República, a la vez que considera los resultados de la implementación de los Lineamientos y de las políticas aprobadas desde el 6to. Congreso hasta la fecha.

    La Conceptualización actualizada ratifica que la sociedad cubana se encuentra en el período histórico de construcción del socialismo, así como los principios en que se sustenta el ideal de sociedad socialista, forjado durante el proceso revolucionario en función de materializar la Visión de la Nación, Soberana, Independiente, Socialista, Democrática, Próspera y Sostenible.

Entre los principios fundamentales se destaca el ser humano como objetivo principal y sujeto protagónico; la propiedad socialista de todo el pueblo sobre los medios fundamentales de producción como forma principal del sistema socioeconómico; el rol de la innovación científica y tecnológica para el desarrollo económico y social del país; el Estado Socialista de Derecho y Justicia Social como garante de la igualdad de deberes y derechos, que asegura que ninguna persona quede desamparada.

Se reafirma el papel dirigente del Partido Comunista de Cuba, único, martiano, fidelista, marxista y leninista, vanguardia organizada de la nación cubana, expresión de la unidad de los cubanos en torno a la dirección de la Revolución.

A su vez, la Conceptualización actualizada fundamenta las principales transformaciones para la consolidación y continuidad de la Revolución a partir de nuestras fortalezas y potencialidades.

Entre las principales transformaciones se encuentran:

Consolidar el papel de la propiedad socialista de todo el pueblo sobre los medios fundamentales de producción; reconocer y diversificar las diferentes formas de propiedad y gestión adecuadamente interrelacionadas; el perfeccionamiento integral del Sistema de Dirección Planificada del Desarrollo Económico y Social y del Estado como rector, coordinador y regulador de todos los actores, en particular la descentralización de facultades a los niveles territoriales, con énfasis en el municipio como instancia fundamental.

  Reconocer, regular y lograr un adecuado funcionamiento del mercado, de modo que las medidas administrativas centralizadas, en interacción con las políticas macroeconómicas y otras, induzcan a los actores económicos a adoptar decisiones de acuerdo con los intereses de toda la sociedad.

Como parte de ello, se define que es necesario impedir que productores o comercializadores impongan malas prácticas, la especulación y condiciones contrarias a los intereses y principios de la sociedad, con independencia de la forma de propiedad o gestión.

Impulsar la ciencia y el desarrollo de la tecnología y la innovación, de modo que desempeñen un papel principal en el incremento de la eficiencia, eficacia y la productividad en todas las esferas.

Consolidar el papel de las universidades y fortalecer sus relaciones con las entidades de la producción, los servicios e instituciones armadas. Lograr que la toma de decisiones y la evaluación de los resultados, se apoyen en el conocimiento y la base científica.

Asegurar que el trabajo y la laboriosidad constituyan valores morales cardinales y que la aplicación del principio de distribución socialista con arreglo a la calidad y cantidad del trabajo posibilite que esta sea la vía fundamental de satisfacción de las necesidades.

La elevación del nivel y calidad de vida es un objetivo prioritario permanente, con énfasis en la seguridad alimentaria y energética, la educación y la salud, entre otros.

El control de la correlación entre la dinámica de los precios y los ingresos provenientes del trabajo, las pensiones y prestaciones de la Asistencia Social, en función de ampliar la oferta, proteger y mejorar los ingresos reales, en la medida que se avanza en el proceso de desarrollo económico y social.

    La actualización del Modelo es un proceso complejo en el que se asumen los retos derivados de las fuertes restricciones impuestas por el bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de los Estados Unidos, la agresividad de los enemigos de la Revolución, la crisis sistémica internacional, los efectos del cambio climático y la pandemia de la Covid 19.

El 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba acuerda:

PRIMERO: Aprobar el proyecto de Actualización de la Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista, con las modificaciones incorporadas.

SEGUNDO: Encargar al Comité Central del Partido Comunista de Cuba que la Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista, actualizada, se emplee como guía teórica,  conceptual y de acción para la construcción del socialismo en Cuba, mediante todas las estructuras partidistas, desde sus más altos niveles de dirección hasta las organizaciones de base.

TERCERO: Recomendar a la Asamblea Nacional del Poder Popular el análisis del documento a que se refiere el numeral PRIMERO para obtener su respaldo y el posterior control de su aplicación durante la actualización del Modelo de Desarrollo Económico y Social.

Dada en La Habana a los 18 días del mes de abril de 2021 «Año 63 de la Revolución».

Rumbo a las marchas del 1o. de mayo. Rafael Moreira. 20 de abril de 2021.

Hablar de una unidad real y única del movimiento de las y los trabajadores en El Salvador podría ser uno de los sueños más irrealesque una persona normal pueda tener en estos días… en esta nota tratare de explicar los rumbos y posiciones de las diferentes movilizaciones que se llevaran a cabo este primero de mayo de dos mil uno, no sin antes formar un punteo histórico. Aclaro, que en una semana o en un díalas marchaspueden cambiarde rumbo y postura.

A manera de introducción:

A estas alturas de la historia, no es nada extraordinario entender la necesidad de la clase trabajadora de marchar con sus banderas de lucha cada primero de mayo y más aun no es sorprendente que a pesar que las banderas de lucha y la conmemoración seanla misma, existe una fragmentaciónde criterios políticos e ideológicos que mueven los corazones a trazar líneas y caminos diferentes, es decir, la división cada año se nota más en las calles de San Salvador.Pero esto no es nuevo, en los años de las grandes luchas sociales en lapre-guerra y guerra, las cinco fuerzas beligerantes tenían su brazo social con distintas ideas y acciones, pero tuvieron la entereza de unirse en medio de las represiones populares.Conla llegada de la paz se desarticuló el movimiento social, principalmente el sindical, la estrategia fue impulsar la lucha electoral.

Los Gobiernos de ARENA atizaron las brasas para impulsar nuevas luchas sociales y en medio de la división surge el Movimiento Popular de Resistencia 12 de Octubre de carácter antimperialista, como la unidad no era opción para un movimiento único, surge el Bloque Popular Social parala Democracia Real y se impulsa una división de acciones en medio de una alianza coyuntural… y así la historia.¿Por qué la división del movimiento sindical? … ladivisión se debe a factores externos e internos. Entre los externos identifica los cambios normativos, las reformas del código laboral que remiten al movimiento sindical hacer un mero tramitador…

También en los cambios en el nivel económico, el surgimiento de nuevos sectores de la economía donde no existan sindicatos y la negociación colectiva sea poco efectiva, cambios en la organización del trabajo de las empresas e incorporación de nuevas tecnología, entre otras… Entre los factores internos están los que se derivan de la propia dirigencia sindical, que debe cambiar, como las estructuras rígidas de sindicatos, falta de capacitación para poder enfrentar un proceso de negociación en igualdad de condiciones con el gobierno y los empresarios, entre otros”.Juan Manuel Sepulveda, representante de la OIT.Engelberto Maldonado. Co-Latino, 04082001.

Al llegar los gobiernos del FMLN y la libre sindicalización que “impulso” la OIT se incitaal nacimiento de nuevos sindicatos públicos, privados, entre otros, abriendouna brecha de oportunidades que no se supo aprovechar. Era un momento entre el nuevo sindicalismo y el viejo sindicalismo, cabe mencionar la absurda necesidad de dividir a este sector con el nacimiento de aglutinadoras de todas las tendencias ideológicas.

La CSS y la CUSS.

A pesar que las marchas del primero de mayo motivaban a la unidad en la movilización, los discursos de división y de señalamientos fueron el detonante para la primera división de este impulso del sindicalismo.No hay claridad de cuando se promueve la primera marcha paralela por sectores sindicales y laboralistas que de una u otra forma no hicieron Clic con las nuevas políticas gubernamentales, en muchos casos se acusaba al gobierno de reformismo de izquierda.

Este modelo paralelo fue señalado y etiquetado como de alguna tendencia derechista… sin embargo esto solo impulso el nacimiento de la Coordinadora Sindical Salvadoreña(CSS) con organizaciones sindicales de trabajadores públicos y privados, así mismo organizaciones populares, estudiantiles y políticas, con la consigna “luchar por la defensa y el bienestar de la clase trabajadora”… teniendo en el camino desacuerdos de coordinación y generando otras movilizaciones para estas fechas de conmemoración.

En 2014 en un esfuerzo de unidad nace la Coordinadora Unitaria Social y Sindical (CUSS), motivados por la estrategia de impulsar la acción entre el gobierno, el partido, los movimientos sociales, sindicales y populares, sin duda alguna uno de los mejores esfuerzos de aglutinamiento demasas de los últimos años, sin embargo la gran alianza terminaría con la llegada de un tercer eslabón político de corte y conocimiento populista. La CUSS fue conformada por: MPR-12, FSS, COMPHAS,CIRAC, CSTS, FESITRASEP, entre otras.

Las marchas del primero de mayo de 2019.

El gane electoral de Nayib Bukele con el partido GANA, genera la división dentro de las organizaciones más beligerantes y se denota una evidente lucha por las “marcas”, en algunos casos entre la línea oficial y la línea popular, en otros casos en el manejo de los fondos internos, en fin grupos por un lado y otro.Esto llevo a crear alianzas mínimas y coyunturales para movilizar cinco marchas:

1.Por un lado habría que inspirar una clara oposición política entre los sectores de izquierda y populares contra las desconocidas, pero bien perceptibles intenciones del nuevo Gobierno, esta marcha salió de El Salvador del Mundo rumbo a la Plaza Cívica. Con el MPR-12, una Parte del FSS, COMPHAS Popular, FESTRAJUSAL entre otros.

2.A su vez algunos sectores que se autodenominaron progresistasconvocarían a sus sectores de las letras de Metro-Centro hasta el Divino Salvador del Mundo. La CSTS, COMPHAS Oficial, una pequeña parte de la FSS,entre otras.

3. La Coordinadora Sindical Salvadoreña mantendría su autonomía desde la Fuente Luminosa hasta la Plaza Libertad en el Centro de San Salvador. Acompañados por diferentes sectores de estudiantes de la Universidad de El Salvador, así mismo Unión y Fuerza,entre otros.

4.La CNTS y AGEPYM movilizaron a sus afiliados, fraternos y aliados desde el llamado a la independenciasindical con el lema “Cambio de Patrono, no es Liberación”, la marcha partió del Hospital Bloom sobre la 29 calle poniente hasta la Plaza Morazán siempre en el Centro de San Salvador. Acompañados deFESITRASEP, FESISAL entre otros.

5.También la Coordinadora Nacional de Amplia Participación (CONAPAR) motivo la movilización de su fuerza, desde la Minerva de la UES, hasta el redondel del Monumento 3a la Constitución (La Chulona). Esto con una buena representación de Veteranos de Guerra de El Salvador.En medio de esta dispersión de marchas cabe el análisis de la unidad no planificada, ya que las 5 marchas llevaban como consigna: el derecho al agua, respeto a la estabilidad laboral, la libertad sindical, Pensiones dignas y justas… así mismo en 3 se exaltaba el rechazo al Anteproyecto de Ley del Servicio Público.

El gobierno, la Clase Trabajadora y el Covid-19: marcha 1° de mayo 2020.

Los hechos de despidos en el ejecutivo, golpes constantes a los poderes del estado y una adelantada, marcada y tendenciosa campaña electoral legislativa por parte del gobierno, conlleva a los sectores sindicales y sociales a moverse de un lado a otro para tratar de entender, conectar y seguir trabajando desdeel marco de la ley.Lasviolaciones a la constitución y a las leyes,fomentaronla necesidad de la oposicióna investigar, pronunciarse y luchar desde las redes sociales. También elllamado de clase e independencia entre los sindicatos que se alejaban del pésimo trabajo del ejecutivo en materia laboral.

Así mismo nacían los movimientos pro-gobierno con prácticas antidemocráticas y usurpadoras con la venia del Ministerio de Trabajo y Gobernación.En medio de esta crisis de salud del COVID-19 y a pesar de las restricciones del último decreto ejecutivo (a esa fecha) el cual establecía una prórroga de 15 días más de la cuarentena domiciliar obligatoria, desde el 2 de mayo hasta el 16 de ese mismo mes, no obstante, un decreto anterior establecía ya dicha disposición hasta el 1 de mayo. En tal sentido, estaban prohibidas las aglomeraciones de personas con la finalidad de contener contagios de COVID-19, a pesar de estose llevaron a cabo dos movilizaciones el 1° de mayo de ese año.

1.Con la visión de aplaudir y en gloriar el “trabajo” del gobierno y con el aval del mismo se motivó a la denominada marcha blanca la cual partió de los alrededores del Mercado de Mayoristas La Tiendona hacia la Asamblea Legislativa en donde se incitarían consignas contra las y los diputados de los partidos tradicionales, con una línea muy bien definida de la misma campaña de odio impulsadas porel STISSS, ASTRAM y el SITTOJ, entre otros sindicatos.

2.Por su parte la CSS marcho desde el Cristo de la Paz rumbo a la Zona Franca de San Marcos donde protesto por el abandono en el sector laboral privado. Además de cuestionar las intenciones políticas delgobierno alre-dirigir su campañaalterritorio con la entrega paquetes alimenticios y sorteos de ayudas en efectivo.En esta ocasión las dos marchas tuvieron diferentes connotaciones e intereses. Esto marco(una vez más)la divisióndelsindicalismo opositor,del sindicalismo independientey del sindicalismo oportunista.La crisis económica y social de los próximos años, repercutirá adversamente en el mundo del trabajo en tres dimensiones: 1) la cantidad de empleo disponible, 2) la calidad del trabajo y, 3) los efectos en los grupos específicos en condición de vulnerabilidad frente a las consecuencias adversas en el mercado laboral. Hay que tener en cuenta también los impactos futuros sobre los jóvenes y los adultos mayores.Documento de Trabajo: Mapeo Sindical, 2021.Borrador para análisis y debate de la dirigencia sindical. Francisco Martínez, consultor para la OIT.

Las Nuevas Ideas y la marcha del 1° de mayo 2021.

Nuevamente un previsto resultado electoral (legislativo y municipal) cambia el curso de la política, impulsando un modelo de sindicalismo a la medida del Ministerio de Trabajo y otros sectores de poder gubernamental, los que se jactaban de “no véndense, ni ríndanse”, hoy quedan en el ojo crítico de las otras fuerzas laboralistas y de la misma población. Pero también esto impulsa a una opinión más clara del rumbo y la unidad de los que hacen el llamado a la independencia, a la autonomía e incluso al clasismo.Así se ve la preparación de las marchas de este primero de mayo:

1.Las organizaciones Opositoras sindicales, sociales y populares convocan desde el Salvador del Mundo hasta la Plaza Cívica, con el lema “Marchemos en Resistencia y Rebeldía”.Convocan diferentes organizaciones como el MPR-12, el FSS, COMPHAS, Frente Magisterial, entre muchas Organizaciones No Gubernamentales y colectivos populares.

2.La CSS convoca en la Fuente Luminosa hasta el Parque Libertad, con la consigna ¡Unidad y lucha popular contra la política criminal del gobierno neoliberal! Con una fuerte coordinación de Asociaciones y colectivos de estudiantes y artistas, que han venido luchando al lado de “las mujeres en Resistencia Florenci”; así mismo el movimiento Anarquista Unión y Fuerza.

3.Por su parte la CNTS y AGEPYM motivan la alianza en la acción y convocan desde el Hospital Bloom, sobre la 29 calle Poniente hasta la Plaza Morazán con el lema Marcha Clasista, Autónoma e Independiente: “Cambio de Patrono, no es Liberación”, esta marcha será encabezada por Sindicatos, Asociaciones y Colectivos del Sector Municipal y el Sindicato de la Asamblea Legislativa, quienes este día estarán recibiendo a susnuevos patronos. Dicha coordinación convocaa las organizaciones que quieran y puedan unificar sus bloques y que sin ningún distintivo partidista se pueda unir. Como resultado CONAPAR, FESTIVES, UTPC entre otros movimientos independientes y políticos son convocantes, incluso una representación de Centrales de Trabajadores Salvadoreños enEstados Unidos y su familia en el país acompañaran esta marcha.

4.En el caso del movimiento pro-gobierno, el cual tiene serios problemas de protagonismo y representación, han venido cambiando el rumbo de la marcha al no ponerse de acuerdo con quien aliarse o con quien negociar. La Unión Sindical Salvadoreña (USS) la cual es impulsada porel STISSS, SUTC, ASTRAM entre otros, enprincipio pretendíansalir del Centro de San Salvador rumbo a la Asamblea Legislativa para recibir a los nuevos legisladores, pero este recorrido tuvo que variar tras negociaciones con otros sectores como la CSTS, por lo que los veremos salir de la Constitución al Salvador del Mundo.

5.Luego de una ruptura con los movimientos pro-gubernamentales y con el Ministeriode Trabajo, el denominado Movimiento Poder Popular, el cual sigue siendo impulsado por SITTOJ, SITCOR, SITRAANDA,entre otros, convoca a sus seguidores a marchas desde la Plaza Barrios hacia la Asamblea Legislativa, esta vez para demandarle a los diputados electos los “cambios prometidos”. Sin embargo,cabe mencionar que esta organización cambio radicalmente su marcha la cual estaba prevista para elRedondel Masferrer rumbo a la Embajada Americana en donde estarían repudiando la intervención de ese gobierno contra la “soberanía nacional”, pero al parecer no se llegóa lo acordado.“…pareciera ser que los sindicatos por sí solos no han sido capaces de hacer presión ni lograr o evitar Reformas sustantivas.

Por tanto, en la historia salvadoreña han tenido que hacer alianzas, tanto multisectoriales con otros sindicatos, o con organizaciones sociales. En este sentido, las confederaciones y federaciones han llegado a ser más representativas de los derechos de los trabajadores, que sindicatos por sí mismos…”Fondecyt Regular Informe El SalvadorCecilia Correa A. Abril 2021

Después del 1°de mayo de 2021,la historia de este país cambiara,es necesario tener habilidades a la hora de las pláticas entre representantes de las y los trabajadoresy las instancias internacionales de defensa,ya que será el único camino que nos queda para replantear los métodos de lucha, de dialogo social, de solidaridad y de la unidad. No importa el rumbo que tomemos, siempre y cuando las banderas de lucha sigan siendo: el derecho al agua, la estabilidad laboral, la libertad sindical, por los desaparecidos, poruna CICIES con representación ciudadana, por un seguimiento directo de la OIT para El Salvador,por pensiones dignas y justas, entre muchas.

Hay que saludarel hecho de movilizarse por el bienestarde la clase trabajadora a la que representa cada marcha y hay que repudiar las queincitan el odio y la división.

Referencias:

https://www.fmln.org.sv/index.php/noticias/politica/187-la-unidad-del-movimiento-social-y-sindical-salvadoreno-es-la-que-da-fuerzahttps://elsoca.org/index.php/america-central/el-salvador/3706-el-salvador-la-coordinadora-sindical-salvadorena-css-solidaria-en-las-luchashttps://historico.elsalvador.com/historico/589208/inician-marchas-por-el-dia-internacional-del-trabajo.htmlhttps://www.solonoticias.com/2020/05/01/ministro-de-trabajo-sobre-marcha-en-plena-cuarentena-solo-una-vez-se-conmemora-el-dia-del-trabajador/https://www.elsoca.org/index.php/america-central/el-salvador/5399-el-salvador-1-mayo-2020-sindicatos-en-pie-de-lucha-por-sus-derechos

2021: Perspectivas de la lucha de clases y el gobierno de Bukele. BPJ. Noviembre de 2020

La discusión actual es de suma importancia para aclarar nuestras tácticas de trabajo en el próximo periodo. El estudio y análisis de los aspectos más relevantes del periodo anterior son la base para trazar las perspectivas de los posibles escenarios que se puedan desarrollar y deben marcar el camino a seguir en el futuro próximo. Hasta hoy, el análisis de nuestras perspectivas pasadas se ha cumplido en líneas generales, lo cual confirma que nuestros planteamientos políticos son los correctos. Las perspectivas para los marxistas son una ciencia y deben ser elaboradas y estudiadas de manera seria, de ninguna forma es una predicción total de los acontecimientos, la intención es señalar las tendencias más probables del desarrollo de los procesos futuros. Es imposible poder predecir acontecimientos tan dinámicos como la evolución de la conciencia de la clase obrera y su aparición en la arena de la lucha de clases. Esperamos que este documento arroje luz para guiarnos en el camino de la lucha revolucionaria.

Contexto 

Ha pasado el primer año del gobierno de Bukele, y como lo habíamos definido antes, lejos de ser un gobierno poderoso y estable, no ha sido más que un gigante con pies de barro; a la fecha más de 6 ministros y funcionarios han renunciado o han sido removidos de sus cargos, los errores políticos y prácticos son continuos y los casos de corrupción, torpemente escondidos, han estado a la orden del día durante la pandemia.

Esto es muy distinto a lo que afirman los empíricos y cínicos “analistas” de la pseudoizquierda, que, incapaces de poder describir las características y la naturaleza del gobierno, no les queda otra que gritar estupideces como el peligro del fascismo de manera abstracta, sin explicar el porqué de usar esas categorías. Por el contrario, el gobierno de Bukele, lejos de demostrar la fuerza del fascismo, ha resultado ser un gobierno totalmente mediocre, que basa su política en la matonería y el uso extremo de la demagogia, esto realmente no representa una fortaleza en su gobierno, como siguen afirmando erróneamente algunos en la oposición, infundiendo el miedo y la inacción en las masas, que, por otro lado, están sacando conclusiones del proceso.

Particularmente lo que le ha jugado a favor a este gobierno son principalmente dos características fundamentales de la política local: una, la enorme decepción y frustración de las masas sobre los partidos tradicionales, junto con la profunda desconfianza hacia las viejas instituciones de la democracia burguesa (AL, CSJ, Fiscalía); y por otro lado, la ausencia de un movimiento de oposición audaz y claro, con un programa revolucionario de clase, con la suficiente claridad para fortalecer la capacidad de lucha de la clase trabajadora frente a los ataques a sus condiciones de vida. Esto es lo que mantiene a Bukele en la cima de la popularidad.

Pero como todo en la vida tiene un límite, el uso de estos métodos para mantenerse en el gobierno sin mayor preocupación no durará para siempre, los márgenes de popularidad y aceptación siguen estando arriba, por sobre todas las perspectivas que se pudieran plantear, pero para nosotros los marxistas que entendemos el proceso de toma de conciencia y las condiciones sobre las cuales se eleva el fenómeno de Bukele, no es nada que no tenga explicación y no nos sorprende en absoluto, Trotsky dijo que la teoría es la superioridad de la previsión sobre la sorpresa, y no estaba equivocado.

Como marxistas estamos seguros de que de un momento a otro las masas entrarán en un proceso de radicalización donde empezarán por exigirle al gobierno las promesas que planteó en su campaña, para luego desecharle. Después de esto lo más probable es que nuevamente se volverán a movilizar para buscar una alternativa que resuelva sus problemas.

Bukele como ya hemos advertido no es santo de devoción del sector más inteligente de Washington (que le tolera porque no tienen opción más que apoyarle a regañadientes) sin embargo, esta situación puede cambiar a partir de la elecciones en los EE. UU., en noviembre próximo donde hay una posibilidad de un cambio de partido en la Casa Blanca, sin duda, una cambio por mínimo que sea en Washington puede tener consecuencia en las relaciones con los gobiernos latinoamericanos, sabemos que a Trump no le molesta la presencia de Bukele a quien ve como un perrito faldero de su política, sin embargo, los demócratas en la política internacional, suelen ser más moderados que los republicanos, no son partidarios de los actos abruptos y poco pensados en política, claramente algo de lo cual Bukele no carece en absoluto. Por tanto, un cambio en la situación de los EE. UU. tendrá consecuencias en la política de Bukele.

Bukele tampoco es querido dentro de un sector de la burguesía nacional que le ven como un advenedizo del cual deberían deshacerse, lo que evita que la burguesía pueda deshacerse de él de manera efectiva es su alta popularidad. Lo sectores más recalcitrantes de la derecha estarían felices de inhabilitarle por la vía constitucional, como la ha expresado el presidente del partido Nuestro Tiempo, Johnny Wrigth Sol, sin embargo, cuando las masas se alcen exigiéndole cumplir sus promesas, no dudarán en darle todo su apoyo y hacer un frente único contra la clase trabajadora utilizándole para aplastar la lucha.

Los empiristas, impresionistas y sectarios que gritaron pestes de la clase obrera sobre su “giro a la derecha” o su incapacidad de mirar el engaño de la demagogia de Bukele, se quedarán atónitos ante el movimiento de los trabajadores, buscarán esconderse bajo la cama en estado de shock horrorizados por los acontecimientos, incapaces, como siempre, de poder actuar de manera revolucionaria en el movimiento. Más de algunos jugarán como freno a la acción de las masas, haciendo llamados a la calma y la moderación.

El Covid-19 y el gobierno de Bukele

Como hemos afirmado desde la CMI, el Covid-19 ha sido el accidente que vino a acelerar la crisis del sistema que ya estaba en marcha desde mucho antes. No ha sido en absoluto el Covid-19 la causa de la crisis económica mundial, todos los pronósticos de los marxistas y los economistas serios advertían que ocurriría una caída estrepitosa de la economía mundial en cualquier momento. Durante años hemos advertido esto, criticando las falsas esperanzas de los economistas burgueses, como los “brotes verdes”, “los BRICS” y el crecimiento excepcional de China durante la crisis del 2008 y posterior a esto.

La crisis ahora es un hecho, sin embargo, es mucho peor de lo que se pudo pronosticar, el PIB de los Estados Unidos se desplomó abruptamente en el primer trimestre de este año, y se pronostica una fuerte caída de la economía mundial, una caída que no parece tener fondo, como lo han descrito los economistas que hablan de una crisis que durará 300 años. Esta situación ya está teniendo graves efectos sobre la débil economía del país, mandando cualquier esperanza de recuperación e inversión al carajo, sin duda la lucha internacional por mejores condiciones de vida tendrá grandes efectos en la conciencia de las masas centroamericanas.

Las condiciones de la clase obrera antes de la pandemia

Antes de la pandemia la economía salvadoreña no había experimentado mayor recuperación, se mantuvo en un estancamiento, que rondaba entre el 1.5 al 2.5% de crecimiento después de la crisis del 2008, uno de los índices de “crecimiento” más bajo de la región centroamericana, condenando así a millones de personas al desempleo, los bajos salarios y la pobreza extrema. Así describe Ricardo Castaneda del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) las condiciones de los salvadoreños antes de la pandemia “Antes de la llegada del coronavirus, El Salvador era el país que menos había crecido en las últimas dos décadas en Centroamérica. Más de dos millones de salvadoreños estaban sumidos en la pobreza y, más de dos millones y medio no comían lo suficiente o padecían hambre. Solo 1 de cada 4 personas que tenían un trabajo remunerado, cotizaba al seguro social. En los últimos 15 años, mientras los trabajadores sufrían una caída en la participación de sueldos y salarios en la producción nacional, las empresas experimentaban un aumento de las ganancias en la participación del PIB[1].

Estas eran las condiciones materiales en las cuales nos  enfrentamos a la pandemia y no solo eso, el gobierno de Nayib Bukele tenía un presupuesto desfinanciado que rondaba los $755.8 millones de dólares de déficit, donde la prioridad de dicho presupuesto en ningún momento fue la salud básica de los más pobres, al contrario, los fondos para servicios comunitarios de salud habían sido reorientados y los recursos financieros para defensa y seguridad aumentaron significativamente, un escenario totalmente desastroso para enfrentarse a una crisis sanitaria que no tenía precedente alguno en la historia. 

El inicio de la cuarentena estricta

Después de la militarización del 9F, Bukele perdió algunos adeptos y su prestigio e imagen se vio muy mal a los ojos de las fuerzas liberales que le apoyaban, la prensa internacional apunto sus fusiles contra él. Con la llegada de la pandemia logró captar una oportunidad para levantar su imagen internacional, con la gestión de la crisis sanitaria que se avecinaba en el país, haciendo algunos pronósticos podía salir con opiniones positivas de esta situación, recobrando así el agrado de la opinión pública qué perdió durante su exabrupto con la Asamblea Legislativa (AL) y así fue, el gobierno se dispuso a decretar medidas extremas para “evitar” el contagio masivo, no sin antes lograr un acuerdo con la Sala de lo Constitucional, la Empresa Privada y el Embajador de los EE.UU. nada anormal, de cómo se toman las grandes decisiones de este país, aquí vemos que nada se decide sin tomar en cuenta los intereses de las transnacionales y los súper ricos del país como Murray Meza, Ricardo Poma y Roberto Kriet, entre otros.

Sin embargo, la brutalidad de la pandemia ha sido directamente proporcional a la ineptitud, corrupción y la improvisación del gobierno, algo que a lo mejor no pudieron pronosticar a cabalidad la Sala de lo Constitucional y la ANEP que luego decidieron quitarle el apoyo a Bukele cuando habían pasado ya 3 meses de medidas estrictas y no se conseguían los resultados esperados para volver a  operar sus grandes empresas. La perspectiva de la clase dominante y el gobierno era salir cuanto antes de la situación complicada de la enfermedad, sin embargo, la ineptitud del gobierno, las condiciones deplorables del sistema de salud, la pobreza extrema y la virulencia del virus echo abajo rápidamente esta perspectiva, por lo tanto, se ponían en juego las grandes ganancias de las empresas nacionales y transnacionales, esto imposibilitó mantener la unidad de los acuerdos con Bukele.

Durante los más de los 3 meses que duró la cuarentena estricta, fuimos testigos de un Estado policial que se desplegó por todo el país cometiendo una serie de ilícitos, violentando los derechos humanos e imponiéndose sobre la ciudadanía de manera autoritaria. Además del mal manejo de los centros de contención que se volvieron centros de contagio, las aglomeraciones en los CENADE y los mítines políticos en medio de las lluvias torrenciales y la pandemia que ayudaron a aumentar los casos y por consecuencia a engrosar la lista de fallecidos por Covid-19.

La profundización de la pobreza, la violencia criminal con el abril sangriento, el aumento de la violencia machista doméstica y  el desempleo, donde se perdieron más de 82, 8884 de empleos formales según las cifras del Seguro Social a septiembre de este año, revelaron de manera más cruda las fallas del capitalismo.

La estrategia del endeudamiento sin fin, del neoliberalismo al keynesianismo

Como todos los gobiernos del mundo, Bukele intenta resolver los efectos de la paralización económica y las pérdidas inyectando dinero al consumo. Se solicitaron en un principio 2,000 millones de dólares en deuda, la cual fue aprobada en nombre de la “Salud Pública” por todas las bancadas legislativas y una solicitud más tarde de 1,500 millones más para el rescate de las empresas.

Recientemente hemos conocido por declaraciones del ahora expresidente del Banco Central de Reservas que el gobierno ha gastado más de 3,000 millones de dólares desde periodo de la cuarentena a la fecha, utilizando Certificados del Tesoro CETES (deuda a corto plazo) y Letras del Tesoro (LETES). Podemos definir al gobierno de Bukele como un barco que navega a la deriva en un mar de deuda y que no está cerca de tocar puerto en tierra firme.

Las políticas implementadas tenían el objetivo principal de inyectar dinero para reactivar el consumo, así el gobierno de Bukele gastó 350 millones de dólares en subsidios de 300 dólares a las familias más pobres, dinero que terminó quedando en las arcas de los capitalistas, luego se invirtieron 79 millones más en canasta básica alimentaria que también sirvió para mover la mercancía de las grandes empresas nacionales e internacionales y los mil millones del fideicomiso para dar subsidios a las empresas. El objetivo de estas políticas no fue ayudar a la clase obrera, sino claramente salvar las empresas de la catástrofe y la estabilidad económica, pues se pronosticaba una caída brutal para el fin de año.

En la actual crisis todos los gobiernos están endeudándose para salvar a los capitalistas, atrás quedaron los discursos negativos sobre la intervención del Estado en la economía, ahora todos extienden sus manos para que los salven de su desastre y el Estado como padre bonachón recurre a su auxilio con dinero de los contribuyentes que serán los que tendrán que pagar esta montaña de deuda. Situación que cuaja perfectamente con la frese de privatizar las ganancias y socializar las pérdidas.

Durante años los gobiernos anteriores se encargaron de desmantelar las instituciones del Estado que “supuestamente” nos garantizan nuestros derechos, la salud estatal es deficiente o más bien inexistente, el sistema de pensiones privatizado nos condena a una pensión de hambre, el Instituto Regulador de los Alimentos fue desmantelado y el agro fue abandonado totalmente, los ingenios de azúcar fueron privatizados, los últimos en los gobiernos del FMLN, ¿Cómo se suponía que el Estado podía solventar las necesidades de invertir en políticas sanitarias de emergencia? sino posee ninguna empresa estatal para generar ingresos, hasta cierto punto y desde una óptica capitalista el endeudamiento está justificado.

¿Había alguna alternativa?

Desde un punto de vista del capital el endeudamiento del Estado es lógico, sin embargo, bajo un gobierno revolucionario controlado por las masas trabajadoras, la crisis sanitaria se hubiese podido solventar de manera satisfactoria en beneficio de los más desposeídos, por ejemplo tomando la industria farmacéutica y textil para producir medicamentos e implementos necesarios para proteger al personal de salud y a los ciudadanos del virus, tomando los grandes salones de la burguesía, hoteles, edificios, casa de campo, ranchos y  clubes para establecerlos como centros de cuarentenas con medidas de distanciamiento social sin pagar ni un centavo por ellos en nombre de la salud pública; unificando el sistema hospitalario privado y nacional en uno solo universal y gratuito; utilizando las grandes riquezas de los multimillonarios del país para invertir en más hospitales, clínicas, centros de contención y en los suplementos necesarios para enfrentar al virus (kit de salud, mascarillas, alcohol gel, etc.). Todos estos utensilios pueden ser producido por la clase obrera en la industria, con esto se pudo evitar miles de muerte y el sufrimiento de miles.

Sin embargo, ninguna de estas medidas estaba en boca de los políticos, ni mucho menos en sus mentes, en su devoción y respeto a la sacrosanta gran propiedad privada establecida por la constitución, se dedicaron a hablar de más deuda o de una buena administración de la deuda, incluso algunos en la izquierda llegaron a caer a lo absurdo, negando todo principio político, al plantear que el endeudamiento con los bancos internacionales no es malo, sino que lo que era malo es la mala administración de la deuda.

En este sentido, podemos afirmar que nunca ha sido un problema, para la falsa izquierda y mucho menos para los capitalistas, la expoliación y el saqueo de la clase obrera a través de los organismos financieros, sino que solo se ha tratado de buenos o malos administradores, esto no es más que la claudicación de los intelectuales y políticos de esa izquierda reformista, conciliadora de clases, que desprecia a las masas y que desconfían en su capacidad de compresión para entender la lógica de la deuda bajo el capitalismo.

Lejos de criticar los privilegios y las grandes fortunas de los ricos y luchar por aumentar la crítica constante a la acumulación de capital bajo el sistema explotador que nos impone la clase dominante y por el cual miles murieron y siguen muriendo en la pandemia, la izquierda reformista se dedicó a una lucha parlamentaria vacía de contenido sobre el respeto a la constitución burguesa y la “administración ordenada de los fondos” en beneficio de los pobres, como si esto pudiese hacerse desde un Estado, que es un instrumento de dominación que está al servicio del capital  y  bajo el marco de leyes que es el andamiaje que sostiene al Estado mismo que mantiene la explotación de la mayoría en favor de una minoría privilegiada.

Ante las masas se presentan como los más grandes defensores del sistema de leyes burguesas, como si estas estuviesen hechas para de verdad garantizar los derechos de los más pobres. Planteaban afirmaciones como, Bukele debe respetar las leyes, la independencia de poderes, la constitución, etc. Pero ¿eso realmente solventará los problemas de las masas? Por supuesto que no, esto significa no comprender la lógica del Estado burgués.

Es imposible acabar con la corrupción y el despilfarro de los recursos provenientes del trabajo de la clase obrera en el marco capitalista, esta actitud servil al sistema de la izquierda parlamentarista solo aumentó su impopularidad cayendo en el juego del gobierno, que no le ha resultado difícil ponerlos, a todos sin excepción, en un solo bloque que se dice estar contra los intereses del pueblo.

El debate sobre la constitución

Los discursos en favor de la constitución no encuentran un eco en los pobres que se encuentra cansados de este lenguaje burgués, pues reconocen en el discurso en favor de las leyes y la constitución el engaño de los gobiernos pasados. No es contradictorio que la clase obrera, bajo un discurso demagógico este presta a escuchar e incluso a apoyar una reforma constitucional esperanzada a que esto le facilite el trabajo al gobierno de Bukele, sin embargo, la intención que pueda tener Bukele es otra y no la de realmente cambiar las condiciones de la clase obrera.

Son dos puntos concretos sobre los cuales Bukele intentará mantenerse estable en el gobierno, en un primer plano está, el que hemos escuchado en su primer año, la ausencia de apoyo parlamentario, por lo que busca una mayoría parlamentaria y en segundo plano la reforma constitucional, que es el que escucharemos con más fuerza después, y que le servirá para generar nuevos enemigos y justificaciones del por qué él no puede gobernar para el pueblo, hay poderes fácticos y leyes de los poderosos que nos lo impiden por tanto debemos cambiar estas leyes y debemos movilizarnos por esto, dirán. Cuánto tiempo extenderá la popularidad de Bukele esta nueva excusa, no podemos saberlo con exactitud, pero es poco probable que le dure mucho.

Nosotros como marxista tenemos claridad de lo que significa la constitución burguesa, en pocas palabras es el marco legal que permite las reglas del juego de la explotación y la comercialización de las mercancías, mediante la lucha obrera algunos derechos se han ido incorporando a la constitución, pero esto no deja de ser en el fondo una constitución opresora que sirve como instrumento de la clase dominante para dominar a los oprimidos.

Incluso allá donde mejor diseñada está la constitución burguesa, donde más derechos propugna ésta, más enmascarada se encuentra la explotación capitalista, y no significa necesariamente que la explotación y opresión ha dejado de existir, sino solo que la burguesía es capaz de dejar caer unas migajas a las clases bajas, es un lujo que se pueden dar los capitalistas cuando la economía va “bien”, sin embargo en el periodo actual hasta los países más “democráticos” están desechando esta envoltura democrática dejando al descubierto la verdadera cara del capital.  

Nuestra tarea no es alimentar ilusiones en la democracia burguesa y su marco legal, sino desenmascarar estas leyes, llegar al fondo de su naturaleza y defender las conquistas democráticas de la clase obrera, no abogamos por un cambio de constitución, sino por el cambio de las relaciones de propiedad y producción.

Abogamos por una sociedad donde los medios de producción (fabricas, tierras y bancos) sean de propiedad colectiva de los trabajadores y el excedente de la producción sea utilizado para elevar los niveles de vida de la mayoría y no de la minoría, sobre esta base deberá erigirse un nuevo sistema de leyes que la clase obrera organizada debe dictar, nuestra fuerza no debe estar enfocada en reformar o cambiar la constitución burguesa sino en cambiar la base material que la sostiene para sustituirla por una nueva.

Ante este debate debemos tener claridad para poder acercarnos a la clase trabajadora y separar las cuestiones fundamentales implícitas en este escenario, no debemos caer en la defensa abstracta de la democracia y la constitución burguesa. Decir que Bukele debe respetar la democracia (en abstracto), la Constitución la separación de poderes y otras frases que ahora utiliza la izquierda es alimentar falsas esperanzas de que bajo el sistema de gobierno burgués los problemas de las masas pueden ser resueltos, cuando sabemos que no es así.

Este discurso no conduce más que a seguir engañando a las masas trabajadoras alimentando esperanzas en un sistema de leyes que no le favorece en nada. Es defender la ideología de la clase dominante y la súper estructura de esta. Cuando nuestra tarea es desmitificarla, mostrarle a la clase obrera que otro sistema es posible, que otra democracia, la democracia obrera es posible y que otras instituciones que sirvan para nuestros intereses deben ser construidas, que debemos acabar con las viejas instituciones inservibles de la burguesía.     

El impacto de la pandemia y las divisiones en el régimen  

El impacto de la pandemia en El Salvador dejó entrever las divisiones de la clase dominante, la imposibilidad de poder controlar a su antojo al gobierno de Bukele, tarea hartamente difícil. El rompimiento del pacto para mantener la cuarentena estricta fue una señal de esto, y hasta el momento esta división entre los intereses de la gran burguesía con los objetivos que persigue el gobierno, por lo menos electoralmente, se mantienen.

Lo que no significa automáticamente que el gobierno de Bukele este defendiendo los intereses de los explotados, sino que el gobierno de Bukele en momentos determinados puede tomar una lógica independiente de los intereses de la clase dominante, pero manteniendo las condiciones básicas del sistema capitalista, estas son las líneas que no puede sobrepasar. Está en  una lucha por cumplir con su papel de mostrarse como un juez en medio de las clases, los tintes bonapartistas que no se terminan de expresarse de manera clara y abierta.

Las divisiones por arriba solo expresan la tremenda presión que se está acumulando por debajo de la superficie, Bukele se balancea entre las dos clases e intenta mantener un carácter independiente, algo que por ahora es imposible, al final está íntimamente vinculado y comprometido con los intereses del capital nacional e internacional, la enorme popularidad ejerce un peso tremendo sobre sus espaldas que no lo deja impulsar los ataques que el sistema necesita para paliar los efectos de la crisis económica, sin embargo, su margen de maniobra se está agotando tarde o temprano Bukele deberá sacar su verdadera cara, obligado por las condiciones económicas y sociales en las que su gobierno se está desarrollando y las presiones del gran capital.

El 2021 no solo será un año donde posiblemente los diputados afines al gobierno logren una mayoría en el parlamento, hasta el momento no hay indicios de que este escenario fracase, al contrario sigue la tendencia según las encuestas, hacia la profundización del descontento contra los partidos tradicionales, lo cual es lógico por la inoperancia de la izquierda que no ha podido levantar cabeza y por el contrario los partidos de centro parecen ya arrebatarle algunos adeptos importante entre las capas medias de la sociedad.

Sin embargo, la alegría de la victoria de Bukele en el parlamento puede que sea muy efímera, la verdad el escenario sobre el cual estos diputados actuarán no es nada alentador, es realmente un terreno minado, necesitaran más escenarios demagógicos para contener la rabia de las masas que exigirán cambios inmediatos, una tarea cada vez más difícil, en un ambiente internacional de lucha y rabia, la alternativa del engaño es cada vez menos efectiva.

La economía y el desempleo

Veamos algunos datos para visualizar el futuro que nos espera, según la CEPAL toda la economía en Latinoamérica entrará en un proceso de recesión profundo y la economía caerá este 2020 en 6.4%, El Salvador experimentará una caída de su PIB no visto desde la guerra civil, de entre el 6% y 8 % según el BCR y el FMI, y puede ser peor, esta tendencia seguirá a la baja durante todo el próximo año, a eso debemos sumarles los más de 200,000 empleos que se perderán este año y los que se seguirán perdiendo, los niveles de endeudamiento que superarían el 90 % del PIB, además de la carta de compromisos firmada con el FMI que implica la reducción del gasto estatal para 2021 en adelante (recortes en Salud, Educación, Vivienda, salarios y plazas estatales) aumento del IVA y la implementación de nuevos impuestos regresivos.

La caída de las remesas por la crisis en los Estado Unidos la cual ya ha iniciado, los 222,792 perdidos en la manufactura y los 22,053 en los servicios de hoteles y restaurantes. La caída de los precios del café y la baja productividad, solo este año se ha reducido la productividad en un 58 %, con una producción de 300 mil quintales la más baja de la historia según el Consejo Nacional del Café, sector donde se han perdido más de 11 mil empleos directos y alrededor de 20 mil entre directos e indirectos.

El gobierno de Bukele está parado sobre un terreno realmente explosivo y lo peor de todo es que estas damas y caballeros no tienen ni la menor idea como resolver estos problemas, mucho menos lo tendrán sus diputados, por lo que es muy previsible que la realidad les explote en la cara tarde o temprano, la clase obrera no podrá resistir ni el menor intento de ataque a sus condiciones de vida.

Una vez pasadas las elecciones, se incrementarán las demandas, los estamos poniendo ahí como nuestros diputados para que resuelvan razonarán, la verdadera traición no tardará en expresarse. Hay una gran posibilidad de que el rompimiento se de en el año 2021.

De hecho, para nosotros es positivo de alguna forma el retraso de la toma de conciencia de la clase obrera, porque eso significa que tenemos más tiempo para preparar la organización frente a las batallas decisivas en contra de la explotación y la miseria. Entre más tiempo nos den los acontecimientos mejor para nosotros.             

Bajo la actual crisis, la pandemia y sus efectos en la economía todas estas contradicciones del sistema están quedando expuestas y quedaran más expuestas a los ojos de los trabajadores y son un dínamo del proceso molecular del desarrollo de la conciencia, que como sabemos no es mecánico ni gradual, sino sumamente dinámico, puede estancarse o acelerarse repentinamente, tal y como decía Engels: hay décadas en la historia en las que no pasa nada, pero hay años donde se concentran décadas, haciendo referencia a los cambios bruscos de la conciencia de las masas.

Lo que ha detenido el estallido de los procesos de lucha en el país es el fenómeno demagógico de Bukele, las masas no actúan como los activistas, tienden a ser sumamente conservadoras y normalmente agotan todas las posibilidades legales existentes antes de pasar a la acción, ponen a prueba a sus dirigentes tal y como pusieron a prueba al FMLN. les costó 2 gobiernos comprender su traición, pero en cuanto la comprendieron se radicalizaron y giraron hacia otra alternativa buscando una salida, cuánto tiempo le darán las masas a Bukele no lo sabemos, no podemos razonar mecánicamente en esto y creer que les tomará otros 10 años.  

La mejor forma de medir el proceso de toma de conciencia de las masas es mantener una actitud participativa y atenta en el movimiento de los trabajadores, escucharles y entender como razonan, y cuando nos referimos al movimiento de los trabajadores nos referimos a los que salen a trabajar día con día no a sus opinológos, académicos, comentaristas de los medios de comunicación y redes sociales, que no entienden nada y se quejan amargamente de las masas.

Las organizaciones de la clase obrera y las demandas más inmediatas

Debemos observar y participar en la lucha de la clase obrera, solo teniendo un pie y un oído dentro de las organizaciones de la clase obrera podremos entender como están analizando la situación los obreros organizados. A menudo los grandes cambios son antecedidos por luchas internas en las organizaciones de masas, estos cambios están desarrollándose silenciosamente y algunos ya han ocurrido, puede que los tambores de batallas suenen primero en las viejas organizaciones, aunque la tendencia internacional de las luchas insurreccionales suele estarse desarrollando a expensas de las organizaciones de masas, no debemos perder de vista lo que pasa en las viejas organizaciones.

El movimiento sindical puede tomar una fortaleza mayor en los próximos años, hay batallas pendientes y urgentes que saltarán a la vista de todos tarde o temprano, seguramente estas luchas tendrán un aspecto ambiguo y confuso, no puede ser de otra forma, para nosotros es claro que las direcciones sindicales están vendidas a las patronales y algunas al gobierno como siempre pasa, quien espere ver un sindicalismo perfectamente revolucionario y puro no lo podrá ver nunca, porque no existe, en la medida de nuestras fuerzas debemos participar en las luchas que se planteen, evaluando cada paso y proponiéndonos objetivos para crecer y extender nuestra influencia.

La lucha por las pensiones es una tarea pendiente y preocupante no solo para los trabajadores sino también para la misma burguesía y el Estado sin duda es un eslabón que puede romperse en cualquier momento y desencadenar acontecimientos peligrosos para los intereses de la burguesía. El peso de la deuda en el Estado se volverá expresar pronto, los parches que se pusieron en el gobierno del FMLN no podrán contener los problemas por más tiempo, además de la creciente crítica de los pensionados que cada vez tienen que aguantar peores pensiones. La lucha por cambiar estas condiciones no puede esperar más.

Bukele también tiene la deuda de decretar un aumento salarial, el año 2020 era el año en que se cumplen los tres años de la vigencia del aumento salarial pasado, en 2021 deberíamos experimentar un nuevo aumento, sin embargo Bukele no ha iniciado ni tan siquiera las negociaciones sobre este punto, sin duda el coronavirus ha venido a paralizar ciertas demandas, esto ha sido un respiro para el gobierno de la burguesía, sin embargo, un cóctel de problemas se les están juntando creando las condiciones idóneas para una gran explosión de los trabajadores. Este gobierno está entre la espada en la pared, imposibilitado para poder actuar de forma tranquila en los próximos años, pueda que su caída no sea inminente, pero tampoco podrá mantenerse con la pasividad y la tranquilidad de siempre, el camino para el combate abierto está trazado.  

Cuando estos acontecimiento lleguen, el mito del “gobierno fuerte” caerá por su propio peso, se unirán en una Santa Alianza burguesía y gobierno para aplastar la resistencia y la lucha del pueblo dejando atrás cualquier diferencia entre ambos bandos, la posibilidad de la victoria del pueblo por sobre los intereses del gobierno y la clase dominante dependerán no de su valentía y disposición a la lucha, sino a la posibilidad de tener una herramienta de lucha con una dirección a la altura de los acontecimientos que guie a las masas hacia la toma del poder. 

El año 2020 ha sido revelador no solo para la clase obrera salvadoreña sino para todas las clases a nivel general y mundial, hemos iniciado una época de revolución, grandes acontecimientos están en el futuro inmediato debemos prepararnos asiduamente para aprovechar todas las oportunidades para construir y luchar por una sociedad diferente.

El peligro de la represión del gobierno

Hemos advertido y explicado una y otra vez del carácter del régimen de Bukele, no nos parece en absoluto fascista, en primer lugar porque no existen las condiciones concretas que hicieron surgir los regímenes fascistas del pasado, la actual generación de trabajadores y jóvenes no ha sido derrotados en la arena de la lucha de clase, las organizaciones de la clase obrera están intactas y más bien se están preparando para la lucha, los estudiantes uno de los apoyos más fundamentales que tuvo el fascismo en el pasado, ahora están más orientados a las ideas de izquierda que a las ideas de la reacción, el campesinado ha sido reducido a una condición de obrero del campo empobrecido hasta lo más bajo, sin tierra y sin créditos, ¿De dónde se supone que tendrá apoyo un gobierno fascista? que su objetivo es acabar con la resistencia de la clase obrera, de asesinar a sus principales líderes para descabezar las organizaciones de oposición.   

Sin embargo, aunque hemos rechazados tales afirmaciones no estamos diciendo que el régimen de Bukele no puede hacer uso de la violencia estatal, reprimir, perseguir y asesinar en cualquier momento, no por supuesto que no. Para hacer estos crímenes no se necesita erigir un régimen fascista, el Estado burgués ya posee el monopolio de la violencia a partir de las FFAA y la policía, en cuanto se siente amenazado no duda en utilizarlas para imponer el orden, esta es la experiencia reciente de las luchas revolucionarias en EE. UU, Colombia, Ecuador y Chile. O en la dictadura sangrienta de Juan Orlando Hernández en Honduras.

Tampoco hay que olvidar su alianza con los lúmpenes a los cuales les ha extendido la mano y ha negociado con ellos, los sindicatos en el pasado ya han sido amedrentados por estas escorias de la sociedad, incluso en los gobiernos del FMLN, los pandilleros sirvieron de esquiroles para las luchas obreras en las maquilas, Bukele al sentirse amenazado no dudará en usar estas fuerzas reaccionarias para aplastar la lucha.

Por supuesto que si estamos hablando de un despertar de la clase obrera, de un proceso de lucha por parte de la juventud las mujeres y todos los oprimidos contra los ataques del régimen de Bukele, debemos advertir que esta lucha no será pacifica, como hemos podido observar Bukele no es un tipo que se anda con rodeos, ha sabido hasta hoy utilizar a las FFAA para demostrar “fortaleza”, no dudamos que ante el menor viso de un movimiento fuerte utilizará todo tipo de violencia para aplastarlo y deshacerse de este. Estos gobiernos son peligrosos porque ante situaciones desesperadas no suelen detenerse en las consecuencias.

Por tanto, la preparación de nuestra organización y de los sindicatos debe tener en cuenta este factor de la ecuación, debemos organizar también la resistencia a través de comités de autodefensas o guardia comunitarias como las que nos han mostrados las luchas de nuestros hermanos de clase de Ecuador, Chile y los Estados unidos.

Lo único que puede neutralizar la violencia brutal del régimen es la organización audaz de los trabajadores y la unidad del movimiento, por tanto, un el movimiento debe afinar sus métodos de lucha y avanzar hacia la unidad para enfrentarse a los ataques del Estado cuando el movimiento alcance un ambiente explosivo de lucha.   

Conclusiones

Las próximas elecciones son un gran escenario para agitar en cuanto a nuestras demandas hoy como en el pasado la clase obrera no tiene alternativa, debemos mantener la consigna que planteamos en las elecciones presidenciales, no hay alternativas la solución a nuestros problemas está en las calles, los centros de trabajo, los barrios y los centros educativos, en la lucha revolucionaria.

No alimentamos en las masas ninguna confianza en la democracia burguesa, luchamos por un tipo de democracia obrera desde la gestión y administración de nuestros recursos, una democracia totalmente diferente a la democracia burguesa. Sin embargo, en la lucha por la asimilación de esta necesidad, las masas atraviesan una serie de experiencias sucesivas que le ayudan a comprender esta idea correcta, puede que el sector más consiente de la clase obrera comprendan la farsa de la democracia burguesa, pero las nueve décimas partes de la clase obrera siguen teniendo ilusiones en ella, nuestra tarea por lo tanto no es darle la espalda, sino que debemos mostrarles el camino más fácil para comprender que el parlamentarismo burgués no resuelve nada.

 Cuando los trabajadores se encontraban aglutinados en una organización propia, participamos ahí solo con el objetivo de explicar la imposibilidad de conseguir nuestros objetivos a través de la democracia burguesa, de la vía electoral, nuestra tarea no era demostrar que ganando diputaciones podríamos cambiar la sociedad, sino todo lo contrario, demostrar que es imposible cambiarla desde las asambleas y salones ministeriales.

Sin embargo, hoy que el movimiento se encuentra atomizado y desorganizado, sin un partido directo de la clase obrera, la participación directa de los marxistas en las elecciones no tiene sentido. Aunque seguiremos dando nuestro punto de vista sobre los programas y propuestas, acompañando el proceso de asimilación de la farsa que es la democracia bajo el capital, mientras nos preparamos para construir un partido independiente de la clase obrera para luchar por el socialismo, que expropie las riquezas, las fábricas, bancos y tierras y las ponga al servicio de la sociedad, esa es nuestra principal tarea, para eso debemos construir el partido.

Para estas tareas debemos profesionalizar nuestro trabajo propagandístico, avanzar hacia la profesionalización de la prensa, nuestros artículos deben estar orientados en describir los escenarios desastrosos de hacia dónde nos lleva el capitalismo, agitando en cuanto a la necesidad de luchar por el socialismo demostrando que solo bajo el socialismo los grandes problemas serán resueltos de una vez por todas.

A partir de nuestro análisis nacional e internacional de la lucha por el socialismo no podemos permitirnos ni una gota de rutinismo y pesimismos, hemos entrado en un periodo excepcional de la lucha de clases un punto de inflexión que marca una situación revolucionaria global, nuestro crecimiento e influencia lo comprueba con creses, nunca en la historia de la organización hemos tenido tantas oportunidades para crecer y fortalecernos.

Sin duda la construcción del embrión del futuro partido marxista de los trabajadores ha tomado una velocidad sinigual, pero debemos reconocer que aun somos una minoría insignificante, nuestro objetivo en el próximo periodo no es llegar a las masas directamente, sino mientras seamos un minúsculo grupo debemos luchar por llegar a los cuadros más avanzados del movimiento obrero para formarlos en las ideas del marxismo y en la convicción de la lucha revolucionaria por el socialismo, mientras más elementos comprometidos ganemos más grande se volverá nuestro altavoz y podremos llegar así directamente a las masas.

Estas son nuestras tareas en el momento actual, debemos asumirlas de manera militante y disciplinada, con optimismo y energía, que nada nos detenga para cumplir nuestros objetivos. Confiemos en nuestras fuerzas y en la claridad y la fortaleza de nuestras ideas, nuestros objetivos descansan por ahora en los hombros de los gigantes teóricos del marxismo que nos legaron un arsenal para luchar contra el capital, la opresión y la explotación.

Como dijo Víctor Hugo No hay nada tan poderoso como la idea cuya época ha llegado. Agitemos la bandera roja del socialismo y construyamos la organización que la clase obrera ha necesitado durante toda su historia en la lucha por la liberación, este es nuestro objetivo más ambicioso luchemos por construirlo.

26 de septiembre 2020

[1] https://elfaro.net/es/202005/columnas/24402/La-improvisación-no-debe-seguir-siendo-el-plan.htm?st-full_text=all&tpl=11

[Este documento fue aprobado unánimemente en el congreso de la sección salvadoreña de la Corriente Marxista Internacional celebrado el día 15 de noviembre de 2020]